El futuro del trabajo

En una ocasi¨®n, Jaime Garc¨ªa Cantero, director de EL PA?S Retina, plante¨® a Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalizaci¨®n e Inteligencia Artificial, c¨®mo era posible que en Espa?a hubiera unos 150.000 puestos de trabajo que no se cubren y un paro del 13%, del 30% en el caso de los j¨®venes. A lo que Artigas respondi¨® que las empresas buscaban todas en el mismo sitio, y que las respuestas no estaban ah¨ª, que hab¨ªa que construirlas. Garc¨ªa Cantero saca a colaci¨®n el comentario durante el evento El futuro del trabajo, del que es moderador, y sobre el que planea el desequilibrio evidente entre los empleadores que no encuentran los perfiles que necesitan y los trabajadores que no encuentran empleo. ¡°El reciclaje y la recualificaci¨®n laboral de los mayores de 45 a?os es interesante¡±, concede Javier Azor¨ªn Cuadrillero, responsable de Desarrollo, Talento y Cultura de Iberdrola Espa?a, que defiende que hay que seguir aprendiendo durante toda la vida, con orientaci¨®n y reskilling por parte de la compa?¨ªa, seg¨²n remacha.

Los participantes en El futuro del trabajo, organizado por EL PA?S Retina, celebrado en el Palacio de Congresos y Auditorio Kursaal de San Sebasti¨¢n gracias al patrocinio de Indra, Iberdrola y Corporaci¨®n Mondrag¨®n, y con la sociedad p¨²blica municipal Donostia Sustapena-Fomento de San Sebasti¨¢n como anfitriona, van aportando pistas desde su propia experiencia. ??igo Larrea, responsable de Gesti¨®n del Talento de la Corporaci¨®n Mondrag¨®n, recuerda que el cierre de Fagor (la crisis m¨¢s fuerte del grupo, en 2013) supuso que 18.000 personas se fueran a la calle. ¡°Nuestro compromiso, como cooperativa que somos, era reubicarlas¡±, subraya. Algo que se consigui¨® mediante la recualificaci¨®n. ¡°Es fundamental; el futuro es disruptivo, con cambios muy r¨¢pidos, y las tendencias demogr¨¢ficas apuntan a que habr¨¢ menos j¨®venes, y vidas laborales m¨¢s grandes¡±, acota Larrea.

¡°Como ciudad tenemos un importante reto demogr¨¢fico: uno de cada cinco donostiarras tienen m¨¢s de 65 a?os¡±, revela Marisol Garmendia, concejala de Desarrollo Econ¨®mico y Empleo del Ayuntamiento de San Sebasti¨¢n. ¡°Hemos de incorporar el talento, venga de donde venga; acogerlo, integrarlo e insertarlo¡±, declara. ¡°Ahora todo el mundo quiere electr¨®nicos y profesionales relacionados con los datos. Como el mercado no nos los da, los formamos nosotros¡±, tercia Azor¨ªn. ¡°Hemos de pasar de preguntarnos qu¨¦ perfiles necesitamos a asumir que vamos necesitar a cualquier persona, de cualquier sector, susceptible de que podamos formarla a corto plazo¡±, advierte.

Larrea tambi¨¦n aboga por soluciones de formaci¨®n m¨¢s micro, no por la v¨ªa de ¡°un m¨¢ster de a?o y medio y 1.500 horas¡±, por definir transiciones profesionales claras, y por hacer m¨¢s l¨ªquida esa frontera dura entre el estudio y el trabajo, ¡°como hemos visto con la FP [Formaci¨®n Profesional] dual¡±. Esto ¨²ltimo lo consigue el ?rea de Conocimiento de la corporaci¨®n, compuesta por la Universidad de Mondrag¨®n y cuatro centros de FP, mediante el elemento dual, la gobernanza compartida ¡ªel rector de la Universidad es uno los vicepresidentes de la corporaci¨®n¡ª, un modelo pedag¨®gico que fomenta el emprendimiento ¡ªLarrea pone el Basque Culinary Center como ejemplo¡ª y la generaci¨®n de ecosistemas.

Para el director gerente de Fomento de San Sebasti¨¢n, ??igo Olaizola, todo empieza por la educaci¨®n y la formaci¨®n. ¡°Tenemos una responsabilidad, no podemos esperar a que la gente llegue al mercado laboral, hemos de empezar antes, de la mano de todo el ecosistema, con un aprendizaje m¨¢s pr¨¢ctico y cercano a la realidad empresarial y tecnol¨®gica, y orientando las vocaciones seg¨²n las demandas¡±, detalla. Las nuevas generaciones, recuerda, son nativas digitales, van a trabajar de otra manera y con otras expectativas, y necesitan conocer las empresas y los centros tecnol¨®gicos¡±, precisa.

¡°Solemos hablar de atraer y retener, pero habr¨ªa que ir un paso m¨¢s atr¨¢s, e intentar rescatar talento¡±, sostiene Susana Carillo, teniente de alcalde y delegada de Innovaci¨®n y Digitalizaci¨®n Urbana del Ayuntamiento de M¨¢laga, que comparece en El futuro del trabajo para presentar su ciudad como ecosistema de talento, capaz de atraer a gigantes como Google (con su centro de excelencia en ciberseguridad) y hacerlos convivir con pymes, centros tecnol¨®gicos, la Universidad. Dentro de ¡°este hervidero¡±, como lo define, destaca el polo de contenidos digitales, ecosistema de la industria de los medios digitales y entretenimiento. ¡°Ya ten¨ªamos 15 incubadoras, pero todas trabajaban de manera horizontal: un marmolista al lado de una fotovoltaica o de una start-up de moda. Hace cinco a?os decidimos trabajar en una vertical, para que en ella hubiera mayor capacidad de interacci¨®n, y dedicarla al sector del videojuego¡±, explica.

Ese reclamo atrajo a j¨®venes que ni estudiaban ni trabajaban, y que aprendieron a programar en Unity; todos encontraron empleo. ¡°Desde que salimos de la pandemia hemos convocado m¨¢s de 200 cursos, intentando que sean de las tem¨¢ticas que las empresas tecnol¨®gicas nos dicen que necesitan¡±, aporta Carillo. Realidad Virtual, Realidad Aumentada, impresi¨®n en 3D, desarrollo web. Desde la otra punta de Espa?a, Javier Garc¨ªa Cogorro, CEO de Viralgen, resalta c¨®mo su compa?¨ªa ha conseguido reclutar el talento local que requiere gracias al modelo ¡°particular, interesante y diferencial¡± de FP existente en el Pa¨ªs Vasco: un ciclo dual de tres a?os, el primero de los cuales transcurre en la escuela, ¡°donde elegimos los perfiles que mejor se adec¨²an¡±; el segundo curso, el alumnado pasa un 50% en Viralgen; el tercero, un 80%. Cada a?o salen promociones de 30 j¨®venes, ¡°formadas seg¨²n nuestro programa¡±, que ¡°conocen la empresa¡±, concluye.

Viralgen tiene en com¨²n con Veridas, del grupo das-Nano, que ambas firmas son pioneras en sus respectivos campos (biotecnolog¨ªa la primera, soluciones de verificaci¨®n de la identidad digital y biometr¨ªa la segunda), cuentan con un alto porcentaje de titulados superiores, y con plantillas muy estables. ¡°En nuestro mercado puede haber rotaciones del 30% o 35%; en nuestra empresa es del menos del 3%¡±, compara Garc¨ªa Cogorro. Lo ha logrado, en su opini¨®n, por una conjunci¨®n de factores, el primero de los cuales es que el proyecto es interesante; el segundo, que la compensaci¨®n es la adecuada; el tercero, que tiene impacto.

Anhelos diferentes

¡°El prop¨®sito es fundamental¡±, suscribe Esteban Morr¨¢s, cofundador y presidente de Veridas, y miembro del consejo del Instituto Hermes (fundaci¨®n en defensa de los derechos digitales). ¡°Si el grupo siente que lo hay, busca la manera de formarse, de manera muy r¨¢pida¡±, afirma Morr¨¢s recordando que a su empresa ha llegado gente eligiendo cursos ¡°que sab¨ªa espec¨ªficamente que nosotros necesit¨¢bamos¡±. En palabras de Azor¨ªn, ahora a los empleados les interesa m¨¢s la propuesta de valor, y dan importancia al grupo, para qui¨¦n trabajo, y, m¨¢s all¨¢, con qui¨¦n trabajo. ¡°Antes, trabajar en gran corporaci¨®n era un sue?o; ahora, no tanto¡±, lo expresa.

¡°Creo que hemos de darle un sentido al empleo; el prop¨®sito no es solo para las empresas, sino tambi¨¦n para las ciudades¡±, reclama Olaizola, que aboga por la diferenciaci¨®n frente a otros hubs de innovaci¨®n, muchos con capacidades mayores. San Sebasti¨¢n tiene una manera de hacer las cosas que ha de utilizar a su favor, poni¨¦ndolo en valor, seg¨²n viene a decir, ofreciendo algunos ejemplos: aboga por la igualdad de g¨¦nero (la sociedad de Fomento mantiene un programa de mujeres cient¨ªficas), por ofrecer oportunidades a los j¨®venes. Y por ser colaborativo. En 2020, la revista Nature situ¨® a la capital guipuzcoana como el centro de investigaci¨®n cient¨ªfica m¨¢s colaborativo del mundo. ¡°Mostramos mucho inter¨¦s en la divulgaci¨®n cient¨ªfica, porque el conocimiento nos empodera como ciudad, e incorporamos iniciativas de solidaridad¡±, a?ade otros elementos distintivos.

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