Trabajadores invisibles y protegidos con retraso

La primera l¨ªnea de batalla en esta crisis contra el virus viste uniforme y se esconde detr¨¢s de mascarillas y pantallas. Sin embargo, mientras que la pandemia pasa lista y recuenta los sanitarios y los cuerpos de seguridad del Estado afectados, existen otros gremios, invisibles la mayor parte del tiempo, que no tienen esa suerte. El sector servicios se sabe estos d¨ªas parte fundamental del sistema, pero aunque es tan vulnerable como el resto de personal en activo en la calle, sigue condenado al anonimato.

El cierre de colegios y el estado de alarma ¡°dispararon un 71% las ventas en gran consumo¡±, apunta Ignacio Biedma, experto de Nielsen. Los comercios, sin embargo, tardaron tiempo en proteger a sus trabajadores, denuncian los sindicatos, pero por el momento no se conoce c¨®mo les afect¨®. Ni a ellos ni a los transportistas, personal de limpieza o de hosteler¨ªa en los hospitales. Es dif¨ªcil hacer una radiograf¨ªa certera de estos sectores, pues la adaptaci¨®n parece irregular. ¡°No tenemos datos confirmados¡±, resume la responsable de Comercio de CC OO, ?ngeles Rodr¨ªguez.

¡°Calculamos que en el comercio hay ya centenares de bajas, pero no se va a ser transparente con ellas. Depender¨¢ de la compa?¨ªa; algunas no cuentan al que no llama para decir que est¨¢ ingresado¡±, explica Cristina Est¨¦vez, responsable de UGT-Comercio y grandes almacenes. Asegura que ¡°desde el primer d¨ªa hay gente con crisis de ansiedad porque saben que no tienen mecanismos de protecci¨®n en el trabajo y estamos agotados de pedirlos. Nuestra mayor preocupaci¨®n es la gente que va a caer contagiada porque no se han tomado las medidas adecuadas¡±.

El d¨ªa que se anunci¨® el cierre de comercios y los dos siguientes quedar¨¢n marcados en el calendario de las grandes superficies como unos de los m¨¢s provechosos para las ventas, solo comparables con campa?as de Navidad. ¡°Propici¨® una oleada de visitantes a s¨²per e h¨ªper. Aument¨® un 77,5% la venta de alimentaci¨®n envasada, un 51,3% la de frescos y un 170% los productos de celulosa¡±, explica el portavoz de Nielsen.

Pero durante estos dos primeros d¨ªas, ¡°toc¨® presionar mucho para que se tomaran medidas; al principio algunos no ten¨ªan mascarillas, no guardaban la distancia de seguridad e incluso tuvimos que llamar a la polic¨ªa en algunos casos¡±, resume Rodr¨ªguez. Ambas sindicalistas destacan dos casos de ¨¦xito: Ahorram¨¢s y Eroski. ¡°Creo que esta crisis servir¨¢ para que los clientes, con la informaci¨®n de qui¨¦n protegi¨® mejor a sus trabajadores, tomen decisiones para su compra¡±, prev¨¦ Est¨¦vez. Mercadona reforz¨® hace semanas las medidas para separar al personal de los clientes con control de aforo, mamparas y reparto de guantes.

Proveer a los trabajadores de mascarillas, guantes, l¨ªquidos de desinfecci¨®n e incluso pantallas hubiera sido la primera medida a tomar por el sector servicios, ¡°pero casi todos han ido preo?cupantemente lentos¡±, remarca Est¨¦vez. Uno de los negocios m¨¢s afectados por esta demanda de consumo fue el transporte, tanto el de ¨²ltima milla como el que se mueve por Europa. Seg¨²n la compa?¨ªa que pone en contacto conductores para el relevo de camiones y mercanc¨ªas, Trucksters, ¡°fueron los trabajadores quienes nos advirtieron, antes de que estallara la situaci¨®n en Italia, de que esto era m¨¢s gordo de lo que pens¨¢bamos; fueron unos h¨¦roes¡±, asegura Luis Bardaj¨ª, su director general, que dice que ya entonces se empezaron a enviar guantes y mascarillas y, en los relevos, ¡°en vez de cambiar de veh¨ªculo, se desengancha la carga, qued¨¢ndose el conductor dentro de la cabina¡±.

El sector del transporte que no se dedica ¨²nicamente a los productos ¡ªel textil o la automoci¨®n, por ejemplo, van a perder enteros¡ª, al contrario que la alimentaci¨®n, ¡°es uno de los que m¨¢s reforzados van a salir¡±, aunque, seg¨²n Bardaj¨ª, ¡°no ser¨ªa justo que solo gane el que m¨¢s factura, sino el que se dio m¨¢s prisa por proteger a sus trabajadores y tomar decisiones y r¨¢pidas y el que estaba preparado para el teletrabajo¡±, punto en el que destaca su compa?¨ªa al ser una empresa digital que se comunica directamente con los trabajadores a distancia. ¡°La clave es que no haya retrasos en el sistema de relevos, y la ¨²nica parte que no podemos controlar es que haya atascos en las fronteras a consecuencia de los controles¡±.

Este empresario explica que una de las grandes preocupaciones que manifiesta el sector en estos d¨ªas es ¡°poder asegurarse el retorno, no tener que quedarse en el pa¨ªs dos semanas esperando una carga, lo que les est¨¢ llevando a pedir que las rutas eviten ciertos sitios¡±. Menos ejemplar es el caso de la ¨²ltima milla y los repartidores y riders que est¨¢n ayudando al negocio de la restauraci¨®n y al peque?o comercio. Este sector, pol¨¦mico siempre por las condiciones de sus trabajadores, tampoco parece haber sido de los m¨¢s r¨¢pidos en la adquisici¨®n de medidas de seguridad.

Transporte de alto riesgo

Empresas de reparto como la franco-catalana Stuart, con un modelo similar a Glovo pero m¨¢s centrada en parafarmacia y alimentaci¨®n, remarcan su papel en esta crisis como ¡°estrat¨¦gico¡±, en palabras de David Guasch, su director general en Espa?a. Stuart ha compartido con los trabajadores la lista de recomendaciones de Sanidad, pero reconocen que ¡°no pueden saber al 100% que todos est¨¦n bien equipados¡± para el servicio. ¡°Como son aut¨®nomos no pod¨ªamos proveer a todos de material para que se protegieran; a algunos se les envi¨®¡±, indica. Un discurso que no chirr¨ªa con lo que detectan los representantes de los trabajadores.

La semana pasada el sindicato de limpieza de A Coru?a denunciaba precisamente la escasez de medios que ten¨ªan especialmente los trabajadores de los camiones de la contrata de Ferrovial Servicios Cespa para ejercer su trabajo con seguridad. ¡°Siempre hemos sido invisibles, pero somos los que cerramos el c¨ªrculo llev¨¢ndonos su basura; nuestro riesgo es alto¡±, se?ala Miguel ?ngel S¨¢nchez, portavoz del sindicato gallego STL. ¡°Si no nos ayudan, a la pandemia se le a?adir¨¢ un problema de salubridad; y la ayuda empieza por dotarnos de medios a todos y adem¨¢s difundir protocolos de actuaci¨®n adecuados de c¨®mo deshacerse de los residuos estos d¨ªas¡±. Asegura que existen las mismas quejas en algunos puntos de Canarias y Barcelona.

Aunque, a todas luces, la pandemia pudiera estar resultando de riesgo para todas estas profesiones, lo cierto es que, como remarca la representante de UGT, ¡°de nada sirve que ahora todos nos demos cuenta de lo que hacen si siguen siendo invisibles para sus propios empleadores¡±, explica, en relaci¨®n a los ERTE, la batalla que les est¨¢ tocando librar a los sindicatos y que afecta a m¨¢s de un mill¨®n de personas.

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