El coche el¨¦ctrico devora el litio mundial

La demanda de litio no tiene freno. El cambio hacia un modelo energ¨¦tico m¨¢s sostenible, impulsado por las grandes econom¨ªas del mundo, ha disparado el apetito por esta materia prima. Hoy se consume m¨¢s que nunca, pero su producci¨®n se est¨¢ quedando rezagada respecto a las necesidades del mercado. Un c¨®ctel peligroso que incluye la falta de inversiones mineras, el cierre temporal de factor¨ªas en China (debido a la pandemia), la cancelaci¨®n de proyectos de explotaci¨®n y un ¨¦xito inesperado del coche el¨¦ctrico ha avivado las dudas sobre la disponibilidad del producto. Y como en la f¨ªsica newtoniana, a una acci¨®n siempre corresponde una reacci¨®n: el precio del metal se ha quintuplicado en los ¨²ltimos 12 meses, llevando a las bater¨ªas de ion de litio (alma de la movilidad futura) a su primera alza en una d¨¦cada.

¡°Los gobiernos, las empresas automotrices y las energ¨¦ticas se han tomado en serio la descarbonizaci¨®n de la econom¨ªa¡±, afirma Chris Berry, fundador de House Mountain Partners, una consultora de materias primas con sede en Nueva York. El a?o pasado, mientras las ventas globales de coches el¨¦ctricos alcanzaron un r¨¦cord hist¨®rico (6,75 millones de unidades, un 108% m¨¢s que en 2020, de acuerdo con EV-Volumes), las necesidades de litio aumentaron un 25% y la producci¨®n mundial repunt¨® solo un 21,2%, seg¨²n las estad¨ªsticas del Servicio Geol¨®gico de EE UU.

¡°Ya hay un d¨¦ficit en el mercado¡±, destaca Caspar Rawles, chief data officer (CDO) de la consultora brit¨¢nica Benchmark Mineral Intelligence. Ello se debe, en parte, a una reducci¨®n en los inventarios y a la falta de inversi¨®n en la cadena de suministro entre 2018 y 2020, cuando el exceso de oferta del metal derrumb¨® los precios y detuvo la llegada de nuevos capitales al sector.

?Habr¨¢ suficiente litio para todos los coches el¨¦ctricos? Esa es la pregunta que se hacen todos los integrantes del mercado. La demanda mundial de este elemento se multiplicar¨¢ por cuatro en los pr¨®ximos a?os: alcanzar¨¢ los dos millones de toneladas hacia 2030, desde las 500.000 toneladas actuales, seg¨²n las estimaciones de S&P Global Market Intelligence. Para Kent Masters, director ejecutivo de Albemarle (una minera estadounidense experta en litio), la previsi¨®n va m¨¢s all¨¢: espera que al inicio de la pr¨®xima d¨¦cada las necesidades del metal alcancen los tres millones de toneladas. Una encuesta realizada por Bloomberg entre seis firmas especialistas en el metal revela que no hay consenso sobre c¨®mo se comportar¨¢ la oferta. Mientras unos ven un d¨¦ficit equivalente al 13% de la demanda en 2025, otros hablan de un super¨¢vit del 17%. Lo que es seguro es que m¨¢s del 84% de toda esa materia prima ir¨¢ a la bater¨ªa de un coche el¨¦ctrico, que para entonces veremos rodando con toda normalidad en las carreteras de las principales econom¨ªas. Los veh¨ªculos el¨¦ctricos ser¨¢n el 75% de las ventas de autom¨®viles de pasajeros a nivel mundial para 2030, con China a la cabeza, seguida de Europa y EE UU, prev¨¦ un an¨¢lisis de McKinsey.

La inc¨®gnita chilena

Ante ello, la presi¨®n sobre la industria del litio se incrementa. Sobre todo, frente a la revocaci¨®n de proyectos estrat¨¦gicos en Europa y las dudas que generan las decisiones pol¨ªticas en Chile ¡ªel segundo productor mundial, con un cuarto de la tarta global, despu¨¦s de Australia, que copa la mitad¡ª, que acaba de estrenar gobierno con el izquierdista Gabriel Boric. En este lado del mundo, en los Balcanes, Serbia ha revocado, en enero pasado, a la compa?¨ªa minera australiana Rio Tinto (una de las 10 principales empresas productoras del metal) todos los permisos para explotar un proyecto de litio al oeste del pa¨ªs. Una fuerte y decidida oposici¨®n ciudadana hizo que el Gobierno de Ana Brnabic diera marcha atr¨¢s a lo que ser¨ªa la mina m¨¢s grande del Viejo Continente y que podr¨ªa suplir de materia prima a un mill¨®n de coches el¨¦ctricos al a?o.

¡°Este es un golpe para Europa¡­, la regi¨®n, actualmente, depende de las importaciones de China¡±, resalta Rawles. ¡°Las materias primas y los componentes digitales van a condicionar la nueva automoci¨®n¡±, alega Arturo P¨¦rez de Lucia, director general de la Asociaci¨®n Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad El¨¦ctrica. Mientras tanto, del otro lado del charco, en Chile, el pa¨ªs con las reservas m¨¢s grandes de litio en el planeta, los analistas ven con ciertas suspicacias las pretensiones del nuevo Gobierno chileno de nacionalizar las minas y crear una empresa estatal de este material. Las incertidumbres pol¨ªticas pueden desviar las inversiones, dicen los expertos de Bank of America. ¡°Esto pone al pa¨ªs en riesgo de perderse el periodo de crecimiento exponencial de la demanda¡±.

A r¨ªo revuelto, ganancia de pescadores. Argentina, Australia, Brasil, Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo y China ¡ªeste ¨²ltimo pa¨ªs controla m¨¢s del 78% de la cadena de producci¨®n de bater¨ªas de ion de litio¡ª se han puesto manos a la obra y han echado adelante proyectos nuevos y expanden operaciones ya existentes. ¡°Existe la facilidad de financiar desarrollos ya sea con aumento de capital o deuda¡±, asegura Daniel Jim¨¦nez, socio en la consultora iLi Markets. Hacerse con el metal, sin embargo, no es cosa f¨¢cil. Se requiere tiempo y paciencia. Por ejemplo, para forjar una mina hay que invertir entre 7 y 10 a?os antes de poder comercializar el material, mientras que para montar una f¨¢brica de bater¨ªas se requiere la mitad de tiempo. ¡°La industria del litio es un mercado de productos qu¨ªmicos especializados, no uno de productos b¨¢sicos, lo que significa que no se trata solo de sacar la materia prima de la tierra, sino que hay que procesarla¡±, resalta Rawles. ¡°Los proyectos se retrasan o no llegan a la producci¨®n debido a problemas t¨¦cnicos¡±.

Esto aumenta las preocupaciones entre los fabricantes de veh¨ªculos el¨¦ctricos y productores de bater¨ªas, que han sentido el aumento no solo del litio, sino tambi¨¦n de otros elementos clave como el cobalto o el sulfato de n¨ªquel. Despu¨¦s de una d¨¦cada de bajadas constantes, las bater¨ªas de ion de litio cuestan entre un 20% y un 30% m¨¢s que hace un a?o, seg¨²n Benchmark Mineral Intelligence. Y es probable que sigan al alza. Ello supone un coste adicional de entre 1.000 a 2.000 d¨®lares por cada veh¨ªculo. En 2010, una bater¨ªa de ion de litio costaba unos 1.100 d¨®lares por kilovatio hora. Para 2020, su precio se redujo hasta los 137 d¨®lares. Los fabricantes de coches esperan que los veh¨ªculos el¨¦ctricos sean competitivos con los de combusti¨®n cuando el coste de las bater¨ªas ronde los 100 d¨®lares por kilovatio hora. Para llegar a esa meta a¨²n hay que esperar.