Despedir primero, preguntar despu¨¦s: ?son legales los ceses expr¨¦s?

Mel¨®n legal a la vista. La costumbre de despedir de forma fulminante a un trabajador acusado de indisciplina podr¨ªa ser una pr¨¢ctica empresarial ilegal. En los ¨²ltimos meses, los tribunales espa?oles han puesto bajo la lupa esta forma de proceder, normalizada en nuestro pa¨ªs, que podr¨ªa, no obstante, ser contraria a un tratado internacional que Espa?a firm¨® hace 37 a?os y que ha permanecido olvidado en un caj¨®n. La justicia se debate sobre si las empresas deben entrevistarse con los empleados antes de despedirlos disciplinariamente, para que as¨ª la plantilla tenga la oportunidad de defenderse.

Recientes sentencias, todas de este a?o, reflejan las dudas de los magistrados en este espinoso asunto.

La cuesti¨®n ha surgido a ra¨ªz de lo sucedido con distintos operarios, expulsados de sus respectivas empresas, que han invocado este convenio para que su despido sea declarado improcedente. Todos alegan que debieron ser citados y escuchados antes de ser expulsados de sus puestos.

El debate tiene, en s¨ªntesis, dos posturas. Por un lado, la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) defiende que los trabajadores deben ser llamados a una reuni¨®n para esclarecer el asunto antes de ser despedidos. As¨ª lo dice el art¨ªculo 7 del Convenio 158, tratado que Espa?a ratific¨® en 1985. Seg¨²n este precepto, ¡°no puede darse por terminada la relaci¨®n laboral por motivos relacionados con su conducta o su rendimiento [del empleado] antes de que se le ofrezca la posibilidad de defenderse de los cargos imputados¡±.

Por otro lado, la ley espa?ola no prev¨¦ nada sobre esta audiencia previa a la expulsi¨®n. S¨ª permite, en cambio, los despidos instant¨¢neos. Nuestro pa¨ªs asumi¨® el compromiso de reformar sus normas y adaptarlas al tratado de la OIT, pero ning¨²n gobierno abord¨® la tarea. El resultado se materializa ahora en un choque de trenes legal entre dos normas: la espa?ola, que s¨ª permite los despidos por sorpresa, y el Convenio de la OIT, que los proh¨ªbe. En el fuego cruzado los jueces no se ponen de acuerdo.

El embrollo previsiblemente llegar¨¢ al Tribunal Supremo. Hace unos d¨ªas, Omar Molina Garc¨ªa, director del departamento laboral de Augusta Abogados, daba la voz de alarma en su perfil de LinkedIn. ¡°Hay sentencias que dicen que la audiencia previa al despido disciplinario es obligatoria y otras que no¡±, resume el abogado. Por lo que, al existir sentencias contradictorias de tribunales de igual jerarqu¨ªa, es de esperar que el asunto acabe en el alto tribunal, que ahora tiene la oportunidad de unificar doctrina y cerrar el debate.

Molina destaca tres antecedentes problem¨¢ticos. En primer lugar, un fallo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Baleares, de febrero de 2023, sobre el despido fulminante de un profesor de arte dram¨¢tico, acusado de acosar a sus alumnas. El tribunal vio ¡°inexplicable¡± y ¡°de dif¨ªcil justificaci¨®n¡± que el profesor fuese expulsado ¡°sin haber sido escuchado previamente¡± ante unas acusaciones tan graves. De forma que la sala declar¨® su despido como improcedente.

Sentencias contradictorias

Pero en abril, el TSJ de Madrid tom¨® otro camino. ¡°El tribunal interpret¨® que, si bien la empresa deb¨ªa abrir una audiencia previa al despido, el incumplimiento no comportaba la improcedencia, sino que abr¨ªa la puerta a reclamar una indemnizaci¨®n extra¡±, explica Molina Garc¨ªa. Para complicar el asunto, el TSJ de Catalu?a opt¨® por una tercera v¨ªa en julio, y neg¨® que las empresas est¨¦n obligadas a dar esta audiencia porque, en su opini¨®n, el Convenio 158 no tiene aplicaci¨®n directa en Espa?a. En cinco meses, los tribunales han emitido tres criterios judiciales distintos en casos de similares caracter¨ªsticas.

?Cu¨¢l es la opini¨®n de los expertos? Sus valoraciones, como la de los magistrados, difieren. El catedr¨¢tico de Derecho del Trabajo de la Universidad de Salamanca, Wilfredo Sanguineti, uno de los primeros juristas en denunciar que las empresas incumpl¨ªan el convenio de la OIT, defiende esta postura a capa y espada. ¡°Espa?a incumple desde hace a?os el convenio y ha intentado por todos los medios defender que el art¨ªculo 7 no se aplique. Las autoridades espa?olas alegan que su legislaci¨®n ya ofrece garant¨ªas al trabajador, como la conciliaci¨®n y la posibilidad de discutir el despido en tribunales. Pero la comisi¨®n de expertos de la OIT ha recordado en numerosas ocasiones que esto no es suficiente¡±. Y agrega: ¡°La Constituci¨®n dice que los tratados forman parte del derecho interno, me niego a pensar que los pa¨ªses pueden ratificarlos y luego no cumplirlos¡±.

Aceptar que los despidos sin audiencia previa son ilegales tendr¨ªa consecuencias inciertas. Daniel Cifuentes, socio de laboral de P¨¦rez-Llorca, se inclina por pensar que, de aceptar esta premisa, no reunirse con el trabajador implicar¨ªa la improcedencia de su cese, pero no su nulidad. Esta ¨²ltima opci¨®n, recuerda el abogado, est¨¢ reservada a ¡°situaciones expresamente previstas en la ley¡±.

Eso s¨ª, el socio acepta que ¡°la omisi¨®n del procedimiento de audiencia previa puede ser utilizada como un elemento para aumentar la indemnizaci¨®n en casos de despido improcedente¡±, tesis que esgrimi¨® el tribunal madrile?o. La recomendaci¨®n del experto pasa por ser prudente: es mejor escuchar a los trabajadores indisciplinados y luego decidir si expulsar o no. Y por supuesto, ¡°registrar la reuni¨®n y dejar constancia por escrito¡± y ¡°permitir la presencia de los representantes de los trabajadores o de sus abogados¡±. A la vista de los bandazos de los tribunales, mejor pecar de precavido.

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