El auge de las clases particulares: los ricos las usan para diferenciar a sus hijos, los pobres para que no se queden atr¨¢s

El creciente clima de competitividad escolar y el intento de las familias por mejorar la trayectoria educativa y las expectativas laborales de sus hijos ha disparado el mercado de las clases particulares a unas cotas muy superiores a lo que se pensaba hasta ahora: el gasto total en extraescolares educativas se eleva a 1.700 millones de euros al a?o y un 47% de los ni?os y adolescentes asisten a ellas. La mayor investigaci¨®n hecha en Espa?a sobre el fen¨®meno advierte que constituyen una gran fuente de inequidad educativa, y recomienda aumentar la oferta p¨²blica y gratuita de clases de apoyo para paliar sus efectos.

El estudio, elaborado por el catedr¨¢tico de Did¨¢ctica y Organizaci¨®n Escolar de la UNED Juan Manuel Moreno y el economista ?ngel Mart¨ªnez para el Centro de Pol¨ªtica Econ¨®mica de la escuela de negocios Esade (EsadeEcPol), divide las extraescolares en dos grandes categor¨ªas: las destinadas a ¡°ampliar y perfeccionar¡± conocimientos ¨Dpor ejemplo, las clases particulares de idiomas¨D, y las que tienen como objetivo ¡°reforzar y recuperar¡± aprendizajes no adquiridos en ¡°materias curriculares b¨¢sicas¡±, como matem¨¢ticas. Los autores concluyen que las familias ricas utilizan en mayor medida las extraescolares del primer tipo, y que lo hacen como una v¨ªa para ¡°diferenciar¡± a sus hijos y proporcionarles ¡°ventajas competitivas¡±. Las m¨¢s desfavorecidas recurren, en cambio, en mayor grado a las clases particulares del segundo tipo con el fin de evitar que sus hijos se queden atr¨¢s, repitan curso y caigan en el fracaso escolar.

El informe, titulado Educaci¨®n en la sombra en Espa?a: una radiograf¨ªa del mercado de clases particulares por etapa escolar, capacidad econ¨®mica de los hogares, titularidad del centro y comunidad aut¨®noma, utiliza la informaci¨®n proporcionada por dos publicaciones del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), la ¨²ltima Encuesta de Gasto de Hogares en Educaci¨®n, del curso 2019-2020, y la Encuesta de Presupuestos Familiares del a?o 2021. Ello ha permitido a los autores hilar m¨¢s fino de lo que lo hicieron en otra investigaci¨®n, sobre el mismo tema, presentada hace un a?o, basada solamente en la Encuesta de Presupuestos Familiares del INE, que mostr¨® magnitudes m¨¢s reducidas (un 24% del alumnado receptor de clases particulares y un gasto total de 732 millones) al no contabilizar extraescolares muy frecuentes, como la ense?anza de lenguas extranjeras al margen de las escuelas oficiales de idiomas. La Encuesta de Gasto de Hogares en Educaci¨®n de 2019-2020 (que empez¨® a recopilar datos en el verano de 2019) se vio afectada por el gran confinamiento, pero, seg¨²n los autores, de forma menor.

El estrato social es lo que m¨¢s determina cu¨¢nto se usan las lecciones particulares. El estudio de Esade muestra que ya no son un recurso limitado a las clases altas y medias, sino que se han extendido de forma generalizada, aunque con intensidades muy diferentes. En las familias situadas en el quintil m¨¢s bajo en cuanto a capacidad de gasto (un concepto del INE parecido al nivel de renta), el 30% de los ni?os asiste a alg¨²n tipo de extraescolares educativas. En los dos quintiles m¨¢s elevados, el porcentaje supera, en cambio, el 60%. El gasto medio por alumno ¨Dque hasta cierto punto puede tomarse como un indicador de la calidad de las actividades y de la frecuencia con que se usan¨D tambi¨¦n es muy distinto seg¨²n la clase social: la inversi¨®n de los hogares m¨¢s ricos triplica al de los m¨¢s pobres. Como promedio, el gasto por alumno y curso asciende a 270 euros (en Madrid alcanza los 350 y en el otro extremo, en Castilla-La Mancha, los 153).

El trabajo tambi¨¦n constata disparidades en funci¨®n de las redes educativas a las que acuden los alumnos (debido sobre todo a que la escuela p¨²blica matricula a muchos m¨¢s estudiantes desfavorecidos de lo que le corresponder¨ªa si su distribuci¨®n fuera equilibrada). El gasto por escolar en clases particulares es de 300 euros en la concertada y de 235 en la p¨²blica. Y mientras en la p¨²blica la principal partida se destina a refuerzo de materias curriculares b¨¢sicas, 96 euros, seguida de los idiomas, 89, en la concertada el orden es el inverso: las familias gastan 146 euros por curso en idiomas y 90 en materias curriculares. La tercera diferencia, y seg¨²n Juan Manuel Moreno la ¡°m¨¢s significativa¡±, es que si bien el gasto por alumno durante las etapas de infantil y primaria es casi el mismo en ambas redes, en secundaria el gasto de las familias de la concertada ¡°se dispara un 50%¡± respecto a las de la p¨²blica.

Un caso aparte

Los alumnos de centros privados (no concertados) representan un caso aparte. El gasto de sus familias en clases particulares es mucho m¨¢s elevado y se concentra en lo que los autores describen como b¨²squeda de la diferenciaci¨®n. Destinan 483,3 euros por alumno y curso a estudios de idiomas y apenas 76,5 (menos que las de la p¨²blica y la concertada) a sesiones de repaso de materias curriculares b¨¢sicas.

El gasto por alumno en la p¨²blica tambi¨¦n es inferior en las extraescolares que engloban los ¡°estudios no reglados de ense?anzas art¨ªsticas¡± (como danza, pl¨¢stica, m¨²sica o teatro): asciende a 38,5 euros, frente a 55,7 en la concertada y 57,3 en la privada. Y el quintil m¨¢s rico es el ¨²nico en el que la cuarta y ¨²ltima categor¨ªa de clases particulares recogida en el informe bajo el nombre de ¡°otros estudios¡±, del que forman parte la ense?anza de t¨¦cnicas de estudio, inform¨¢tica o programaci¨®n, suponen un porcentaje significativo (un 7% del gasto total en extraescolares educativas realizadas por estos hogares). El informe no aborda las actividades extraescolares deportivas debido a la falta de datos, explican los autores, ni se aventura a decir en qu¨¦ proporci¨®n se trata de actividades no declaradas que permanecen en la econom¨ªa sumergida, aunque Moreno cree que es muy relevante.

El bum de las clases particulares es global. Espa?a forma parte de esa tendencia (el gasto total casi se ha triplicado en una d¨¦cada), pero Moreno, que durante buena parte de su carrera ha sido especialista educativo del Banco Mundial, afirma que todav¨ªa est¨¢ lejos de lo que sucede en los pa¨ªses asi¨¢ticos, grandes referentes en la materia. ¡°Si miramos al porcentaje de los alumnos espa?oles que consumen clases particulares, 47%, efectivamente, estamos avanzando r¨¢pido hacia lo que ocurre en los pa¨ªses asi¨¢ticos. Sin embargo, si comparamos el gasto medio en relaci¨®n con nuestra renta per c¨¢pita con la suya, vemos que seguimos a a?os luz de ellos¡±.

El primer objetivo

El aumento de las clases particulares supone un gran caudal de desigualdad educativa, alertan los autores, que proponen a los poderes p¨²blicos recomendaciones para mitigar su impacto. ¡°El primer objetivo deber¨ªa ser eliminar la parte del gasto que se dedica a clases de refuerzo y recuperaci¨®n de materias b¨¢sicas del curr¨ªculo escolar y que constituye un tercio del gasto total. Eso es lo que m¨¢s nos deber¨ªa preocupar¡±, afirma Moreno. El informe de Esade plantea potenciar las clases de apoyo gratuitas en los propios centros educativos para los chavales que lo necesitan, en l¨ªnea con el programa PROA (Plan de Refuerzo, Orientaci¨®n y Apoyo) recuperado en los ¨²ltimos a?os por el Ministerio de Educaci¨®n. Tambi¨¦n recomienda potenciar los servicios de orientaci¨®n y tutorizaci¨®n personalizada en los centros educativos, revisar ¡°los ex¨¢menes externos altamente competitivos¡± (es decir, la Selectividad) y ¡°las tasas injustificadamente altas de fracaso y repetici¨®n¡±. Los investigadores tambi¨¦n consideran necesario aumentar la recogida de informaci¨®n de forma que puedan hacerse an¨¢lisis m¨¢s detallados y se incluyan elementos que ahora se quedan fuera del c¨¢lculo, como las extraescolares deportivas o las estancias de verano para aprender ingl¨¦s en Reino Unido o Irlanda.

El texto sobre la educaci¨®n en la sombra en Espa?a incluye un apartado auton¨®mico, que muestra que Madrid es al mismo tiempo la comunidad donde mayor es el gasto por alumno en clases particulares y una de las ¨²ltimas en cuanto a porcentaje de estudiantes que asisten a las mismas: un 41% frente al 56% del Pa¨ªs Vasco (que es donde m¨¢s). Los autores atribuyen el contraste en Madrid a la desigualdad social que existe en la regi¨®n (que, expresada mediante el ¨ªndice Gini, es 10 puntos superior a la media). Y consideran perjudiciales medidas como la adoptada por la Junta de Andaluc¨ªa de permitir que las familias se desgraven el gasto en clases particulares. ¡°Son un claro ejemplo de transferencia de recursos p¨²blicos al sistema de educaci¨®n en la sombra con la justificaci¨®n de subvencionar a las familias para mejorar el rendimiento acad¨¦mico de sus hijos. Es una pol¨ªtica desaconsejable, porque se convertir¨¢ en un incentivo adicional para incrementar la demanda de educaci¨®n en la sombra y con ello en una fuente de desigualdad educativa y de p¨¦rdida de confianza p¨²blica en la escolarizaci¨®n. Y esto, am¨¦n de que la desgravaci¨®n solo bonificar¨¢ a las familias de clases media-alta y alta¡±.

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