Industria estrena nuevo responsable con prisas: ejecutar m¨¢s de 4.000 millones de los fondos europeos en un a?o

A finales de a?o, y para sorpresa de patronales y sindicatos, la ministra de Industria, Reyes Maroto, decidi¨® destituir al secretario general de Industria, Ra¨²l Blanco. El exsenador socialista por Asturias, Francisco Blanco, lo sustituye en este ¨²ltimo a?o de legislatura, en el que se ha marcado dos objetivos b¨¢sicos: gastar los 4.214 millones de euros de fondos europeos con los que cuenta para lanzar la industria, b¨¢sicamente a partir de los denominados PERTE, y aprobar en Las Cortes antes de final de a?o la Ley de Industria, otro compromiso previo ante la Comisi¨®n Europea para recibir los fondos del Plan de Recuperaci¨®n, Transformaci¨®n y Resiliencia. A esos compromisos se sumar¨¢ la gesti¨®n de las crisis empresariales que vayan surgiendo. La primera del a?o ha sido que la divisi¨®n de renovables de General Electric amenaza con el despido de 200 trabajadores.

El ¨²ltimo ejercicio de mandato no ser¨¢ sencillo en un gabinete que vivir¨¢ otros cambios en pocos meses, cuando la propia Maroto abandone el Consejo de Ministros para convertirse en candidata del PSOE a la alcald¨ªa de Madrid en las municipales de mayo. El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, todav¨ªa no ha dado a conocer c¨®mo pretende cubrir esa baja, aunque nadie descarta que el ministerio (que tambi¨¦n incluye Turismo y Comercio) se funda en otro ya existente, como sucedi¨® en tiempos del PP, cuando en una remodelaci¨®n similar lo asumi¨® Econom¨ªa.

La salida de la ministra no ser¨¢ la primera modificaci¨®n en el gabinete. Seg¨²n diversas fuentes, el Gobierno baraja el nombramiento de un comisionado (con categor¨ªa de subsecretario de Estado) para cada uno de los cuatro PERTE (Proyecto Estrat¨¦gico para la Recuperaci¨®n y Transformaci¨®n Econ¨®mica) que est¨¢ desarrollando el ministerio: descarbonizaci¨®n, actividad agroalimentaria, sector naval y veh¨ªculo el¨¦ctrico y conectado. Los dos primeros previsiblemente se aprobar¨¢n en el Consejo de Ministros de este martes, seg¨²n fuentes del Gobierno.

Tras dos a?os de trabajos, el reparto de los fondos europeos para la reconversi¨®n de la automoci¨®n, para iniciar la fabricaci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos, ha acabado convirti¨¦ndose en una piedra en el zapato del ministerio. De los 2.975 millones de euros previstos, solo se han acabado asignando 834 millones de euros, un 28% del total. De los 10 proyectos que han logrado subvenciones a fondo perdido y cr¨¦ditos blandos, la m¨¢s pol¨¦mica ha sido la adjudicaci¨®n a Grupo Volkswagen, que demandaba m¨¢s apoyo para su plan de 10.000 millones que incluye la construcci¨®n de una f¨¢brica de celdas de bater¨ªas y la electrificaci¨®n de su gama de veh¨ªculos elaborados en Espa?a a partir de 2025.

Dado el bajo reparto, el Gobierno se comprometi¨® a crear una segunda convocatoria para la primera mitad de este a?o, para que participen empresas cuyos proyectos se han quedado fuera, como la reconversi¨®n de la f¨¢brica de Almussafes (Valencia) o la nueva factor¨ªa de celdas de bater¨ªas en Extremadura que proyecta la china Envision. La necesidad de gestionar sobre recursos econ¨®micos provoca que algunas patronales, como la automovil¨ªstica Anfac, vean con buenos ojos que el Ministerio de Econom¨ªa absorba Industria.

El nuevo secretario de Industria asume la relevancia del PERTE del coche el¨¦ctrico, por el volumen de ayudas que representa, pero es cauto a la hora de ponerse objetivos despu¨¦s de las dificultades acumuladas en su desarrollo: ¡°No s¨¦ si vamos a poder gastar la totalidad de los recursos, pero ese deber¨ªa ser el objetivo. Hay que culminarlo implicando a las empresas del sector que todav¨ªa no est¨¢n¡±, dice, asumiendo la complejidad de ponerlo en marcha sin referentes anteriores: ¡°Ha habido un proceso de aprendizaje y ahora estamos haciendo algunos cambios¡±. El reto, ahora, es convencer a Bruselas de que las inversiones se puedan efectuar en un calendario m¨¢s abierto de tiempo, de forma que las empresas tengan tiempo de llevar a cabo sus planes.

Del resto de PERTE que dependen de Industria, solo el naval ha entrado en la fase de convocatoria para repartir los 1.460 millones de euros previstos. Las empresas tienen tiempo de entregar sus propuestas hasta febrero, el mismo camino que seguir¨¢n los programas de ayudas para la descarbonizaci¨®n y el sector agroalimentario. El gran problema de este tipo de convocatorias es la limitada estructura con la que cuenta Industria, por lo que el nombramiento de comisionados (como ya existe en otros PERTE de otros ministerios que aterrizan con su propio equipo) deber¨ªa ayudar a dar m¨¢s agilidad a su elaboraci¨®n.

Aprobaci¨®n de la Ley de Industria

El segundo eje es la ansiada Ley de Industria, aprobada en su primera versi¨®n por el Consejo de Ministros a principios de diciembre. La cuesti¨®n es si el Congreso ser¨¢ capaz de aprobarla antes de que concluya la legislatura. El Ejecutivo quiere asegurar el empleo en el sector secundario con esta nueva norma, con la que tambi¨¦n quiere anclar mayor compromiso de las empresas que reciban ayudas p¨²blicas, ya que deber¨¢n mantener su actividad un m¨ªnimo de tres a?os.

¡°La ley por s¨ª sola no va a servir si no se cierra tambi¨¦n el Pacto de Estado para la Industria¡±, explica Garbi?e Espejo, secretaria general de Industria de CC OO. Ese pacto es un compromiso con el que arranc¨® el Gobierno, para el que se consensuaron las bases con los agentes sociales, pero que no ha acabado de cuajar. La sindicalista reclama la implicaci¨®n de otros ministerios en el ¨¢rea, sobre todo Transici¨®n Ecol¨®gica, el ministerio comandado por Teresa Ribera.

Juan Antonio Labad, director general de Feique, la patronal qu¨ªmica, advierte de las dificultades de sacar adelante una ley como la industrial en un ¨²ltimo a?o de mandato como el actual, con batalla pol¨ªtica propia de una elecciones municipales y auton¨®micas casi en su ecuador y con el relevo de toda la c¨²pula de Industria, incluida la salida prevista de la ministra. ¡°Tiene que haber liderazgo pol¨ªtico fuerte, aunque eso no quiere decir que haya un ministro fuerte de Industria¡±, se?ala, en referencia a la necesidad de agrupar votos de diferentes partidos del arco parlamentario.

Otro elemento que ser¨¢ relevante para el ministerio es su incidencia en la presidencia espa?ola de la Uni¨®n Europea, que se prolongar¨¢ todo el segundo semestre de 2023. Fuentes conocedoras aseguran que ese protagonismo podr¨ªa suponer marcar el paso en temas como las regulaciones de los nuevos motores de combusti¨®n o el futuro de la industria del hidr¨®geno verde.