Ventajas y riesgos del euro digital
Se desconoce el impacto en el PIB, pero podr¨ªa ayudar a garantizar acceso universal al mercado ¡®online¡¯
?C¨®mo operar¨ªa un euro digital? ?Qu¨¦ aportar¨ªa si hoy puedo pagar/cobrar por todo a trav¨¦s de mi m¨®vil, apps y sitios favoritos? ?Esto conllevar¨ªa alg¨²n riesgo? Hasta ahora estas sencillas preguntas no han encontrado f¨¢cil respuesta. Por el contrario, han propiciado un rico debate econ¨®mico, pol¨ªtico y tecnol¨®gico que se encuentra en plena ebullici¨®n y que adem¨¢s cuenta con fecha de expiraci¨®n. El Banco Central Europeo inici¨® en octubre una ¡°fase de investigaci¨®n¡± de dos a?os para avanzar una propuesta que, de ser aceptada, se implementar¨ªa en los tres siguientes.
Centr¨¦monos en la pregunta del valor que aportar¨ªa el euro digital o cualquier otra CBDC (Central Bank Digital Currency). Se desconoce el impacto en el PIB, pero de manera cualitativa se vislumbran potenciales beneficios. Podr¨ªa ayudar a garantizar acceso universal al creciente mercado digital. Tambi¨¦n a reducir los costes de transacci¨®n y de innovaci¨®n en el din¨¢mico mercado de pagos. Pero es otro el principal provecho atisbado por varias autoridades del euro digital: evitar que alguna moneda digital poco regulada (sea privada y/o extranjera) encuentre un nicho desde el que acabe dominando el sistema de pagos europeo.
La preocupaci¨®n es v¨¢lida: una moneda no regulada facilitar¨ªa la criminalidad, pondr¨ªa en riesgo la estabilidad del mercado financiero y, en caso extremo, har¨ªa inoperativa toda pol¨ªtica monetaria. De los pa¨ªses grandes, China es el m¨¢s avanzado en la implementaci¨®n de su yuan digital (que ya est¨¢ operativo en varias ciudades). Ha prohibido el uso de criptomonedas como bitcoin, aun as¨ª las autoridades batallan en promover su moneda digital ante ciudadanos ya acostumbrados a los medios de pagos facilitados por las grandes plataformas Alibaba y WeChat. En Bahamas, los ¡°sand dollars¡± digitales llevan m¨¢s de un a?o en circulaci¨®n, pero hoy solo representan el 0,01% de la oferta monetaria. ?Es esto evidencia de redundancia con la actual oferta de medios de pagos? ?O es muestra de que las iniciativas china y bahame?a est¨¢n descuidando alg¨²n aspecto importante para que sus CBDC compitan de forma efectiva con monedas no reguladas? Varias autoridades est¨¢n atentas y preocupadas.
Focaliz¨¢ndonos ahora en los riesgos de un euro digital, las inc¨®gnitas econ¨®micas tambi¨¦n abundan. Ser¨¢ importante definir y operativizar niveles de privacidad compatibles con la prevenci¨®n de actividades criminales y de lavado de dinero. Igualmente importante ser¨¢ resguardar la estabilidad financiera, evitando disrupciones tanto dom¨¦sticas (intermediaci¨®n bancaria) como externas (mercado de capitales).
En definitiva, existen muchas formas de operativizar un euro digital. ?Imponer cuotas/tasas a la tenencia o al uso? ?Restringirlo solo a residentes? ?Regular a intermediarios? Buscar una arquitectura que potencie el valor y reduzca todo riesgo es el reto actual y para los pr¨®ximos dos a?os.
Alejandro Neut, de BBVA Research.
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