El Tribunal Supremo del Reino Unido niega a los repartidores de Deliveroo el derecho a la negociaci¨®n colectiva
La justicia brit¨¢nica rechaza que haya una relaci¨®n laboral entre la empresa y los ¡®riders¡¯, en una sentencia hist¨®rica para la econom¨ªa ¡®gig¡¯
El Tribunal Supremo del Reino Unido ha propinado este martes un duro golpe a los repartidores de Deliveroo, en una sentencia hist¨®rica sobre las relaciones y derechos laborales de la econom¨ªa gig. Los cinco magistrados que firman la sentencia han negado al sindicato Independent Worker¡¯s Union of Great Britain (IWGB, en sus siglas en ingl¨¦s) la posibilidad de representar a los riders en una negociaci¨®n colectiva para defender sus salarios o condiciones de trabajo. El Supremo confirma la decisi¨®n de instancias judiciales inferiores ¡ªel recorrido judicial del asunto ha durado m¨¢s de siete a?os¡ª, que niegan la existencia de una relaci¨®n laboral entre la empresa y los repartidores.
Seg¨²n expone la sentencia, los trabajadores funcionan como aut¨®nomos (basan su carga laboral en lo que les asigna la app a la que est¨¢n suscritos), y tienen la libertad de trasladar a un sustituto sus obligaciones o incluso de realizar el trabajo encargado a otro rider. ¡°Los repartidores pueden rechazar ofertas de trabajo, declararse ellos mismos no disponibles o incluso comprometerse a realizar encargos de sus competidores¡±, reza la decisi¨®n. ¡°Todas estas caracter¨ªsticas resultan fundamentalmente incompatibles con cualquier noci¨®n de una relaci¨®n laboral¡±, a?ade.
IWGB, que agrupa bajo su protecci¨®n al mayor n¨²mero de repartidores de la econom¨ªa gig en el Reino Unido, ha asegurado que contempla la posibilidad de recurrir ante la justicia europea ¡ªante el Tribunal de Estrasburgo¡ª en busca del amparo del derecho internacional. ¡°La sentencia del Supremo supone una gran decepci¨®n, despu¨¦s de varios a?os de batalla legal para asegurar los derechos de los riders a contar con unos derechos laborales m¨ªnimos. No podemos aceptar, como sindicato, que miles de trabajadores sigan desempe?ando su tarea sin protecciones clave como el derecho a la negociaci¨®n colectiva¡±, ha asegurado la central. ¡°Esta falsa y peligrosa dicotom¨ªa entre los derechos laborales y la flexibilidad [para aceptar encargos] es un argumento que Deliveroo y otros gigantes de la econom¨ªa gig utilizan para dar legitimidad a la explotaci¨®n de su modelo de negocio¡±, han a?adido.
La compa?¨ªa se ha felicitado por la decisi¨®n del Supremo y la considera ¡°positiva¡± para sus trabajadores, porque ¡°valora la flexibilidad que ofrece el autoempleo¡±.
Aunque Deliveroo lleg¨® el a?o pasado a un acuerdo con el sindicato GMB por el que otorg¨® cobertura de seguro a los repartidores, bajas laborales por enfermedad y la posibilidad de ser representados por un sindicato, los cr¨ªticos de la empresa ¡ªespecialmente en IWGB¡ª denunciaron el acuerdo como una maniobra de publicidad y un ejercicio de cinismo e hipocres¨ªa. El acuerdo permit¨ªa a Deliveroo decidir qu¨¦ sindicato reconoc¨ªa como interlocutor y cu¨¢l no.
La empresa todav¨ªa no ha comenzado a generar beneficios, a pesar del crecimiento continuo de sus ingresos.
En Bruselas, la UE estudia ya c¨®mo dotar de mayores protecciones a los trabajadores de la econom¨ªa gig. La idea de que una empresa pueda controlar el n¨²mero de horas de trabajo de las personas a su disposici¨®n, el tipo de ropa que deben llevar, e incluso tenga capacidad de obligarles a aceptar o no un encargo, dicen algunas de las recomendaciones barajadas en las instituciones comunitarias, convierten a los riders en empleados laborales con todas las consecuencias.
En Espa?a, Deliveroo ha dejado de operar hace un a?o, justo antes de que se aprobara y entrara en vigor la nueva ley de riders, que obligaba a la empresa a contratar directamente, o subcontratar de otro proveedor, a sus repartidores.
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