Pa¨ªses Bajos o c¨®mo un gobierno liberal se disfraza de socialdem¨®crata

El pasado 30 de septiembre, la inflaci¨®n lleg¨® en Pa¨ªses Bajos al 17,1%. Es la tasa m¨¢s alta desde la Segunda Guerra Mundial, atribuida, en gran medida, al precio de la energ¨ªa por la guerra en Ucrania. Solo 10 d¨ªas antes, el Gobierno hab¨ªa presentado los Presupuestos Generales, que inclu¨ªan una inyecci¨®n de 17.000 millones de euros ¡ªde un total de 395.000¡ª para apuntalar el poder adquisitivo y ¡°apoyar a grupos vulnerables y con ingresos medios¡±. El plan fiscal que acompa?a a esta cifra incluye apartados que no suelen asociarse a un Gabinete de centro derecha como el actual, ya que no solo contiene un aumento del salario m¨ªnimo del 10%, hasta los 1.930 euros, sino que parte de la cuenta ser¨¢ pagada por grandes empresas, y las rentas altas tambi¨¦n abonar¨¢n m¨¢s impuestos.

Con los liberales de derecha como mayor partido de la actual coalici¨®n en el poder, se trata del ¡°gabinete de derecha con el presupuesto m¨¢s de izquierda en a?os¡±. La descripci¨®n es del economista holand¨¦s Mathijs Bouman, hecha poco despu¨¦s de la presentaci¨®n oficial de los planes. En un art¨ªculo publicado en el diario Financieele Dagblad, Bouman a?ad¨ªa que se hab¨ªa arrinconado ¡°la teor¨ªa de que los problemas sociales pueden resolverse solos, as¨ª como la de unos c¨¢lculos cautelosos¡±. Ante la actual crisis energ¨¦tica y la espiral inflacionista, ¡°solo el Gobierno puede ocuparse de solucionarlo, de modo que ha decidido nivelar¡±. Seg¨²n la Oficina Central de Planificaci¨®n, unas 833.000 personas vivir¨¢n por debajo del umbral de la pobreza en 2023 si no se aborda pronto la p¨¦rdida de poder adquisitivo. Pa¨ªses Bajos tiene 17,7 millones de habitantes.

El economista e investigador holand¨¦s Marcel Jansen atribuye haber llegado a la cota del 17% de inflaci¨®n a dos posibles causas. Por un lado, porque esa tasa puede sobreestimar la inflaci¨®n ¡°al considerar solo el precio de la energ¨ªa en los nuevos contratos¡±. Aun as¨ª, la cifra le parece escalofriante al dejar patente ¡°la envergadura de la crisis, pero tambi¨¦n los errores del propio Gobierno¡±. La otra explicaci¨®n es el estado del mercado laboral holand¨¦s, ¡°donde los trabajadores tienen mayores facilidades para exigir subidas salariales, de modo que el aumento de los costes ha podido extenderse a m¨¢s sectores¡±. Jansen recuerda que hay falta de personal por todas partes y las empresas no tienen m¨¢s remedio que compensar el poder adquisitivo. ¡°Adem¨¢s, Pa¨ªses Bajos y Alemania dependen mucho del gas ruso¡±, asevera.

Jansen, profesor titular de An¨¢lisis Econ¨®mico de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, considera que Pa¨ªses Bajos ha infravalorado el impacto de la pandemia y de la crisis energ¨¦tica en la econom¨ªa nacional. Cree que el Ejecutivo ¡°ha querido retomar la iniciativa y el paquete final les ha salido mucho m¨¢s caro¡±. Y apunta que en las ambiciosas ayudas presentadas ha influido la ministra de Finanzas, Sigrid Kaag. ¡°Este presupuesto no habr¨ªa sido posible sin la presencia de los liberales de izquierda [D66], el partido de Kaag, [uno de los cuatro que forman el Gobierno] porque han movido al presidente Mark Rutte, un liberal de derecha, m¨¢s hacia el centro izquierda¡±, argumenta.

Al economista Bas Jacobs, sin embargo, la actual pol¨ªtica presupuestaria holandesa le parece ¡°ca¨®tica¡±. Para ilustrarlo, se?ala que las cuentas para 2023 contemplaban ya un d¨¦ficit de cerca de un 3% del PIB, sin incluir el techo fijado para los precios de la energ¨ªa decidido por el Gobierno un d¨ªa antes de su presentaci¨®n al Parlamento. ¡°Ese tope costar¨¢ alrededor de otro 2% del PIB, de modo que sin medidas adicionales, como un aumento de los impuestos o un recorte de gastos, el d¨¦ficit puede encaminarse hacia un 5%. Esa cifra se aparta de las normas de Bruselas y es demasiado elevada para el curso actual de la econom¨ªa holandesa¡±, declara.

Recalentamiento

Catedr¨¢tico de Econom¨ªa en la Universidad Libre, de ?msterdam, Jacobs advierte tambi¨¦n ¡°del sobrecalentamiento de la econom¨ªa¡±, porque la inflaci¨®n subyacente se acerca al 6%, y el mercado laboral tiene m¨¢s vacantes que parados. En su opini¨®n, ¡°el elevado gasto del Ejecutivo contribuir¨¢ a m¨¢s inflaci¨®n¡±. ?Pod¨ªa haberse hecho de otro modo, dada la crisis actual? ¡°Siempre hay otras opciones¡±, afirma. Explica que el Gobierno ¡°quer¨ªa compensar a las personas con ingresos bajos por el elevado recibo de la energ¨ªa cambiando el sistema de transferencias e impuestos, pero en el ¨²ltimo momento aplic¨® el tope a estos precios, y eso duplica el gasto¡±.

Jacobs sostiene que en este Gobierno nadie parece querer asumir la responsabilidad del coste pol¨ªtico derivado de la adopci¨®n de medidas dolorosas que puedan reducir el d¨¦ficit. ¡°Por eso acuerdan gastar tanto dinero, teniendo, ahora, una mayor¨ªa justa en el Congreso y sin mayor¨ªa en el Senado¡±. Este experto calcula que la actual factura del gas bajar¨¢ el pr¨®ximo a?o ante la presencia de alternativas, como la energ¨ªa solar o e¨®lica, y m¨¢s energ¨ªa el¨¦ctrica. ¡°Con la covid-19, el Gobierno ya sostuvo la econom¨ªa con enormes decisiones que costaron un 10% del PIB a lo largo de un a?o y medio¡±, se?ala. Y concluye: ¡°Los presupuestos remitidos ahora al Parlamento no explican c¨®mo se pagar¨¢ el tope para la energ¨ªa en 2023, pero se pide una especie de cheque en blanco para su aprobaci¨®n¡±.

El tope anunciado es para el precio del gas y la electricidad para uso dom¨¦stico. Si bien la cifra depende ¡°de la incertidumbre del momento¡±, se calcula en 1,50 euros por metro c¨²bico de gas, y en 70 c¨¦ntimos por un kilovatio de electricidad para el consumo medio de un hogar (1.200 metros c¨²bicos de gas y 2.400 kilovatios de electricidad anuales). Un fondo de emergencia evitar¨¢ desconexiones por falta de pago.

A esto se a?ade la rebaja del IRPF para trabajadores que, junto con otras bonificaciones fiscales, impulsar¨¢ la renta media en unos 500 euros anuales. A la exenci¨®n de pagar impuestos sobre los activos en ahorros de hasta 57.000 euros, se suma que las rentas altas abonen m¨¢s: el impuesto sobre el rendimiento del capital pasar¨¢ del 31% a un 34%.

Por otra parte, los actuales impuestos sobre los combustibles se mantendr¨¢n hasta el 30 de junio de 2023. A partir de entonces, y hasta diciembre del pr¨®ximo a?o, se reducir¨¢n: la gasolina sin plomo, 8,65 c¨¦ntimos por litro; el gas¨®leo, 5,55 c¨¦ntimos por litro; y el gas licuado del petr¨®leo, 2 c¨¦ntimos por litro.