El consumo de electricidad crece en 2024 por primera vez desde la salida de la pandemia
La demanda abandona del letargo de la crisis energ¨¦tica por la m¨ªnima, pero el cambio de tornas invita a pensar en una incipiente electrificaci¨®n de empresas y hogares. La ¨²ltima vez que aument¨® fue en 2021
La demanda el¨¦ctrica aumentar¨¢ este a?o por primera vez desde la salida de la pandemia: hay que remontarse a 2021, un ejercicio desvirtuado por la comparaci¨®n con el confinamiento, para dar con el ¨²ltimo incremento en esta variable. A poco m¨¢s de una semana vista del cierre de 2024, el consumo de energ¨ªa el¨¦ctrica acumula un aumento del 1,4%, ya corregido por calendario y temperaturas. La ¨²ltima previsi¨®n de Red El¨¦ctrica de Espa?a (REE) apunta incluso algo m¨¢s alto: hasta el 1,6%. Cifras, ambas, que...
La demanda el¨¦ctrica aumentar¨¢ este a?o por primera vez desde la salida de la pandemia: hay que remontarse a 2021, un ejercicio desvirtuado por la comparaci¨®n con el confinamiento, para dar con el ¨²ltimo incremento en esta variable. A poco m¨¢s de una semana vista del cierre de 2024, el consumo de energ¨ªa el¨¦ctrica acumula un aumento del 1,4%, ya corregido por calendario y temperaturas. La ¨²ltima previsi¨®n de Red El¨¦ctrica de Espa?a (REE) apunta incluso algo m¨¢s alto: hasta el 1,6%. Cifras, ambas, que contrastan con la ca¨ªda del 1,9% en 2023 y del 3,5% en 2022, en plena crisis de precios de la energ¨ªa.
¡°El crecimiento es leve, poco significativo, pero es¡±, valora Juan Antonio Mart¨ªnez, analista de la firma de asesor¨ªa energ¨¦tica a empresas ASE. Una subida ¡°peque?a y que probablemente tenga que ver con la bajada de precios este a?o, ya est¨¢n lejos de los valores de la crisis energ¨¦tica. Eso incentiva el consumo, sobre todo el industrial¡±. Con todo, Mart¨ªnez recuerda que este a?o terminar¨¢ con cifras de consumo de electricidad ¡°muy inferiores¡± a las de los a?os anteriores a la pandemia.
¡°Lo achaco, sobre todo, a la industria, que ha tocado fondo, al crecimiento de la econom¨ªa y, en menor medida, a la electrificaci¨®n de los hogares¡±, esboza ?scar Barrero, socio responsable de Energ¨ªa de la consultora PwC, que prev¨¦ que la tendencia al alza contin¨²e el a?o que viene, ¡°quiz¨¢ con aumentos peque?os hasta que lleguen los grandes proyectos de electrificaci¨®n industrial, como las f¨¢bricas de bater¨ªas y los centros de datos. Eso es lo que va a pegar el tir¨®n definitivo¡±. Un centro de datos de tama?o medio, ejemplifica, consume alrededor de 800 gigavatios hora (GWh) al a?o, lo mismo que 200.000 familias. ¡°Los hogares ir¨¢n sumando, sobre todo con el coche el¨¦ctrico y la sustituci¨®n de calderas de gas por aerotermia, pero lo que de verdad mueve la aguja es que entren proyectos grandes. Y eso todav¨ªa est¨¢ por llegar¡±.
La inc¨®gnita del autoconsumo
Hay, sin embargo, una raz¨®n de peso para pensar que la estad¨ªstica de demanda no est¨¢ siendo del todo fiel a la realidad: el autoconsumo. La instalaci¨®n masiva de paneles solares en el tejado de casas, f¨¢bricas y empresas del sector servicios est¨¢ drenando una cantidad significativa de demanda en las horas diurnas. A falta de datos oficiales, la patronal renovable APPA calcula en ocho gigavatios (GW) la potencia instalada de autoconsumo, con un 3,7% de la demanda el¨¦ctrica total siendo ya satisfecha in situ.
¡°?Cu¨¢ntos de nuestros clientes de Madrid al sur no est¨¢n reduciendo su consumo poniendo paneles?¡±, se pregunta ret¨®ricamente Mart¨ªnez, del grupo ASE. ¡°Al no haber datos oficiales de REE sobre autoconsumo, todo lo que se diga es especulativo. Pero claro que ha tenido impacto... y muy importante¡±. Aunque, tras el m¨¢ximo de 2022 ¡ªen plena crisis energ¨¦tica¡ª el ritmo de instalaci¨®n se ha ralentizado, ¡°sigue entrando alrededor de un gigavatio al a?o, y eso es mucho. Eso rompe la correlaci¨®n entre la demanda real y la que figura en las estad¨ªsticas¡±, completa Barrero, de PwC. ¡°Sin autoconsumo y sin la mejora de la eficiencia energ¨¦tica, que contin¨²a, los aumentos de demanda ser¨ªan mucho mayores¡±.
?Primeras se?ales de electrificaci¨®n?
A¨²n es pronto para lanzar las campanas al vuelo, pero los ¨²ltimos datos alimentan el optimismo. Por contradictorio que pueda sonar en la era de la eficiencia y el ahorro, que el consumo de electricidad aumente se considera una buena noticia en tanto que apunta a un trasvase de demanda de combustibles f¨®siles (gas y carburantes) a electricidad, una fuente infinitamente m¨¢s limpia gracias a las renovables. En 2024, y por segundo a?o consecutivo, el sol, el viento y el agua han supuesto m¨¢s de la mitad de la demanda el¨¦ctrica nacional.
El caso m¨¢s paradigm¨¢tico es el de la automoci¨®n. Un coche el¨¦ctrico no solo se alimenta con energ¨ªa m¨¢s limpia que uno de combusti¨®n. Es que, adem¨¢s, su motor es notablemente m¨¢s eficiente: aunque pesen m¨¢s, por la bater¨ªa que portan, su capacidad para convertir la energ¨ªa en movimiento es mucho mayor que la de sus pares de gasolina o gas¨®leo. Algo similar ocurre en el sector secundario: la industria que ya ha transitado de los combustibles f¨®siles a la electricidad suele ser m¨¢s eficiente que la que a¨²n no lo ha hecho.
¡°El sector necesita que la electrificaci¨®n eche a andar r¨¢pido. Es un tir¨®n de demanda que hace falta, y que debe venir por la movilidad el¨¦ctrica y la electrificaci¨®n de los puertos, por ejemplo, al margen de los centros de datos y otros sectores industriales, como la fabricaci¨®n de bater¨ªas¡±, subraya Mart¨ªnez, que ve dif¨ªcil que las industrias cl¨¢sicas ¡ªcon las que trabaja codo con codo¡ª puedan ser las protagonistas del aumento. ¡°Sigue habiendo mucho cambio de maquinaria en aras de una mayor eficiencia energ¨¦tica, y eso es algo que va a continuar. Tambi¨¦n en hogares¡±.
M¨¢s all¨¢ de la incipiente electrificaci¨®n, emergen varios factores m¨¢s detr¨¢s del cambio de tendencia de la demanda el¨¦ctrica en lo que va de 2024. Ha crecido la poblaci¨®n, a raz¨®n de cerca de medio mill¨®n de personas al a?o en los ¨²ltimos tiempos. Hay m¨¢s turismo: entre enero y junio se ha superado la barrera de los 40 millones de visitantes por primera vez desde que hay registros. Y, aunque el v¨ªnculo entre crecimiento econ¨®mico y consumo de electricidad es cada vez m¨¢s d¨¦bil, el PIB va camino de crecer m¨¢s de un 3% interanual.
Desacoplamiento del PIB
Al margen del incipiente cambio de ciclo al que apuntan los datos de 2024, la tendencia que se aprecia de fondo es un desacoplamiento entre la demanda de electricidad y el ciclo econ¨®mico. Si en toda la segunda mitad del siglo pasado y en la primera d¨¦cada de este el consumo de energ¨ªa iba en paralelo al PIB, este v¨ªnculo se ha vuelto cada vez m¨¢s fr¨¢gil.
En 2021, la econom¨ªa espa?ola se expandi¨® un 6,4% ¡ªen gran medida, como rebote del confinamiento¡ª y el aumento de la demanda el¨¦ctrica se qued¨® en el 2,5%. En 2022, el a?o de la invasi¨®n rusa de Ucrania y la mayor crisis energ¨¦tica en Europa desde que hay registros, el consumo de electricidad se hundi¨® un 3,3%, en contraste con una econom¨ªa que crec¨ªa al 5,8. En 2023, la demanda el¨¦ctrica sigui¨® cayendo (un 1,8%) pese a un robusto crecimiento del PIB (2,5%). El a?o que ahora termina, el Banco de Espa?a prev¨¦ un aumento del PIB del 3,1%, con la demanda creciendo al citado 1,4%.
¡°Es algo que empieza con la crisis inmobiliaria y financiera de 2008 y 2009, y que se ha acentuado con el paso de los a?os¡±, explica Barrero. Siempre, claro, con la mencionada inc¨®gnita del autoconsumo. ¡°Sigue habiendo una parte de la demanda de electricidad que tiene que ver con el ciclo econ¨®mico, pero hay variables que, con el cambio de modelo productivo [m¨¢s servicios, menos industria], pesan mucho m¨¢s¡±. Eso, zanja, es lo que debe cambiar en los pr¨®ximos a?os: que un sector secundario de nuevo cu?o y ya plenamente electrificado recupere el terreno perdido y empuje definitivamente al alza la demanda de electricidad.