Bruselas allana el camino para equiparar el hidr¨®geno nuclear al verde
La Comisi¨®n Europea atiende la aspiraci¨®n francesa, frente al criterio de otros grandes pa¨ªses como Alemania y Espa?a. A¨²n queda el visto bueno del Consejo y el Parlamento
Francia se ha anotado este lunes un importante tanto en Bruselas. En Par¨ªs se habla incluso de ¡°victoria¡±. La Comisi¨®n Europea ha abierto la puerta a que parte del hidr¨®geno producido con energ¨ªa nuclear reciba la etiqueta equiparable a la del obtenido con fuentes renovables. El Ejecutivo comunitario atiende, as¨ª, una importante aspiraci¨®n de la segunda econom¨ªa europea, titular del mayor parque at¨®mico entre los Veintisiete, que en las ¨²ltimas semanas hab¨ªa redoblado su presi¨®n para que el equipo de Ursula von der Leyen se inclinase por sus tesis. Para que la nueva ordenaci¨®n entre en vigor, a¨²n es necesario el visto bueno tanto del Consejo como de la Euroc¨¢mara. De no oponerse en un periodo m¨¢ximo de dos meses, entrar¨ªa autom¨¢ticamente en vigor.
Que el llamado hidr¨®geno rosa, el obtenido a partir de electricidad generada en centrales nucleares, acabe siendo equiparado con el verde se ha convertido en una de las principales batallas energ¨¦ticas de Par¨ªs en la capital comunitaria. Tanto, que ha llegado a hipotecar el futuro del hidroducto subterr¨¢neo entre Barcelona y Marsella, que cuenta con el visto bueno de Bruselas para financiar hasta la mitad de la obra, a que reciba el mismo estatus que el procedente de otras fuentes no emisoras de gases de efecto invernadero, como la solar fotovoltaica o la e¨®lica.
Para que el hidr¨®geno compute en los objetivos de energ¨ªas renovables, Bruselas contempla ahora tres opciones: que proceda de electrolizadores alimentados directamente por aerogeneradores o granjas solares; que venga de una zona geogr¨¢fica en la que m¨¢s del 90% de la electricidad proviniese el a?o anterior de fuentes renovables; o ¡ªy aqu¨ª es donde Francia encontrar¨ªa un resquicio al que asirse¡ª de un ¨¢rea en el que la mayor parte de la energ¨ªa el¨¦ctrica sea baja en carbono ¡ªalgo que tambi¨¦n posibilita la nuclear¡ª, y siempre y cuando la empresa que produzca el hidr¨®geno haya firmado un contrato bilateral (PPA, por sus siglas en ingl¨¦s) de suministro de electricidad renovable por una cantidad equivalente a la que utilice en el proceso.
¡°Esta decisi¨®n entreabre la puerta a etiquetar como hidr¨®geno renovable el producido a trav¨¦s de fuentes de bajas emisiones en carbono. Esto es un error y una cesi¨®n desmesurada ante a Francia¡±, apunta el eurodiputado socialista Nicol¨¢s Gonz¨¢lez Casares. ¡°Hay restricciones, pero aun as¨ª es preocupante¡±, a?ade el representante espa?ol. Con su taxonom¨ªa del a?o pasado, la Comisi¨®n Europea ya abri¨® la puerta a que tanto la at¨®mica (una pretensi¨®n francesa) como el gas f¨®sil (una pretensi¨®n alemana) recibieran la etiqueta de fuentes verdes de energ¨ªa.
¡°El acto delegado de hoy [por este lunes]es sobre combustibles renovables de origen no biol¨®gico, lo que incluye el hidr¨®geno renovable. No tenemos una categor¨ªa de hidr¨®geno verde en la legislaci¨®n. Definiremos que es hidr¨®geno bajo en carbono en una norma separada. Pero es el hidr¨®geno renovable el que cuenta para los objetivos de la directiva sobre energ¨ªas renovables¡±, apuntan portavoces oficiales de la Comisi¨®n.
El Gobierno franc¨¦s se atribuye una ¡°victoria¡±, pero considera que esta es parcial. Y hace una distinci¨®n entre los llamados actos delegados ¡ªlos documentos que el Ejecutivo comunitario ha presentado este lunes¡ª y la directiva RED3 sobre energ¨ªas renovables, que est¨¢ en fase de debate entre los Estados. En la negociaci¨®n sobre la directiva, Par¨ªs topa de manera frontal con Alemania y Espa?a.
¡°El trabajo de convicci¨®n que he realizado ante mis colegas europeos ha dado sus frutos y doy las gracias a los parlamentarios europeos que tambi¨¦n se han movilizado¡±, se congratul¨® la ministra francesa de Transici¨®n Energ¨¦tica, Agn¨¨s Pannier-Runacher. Y a?adi¨®: ¡°La publicaci¨®n de estos actos delegados sobre el hidr¨®geno reconoce los esfuerzos de descarbonizaci¨®n que ha hecho Francia. Ahora hay que aplicar esta misma l¨®gica a nuestros objetivos de hidr¨®geno renovable en la directiva RED3. Es un punto dif¨ªcil para Francia y sus socios y todav¨ªa no hemos llegado al fin¡±.
El ¡°nudo de la discusi¨®n¡±, seg¨²n el El¨ªseo, es el reconocimiento a la capacidad de Francia para producir hidr¨®geno a partir de energ¨ªa nuclear. En caso contrario, Francia considera que un proyecto como el H2Med ¡ªel tubo submarino para llevar hidr¨®geno de Barcelona a Marsella y de ah¨ª a Alemania¡ª corre peligro.
¡°Si Francia no puede producir su hidr¨®geno a causa de reglas europeas¡±, dijo una fuente ministerio franc¨¦s de Transici¨®n Energ¨¦tica, ¡°la viabilidad econ¨®mica de los proyectos quedar¨¢ en cuesti¨®n, porque si no hay hidr¨®geno para meter en los tubos, econ¨®micamente no tendr¨¢ ning¨²n sentido construir tubos¡±. Esta posici¨®n, para el espa?ol Gonz¨¢lez Casares, uno de los negociadores en la directiva por el Parlamento europeo, es inaceptable.
El Gobierno espa?ol es uno de los que m¨¢s se ha opuesto a Francia en esta materia. ¡±Rechazamos considerar los combustibles bajos en carbono entre los objetivos de energ¨ªas renovables¡±, dec¨ªa el fin de semana un portavoz. Sobre la decisi¨®n de la Comisi¨®n del lunes, a¨²n no se ha pronunciado: ¡°Lo estamos estudiando¡±, se han limitado a afirmar fuentes del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico.
El hidr¨®geno, un gas que se obtiene mediante electr¨®lisis (la combinaci¨®n de electricidad y agua) es un vector energ¨¦tico clave para la descarbonizaci¨®n de sectores de dif¨ªcil o imposible electrificaci¨®n, como la industria pesada o el transporte a¨¦reo o mar¨ªtimo.
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