Berg¨¦ quiere hacer caja con los autom¨®viles

Berg¨¦ y Compa?¨ªa, empresa que naci¨® en el XIX al calor de los inventos en la marina mercante, el motor de vapor, el hierro y el acero, planea vender en Bolsa hasta el 49% de su filial de autom¨®viles Astara para financiar su expansi¨®n. Berg¨¦ manda en dos sectores econ¨®micos clave, la automoci¨®n y los servicios log¨ªsticos, y Astara es una m¨¢quina de hacer dinero. Las tres familias que controlan el grupo desde hace m¨¢s de un siglo ¡ªGorbe?a, Enciso y Berg¨¦¡ª creen que ha llegado el momento de hacer caja. Otras compa?¨ªas familiares como Prosegur Cash, de la familia Gut Revoredo o Acciona Energ¨ªa, de los Entrecanales, tambi¨¦n han acudido al mercado sin perder el tim¨®n de las filiales. Es una buena idea, pero en un momento complicado. La incertidumbre, dentro y fuera del pa¨ªs, puede aplazar la venta prevista para la primavera del pr¨®ximo a?o, seg¨²n admiten fuentes conocedoras de la operaci¨®n. La oferta de acciones de Astara, en la que participa con un 25% Mitsubishi Corporation, no cambiar¨¢ la relaci¨®n de fuerzas ni en el grupo ni en la filial, seg¨²n las mismas fuentes.

La salida a Bolsa, con Citi, Deutsche Bank y Santander como colocadores, pone en el escaparate una compa?¨ªa que vende y/o alquila autom¨®viles de 34 marcas de forma exclusiva en 19 mercados de Europa, Am¨¦rica Latina y el sudeste asi¨¢tico. Por sus registros han pasado muchos autom¨®viles. Tres millones desde 1979. Es medio siglo vendiendo coches, lo que ha proporcionado una buena base de clientes y de datos. Ese material es oro molido para el negocio que quiere afianzar el grupo Berg¨¦: la nueva movilidad, enfocada a un cliente que ha cambiado de h¨¢bitos y que no piensa ya en el autom¨®vil como una inversi¨®n a largo plazo. Se trata de explotar modos de transporte compartido y servicios digitales que van m¨¢s all¨¢ del transporte p¨²blico convencional y de los autom¨®viles de propiedad privada. La idea es convertir al gigante Astara ¡ª5.500 millones de facturaci¨®n agregada en 2022, un 70% de los ingresos del grupo¡ª en una palanca de modernizaci¨®n.

La valoraci¨®n de la compa?¨ªa se sit¨²a en torno a los 2.000 millones de euros. En n¨²meros, la tarjeta de presentaci¨®n de Astara es notable. Durante la ¨²ltima d¨¦cada la compa?¨ªa ha registrado una tasa anual de crecimiento del 16%; tiene ingresos diversificados, un 52% procedentes de Europa y un 48% de Am¨¦rica Latina, y su beneficio bruto ha crecido un 40% entre 2019 y 2022. El pasado a?o reparti¨® 40 millones de dividendos. La compa?¨ªa se ha comprometido tambi¨¦n a lograr la neutralidad de carbono en 2027 con dos hitos: consumir 100% de energ¨ªa renovable y la electrificaci¨®n de su flota.

La salida a Bolsa, si el entorno lo permite, es todo un paso adelante de la antigua Berg¨¦ Auto, que ofrece servicios de distribuci¨®n exclusivos a firmas asi¨¢ticas como Mitsubishi, Subaru y SsangYong. La gran apuesta son los autom¨®viles a medida del cliente. Una oferta de coches del modelo y el tama?o que necesite el consumidor, durante el tiempo que lo necesite. Son soluciones a gusto del cliente que se sustancian en ¨¢reas concretas dentro de la empresa como Astara Store ¡ªantigua Trive¡ª, una plataforma de gesti¨®n de veh¨ªculos nuevos, usados y de renting, y Astara Move, una plataforma de suscripci¨®n de veh¨ªculos a particulares y tambi¨¦n a empresas. Astara cuenta ya con dos millones de usuarios y aspira a multiplicar la cifra por cinco en los pr¨®ximos a?os.

El movimiento del grupo Berg¨¦ tiene fundamentos s¨®lidos. La Asociaci¨®n Nacional de Fabricantes de Autom¨®viles y Camiones (Anfac) en su an¨¢lisis Automoci¨®n 2020-2040 adelant¨® las claves. Las cadenas de valor que controlaban los fabricantes de autom¨®viles ¡ªAstara no fabrica, vende y alquila¡ª han cambiado. Ya no son lineales. Han pasado a ser cadenas interconectadas, m¨¢s complejas, que requieren de nuevos modelos de negocio y de la colaboraci¨®n de otros agentes que no son los tradicionales. Las cifras que acompa?an el cambio marean. Para hacer realidad este nuevo ecosistema de movilidad, los actores involucrados, entre los que est¨¢n los fabricantes de veh¨ªculos, tendr¨¢n que invertir m¨¢s de 54.000 millones, el 5% del PIB anual espa?ol. Es una cifra elevada, aunque con expectativas de un buen retorno.

Es un nuevo ¨¢mbito de movilidad que, seg¨²n los fabricantes, va a provocar cambios en la generaci¨®n de valor en torno al veh¨ªculo. ¡°Si se hacen bien las cosas en Espa?a¡±, sostiene Anfac, ¡°en 2040, el mercado relacionado con el autom¨®vil y los servicios de movilidad mover¨¢ un negocio valorado en m¨¢s de 310.000 millones de euros de facturaci¨®n¡±. En ese ecosistema, la fabricaci¨®n de veh¨ªculos ser¨¢ una parte m¨¢s, pero ganar¨¢n espacio los fabricantes de nuevos componentes de veh¨ªculos, de componentes de software, as¨ª como los negocios relacionados con la gesti¨®n de los datos, la conectividad y la movilidad a demanda. El espacio en el que se mueve Astara.

Nuevos tiempos

Con la venta parcial de Astara, el grupo Berg¨¦ trata de adaptarse a los nuevos tiempos. La empresa multifamiliar ha sobrevivido a dos guerras mundiales, una guerra civil, dos pandemias y dos graves crisis financieras. Tambi¨¦n ha esquivado un descalabro financiero y de gesti¨®n en el negocio de las renovables. A comienzos de siglo, Berg¨¦ emprendi¨® una aventura fotovoltaica con la empresa Isofot¨®n ¡ªsalpimentada con su poco de especulaci¨®n y su cucharadita de pol¨ªtica¡ª que estuvo a punto de hacer zozobrar el grupo. Berg¨¦ tuvo que asumir 360 millones de p¨¦rdidas inesperadas en la empresa en 2010, aunque logr¨® remontar.

El timonel pactado por las familias Berg¨¦, Gorbe?a y Enciso para adaptar el grupo a los cambios es Jaime Gorbe?a Yllera (Santander, 1969), que cuenta con un perfil y una imagen muy alejada de las portadas. Gorbe?a se form¨® desde los 15 a?os en colegios y universidades de ¨¦lite del Reino Unido ¡ªTonbridge School, London School of Economics¡ª y B¨¦lgica ¡ªSolvay Brussels School¡ª. Trabaj¨® en los almacenes Harrods ¡ªventas de lujo¡ª, en Toyota, en la naviera Kawasaki Kisen Kaisha y en Chrysler Corporation. El encargado de convertir los planes del grupo en realidad en Astara es Jorge Navea, un licenciado en Derecho Econ¨®mico por la Universidad de Deusto que inici¨® su carrera en el bufete Cuatrecasas y que ocup¨® diferentes puestos en Toyota y Kia en Europa. Navea lleg¨® a Berg¨¦ Auto hace 20 a?os y es su consejero delegado desde 2007.

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