Menos abrigos y m¨¢s helados: las empresas se adaptan a un invierno sin fr¨ªo

El casta?ero de la peatonal calle del Carmen mira l¨¢nguido a la helader¨ªa de enfrente. Es 1 de febrero, pleno invierno en Madrid, pero hacen unos agradables 18 grados en el centro. ¡°Mucha gente en la calle es bueno; pero sin fr¨ªo, no apetece¡±, dice se?alando a los viandantes pasar de largo sus casta?as y boniatos. Sin embargo, en V¨¦neta ¡ªcon enormes pegatinas de ¡°Mejor helado de Espa?a¡± en el escaparate¡ª hay una cola de gente salivando. Desde que reabrieron tras sus primeras vacaciones de Navidad (la franquicia se inaugur¨® hace un a?o en la capital) no paran, asegura una dependienta mientras cucharea una monta?a de ¡°Pistachio Paradise¡±.

El a?o pasado fue el m¨¢s caluroso de la historia en el mundo y el segundo en Espa?a desde el comienzo de la serie en 1961. Acab¨® con un diciembre c¨¢lido y muy seco que llev¨® a un enero extremo en temperatura (el m¨¢s caliente registrado, bati¨® 153 r¨¦cords) y de media h¨²medo, aunque marcado por una brutal sequ¨ªa en zonas como Catalu?a y Murcia. Febrero ha avanzado m¨¢s fresco, pero este nuevo invierno que no termina de serlo del todo, ha trastocado los planes de muchas empresas.

El buen tiempo es el peor para sectores obvios como las pistas de esqu¨ª, pero no solo. A un mes de que arranque la primavera oficialmente, en los viveros se acumulan las flores que han restallado antes de tiempo, ha ca¨ªdo la demanda en los hoteles rurales cuyo encanto es una buena chimenea, y perdido su valor los abrigos sin vender en los escaparates. Y en el campo, la sequ¨ªa asola los cultivos. Como en toda crisis, algunos negocios sacan ventaja. Para ganadores y perdedores, la clave, repiten los empresarios, es ser flexible y adaptarse.

Esquiar a ca?onazos

Cada vez son m¨¢s recurrentes (y criticadas por el sector ecologista) las im¨¢genes en estaciones como La Molina o Vallter donde esquiadores poco abrigados se deslizan por monta?as donde el ¨²nico blanco es el de la nieve artificial y los m¨¢rgenes de las pistas est¨¢n verdes. Hace tres inviernos que los nubarrones cargados de nieves esquivan los Pirineos, sobre todo los catalanes. Son decenas de municipios entre Arag¨®n, Catalu?a y Andorra que viven al fr¨ªo de un sector que recurre como nunca a la tecnolog¨ªa en busca de lo que la emergencia clim¨¢tica les arrebata del cielo.

El calor adem¨¢s dificulta el uso de los ca?ones esparcidos por las laderas: conectados por tuber¨ªas subterr¨¢neas a las balsas de las estaciones (llenas gracias al anterior deshielo) pulverizan el agua con aire a presi¨®n para hacer la nieve artificial, pero para ello se necesita que la temperatura y la humedad del aire sean las adecuadas, ligeramente por encima del punto de congelaci¨®n.

Dado que la regi¨®n est¨¢ sufriendo la peor sequ¨ªa desde que existen registros, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (que gestiona las seis estaciones de esqu¨ª p¨²blicas) present¨® a principio de temporada un proyecto ¡°pionero¡± con el que asegura se ahorrar¨¢ un 40% de agua y electricidad en la producci¨®n de nieve artificial. El objetivo es hacer las estaciones m¨ªnimamente esquiables para salvar miles de empleos, por lo que la FGC tambi¨¦n anunci¨® que colocar¨¢ 73 ca?ones m¨¢s en Vallter y La Molina. Porque los inviernos cada vez ser¨¢n menos blancos: seg¨²n el Observatorio Pirenaico de Cambio Clim¨¢tico, en 2050 habr¨¢ un espesor de nieve un 50% menor al actual en cotas de 1.800 a 2.200 metros, franja que ocupan la mayor¨ªa de las estaciones.

Helados todo el a?o

El sector del helado sigue valorando las cifras del negocio de este invierno, aunque Marco Miquel, presidente de la Asociaci¨®n Nacional de Heladeros Artesanos (Anhcea), ya avanza que ser¨¢n ¡°espectaculares¡±. ¡°En la franja cant¨¢brica, el sur y la costa mediterr¨¢nea¡±, dice, el clima benigno ¡°ha aumentado tanto la apertura de establecimientos como el volumen de ventas¡±. La zona central, que ha registrado temperaturas m¨¢s bajas, es la ¨²nica en la que no se ha notado este repunte. El ¨²nico cambio con respecto al verano es que ¡°los productos se adaptan a la temporada y se elabora con algo m¨¢s de calidez en el paladar¡±, con ingredientes como ¡°la casta?a, el mascarpone o el marr¨®n glac¨¦¡±. El auge del consumo supera incluso ¡°el h¨¢ndicap de que la producci¨®n mayoritaria, situada en Xixona e Ibi (Alicante), est¨¦ centrada en la producci¨®n de turr¨®n¡± durante las fechas pr¨®ximas a la Navidad.

Escaparates desubicados

En Oysho, plumas t¨¦rmico (para hasta -15?) de 49.99 a 14.99 euros. En Adolfo Dom¨ªnguez, parka de caballero de 279 a 99. En Cortefiel, jersey gordo de cuello vuelto de 69,99 a 12,99: es decir, un 81% de descuento, y un 25% en toda la nueva temporada.

¡°La gran lacra de este sector es la venta con rebajas¡±, dice Eduardo Zam¨¢cola, presidente de Acotex, la Asociaci¨®n Nacional del Comercio Textil, Complementos y Piel. ¡°Nos quejamos mucho de los costes, pero la venta es una locura, los descuentos cada vez empiezan antes, y duran m¨¢s, estamos regalando abrigos en el ¨²nico momento del a?o que tienen demanda, y si encima no hace fr¨ªo¡­ Olv¨ªdate¡±.

El sistema anterior ¡°tampoco ten¨ªa sentido¡±, dice el portavoz de las tiendas de moda: ¡°Con solo dos colecciones al a?o, colocabas la ropa de verano en febrero, no hac¨ªas caso a lo que necesitaba el cliente, pero al menos la gente compraba¡±. Inditex fue el primero en cambiar el paso, explica, renovando constantemente sus colecciones para adecuarse al clima. ¡°Pero los negocios peque?os lo tienen m¨¢s dif¨ªcil¡±. Hacen dos grandes pedidos al a?o, no tienen espacio para almacenar stock, ni fuerza para presionar a los proveedores. El experto insiste en que, grande o peque?a, los m¨¢s importante es que la empresa ¡°tenga cintura, sea flexible¡±. ¡°Las tiendas deben adaptarse teniendo un poco de todo, apostando por el entretiempo; y los clientes tenemos que comprar ropa para vestirnos por capas¡±.

Alficoz en vez de pepino

Mitad pepino, mitad mel¨®n, el alficoz es una variedad de hortalizas cucurbit¨¢ceas. Apenas se conoce fuera de la Comunidad Valenciana porque es fr¨¢gil para ser transportado, pero soporta muy bien la sequ¨ªa y el riego con agua con altas concentraciones de salinidad, por lo que est¨¢ dentro del campo de acci¨®n de un grupo de investigaci¨®n liderado por la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia, que busca semillas tradicionales de la familia del mel¨®n o la calabaza que resistan la escasez de agua. La agricultura, uno de los sectores m¨¢s perjudicados por el calentamiento global, la sequ¨ªa, inundaciones, olas de calor y fr¨ªo extremo, intenta adaptarse cultivando variedades como el alficoz o modificando las fechas de siembra.

¡°Hay mucha incertidumbre, porque ya no tenemos a?os con estaciones diferenciadas¡±, explica Ricardo Bayo, que tiene varias explotaciones de c¨ªtricos en Pedralba (Valencia). Al agricultor se le acumulan los problemas: a la falta lluvia se suma la competencia de los c¨ªtricos procedentes de Egipto, y las exigencias medioambientales de la Comisi¨®n Europea. Las tractoradas de estos d¨ªas dan fe de los ¨¢nimos en el sector.

Algunos agricultores optan por cambiar las variedades que plantan, pero Bayo, que tambi¨¦n es responsable de Naranjas de la Uni¨®n de Peque?os Agricultores y Ganaderos, advierte que un ¨¢rbol puede tardar cinco a?os en dar frutos, por lo que es partidario de mejorar la eficiencia del riego y usar mantas que rodean el suelo alrededor de los naranjos para mantener la humedad y protegerlos del calor.

Trasvases tur¨ªsticos

Los tres hoteles del grupo Spring en Tenerife abren los 12 meses del a?o. ¡°Nunca ha hecho fr¨ªo en Canarias, pero ahora es que hace calor todo el a?o¡±, explica Miguel Villarroya, consejero delegado de la empresa. ¡°Nuestros clientes ingleses alucinan¡±, dice el empresario, que asegura que no se ha puesto el abrigo este a?o. ¡°Los inviernos aqu¨ª siempre han sido muy suaves¡±, coincide Leire Bilbao, gerente de la fundaci¨®n Visit Benidorm, ¡°pero la mejora de temperatura¡±, sumada a continuas lluvias y nevadas en el principal mercado emisor de turistas, Reino Unido, ha generado ¡°un incremento de pernoctaciones y que los aeropuertos de Alicante-Elche y Val¨¨ncia hayan superado sus r¨¦cords de pasajeros en noviembre, diciembre y enero¡±.

Pero lo que se gana por un lado (la costa), se pierde por otro (el interior). Las pistas de esqu¨ª de G¨²dar-Javalambre (entre Teruel, Castell¨®n y Valencia) han estado pocos d¨ªas abiertas y se han anulado reservas, seg¨²n un portavoz de la Asociaci¨®n Espa?ola de Turismo Rural (Asetur). El problema se extiende por la red rural, m¨¢s que por el calor, por la falta de lluvias: el cliente habitual quiere fr¨ªo en invierno; si no lo hay, busca otro tipo de experiencias, como el spa o el pirag¨¹ismo, que precisan grandes reservas h¨ªdricas.

En verano el trasvase se da de sur a norte. Las olas de calor en el Mediterr¨¢neo, destino tradicional en julio y agosto, han incrementado el atractivo de las playas del norte. En 2023 el Pa¨ªs Vasco, Cantabria y Asturias fueron las comunidades que m¨¢s crecieron en visitas, esta ¨²ltima un 38% respecto al a?o anterior. Mientras, la Comisi¨®n Europea de Viajes, que aglutina a 35 entes nacionales de turismo ¡ªincluido TurEspa?a¡ª, public¨® en julio una encuesta afirmando que el n¨²mero de europeos dispuestos a viajar al ¨¢rea mediterr¨¢nea de junio a noviembre ha ca¨ªdo un 10%. Jaime Rossell¨®, catedr¨¢tico de la Universidad de las Islas Baleares experto en estudiar el impacto del cambio clim¨¢tico en el turismo, considera que a los extranjeros no les molestan tanto las altas temperaturas, mientras los veraneantes nacionales huyen al norte en parte por el calor, ¡°pero tambi¨¦n buscan naturaleza¡±.

Flores despistadas

A mediados de enero Julio Pe?a, de Viveros Pe?a, vio ¡°un r¨ªo de hormigas¡± cruzar su hist¨®rico establecimiento de la madrile?a A-2. ¡°?Hormigas en enero, lo nunca visto!¡±, exclama el experto en plantas ornamentales, directivo de esta empresa familiar fundada en 1969. Igual de confundidas empezaban a estar sus plantas. ¡°Si no llegan a bajar las temperaturas esta primera semana de febrero, podr¨ªa haber sido un desastre¡±, dice. Cuando la luz y el calor, se?ales de la primavera, empiezan a mover la savia antes de tiempo, los fr¨¢giles brotes quedan m¨¢s expuestos, durante m¨¢s tiempo, a las heladas nocturnas que ¡°llegar¨¢n s¨ª o s¨ª¡± en febrero y marzo. Puede ocurrirles a las peque?as flores de frutales como los cerezos y a las grandes camelias jap¨®nicas. ¡°Si ese capullo est¨¢ fuera cuando hiele, te quedas sin flor¡±. Le puede pasar incluso al resistente durillo. ¡°Las peores heladas son las que llegan cuando las plantas ya est¨¢n movidas¡±, dice Pe?a.

La floraci¨®n parece haberse parado con el reciente fr¨ªo. O al menos hacerse m¨¢s lenta. Como con las hormonas ¡°cuando existe la orden interna de despegar, es dif¨ªcil pararla¡±. En las plantas m¨¢s adelantadas hay que colocar telas antiheladas. ¡°El problema lo tienen los centros de producci¨®n de la costa¡±, dice Pe?a poniendo de ejemplo un vivero de producci¨®n de flor peque?a, como la petunia o el geranio, en Murcia. ¡°Su plan es que florezcan en marzo para venderlas en Madrid cuando la gente abra sus terrazas, pero si con el calor la floraci¨®n se les ha adelantado a enero o febrero, eso va a tal velocidad que se les acumularan sin poder venderlas¡±.

Asesores del tiempo

Como casi todos los centros de jardiner¨ªa y viveros, Pe?a recibe quincenalmente una previsi¨®n meteorol¨®gica de su asociaci¨®n sectorial (aunque no siempre acierta, admite). Pero muchos otros sectores, que podr¨ªan beneficiarse de ello, no cuentan con estos servicios. Empresas como Taiko Meteorolog¨ªa, con sede en Barcelona, quieren ocupar ese hueco ofreciendo un servicio personalizado. Taiko asesora a Freixenet o al Ayuntamiento de la Ciudad Condal. Ofrecen tendencias a 15 d¨ªas, un mes, estacionales; las bodegas pueden usarlas para decidir por ejemplo qu¨¦ vi?edos no regar ahora que hay restricciones porque se espera que llueva pronto en una zona concreta.

Las empresas de eventos o de construcci¨®n les contactan para saber c¨®mo de protegida ha de estar una obra o una boda. ¡°Nos abriendo cada vez a m¨¢s sectores que antes no se fijaban en estas cosas¡±, dice Alfred Rodr¨ªguez Pic¨®, director de la empresa. Menciona la moda (¡±adelantarse al tiempo sirve para planificar el stock y preparar los escaparates en vez de ir a rebufo del clima¡±) y los supermercados, donde saber de antemano el tiempo sirve para exponer comida m¨¢s fresca o m¨¢s invernal, o saber cu¨¢nta gente acudir¨¢ un s¨¢bado: ¡°Cuando hace buen tiempo se llenan¡±, explica Rodr¨ªguez Pic¨®. Para ¨¦l, este tiempo extra?o puede ser una oportunidad de negocio, pero nunca una buena noticia. ¡°Llevo a?os dando conferencias sobre el cambio clim¨¢tico, pero la gente no se acuerda de Santa B¨¢rbara hasta que truena, es decir, hasta que le toca el bolsillo¡±.

Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal