El nuevo sistema para evaluar los conocimientos digitales de los profesores valdr¨¢ en toda Espa?a

La Conferencia Sectorial de Educaci¨®n, que sienta a la mesa a los Gobiernos auton¨®micos y el ministerio del ramo, ha aprobado este jueves elaborar un marco com¨²n para que cada comunidad, que es quien tiene las competencias administrativas, eval¨²e de igual forma las destrezas digitales de sus maestros de primaria y profesores de secundaria de los centros p¨²blicos y concertados. De esa manera, el certificado servir¨¢, por ejemplo, a un docente de Zaragoza que pide el traslado a Lugo. Un resultado positivo en esta evaluaci¨®n dar¨¢ puntos en los concursos de traslado, las oposiciones y los procesos para ocupar puestos interinos. El pr¨®ximo mes de julio, Gobierno, comunidades y sindicatos negociar¨¢n si adem¨¢s supondr¨¢ mejoras en el salario. El objetivo es evaluar en los pr¨®ximos tres cursos, al menos, a medio mill¨®n de docentes, es decir, al 80% de los 700.000 profesores de ense?anzas no universitarias.

La intenci¨®n del Ministerio de Educaci¨®n es que en septiembre est¨¦ lista su normativa de acreditaci¨®n de las competencias digitales. A partir de ese momento, las comunidades aut¨®nomas tendr¨¢n un a?o para elaborar sus desarrollos propios. La idea es que antes de que termine el curso que viene se valide a los primeros profesores que ya cuenten con los m¨¦ritos digitales suficientes.

Habr¨¢ seis niveles, similares a los del Marco Com¨²n Europeo de Referencia para las Lenguas: A1 y A2 para el estadio inicial; B1 y B2, para el intermedio; y C1 y C2 para el avanzado. No se puede forzar a los docentes a formarse, pero existe el compromiso con la Uni¨®n Europea de que antes de 2024-2025 se acrediten las competencias digitales al menos ese 80% de la plantilla docentes, para lo que se movilizar¨¢ una partida de fondos europeos de 284,7 millones de euros, que se refleja en el Plan de Recuperaci¨®n, Transformaci¨®n y Resiliencia.

Aprobar el A1 y el A2 no exigir¨¢ un gran esfuerzo. Bastar¨¢ con haber superado cursos reconocidos por la Administraci¨®n o hacer una prueba ¡ªa¨²n por determinar¡ª o validar las habilidades digitales demostradas en la carrera de Magisterio si coinciden en un 80% con las competencias requeridas por la consejer¨ªa. ¡°Con la acreditaci¨®n buscamos reconocer el esfuerzo de los docentes, pero tambi¨¦n queremos que sirva para que ellos sepan qu¨¦ camino tienen que seguir para subir de nivel¡±, explica Julio Albalad, director del Instituto Nacional de Tecnolog¨ªa Educativa y Formaci¨®n del Profesorado del ministerio (INTEF).

En el nivel B, adem¨¢s de formaci¨®n, ¡±tiene que haber una aplicaci¨®n en clase¡±. ¡°Por ejemplo, si se ha hecho un curso de protecci¨®n de datos, se pide un ejercicio en el aula con los alumnos para demostrar la aplicaci¨®n¡±, prosigue Albalad.

¡°En los niveles superiores, una persona tiene que validar [comprobar] en el aula lo que el profesor est¨¢ haciendo. Lo que est¨¢ aportando a la experimentaci¨®n, a la innovaci¨®n¡±, contin¨²a Albalad. Este nivel C, vinculado a colaboraciones y a publicaciones, solo est¨¢ pensado para perfiles muy espec¨ªficos, como el responsable TIC (Tecnolog¨ªas de la Informaci¨®n y la Comunicaci¨®n) de los centros educativos. ¡°Ahora mismo no nos vamos a centrar en ellos, porque son muchos menos, pero s¨ª que hay que articularlo¡±.

Los centros tienen hasta 2024 para establecer un plan, plasmado en un documento, en el que se reflejen los recursos TIC que hay en sus instalaciones y las competencias digitales de los profesores y sus alumnos.

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