Cuando todo queda a m¨¢s de un cuarto de hora de casa
Un 61% de espa?oles viven en entornos que cumplen con la ciudad de los 15 minutos, un concepto que obliga a repensar la manera en que crecen las urbes y se construyen nuevos barrios
Rafael Par¨ªs, un maestro jubilado de 64 a?os, hizo una mudanza junto con su mujer el pasado verano. Una vivienda a estrenar en El Ca?averal, uno de los desarrollos que crecen en el sureste de Madrid, muy cercano a Coslada, donde viv¨ªa antes. Pero las cosas han resultado muy diferentes al v¨ªdeo promocional que les ense?aron al comprar el piso: ¡°Yo estoy muy contento con mi casa de puertas adentro, pero ahora la tienda m¨¢s cercana que tengo est¨¢ a 20 minutos andando, el m¨¦dico lo sigo teniendo en Coslada y voy a mi antiguo barrio a muchas cosas¡±, relata. ¡°No es agradable, no es c¨®modo, es un lugar a medio hacer¡±, remata. Pero lo que m¨¢s le molesta es la sensaci¨®n de que no se trata de una cuesti¨®n coyuntural, sino de un modelo de hacer ciudad, el de los PAU o proyectos de actuaci¨®n urban¨ªstica: ¡°Es especulaci¨®n pura y dura en la que las dotaciones son lo que menos importa¡±, contin¨²a, ¡°un truco maravilloso en que todo el mundo gana, salvo el vecino¡±.
El antiguo maestro de Coslada y sus nuevos vecinos del Ca?averal tienen el dudoso honor de pertenecer al 1,3% de madrile?os que viven en un punto rojo de la capital: el color que marca los lugares donde faltan servicios b¨¢sicos a una distancia de un cuarto de hora andado o en bicicleta, seg¨²n un mapa que ha creado recientemente la compa?¨ªa Deyde DataCentric. Se basa en el concepto de la ciudad de los 15 minutos, que gener¨® cierto ruido en las elecciones municipales del pasado mayo. Por eso la compa?¨ªa de datos se propuso un rastreo de Espa?a, secci¨®n censal a secci¨®n censal, que ha completado ahora. ¡°En general, las grandes ciudades cumplen de manera homog¨¦nea¡±, resume Gerardo Raido, jefe de marketing de la firma, ¡°en los PAU s¨ª hay peque?as islas de dotaci¨®n de servicios, pero menos de lo que esper¨¢bamos¡±. La conclusi¨®n general del estudio que es que un 61% de la poblaci¨®n espa?ola vive en zonas que cumplen los criterios en las seis categor¨ªas (trabajo, abastecimiento, sanidad, educaci¨®n, ocio y calidad de vida), bajo un nuevo paradigma al que los expertos asocian muchos beneficios sociales, econ¨®micos y medioambientales.
El arquitecto francocolombiano Carlos Moreno, director cient¨ªfico de la C¨¢tedra Emprendimiento-Territorio-Innovaci¨®n en la escuela de negocios IAE Par¨ªs-Sorbona, pasa por ser el inventor de la ciudad de los 15 minutos (ciudad del cuarto de hora, en su traducci¨®n literal del franc¨¦s). ¡°Llevo trabajando el concepto desde 2010¡å, relata al tel¨¦fono, ¡°pero los tres ¨²ltimos a?os han sido muy interesantes porque hemos pasado de la teor¨ªa a la aplicaci¨®n¡±. Moreno, asesor de urbanismo de la Alcald¨ªa de Par¨ªs, incide en la influencia de la covid para redescubrir la importancia de la proximidad. ¡°Ya tenemos m¨¢s de 200 ciudades en el mundo que est¨¢n aplicando el concepto¡±, a?ade en alusi¨®n al ¡°¨¦xito¡± que ha tenido su propuesta en la red internacional de urbes C40 y otras organizaciones similares. Hasta el punto de que fue adoptada como recomendaci¨®n en una gu¨ªa de ONU-H¨¢bitat. Si la f¨®rmula funciona, dice su creador, es porque es f¨¢cil comprender sus beneficios, que sintetiza en una frase: ¡°Se genera menos di¨®xido de carbono, m¨¢s actividad econ¨®mica y m¨¢s inclusividad social¡±.
Hasta 23 municipios espa?oles de m¨¢s de 50.000 habitantes, incluyendo tres capitales provinciales (Pamplona, Bilbao y Santander), cumplen los criterios de la ciudad de los 15 minutos, seg¨²n la proyecci¨®n de Deyde DataCentric. Si se restringe al desplazamiento peatonal, ese 100% solo lo alcanzan dos poblaciones: Santa Coloma de Gramenet y Cornell¨¤ de Llobregat. Ambas est¨¢n en el ¨¢rea metropolitana de Barcelona, que copa los primeros puestos de la clasificaci¨®n. Por el contrario, no hay ning¨²n vecino de Molina de Segura (Murcia), Roquetas de Mar (Almer¨ªa) o Utrera (Sevilla) con acceso a todos los servicios en un cuarto de hora de paseo o de pedaleo. Entre medias, las grandes urbes de m¨¢s de medio mill¨®n de habitantes se dividen. Todas cumplen con una proximidad par¨¢ m¨¢s del 90% de su poblaci¨®n en bici, pero al observar la distancia solo andando, esa barrera solo la superan las tres mayores: Madrid, Barcelona y Valencia. Sevilla se queda cerca, y Zaragoza y M¨¢laga est¨¢n m¨¢s rezagadas.
Un paseo con Rafael Par¨ªs por su nuevo vecindario ejemplifica muchas de las vivencias que relata: familias que tardan 40 minutos en llevar a los ni?os al colegio, descampados donde deber¨ªan levantarse institutos o bibliotecas (¡°ser joven aqu¨ª es totalmente hostil¡±, asegura) y transportes p¨²blicos escasos, como atestiguan los esprints que muchos se echan cuando ven el autob¨²s para no esperar al siguiente. El maestro jubilado forma parte de la asociaci¨®n de vecinos El Ca?averal Avanza (Aveca), y Helio Mart¨ªnez la preside. ¡°Sufrimos las carencias de c¨®mo se hacen los nuevos desarrollos¡±, se queja Mart¨ªnez, a punto de cumplir dos a?os desde que se mud¨® al barrio. En Aveca denuncian que, con unos 21.000 vecinos y m¨¢s de 1.400 ni?os entre cero y cuatro a?os, lo ¨²nico que han puesto all¨ª las Administraciones es una escuela infantil municipal con 154 plazas.
¡°Problemas¡± en la periferia
El dirigente vecinal tambi¨¦n lamenta los atascos que, a causa de las continuas obras de urbanizaci¨®n, llevan semanas sufriendo. Algo que le preocupa porque cree que El Ca?averal, en la encrucijada de tres grandes autov¨ªas que lo encapsulan pero que a la vez son claves para su conexi¨®n con Madrid y su ¨¢rea metropolitana, siempre va a depender del coche. ¡°Las Administraci¨®n nunca va a poner un transporte p¨²blico competitivo con el veh¨ªculo privado¡±, argumenta, ¡°la ciudad de los 15 minutos es posible cuando hay una densidad de poblaci¨®n m¨ªnima y esto es urbanismo en extensi¨®n, por lo que nunca la va a haber¡±.
El coche es, precisamente, la clave que explica todo para el urbanista Jos¨¦ Mar¨ªa Ezquiaga. ¡°La ciudad de los 15 minutos es en realidad la recuperaci¨®n de una idea vigente y dominante en el urbanismo durante mucho tiempo, pero en el siglo XX lleg¨® el dominio del autom¨®vil y todo se replantea desde la accesibilidad a gran distancia que este permite¡±, ilustra. Las tornas est¨¢n cambiando, pero el exdecano de los arquitectos de Madrid admite que existe ¡°un problema en los barrios de la periferia¡±. ¡°Esto es importante para los nuevos PAU¡±, contin¨²a, ¡°en los nuevos desarrollos no es que se vaya a reproducir el centro hist¨®rico, pero habr¨ªa la oportunidad bastante sensata de plantear un comercio m¨¢s distribuido y de pensar que hay que dise?ar esta ciudad cercana no solo para adultos sanos, sino tambi¨¦n para ni?os, mayores o personas con necesidades especiales¡±.
¡°Pensar en nuevos modelos de ciudad no es una ocurrencia¡±, remarca la economista Mar¨ªa Teresa Gallo, profesora de Econom¨ªa Urbana en la Universidad de Alcal¨¢ de Henares. M¨¢s del 50% de la poblaci¨®n mundial, y del 80% en Espa?a, vive en entornos urbanos. ¡°Las cosas pasan donde est¨¢n las personas¡±, comenta Gallo. ¡°Es clave la importancia de las ciudades como motor econ¨®mico porque ah¨ª se generan la actividad y el empleo; pero tambi¨¦n se crean problemas, externalidades en la jerga econ¨®mica, como la contaminaci¨®n¡±. ¡°No podemos ser ajenos a esa realidad¡±, concluye la profesora, ¡°hay una cara y una cruz en el crecimiento urbano de las ¨²ltimas d¨¦cadas¡±. Para Rafael Par¨ªs, el profesor jubilado, la mayor cruz de su nuevo barrio est¨¢ clara: ¡°?C¨®mo vas a generar tejido social si ning¨²n ni?o estudia en el barrio?¡±, se pregunta.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.