La juez imputa a tres agentes de la Consejer¨ªa de Interior de Madrid en el caso de los esp¨ªas
Investiga si hubo malversaci¨®n de fondos para sufragar los gastos de los seguimientos
La titular del juzgado n¨²mero cinco de Madrid, Carmen Valcarce, ha citado en calidad de imputados a tres ex guardias civiles fichados como asesores por Francisco Granados por el espionaje al ex consejero de Justicia y ex vicepresidente segundo del Gobierno de Aguirre Alfredo Prada y al vicealcalde del Ayuntamiento madrile?o, Manuel Cobo: Jos¨¦ Luis Caro Vinagre, Jos¨¦ Oreja S¨¢nchez y Antonio Coronado Mart¨ªnez.
Fuentes relacionadas con esta investigaci¨®n vinculan esta citaci¨®n con un primer informe remitido por Telef¨®nica sobre los posicionamientos de ocho agentes de Granados sospechosos de tales seguimientos a ambos rivales de Aguirre en los meses en los que presuntamente fueron vigilados (abril, marzo y mayo de 2008). La citaci¨®n judicial supone un doble escozor para Granados: no solo se trata de agentes suyos sospechosos de realizar un espionaje que intent¨® ridiculizar en Prensa y desbarat¨® en sede parlamentaria, sino que se trata, encima, del personal de mayor confianza suya. Los fich¨® ¨¦l personalmente por su conocimiento o amistad de cuando era alcalde en Valdemoro, guarnici¨®n de la que proven¨ªan los tres. En privado, dentro del caos de distintos equipos de servicios secretos que pululaban en su consejer¨ªa, Granados s¨®lo pon¨ªa la mano en el fuego por estos tres agentes suyos que, parad¨®jicamente, han sido los primeros en verse alcanzados por las llamas.
Sospechas en la remodelaci¨®n de la Consejer¨ªa de Interior
El PSOE, por boca de Maru Men¨¦ndez, portavoz socialista en la asamblea madrile?a, suma otro elemento de sospecha: la reciente remodelaci¨®n de funciones en la Consejer¨ªa de Interior que precisamente dejaba sin tareas de contravigilancia y avanzada a los agentes sospechosos del espionaje era una medida preventiva para soltar lastre ante el conocimiento o temor de que la justicia ya andaba cerca de los presuntos autores del espionaje. Granados, incluso, recientemente se curaba en salud diciendo que no tendr¨ªa la menor trascendencia si, por mor de los posicionamientos telef¨®nicos, se demostrara que alg¨²n presunto esp¨ªa de su departamento coincidi¨® en alg¨²n punto geogr¨¢fico en los meses de los seguimientos a Prada y Cobo con alguno de los espiados. Y Granados anticipaba una posible coartada: sus agentes se han dedicado a realizar avanzadas (reconocimientos de lugares donde acuden altos cargos) y contravigilancias (detecci¨®n de defectos o riesgos en el personal escoltado), incluso domiciliarias. Y, seg¨²n la consejer¨ªa de Interior, esa labor de protecci¨®n podr¨ªa haber alcanzado a Prada. Sin embargo, ning¨²n portavoz de la consejer¨ªa de Granados supo precisar cu¨¢ndo se hab¨ªa contravigilado a Prada o se le hab¨ªa aplicado una avanzada. "No hay ning¨²n informe donde se detalle a quien se contravigila ni cu¨¢ndo", precisaban en Interior.
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