El esc¨¢ndalo de los suspensos en el examen para dentistas extranjeros: ¡°Es una burla, una estafa¡±

Mar¨ªa Alejandra De Toni (32 a?os) nunca pudo trabajar de lo que estudi¨®. Lleg¨® a Valencia desde Venezuela tras acabar la carrera de Odontolog¨ªa para cursar un m¨¢ster y ejercer como dentista en Espa?a. El d¨ªa que termin¨® de estudiar, empezaron las trabas para homologar su t¨ªtulo, un proceso que para los profesionales extranjeros puede tardar varios meses, o incluso a?os cuando se trata de t¨ªtulos extracomunitarios. Primero tuvo que esperar que una comisi¨®n analizara su petici¨®n: la resoluci¨®n lleg¨® despu¨¦s de dos a?os, y condicionaba su homologaci¨®n a un examen de ortodoncia para demostrar sus habilidades en esta ¨¢rea. La prueba, a cuyas preguntas ha tenido acceso EL PA?S, se celebr¨® a finales de marzo, y fue un desastre en muchos aspectos. ¡°Fue una burla y una estafa para todos los que la hicimos. Hab¨ªa preguntas fuera del temario. Otras que daban como correctas respuestas que no estaban respaldadas en los libros acad¨¦micos. No me sorprende que, una vez m¨¢s, nadie obtenga su homologaci¨®n¡±, denuncia De Toni.

El examen ¡ªque convoca la Conferencia de Decanos de Odontolog¨ªa (CRADO) y que se celebr¨® de forma simult¨¢nea en 15 universidades p¨²blicas y privadas el 24 de marzo¡ª se dio tras muchos a?os de espera y reivindicaciones por parte de los miles de licenciados extracomunitarios que viven en Espa?a. La primera vez que se hizo siguiendo esta modalidad fue en 2021. Se desconoce si habr¨¢ una tercera convocatoria despu¨¦s de la que se celebr¨® en marzo. De Toni pag¨® 120 euros para hacerlo en la Universidad de Santiago de Compostela, un precio que sube hasta los 700 euros en las facultades privadas, a pesar de ser exactamente la misma prueba. Este a?o acudieron 1.000 profesionales, algunos de los cuales fueron evaluados en m¨¢s de una asignatura. Solamente 42 de los 1.828 ex¨¢menes que se celebraron tuvieron un resultado positivo, es decir, un 2,3% del total. En 2021 el resultado fue incluso peor: 21 aprobados de 2.093 ex¨¢menes (el 1%), seg¨²n datos de la CRADO.

Cuando se publicaron las plantillas con los resultados, los profesionales empezaron a denunciar en bloque la dificultad de la prueba y la poca transparencia de todo el proceso. ¡°Estudias un poco en el aire, no sabes exactamente lo que te van a preguntar. Sin bibliograf¨ªa, lo ¨²nico que nos gu¨ªa es el plan de estudios del grado de las carreras espa?olas¡±, explica De Toni. Esta dentista venezolana se gradu¨® en su pa¨ªs como primera de su promoci¨®n, tiene un posgrado en Endodoncia en la Universidad de Valencia y recibi¨® una distinci¨®n por su trabajo de fin de m¨¢ster. Tras terminar los estudios, empez¨® incluso a dar clase en la facultad. Sin embargo, no consigui¨® m¨¢s de 12 puntos, sobre 33 preguntas, en el examen de homologaci¨®n de ortodoncia, la asignatura en la cual necesitaba volver a estudiar. Las materias y la cantidad son diferentes por cada profesional, y dependen de la universidad de origen y del curr¨ªculum que estudiaron. ¡°No es que la gente no haya aprobado el examen porque es dif¨ªcil, no lo aprueba porque es imposible¡±, a?ade.

David Su¨¢rez Quintanilla, catedr¨¢tico de Ortodoncia en la Universidad de Santiago de Compostela, tambi¨¦n tiene sus reservas. ¡°Me sorprend¨ª mucho cuando vi el contenido del test. Las preguntas eran completamente descabelladas, respuestas poco claras. Pero sobre todo era extremadamente dif¨ªcil. Dudo mucho de que la mayor¨ªa de los profesores de Ortodoncia lo hubieran aprobado, incluido yo mismo¡±, reconoce Quintanilla, quien ha visto uno de estos ex¨¢menes de la prueba de su especialidad. El catedr¨¢tico admite que el proceso de homologaci¨®n no es f¨¢cil para los profesionales latinoamericanos ¡ª9 de cada 10 solicitudes provienen de estos pa¨ªses, seg¨²n datos del Ministerio de Universidades¡ª, que en muchos casos tienen conocimientos por haber ya ejercido la profesi¨®n en su pa¨ªs de procedencia, pero han perdido el h¨¢bito de estudio y no rinden a la hora de hacer un examen de tipo test. ¡°Lo normal en este tipo de ex¨¢menes es que haya un 20% de aprobados, no un 5% o menos, como es el caso. Est¨¢ claro que hay que plantearse otro tipo de prueba¡±, afirma.

1.900 dentistas al a?o

La batalla de los dentistas extranjeros para poder ejercer en Espa?a viene de lejos. La profesi¨®n, que hace unos a?os era una garant¨ªa de sueldos altos y calidad de vida, est¨¢ en declive, debido sobre todo a la inmensa cantidad de graduados que salen de las 23 facultades del pa¨ªs. El Consejo General de Dentistas cifra en 1.900 los dentistas que cada a?o buscan un hueco en el mercado laboral. ¡°Hay gente que ahora mismo no cobra m¨¢s del salario m¨ªnimo trabajando en cl¨ªnicas¡±, explica su presidente, ?scar Castro. En el a?o 2000, hab¨ªa 17.000 dentistas colegiados en Espa?a. Ahora son 40.000, lo que supone que haya unos 85 dentistas por cada 100.000 habitantes. Es imposible saber cu¨¢ntos de estos profesionales son extranjeros, ya que el registro de colegiados no hace distinci¨®n entre graduados. Lo que s¨ª se conoce es el n¨²mero de dentistas extranjeros a la espera de conseguir la homologaci¨®n: 6.650, seg¨²n el ministerio.

Son las mismas universidades las que preparan los ex¨¢menes. Hay 35 materias que se sortean y reparten entre los centros p¨²blicos y privados que conforman la conferencia de decanos, y los catedr¨¢ticos de estas asignaturas formulan las preguntas. Llu¨ªs Giner, decano de la Universitat Internacional de Catalunya y presidente de la CRADO, reconoce que lo hacen por ¡°compromiso¡± con el ministerio, pero que ¡°no es su trabajo¡±. ¡°Intentamos ser lo m¨¢s transparentes posible, el examen se pudo hacer sin problemas. Estamos a la espera de evaluar las reclamaciones. Est¨¢ claro que hay que mejorar en muchos aspectos, como muestran los resultados¡±, admite Giner. No responde sobre la dificultad de las preguntas.

Las irregularidades para homologar los t¨ªtulos no se limitan al examen. Empiezan, de hecho, a la hora de obtener la resoluci¨®n de una comisi¨®n de 13 expertos formada por miembros de la Agencia Nacional de Evaluaci¨®n de la Calidad y Acreditaci¨®n (ANECA), el profesorado, los decanos y una representaci¨®n del Ministerio de Universidades. Camila Rodr¨ªguez, argentina de 34 a?os, estuvo esperando cuatro a?os por su resoluci¨®n. Cuando finalmente lleg¨®, el resultado fue ¡°favorable condicionado¡±, es decir, que ten¨ªa que volver a formarse en seis materias. ¡°A otras compa?eras de facultad que se graduaron conmigo les pidieron menos asignaturas. ?C¨®mo puede ser que personas que hayan estudiado exactamente lo mismo tengan un resultado tan diferente?¡±, pregunta indignada.

Desde que lleg¨® a Espa?a, hace seis a?os, Rodr¨ªguez intent¨® en dos ocasiones conseguir la homologaci¨®n: primero en 2021, cuando a los aspirantes no se les proporcion¨® ni un temario para preparar la prueba, y luego en marzo de este a?o, cuando s¨ª hab¨ªa temario, aunque no una bibliograf¨ªa espec¨ªfica. En ninguno de los casos consigui¨® aprobar, a pesar de llevar ya varios a?os prepar¨¢ndose y trabajando como auxiliar en una cl¨ªnica dental, el ¨²nico empleo relacionado con su profesi¨®n que puede ejercer sin la homologaci¨®n. Asegura que otros compa?eros est¨¢n trabajando en el sector de la hosteler¨ªa. ¡°Uno piensa que nuestras quejas se limitan al aspecto econ¨®mico, mientras que la afectaci¨®n es sobre todo a nivel ps¨ªquico. He pasado por una depresi¨®n enorme en estos a?os, y estuve llorando semanas despu¨¦s de los ex¨¢menes. Espa?a tiene todo el derecho de cerrar el proceso de homologaci¨®n, pero no tienen ning¨²n derecho a seguir enga?¨¢ndonos y jugar con nuestra salud mental¡±, afirma.