"Al fin se asocia jugueter¨ªa er¨®tica con salud"

Hace ya a?os (en 2008) Greenpeace lanz¨® un dec¨¢logo para practicar sexo sin perjudicar el planeta. Las medidas pasaban por apagar las luces durante el coito, consumir afrodis¨ªacos naturales, reciclar los juguetes sexuales, ba?arse en pareja o evitar el derivado del pl¨¢stico PVC (por las emisiones t¨®xicas al medio ambiente). Pero no ha sido hasta hace poco cuando la industria del juguete sexual, y sobre todo el consumidor, ha tomado conciencia no solo del respeto hacia el medio ambiente, sino tambi¨¦n al propio cuerpo.

Precisamente, este informe de Greenpeace fue el punto de arranque para Gabriel C., fundador y director de L¡¯Arbre des plaisirs, una las primeras boutiques de juguetes sexy sin ftalatos. Actualmente factura en torno al medio mill¨®n de euros. ¡°Tras un informe que Greenpeace mand¨® a la Comisi¨®n Europea en 2008 se me ocurri¨® la idea de crear esta web. El informe hablaba de la presencia de los ftalatos en la mayor¨ªa de los juguetes sexuales vendidos en el mercado y alertaba sobre el hecho de que pudieran ser nocivos para el aparato reproductor masculino y t¨®xicos para la reproducci¨®n. As¨ª que pens¨¦ en vender productos sin ftalatos, que protegieran tanto el medio ambiente [al convertirse en residuo, persiste, como contaminante, en suelos y sedimentos] como a los consumidores¡±.

Pero, ?qu¨¦ es exactamente esta sustancia de nombre impronunciable? Un producto qu¨ªmico que hace del pl¨¢stico un material m¨¢s flexible. Hay varios tipos, y de todos ellos, la UE ha prohibido seis. ¡°De ciertos componentes de los pl¨¢sticos (como ftalatos, parabenos, bisfenol¡­) a¨²n se est¨¢n estudiando sus efectos en el organismo. Y hay controversia. Para hablar de da?o, habr¨ªa que demostrar y explicar la migraci¨®n de estos compuestos al organismo, qu¨¦ cantidad y durante cu¨¢nto tiempo, puesto que no toda exposici¨®n tiene el mismo riesgo¡±, tranquiliza Brais Abuin, qu¨ªmico y responsable del laboratorio medioambiental Denga.

L¡¯Arbre des Plaisirs tambi¨¦n tiene muy presente su compromiso con el medio ambiente: recicla juguetes sexuales (reciclaje electr¨®nico: como los peque?os electrodom¨¦sticos) y por cada juguete que vende, planta un ¨¢rbol en los bosques tropicales.

Cuanto m¨¢s porosos son los materiales del juguete, m¨¢s fluidos absorbe, m¨¢s dif¨ªcil es de higienizar y m¨¢s residuos suelta. Los mejores son de silicona, cristal de borosilicato y acero¡± (Sara P¨¦rez, responsable de Los placeres de Lola)

Los placeres de Lola es una tienda er¨®tica que abri¨® sus puertas hace ahora 10 a?os en el barrio de Lavapi¨¦s de Madrid y que se ha convertido en referencia incontestable. Seg¨²n Sara P¨¦rez, su responsable, ya se percibe una mayor sensibilidad hacia los materiales que utiliza esta industria y sus consecuencias. ¡°Hasta hace bien poquito no se asociaba la jugueter¨ªa er¨®tica con la salud, pero, afortunadamente, esta visi¨®n est¨¢ cambiando a pasos agigantados. Y al fin se hace¡±. As¨ª, materiales hasta ahora muy utilizados como el PVC, el l¨¢tex o cualquier otro pl¨¢stico est¨¢n empezando a retirarse y a desaparecer. La raz¨®n es la porosidad: ¡°Cuanto m¨¢s porosos son los materiales del juguete, m¨¢s fluidos absorbe, m¨¢s dif¨ªcil es de higienizar y m¨¢s residuos suelta. Los componentes m¨¢s recomendables son: la silicona de uso m¨¦dico, el cristal de borosilicato y el acero¡±, a?ade la experta en sex toys. Entre la amplia oferta, Sara P¨¦rez destaca: ¡°Los huevos de cristal o de materiales semipreciosos, que fortalecen el suelo p¨¦lvico, y los lubricantes sin parabenos [da?inos solo en caso de alergias o intolerancia a los conservantes, seg¨²n la FDA]. Pero cuidado con las glicerinas [que act¨²an de lubricante], porque pueden alterar el pH de la vagina. Tambi¨¦n conviene tener en cuenta que no hayan sido testados sobre animales: la crueldad y el placer son dos cosas que no deber¨ªan ir de la mano¡±.

Consoladores artesanos

BS Atelier es una empresa artesanal que utiliza maquinaria casi dom¨¦stica y, por tanto, con repercusi¨®n m¨ªnima sobre el planeta. Fabrica dildos (consoladores) manualmente y uno a uno. En resumidas cuentas: en una f¨¢brica china se pueden llegara a hacer 50.000 dildos en un mes; en el taller de Sabela Dopazo se tardan 20 minutos en hacer uno, y se puede personalizar cada producto seg¨²n los gustos y necesidades del cliente.

Sabela Dopazo, una de sus fundadoras, nos cuenta c¨®mo surgi¨® la idea: ¡°Venimos de Bellas Artes, somos un grupo activista feminista que trabajaba con tem¨¢tica de g¨¦nero. De hecho, conocimos el dildo desde el punto de vista art¨ªstico y fotogr¨¢fico. A trav¨¦s de la tienda Los placeres de Lola entr¨¦ en el mundo de la sexualidad m¨¢s desde un punto de vista educacional y terap¨¦utico. Ah¨ª vimos que hab¨ªa un hueco en el mercado de fabricaci¨®n de dildos artesanal, de forma sostenible, ecofriendly y con materiales que no fuesen nocivos para el cuerpo¡­ y nos lanzamos¡±. Ahora exportan a Estados Unidos, Canad¨¢, Australia, Jap¨®n o China y est¨¢n en las mejores tiendas de Espa?a.

Pero no solo eso, lo m¨¢s importante es que el control de la manufactura es total: ¡°Solo utilizamos materiales de uso m¨¦dico y farmac¨¦utico, como la silicona, que es hipoalerg¨¦nica e inocua, y no va a alterar el organismo¡±, detalla. Otra de sus ventajas es que, aunque no es reciclable, esta jugueter¨ªa "dura eternamente¡±, como describe Sabela Dopazo. Un dildo de este tipo no es de usar y tirar, es para toda la vida, asegura. ¡°No desprende sustancias nocivas para el medio ambiente, ya que la silicona proviene del silicio de la arena, as¨ª que incluso su explotaci¨®n no es tan nociva como la de otros materiales. Adem¨¢s, la que nosotras usamos es esterilizable: la puedes hervir como una tetina de biber¨®n¡±.

En lo que todos coinciden es en c¨®mo ha crecido la concienciaci¨®n en los usuarios de juguetes sexuales. ¡°Antes¡±, dice Sara P¨¦rez, ¡°los consumidores iban a comprar y les daba un poco igual, el factor determinante era el precio. Ahora ya no: se buscan objetos sin sustancias hipoalerg¨¦nicas [susceptibles de producir alergias], que sean ecol¨®gicas, etc. Y es normal. Si reciclamos m¨¢s y cuidamos como nunca nuestros h¨¢bitos y alimentaci¨®n, ?c¨®mo no vamos a velar por algo que usamos de un modo tan ¨ªntimo?¡±.

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