Diez cracks de la ciencia en 2014
La revista 'Nature' ha seleccionado a diez personas relevantes para la investigaci¨®n en el a?o
Como es tradicional al acabar el a?o, las revistas cient¨ªficas hacen balance y publican sus especiales sobre hitos y personas determinantes durante los ¨²ltimos doce meses. La revista brit¨¢nica Nature ofrece en su edici¨®n de esta semana una lista sobre 10 personas que fueron importantes en varios campos cient¨ªficos. Tres estadounidenses, dos indios, una iran¨ª, una japonesa, un sierraleon¨¦s, un italiano y un holand¨¦s; cuatro mujeres y seis hombres que representan, con todas las limitaciones de estas listas, parte de los logros cient¨ªficos que acabaron de florecer el a?o que termina.
1. Suzanne Topalian: el sistema inmune contra el c¨¢ncer
Hace m¨¢s de un siglo ya se observ¨® que, azuzado de manera adecuada, nuestro sistema inmune pod¨ªa ser un aliado esencial para combatir al c¨¢ncer. Sin embargo, los tratamientos que intentaban emplear esa estrategia no acabaron de prosperar. En julio de este a?o, se aprob¨® en Jap¨®n una de estas terapias para combatir el melanoma avanzado. El nivolumab, producido por la farmac¨¦utica Bristol-Myers, forma parte de una familia de compuestos que permiten a los linfocitos T atacar a los tumores.
Suzanne Topalian, ahora en la Universidad Johns Hopkins, lleva desde mediados de los ochenta trabajando en la aplicaci¨®n de la inmunoterapia contra el c¨¢ncer. En 2006, comenz¨® a colaborar con los primeros ensayos para poner a prueba el nivolumab y seis a?os despu¨¦s particip¨® en la publicaci¨®n de los resultados que mostraban la eficacia de la mol¨¦cula para tratar el melanoma y el c¨¢ncer de pulm¨®n. El trabajo de Topalian ha sido clave para abrir una nueva v¨ªa para combatir los tumores.
2. Sheik Humarr Kahn: el h¨¦roe (m¨¢s visible) del ¨¦bola
El 28 de agosto de este a?o, un grupo de 50 investigadores de cuatro pa¨ªses public¨® el resultado de la secuenciaci¨®n de 99 genomas del virus del ¨¦bola. As¨ª se logr¨® encontrar m¨¢s de 300 cambios gen¨¦ticos que diferencian a esta variante de otras aparecidas durante las ¨²ltimas d¨¦cadas. Estas mutaciones que alteran las secuencias de prote¨ªnas del virus y cambian su comportamiento o la manera en que da?a a sus v¨ªctimas, pueden convertirse en dianas sobre las que disparar f¨¢rmacos, una herramienta para diagnosticar mejor o una base sobre la que crear una vacuna.
De aquellos 50 investigadores que hab¨ªan tomado las muestras del pat¨®geno, cinco hab¨ªan muerto. Uno de ellos era Sheik Humarr Kahn, director del Hospital Gubernamental en Kenema (Sierra Leona). Este m¨¦dico hab¨ªa rechazado ofertas para abandonar el pa¨ªs por su deseo de quedarse para poder tratar a los enfermos. Expertos como ¨¦l han estado entre las principales v¨ªctimas y, adem¨¢s de la p¨¦rdida humana, ser¨¢n necesarios a?os para recuperar el talento y el conocimiento perdidos.
3. Maryam Mirzakhani: las matem¨¢ticas son cosa de chicas
La primera Medalla Fields se entreg¨® en 1936 y a partir de la segunda edici¨®n, en 1950, se ha seguido entregando cada cuatro a?os. Este galard¨®n, el m¨¢s prestigioso que puede recibir un matem¨¢tico, nunca hab¨ªa sido entregado a una mujer. Hasta este a?o. Maryam Mirzakhani, una matem¨¢tica nacida en Ir¨¢n que ha desarrollado su carrera en EEUU, ha sido premiada por un trabajo que toca campos dispares como la topolog¨ªa, la geometr¨ªa y los sistemas din¨¢micos.
Mirzakhani ha comentado a Nature que durante su carrera no ha encontrado una discriminaci¨®n evidente contra las mujeres, pero afirma que existen fuerzas culturales sutiles que pueden minar su confianza. Entre estos obst¨¢culos, menciona la escasez de investigadoras -en las universidades de EEUU, solo son un 30% de los estudiantes de doctorado- o la percepci¨®n entre las chicas de que las matem¨¢ticas ¡°no son guays¡±.
4. Andrea Accomazzo: aterrizar sobre un cometa
Andrea Accomazzo es el director del que quiz¨¢ ha podido ser el momento cient¨ªfico m¨¢s ¨¦pico de este a?o. Despu¨¦s de un viaje de 6.400 millones de kil¨®metros desde la Tierra, en agosto, la sonda Rosetta se encontr¨® con el cometa 67P/Churyumov¨CGerasimenko. Una vez colocado en su ¨®rbita, a medio mill¨®n de kil¨®metros, en alg¨²n lugar entre Marte y J¨²piter, el equipo de la Agencia Espacial Europea (ESA) dirigido por Accomazzo logr¨® hacer aterrizar sobre el cometa una peque?a sonda bautizada como Philae. Era la primera vez que se obten¨ªa informaci¨®n directamente en la superficie de un cometa.
Accomazzo, que ya trabaj¨® en la misi¨®n de la ESA que coloc¨® una sonda en la ¨®rbita de Venus, trabaja ahora en el dise?o de los proyectos que planea la agencia para llegar a Mercurio, Marte y J¨²piter. En su juventud fue piloto de caza de las fuerzas a¨¦reas italianas, un trabajo en el que adquiri¨® una capacidad que, comenta en Nature, le ha sido muy ¨²til para dirigir Rosetta con ¨¦xito: ser capaz de tomar decisiones en segundos.
5. Koppillil Radhakrishnan: el tercer mundo llega a Marte
La mitad de los intentos para colocar una sonda en Marte han fracasado. La dificultad de completar el viaje hasta el ¨²ltimo planeta rocoso del Sistema Solar ha llegado a introducir en la mitolog¨ªa del viaje espacial un monstruo marciano devorador de naves espaciales. Koppillil Radhakrishnan, director de la Organizaci¨®n de Investigaci¨®n Espacial India (ISRO), conoc¨ªa las probabilidades y su organizaci¨®n habl¨® de la sonda Mangalyaan como una prueba de tecnolog¨ªa.
Sin embargo, cuando el 24 de septiembre lograron colocar el artefacto en la ¨®rbita de Marte, entraron en un exclusivo grupo en el que le esperaban Estados Unidos, la Uni¨®n Sovi¨¦tica y la Uni¨®n Europea. Ni siquiera China o Rusia han llegado tan lejos. Durante los pr¨®ximos tres a?os, la India quiere lanzar su segunda misi¨®n lunar, continuando con un programa espacial que trata de alcanzar con humildad objetivos ambiciosos. Radhakrishnan, que tambi¨¦n ha trabajado en el dise?o de alerta frente a tsunamis o en otros sat¨¦lites empleados en agricultura o control medioambiental, se retirar¨¢ al final de este a?o.
6. David Spergel: el descubrimiento del a?o puede ser un error
Este lugar podr¨ªa haber estado ocupado por John Kovac, del Centro para Astrof¨ªsica Harvard-Smithsonian (EEUU). ?l y su equipo anunciaron en una rueda de prensa a principios de este a?o la probable detecci¨®n de ondas gravitacionales procedentes del origen del cosmos. Esa se?al habr¨ªa sido la primera prueba directa de que en sus primeros instantes de vida, el universo experiment¨® una enorme expansi¨®n llamada inflaci¨®n c¨®smica.
Estos espectaculares resultados se pusieron en duda poco tiempo despu¨¦s y el espacio de Kovac entre los cient¨ªficos m¨¢s destacados del a?o lo ocupa David Spergel, un investigador de la Universidad de Princeton (EEUU). Spergel mostr¨® sus dudas ante la posibilidad de que la se?al recogida por el telescopio BICEP2 hubiese sido producida por polvo del espacio cercano. Est¨¢ previsto que pr¨®ximamente aparezca un an¨¢lisis de los datos que zanjar¨ªa la controversia. No obstante, es probable que otros cient¨ªficos se lo piensen antes de anunciar a los medios un hallazgo digno de Nobel antes de tenerlo todo bien atado.
7. Masayo Takahashi: un respiro para las c¨¦lulas madre
Despu¨¦s de diez a?os de trabajo, Masayo Takahashi vio este a?o c¨®mo se trasplantaban las c¨¦lulas que ella hab¨ªa cultivado en la parte posterior de la retina da?ada de una mujer de setenta a?os. La investigadora del centro RIKEN para la Biolog¨ªa del Desarrollo, en Kobe, Jap¨®n, hab¨ªa creado esas c¨¦lulas a partir de c¨¦lulas madre pluripotentes, capaces de transformarse en una gran cantidad de tejidos para tratar un buen n¨²mero de enfermedades.
El triunfo lleg¨® en un a?o complicado para las c¨¦lulas madre y en particular para el centro RIKEN. En enero de este a?o, se publicaron dos art¨ªculos en Nature en los que cient¨ªficos de este centro anunciaban un m¨¦todo r¨¢pido para crear c¨¦lulas madre pluripotentes. El trabajo, alabado en un principio, acab¨® recibiendo duras cr¨ªticas tras el descubrimiento de que algunas cifras se hab¨ªan manipulado. Yoshiki Sasai, supervisor de Haruko Obokata, la autora principal del estudio, se suicid¨® en agosto. Ahora, Takahashi trata de mejorar sus trasplantes de c¨¦lulas introduciendo fotorreceptores para devolver parte de la visi¨®n perdida a personas con degeneraci¨®n macular. Para lograrlo, emplear¨¢ una t¨¦cnica para cultivar tejido de retina creada por Sasai.
8. Radhika Nagpal: enjambres de minirrobots a nuestro servicio
Este a?o, la investigadora de la Universidad de Harvard (EEUU) y su equipo lograron un hito en el desarrollo de robots inspirados en la biolog¨ªa. Copiando algunos de los comportamientos de insectos sociales como las hormigas o las abejas para construir sus hormigueros o colmenas, el equipo de Nagpal dise?¨® un enjambre de 1024 kilobots sin un control central. Estos minirrobots med¨ªa cada uno unos pocos cent¨ªmetros de alto y de ancho y se arrastraban por el suelo impuls¨¢ndose con tres patas y comunic¨¢ndose con sus vecinos a trav¨¦s de luz infrarroja.
Este sistema, seg¨²n Nagpal, permite contar con una gran maquinaria con utilidades como la limpieza de desastres medioambientales, sin la necesidad de tener algoritmos que deban gestionar con precisi¨®n robots individuales. Ahora, el equipo de esta investigadora nacida en India pretende dise?ar grandes enjambres capaces de autoensamblarse para formar estructuras de tres dimensiones.
9. Pete Frates: la viralidad en internet contra la ELA
La persona con m¨¢s impacto p¨²blico en la lista de 10 personas que, seg¨²n Nature, importaron en ciencia en 2014, no es ni cient¨ªfico ni ingeniero ni matem¨¢tico. Se trata de Pete Frates, un estadounidense que fue entrenador de beisbol hasta que, con menos de 30 a?os, la esclerosis lateral amiotr¨®fica (ELA) le empez¨® a arrebatar el movimiento y la capacidad de hablar. Frates fue el impulsor del reto del cubo de hielo, una iniciativa en la que los participantes se lanzaban agua fr¨ªa por encima, lo grababan y lo difund¨ªan en redes sociales para apoyar la recaudaci¨®n de fondos para ayudar a financiar la investigaci¨®n contra la ELA.
Hasta ahora, los participantes en esta iniciativa han subido a Facebook 17 millones de v¨ªdeos lanz¨¢ndose cubos de agua por la cabeza y se han recaudado 115 millones de d¨®lares. La cantidad casi triplica los 40 millones que dedican los Institutos Nacionales de Salud de EEUU a esta enfermedad. La ELA es una enfermedad relativamente rara, que afecta a medio mill¨®n de personas en todo el mundo (las enfermedades cardiovasculares matan alrededor de siete millones y medio de personas al a?o), y esta iniciativa se ha tomado como ejemplo por asociaciones de afectados por enfermedades minoritarias para llamar la atenci¨®n y que la investigaci¨®n no les olvide.
10. Sjors Scheres: matem¨¢ticas para ver la vida microsc¨®pica
La biolog¨ªa estructural, el campo que trata de conocer la forma en que se organizan los mecanismos biol¨®gicos fundamentales para averiguar c¨®mo funcionan, ten¨ªa como herramienta fundamental la cristalograf¨ªa de rayos X. Ahora, una nueva t¨¦cnica conocida como criomicroscop¨ªa electr¨®nica est¨¢ llevando la capacidad para observar la maquinaria molecular de las c¨¦lulas y de todo tipo de compuestos a un nuevo nivel de precisi¨®n. Adem¨¢s, el tipo de objetos que los bi¨®logos podr¨¢n estudiar no solo depender¨¢ de lo que es posible cristalizar.
Este logro ha sido posible gracias al trabajo de matem¨¢ticos como el holand¨¦s Sjors Scheres, de la Universidad de Cambridge (Reino Unido), creador de un software que es capaz de obtener im¨¢genes de gran claridad a partir de las de textura granulada que produce la criomicroscop¨ªa electr¨®nica. Uno de los problemas que quiere afrontar Scheres con su nuevo software es determinar la estructura de la ¦Ã-secretasa, una prote¨ªna relacionada con el desarrollo del alzh¨¦imer. La prote¨ªna es peque?a y tiende a moverse, algo que suele producir im¨¢genes borrosas cuando se les aplica la criomicroscop¨ªa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.