Europa se atraganta con la cesta de la compra: ?se puede frenar la escalada?
Los precios de los alimentos registran subidas r¨¦cord, impulsados por el alza de los costes y las menores cosechas, y avivan el debate sobre c¨®mo contener los incrementos y si las empresas se est¨¢n beneficiando
Un litro de leche se vende a 90 c¨¦ntimos en un supermercado de Madrid, a 92 c¨¦ntimos en Londres, a 1,05 en Berl¨ªn y a 1,54 euros en Par¨ªs. El kilo de manzanas oscila entre los 1,46 euros de Roma y los 2,69 euros de Bruselas. El precio de la misma cesta de la compra, elaborada por este peri¨®dico con 10 productos b¨¢sicos de ocho ciudades europeas, va de los 16,96 euros en la capital espa?ola a los 26,55 euros en La Haya. Esta comparaci¨®n tiene una representatividad muy limitada, porque los productos no son exactamente los mismos y el poder adquisitivo y los salarios de sus ciudadanos tampoco. Pero ilustra un problema generalizado: todos estos bienes han subido en el ¨²ltimo a?o m¨¢s que nunca.
El IPC alimentario se le ha ido de las manos a Europa: la tasa armonizada escal¨® al 18,4% interanual en enero en la UE, seg¨²n los ¨²ltimos datos detallados de Eurostat. En 14 pa¨ªses, el incremento fue superior, como Alemania (20,5%) y Portugal (21,1%). En el resto est¨¢ por encima de los dos d¨ªgitos: en Espa?a en el 15,5%, en Francia en el 14,4% y en Italia en el 12,6%. La escalada ha erosionado el poder adquisitivo de los ciudadanos y ha encendido el debate sobre c¨®mo atajar la situaci¨®n y si alguien en el sector de la alimentaci¨®n est¨¢ sacando partido.
La cesta de la compra es v¨ªctima de una combinaci¨®n ins¨®lita de factores, seg¨²n coinciden la gran mayor¨ªa de expertos y de los sectores agrario y alimentario, El incremento de los costes, que empez¨® en 2021 y empeor¨® con el estallido de la guerra en Ucrania hace un a?o, es el principal causante, agravado por una menor producci¨®n en el campo por las malas cosechas. ¡°Estamos ante una tormenta perfecta: subida de energ¨ªa, de materias primas y fertilizantes; sequ¨ªas y heladas que han reducido las cosechas y la oferta¡ es un problema que no se puede simplificar¡±, advierte Manuel Hidalgo, profesor de Econom¨ªa de la Universidad Pablo de Olavide.
En un supermercado de Madrid, un cliente busca entre los lineales la leche m¨¢s barata. Es uno de los productos que m¨¢s ha subido en el ¨²ltimo a?o, un 33,4% en el caso de Espa?a. Tambi¨¦n el aceite de oliva (un 30,5%). ¡°Me fijo m¨¢s en los precios y comparo mucho, tambi¨¦n entre comercios¡±, asegura el consumidor. ?Nota diferencias entre ellos? ¡°Siempre hay algunas diferencias¡±. Entre pa¨ªses, tambi¨¦n hay disparidades: la cesta de la compra elaborada para este reportaje contiene 10 productos: pan, pollo, yogures, leche, caf¨¦, pasta, huevos, patatas, tomates y manzanas. La m¨¢s cara es la holandesa (ver gr¨¢fico), seguida de Londres, Par¨ªs, Berl¨ªn, Bruselas, Roma, Lisboa y Madrid.
Mientras los costes de la energ¨ªa se han moderado, los de la alimentaci¨®n siguen creciendo, para preocupaci¨®n de las familias con menos recursos, que tienen que dedicarle cada vez m¨¢s porcentaje de su renta. Un 52% se fija ahora m¨¢s en los precios que antes de la pandemia, un 31% m¨¢s que en 2020, seg¨²n una encuesta publicada en enero con 5.000 participantes de 10 pa¨ªses (incluida Espa?a) por la Universidad de Aarhus (Dinamarca) en colaboraci¨®n con el Instituto Europeo de Innovaci¨®n y Tecnolog¨ªa, dependiente de la UE. El 54% opina que la guerra es la principal causa, pero un 48% tambi¨¦n piensa que el incremento de costes se est¨¢ repartiendo mal y el conflicto ¡°ha permitido a los distribuidores y fabricantes obtener m¨¢s ganancias¡±, seg¨²n se?alan los autores de la encuesta.
Un pepino a 3,29 euros
Las redes sociales alientan el debate. En Alemania bullen estos d¨ªas con comentarios sobre los precios de las hortalizas. ¡°?Un pepino por 1,89 y ni siquiera es org¨¢nico!¡±, exclama una usuaria de Twitter que muestra la foto de las estanter¨ªas casi vac¨ªas en un supermercado. Otros suben fotos de los precios disparados de pimientos a 7,99 el kilo o tomates a 5. El r¨¦cord parece ser un pepino (s¨ª, la unidad) a 3,29 euros.
La mayor econom¨ªa de la zona euro es una de las que m¨¢s est¨¢ sufriendo las subidas de precios de los alimentos. Y las quejas por el precio r¨¦cord del pepino son el reflejo de un problema que est¨¢ sufriendo ahora Europa y que a?ade m¨¢s le?a al fuego: el cierre este invierno de los invernaderos en el centro del continente y el Reino Unido ¡ªfuncionan con gas y ahora no resultan rentables¡ª ha producido una reducci¨®n de la oferta de hortalizas y ha disparado los precios. En el Reino Unido, que tambi¨¦n sufre la decisi¨®n de Marruecos de limitar sus exportaciones para cubrir su propia demanda interna, varios supermercados han racionado estos productos.
Todo esto se ha traducido en una mayor demanda de los productores de Almer¨ªa y Murcia, la llamada huerta de Europa. Ha ca¨ªdo la producci¨®n de pepinos y pimientos, mientras los precios se han disparado en las subastas agr¨ªcolas en el ¨²ltimo mes: un 120% el pepino, un 104% el pimiento y un 60% el tomate, seg¨²n fuentes del sector, que estiman que la situaci¨®n se normalizar¨¢ en unas semanas.
Las hortalizas no son lo ¨²nico que se ha encarecido en Alemania. Productos tan b¨¢sicos como la mantequilla han subido casi un 40% en un a?o. El Gobierno tripartito de Olaf Scholz ha aprobado distintas medidas para aliviar los efectos de la inflaci¨®n, pero ninguna enfocada directamente al precio de los alimentos. En septiembre, el tercer paquete de ayudas incluy¨® un pago ¨²nico de 300 euros para jubilados y otro de 200 euros para estudiantes. Tambi¨¦n en septiembre el Ejecutivo decidi¨® frenar el precio de la electricidad y el gas. En paralelo, la nueva renta ciudadana, el sistema de protecci¨®n social antes llamado Hartz IV, ha subido unos 50 euros por persona al mes.
Los ciudadanos del Reino Unido tambi¨¦n est¨¢n sufriendo la crisis del coste de la vida que afecta a toda Europa. Al incremento del coste de la energ¨ªa, Londres debe sumar las consecuencias negativas del Brexit, que ha encarecido y complicado el abastecimiento de los supermercados. La inflaci¨®n se sit¨²a en el 10,1%, pero la subida de la cesta de la compra, seg¨²n Kantar, est¨¢ muy por encima de esa cifra. En el primer mes de 2023, los precios de los alimentos b¨¢sicos subieron un promedio del 16,7% (un 13,3%, seg¨²n la patronal del sector).
El Gobierno brit¨¢nico puso en marcha, a mediados de 2022, el programa Help for Household (Ayuda para los Hogares), coordinado por el empresario y exdirector ejecutivo de la empresa de distribuci¨®n de comida a domicilio Just Eat David Buttress. No es una rebaja directa y generalizada de los precios de una cesta de la compra b¨¢sica. El Ejecutivo ha aumentado las subvenciones directas en una gama de situaciones que contemplan tanto a las familias de renta baja, como el n¨²mero de menores dependientes, pensionistas o ciudadanos con discapacidades. Las ayudas, distribuidas entre 2023 y 2024, suponen un ¨²nico pago que oscila entre los 170 y los 340 euros.
La presi¨®n del coste de la vida sobre los ciudadanos se ha traducido en una oleada de huelgas, en aquellos sectores donde los salarios permanecen congelados desde hace m¨¢s de una d¨¦cada, y donde los sindicatos retienen afiliados y fuerza de convocatoria. Ferrocarriles, autobuses, metro, personal sanitario, bomberos o profesores han protagonizado paros discontinuos desde el final del pasado verano.
Medidas sobre la mesa
La discusi¨®n sobre qu¨¦ hacer ante la subida de precios se ha ido calentando en el Viejo Continente. En Espa?a, el diagn¨®stico de la situaci¨®n y c¨®mo aliviar las subidas ha provocado un cisma entre los socios del Gobierno. El Ejecutivo ha aprobado la rebaja del IVA de algunos productos b¨¢sicos y un cheque de 200 euros para las familias con ingresos menores de 27.000 euros. El ministro de Agricultura, Luis Planas, considera que la subida de precios ha tocado techo y, aunque ha advertido de que las bajadas de precios ser¨¢n lentas, ha descartado de momento nuevas iniciativas.
Desde Unidas Podemos han pedido ir m¨¢s all¨¢: primero la formaci¨®n fue partidaria de topar los precios de los alimentos y despu¨¦s propuso bonificar determinados productos, sin importar el nivel de renta, con cargo a las arcas p¨²blicas. De forma paralela, la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, ha insistido en su iniciativa de acordar con la distribuci¨®n una cesta asequible con cargo a sus m¨¢rgenes, que seg¨²n afirma est¨¢n disparados. Y ha recordado a Planas que la Ley de Ordenaci¨®n del Comercio Minorista permite intervenir m¨¢rgenes empresariales o fijar precios en casos excepcionales.
¡°Hay que identificar bien los problemas antes de tomar medidas porque pueden ser in¨²tiles o contraproducentes¡±, advierte el economista Manuel Hidalgo sobre la posibilidad de topar precios. Pone como ejemplo de posible buena pol¨ªtica, por las circunstancias concretas que se dieron, el control de precios que se impuso a las mascarillas en Espa?a durante la pandemia para evitar abusos. ¡°Pero en el caso de los alimentos no sirven este tipo de medidas porque es un problema principalmente de costes¡±, a?ade. En Hungr¨ªa, el Gobierno de Viktor Orb¨¢n intervino el a?o pasado en el mercado para limitar los precios de un grupo de alimentos y el resultado ha sido el contrario del perseguido. El IPC de los alimentos es el que m¨¢s ha subido en la UE, casi un 50% anual, debido en parte a que, seg¨²n los expertos, los comercios han encarecido otros productos para compensar las p¨¦rdidas generadas por la medida.
Tom¨¢s Garc¨ªa Azc¨¢rate, ingeniero agr¨®nomo del CSIC y experto en pol¨ªtica agraria europea, es partidario de ¡°pol¨ªticas selectivas¡± que apoyen a los que ¡°lo necesitan¡±, como ampliar el cheque de 200 euros. Limitar precios como ha hecho Budapest o bonificarlos de forma generalizada, como ha hecho Grecia ¡ªel Gobierno asumir¨¢ el 10% del coste de la cesta de la compra desde febrero pasado y durante seis meses¡ª, le parecen iniciativas err¨®neas desde ¡°el punto de vista econ¨®mico y ¨¦tico¡±.
La realidad es que en pocos pa¨ªses europeos el debate en torno a las subidas de precios de los alimentos est¨¢ siendo tan crispado como en Espa?a. La secretaria general de Podemos y ministra, Ione Belarra, lleg¨® a llamar en febrero ¡°capitalista despiadado¡± a Juan Roig, presidente de Mercadona, y desde la formaci¨®n se ha acusado a los supermercados de estar ¡°forr¨¢ndose¡±. El ministro Planas no coincide con este diagn¨®stico. Afirma que hay competencia en el mercado, que la cadena alimentaria funciona y existen controles, como lo prueba el hecho de que la Agencia de Informaci¨®n y Control Alimentarios impusiera el a?o pasado 272 sanciones a empresas alimentarias, la gran mayor¨ªa por incumplir los plazos de pago y anomal¨ªas en los contratos.
Ni el sector agrario, ni los distribuidores son culpables de agravar la escalada de precios de los alimentos, seg¨²n Garc¨ªa Azc¨¢rate: ¡°En mis 40 a?os estudiando este mercado, nunca hab¨ªa visto una situaci¨®n con este problema de oferta e inflaci¨®n de costes. La idea de que hay un malo de la pel¨ªcula que asalta a los consumidores no cuadra con la realidad¡±.
Los datos de Agricultura indican que los precios que pagan agricultores y ganaderos por lo que necesitan para producir, desde semillas a fertilizantes, crecieron en conjunto un 33,4% anual en noviembre. Pero los precios que percibieron por sus productos subieron menos, un 23,4% de media, y la renta agraria cay¨® un 5,5% en 2022. Es decir, no han trasladado toda la subida de costes. Esta tendencia de contenci¨®n se mantiene en el siguiente eslab¨®n de la cadena, la industria, donde los precios subieron un 17,2% en el mismo periodo, seg¨²n los datos del INE. Y en la venta final al p¨²blico, en los distribuidores, donde el incremento fue del 11,3% (el IPC alimentario de noviembre pasado).
Desde la asociaci¨®n agraria COAG se destaca la diferencia de hasta el 500% que hay entre un producto fresco desde el origen hasta el punto venta. Aunque el ministerio avisa en su web de que en estas comparaciones en bruto hay que tener en cuenta todos los costes asociados de mantener una cadena alimentaria en marcha para el conjunto del sector (desde mano de obra, a mantenimiento de instalaciones y todos los costes de producci¨®n y adaptaci¨®n a las demandas medioambientales). Tambi¨¦n hay que tener en cuenta que los precios de origen pueden bajar y en el lineal seguir altos, porque hay ¡°un efecto de reposici¨®n¡±, explica Garc¨ªa Azc¨¢rate, que hace que tenga que pasar un tiempo entre un momento y otro.
?Es realmente competitiva la distribuci¨®n en Europa? En Espa?a, Mercadona es l¨ªder, con una cuota del 25%, seguida por Carrefour (9,8%), Lidl (6%), Dia (4,4%) y Eroski (4,3%). Un reparto insuficiente, seg¨²n la ministra D¨ªaz. Suficiente, seg¨²n los expertos de mercado de Kantar y Nielsen IQ. En Francia, las cinco mayores empresas suman un 78% y, en el mercado portugu¨¦s, m¨¢s del 50% est¨¢ en manos de dos firmas.
Nueva tasa en Portugal
Portugal, donde las subidas de los precios de los alimentos est¨¢n por encima del 20%, ha sido tajante en las medidas que ha tomado en relaci¨®n con las empresas. El primer ministro, el socialista Ant¨®nio Costa, descart¨® bajar el IVA a los productos alimentarios, pero las grandes cadenas de distribuci¨®n tendr¨¢n que pagar una tasa temporal del 33% sobre sus beneficios extraordinarios de 2022 y 2023. Hay 108.000 personas que se benefician, adem¨¢s, de una cesta con una veintena de productos esenciales que financia el Gobierno, aunque es una medida anterior a la inflaci¨®n. En septiembre se aprob¨® un paquete de medidas valoradas en 2.400 millones para compensar a las familias y a los pensionistas por la inflaci¨®n.
Un movimiento llamado Vida Justa, creado en las ¨¢reas metropolitanas de Lisboa donde se concentran m¨¢s familias con pocos ingresos, organiz¨® hace una semana una manifestaci¨®n en la capital para exigir que se limite el precio de los bienes esenciales, se suban los salarios y se frene la especulaci¨®n inmobiliaria sobre la vivienda. El pa¨ªs vive una ola de protestas por los bajos salarios y la precariedad laboral en diversos sectores. El salario m¨ªnimo profesional portugu¨¦s es de 760 euros. Si alguien quiere hacer una ensalada, tendr¨ªa que gastar el 5% del salario m¨ªnimo para comprar un kilo de tomates coraz¨®n de buey.
La sombra de la duda planea sobre los m¨¢rgenes de fabricantes y distribuidores. A nivel global, cadenas como la estadounidense Kroger, la holandesa Ahold Delhaize y la brit¨¢nica J Sainsbury aseguran que sobreviven con m¨¢rgenes operativos del 4% o menos. En comparaci¨®n, grandes fabricantes como Unilever y Nestl¨¦ trabajan con m¨¢rgenes del 16% o 17%, seg¨²n analizaba hace unos d¨ªas Aimee Donnellan, columista de Reuters Breakingviews experta en el sector. En las ¨²ltimas presentaciones de resultados, en febrero, ejecutivos de estas ¨²ltimas empresas se han comprometido a responder al incremento de los costes subiendo los precios para proteger esos m¨¢rgenes.
La distribuci¨®n asegura que no puede hacerlo tan f¨¢cilmente porque pierde clientes, seg¨²n explicaba Donnellan. En junio de 2022, la brit¨¢nica Tesco retir¨® de sus estanter¨ªas productos de Kraft Heinz por una disputa sobre precios. Ahold Delhaize dej¨® de vender KitKat y Nescaf¨¦ (de Nestl¨¦) por motivos similares. Lo mismo hizo la cadena francesa Casino, que no acept¨® una subida del 22% del precio del agua Evian y Volvic de Danone.
Respecto a Espa?a, el conjunto del sector de la distribuci¨®n asegura que sus m¨¢rgenes son muy ajustados (entre el 1% y el 3% de las ventas). El Banco de Espa?a public¨® en diciembre un an¨¢lisis en el que concluye que, en los tres primeros trimestres de 2022, las empresas de comercio y hosteler¨ªa registraron repuntes de sus m¨¢rgenes. Pero no se refiere de forma espec¨ªfica a la distribuci¨®n alimentaria. Sobre esta industria, la instituci¨®n dice en el mismo documento que habr¨ªa ¡°experimentado ca¨ªdas de rentabilidad¡±, como otros subsectores afectados por ¡°el impacto negativo de los costes¡±.
Mercadona tiene previsto publicar sus resultados de 2022 este mes. Dia, cuarto operador en Espa?a, acaba de publicar sus cuentas y sigue en p¨¦rdidas. Carrefour tambi¨¦n ha obtenido beneficios a escala global (no da el detalle por pa¨ªses). El grupo franc¨¦s gan¨® 1.566 millones, lo que deja un margen neto del 1,7% de su facturaci¨®n. El operativo fue de 2,9%, dos d¨¦cimas inferior al de 2021.
Cesta asequible en Francia
En Francia, el Gobierno se ha enfrascado en un forcejeo con las grandes firmas de distribuci¨®n, entre ellas Carrefour, para convencerlas de que, a partir del 15 de marzo, garanticen el precio m¨ªnimo posible en una serie de productos alimentarios. Se trata de contener ¡ªpor la persuasi¨®n, y no con medidas obligatorias¡ª la inflaci¨®n en la alimentaci¨®n. Para el presidente, Emmanuel Macron, la subida de precios en la alimentaci¨®n es un motivo de preocupaci¨®n. El temor es que el malestar estalle en alg¨²n momento, aunque por ahora lo que saca a centenares de miles de franceses a las calles no es la inflaci¨®n, sino la reforma de las pensiones. Las demandas de salarios m¨¢s altos ya motivaron en oto?o huelgas en las refiner¨ªas. Podr¨ªan volver.
El Gobierno ya ha gastado 110.000 millones de euros desde 2021 para contener la subida del gas y la electricidad. As¨ª mantuvo la inflaci¨®n en los niveles m¨¢s bajos de la UE el a?o pasado. Pero Macron no quiere gastar un euro, como s¨ª hizo con la energ¨ªa, con la alimentaci¨®n, y aboga por un acuerdo voluntario con las empresas, acuerdo que deber¨ªa concretarse en los pr¨®ximos d¨ªas. ¡°El presidente no es capaz de proponer otra cosa que la caridad a las multinacionales de la alimentaci¨®n, hay que dejar de capitular ante la inflaci¨®n¡±, ha denunciado el diputado de extrema derecha Jean-Philippe Tanguy.
Macron conf¨ªa en que la presi¨®n p¨²blica lleve a las multinacionales a contener los precios por propia iniciativa. El modelo es Total Energies, que hace unos d¨ªas se comprometi¨®, despu¨¦s de anunciar resultados estratosf¨¦ricos, a que la gasolina di¨¦sel no superase en 2023 el precio de 1,99 euros por litro en las estaciones de servicio francesas.
Protestas en B¨¦lgica
Las tensiones de precios en B¨¦lgica son considerables y en los ¨²ltimos meses ha habido protestas para pedir subidas salariales ante la escalada inflacionista. El precio de los alimentos escal¨® un 19,2% en enero en tasa armonizada, por encima de la media de la UE. El instituto belga de estad¨ªstica calcula que los huevos han subido en los ¨²ltimos meses un 38,6%; la leche, un 33,5%; el pan, el 20%; el pescado, un 15,7% y la carne, el 14,8%.
Desde que comenzaron a subir los precios en B¨¦lgica, el Gobierno de coalici¨®n, formado por siete partidos, ha desplegado medidas muy similares a las de otros pa¨ªses europeos. A finales de 2022, por ejemplo, liber¨® unos 26 millones para la cesta de la compra de los hogares m¨¢s vulnerables (unos 450.000). Se aumenta de 475 horas a 600 horas al a?o el tiempo que podr¨¢n trabajar los estudiantes con cotizaciones reducidas y sin perder otras ayudas familiares. Pero donde se puso m¨¢s acento fue, sin duda, en las ayudas para pagar la factura energ¨¦tica: extensi¨®n del bono social a un mill¨®n de hogares, bajada del IVA del gas y la electricidad al 6% o rebaja en impuestos especiales a gasolina y gas¨®leo.
Rebaja fiscal en Italia
Tampoco se ha escapado Italia de la subida de la cesta de la compra, aunque la tasa armonizada est¨¢ por debajo de la media, en el 12,6%, seg¨²n Eurostat. Seg¨²n las asociaciones de consumidores, las familias gastaron de media el a?o pasado 700 euros m¨¢s en alimentaci¨®n.
El Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni ha prometido medidas para paliar la escalada de precios. Por el momento, ha rebajado entre dos y tres puntos la llamada cu?a fiscal (la diferencia entre el salario que paga un empleador y lo que un trabajador se lleva a casa). Se trata de una medida en la l¨ªnea de las impulsadas por el Ejecutivo precedente guiado por Mario Draghi que sirve para aumentar los salarios en la pr¨¢ctica entre 10 y 30 euros mensuales. Meloni tambi¨¦n tante¨® un descenso del IVA al 5% para alimentos de primera necesidad como el pan o la leche que no lleg¨® a aprobarse.
Escalada en los Pa¨ªses Bajos
En Pa¨ªses Bajos, el IPC armonizado se situ¨® en el 17,7% en enero, seg¨²n Eurostat. Ha subido la leche, el queso y los huevos, la carne y el pescado, las verduras... mientras en los ¨²ltimos meses ha bajado el precio de los cereales y tambi¨¦n las grasas alimentarias, pero el ajuste no se ha notado todav¨ªa en el bolsillo del consumidor. Los an¨¢lisis m¨¢s recientes publicados por los expertos del banco Rabobank apuntan la posibilidad de que los precios empiecen a descender hacia finales del verano.
En 2023, el sueldo medio holand¨¦s es de 40.000 euros brutos anuales, se?ala el Instituto de Investigaci¨®n Financiera ADP. Un paquete de pan integral de molde (compra est¨¢ndar en el hogar) vale 2,49 euros. Si se compra uno diario, ser¨ªa un gasto de 74 euros mensuales.
Con informaci¨®n de Marc Bassets (Par¨ªs), Tereixa Constenla (Lisboa), Manuel V. G¨®mez (Bruselas), Lorena Pacho (Roma) e Isabel Ferrer (La Haya).
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