De falso profesorado asociado a su falsa estabilizaci¨®n
La ministra de Trabajo, que acus¨® a Glovo de obstruir la ley, mira de reojo los fraudes de las universidades.
Hace unos d¨ªas se aprob¨® la Ley Org¨¢nica del Sistema Universitario (LOSU) en el Parlamento Espa?ol, promovida por el Ministro de Universidades, Joan Subirats. Al cabo de unas horas de su aprobaci¨®n, las redes se llenaron de expresiones como, por ejemplo, ¡°una ley que estabiliza las condiciones laborales de sus profesionales¡±, le¨ªda en el Twitter de la mism¨ªsima ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz.
Como se deja intuir en el t¨ªtulo de esta columna, en el presente texto os proponemos utilizar diferentes acepciones de falso como tutor ¨Dsiempre la docencia como vocaci¨®n¨D para comprender las condiciones de trabajo del profesorado asociado en las universidades p¨²blicas espa?olas antes y despu¨¦s de la LOSU, para comprender tanto las falsas como las reales condiciones laborales de estos profesionales.
Si bien la actual figura del profesorado asociado tiene m¨¢s de 20 a?os, y siempre tuvo salarios bajos, los problemas actuales con el profesorado asociado comenzaron a partir de la promulgaci¨®n del Real Decreto-ley 14/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes de racionalizaci¨®n del gasto p¨²blico en el ¨¢mbito educativo, m¨¢s conocido como decreto Wert. Este real decreto imped¨ªa a las universidades crear nuevas plazas docentes estables ¨Dpor la dichosa tasa de reposici¨®n¨D y apremi¨® a las gerencias universitarias al uso y abuso de la contrataci¨®n del profesorado asociado. Porque, ?qu¨¦ mayor racionalidad capitalista que contratar al profesorado m¨¢s barato para impartir las mismas asignaturas que el resto de profesorado? ?Qu¨¦ lo podr¨ªa impedir?, ya no lo hizo la Ley Org¨¢nica de Universidades (LOU, la ley anterior a la que se acaba de aprobar) que dice que se contrata al profesorado asociado para traer su experiencia profesional ¨Dde prestigio¨D a las aulas universitarias en una docencia que no puede ser estructural. ?Qui¨¦n lo imped¨ªa? La Inspecci¨®n de Trabajo, no, desde luego. Adem¨¢s, ?qu¨¦ profesionales podr¨ªan aceptar la docencia de cualquier asignatura y a cualquier hora seg¨²n necesidades de los departamentos universitarios? Pues de todo, entre ellos y ellas, profesionales con la flexibilidad horaria necesaria y con el entusiasmo y vocaci¨®n suficiente que permitiera singularizar la tiran¨ªa universitaria.
El sistema universitario p¨²blico espa?ol, el cual goza de ciertas prerrogativas, ten¨ªa que desviar la atenci¨®n sobre el fraude de ley en el que incurr¨ªan las gerencias universitarias y gener¨® la imagen del falso asociado para descargar culpas. Con ¡°falso¡± se trataba, y se sigue tratando, de transmitir la imagen de un profesorado que miente sobre su situaci¨®n profesional, una narrativa que hace sospechar de las intenciones de ese profesorado y libera a las organizaciones contratantes. ?Culpabilizamos a los otros falsos aut¨®nomos como los riders y no a empresas como Glovo? La ministra de Trabajo, la misma Yolanda D¨ªaz, que acus¨® a Glovo de obstruir la ley y anunci¨® sanciones para la empresa, mira de reojo los fraudes de las universidades. Pues eso, las universidades p¨²blicas espa?olas no s¨®lo no est¨¢n obligadas a cumplir las leyes laborales, sino que se permiten lanzar dudas sobre sus trabajadoras y trabajadores.
Y ahora, con la aprobaci¨®n de la nueva ley, ?qu¨¦ pasa con el profesorado asociado? Veamos. Como las universidades tienen que reducir su 40% de contrataci¨®n temporal ¨Dque, fundamentalmente, es el profesorado asociado y que la anterior ley dejaba en un 20%, pero que no se cumpl¨ªa, por aquello de las prerrogativas¨D a un 8% que exige la Uni¨®n Europea, la nueva ley indica que los contratos del profesorado asociado pasen a ser indefinidos en lugar de temporales. La venta que ha hecho el Ministerio de Universidades a la prensa y que se lee en muchos titulares es que van a estabilizar a los 26.000 profesores y profesoras asociadas, lo cual suena muy bien, pero es falso. En este ¨²ltimo caso, falso podr¨ªa ser en la acepci¨®n de ¡°contrario a la verdad¡±, pero vamos a dejarlo en una acepci¨®n m¨¢s suave de ¡°no es lo que parece¡±, pues no van a estabilizar a esas personas que han puesto su cuerpo en estos ¨²ltimos a?os, de malestar econ¨®mico y de pandemia, para mantener la docencia universitaria, sino que lo que estabiliza son las plazas, por lo que el profesorado asociado, para mantenerse como tal, tendr¨¢ que volver a concursar, olvid¨¢ndonos de que ya concurs¨® para ocupar la plaza actual. Es el momento de recordar que el profesorado asociado ha sido renovado cada a?o, aunque fueran m¨¢s de 20, porque no se le despide, porque no tiene derecho a un finiquito. As¨ª, lo que s¨ª suceder¨¢, es que las universidades p¨²blicas espa?olas, gracias a la nueva ley, despedir¨¢n gratis a 26.000 profesoras y profesores asociados.
La nueva ley deja al profesorado asociado donde estaba, en la judicializaci¨®n de su fraudulenta relaci¨®n con las universidades p¨²blicas espa?olas.
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