Melani Sav¨ªn, auxiliar administrativo: ¡°Quiero ser una chica m¨¢s¡±

Valiente, esforzada, deseosa de vivir integrada en el mundo, as¨ª definen las trabajadoras de la Fundaci¨®n S¨ªndrome de Down a esta mujer de 34 a?os. Vivaz y espont¨¢nea. Por algo present¨® el a?o pasado la gala del certamen literario para personas con s¨ªndrome de Down, ganando una menci¨®n de honor por un poema amoroso. Este a?o ha sido jurado. Melani posee una innegable inteligencia emocional. Observando que he llegado nerviosa al encuentro, me suelta con desparpajo: "?Tranquila, mujer, que no tenemos prisa!".

¡ªBuff, ya no me acuerdo de cu¨¢ndo supe que ten¨ªa s¨ªndrome de Down. Fue importante para m¨ª, claro, aunque el esfuerzo que tienes que poner en las cosas es parecido al de todo el mundo. Para la integraci¨®n, igual. En la vida no siempre cuajamos con las personas, pero eso no tiene que ver con el s¨ªndrome de Down.

El trabajo para m¨ª es lo mejor que te puede suceder. Sin trabajo no tienes dinero para regalar cosas a la gente que m¨¢s quieres"

¡ªLas monitoras nos ense?an a ser independientes, a manejarnos con el dinero, en la vida.

¡ªYo so?aba con ser auxiliar administrativo.

¡ªTrabajo en las oficinas de 10 a dos en un Carrefour. Con Susan, la chica de apoyo, meto datos en el ordenador, clasifico el correo y lo reparto.

¡ªYo me preparo cada ma?ana para enfrentarme al mundo. Me miro al espejo y me digo: "Melani, sigue luchando por mantener tu trabajo". No es una reflexi¨®n que me hayan ense?ado, me la he inventado yo para superarme. Y funciona. ?Pru¨¦balo, mujer! T¨² piensa en lo que vales y seguro que siempre encuentras algo bueno.

¡ªEl so?ar es gratis. Yo me paso la vida so?ando. Yo qu¨¦ s¨¦, conocer a Bustamante, visitar el plat¨® de La Voz. En casa tengo un karaoke y me pongo a cantar con mi micr¨®fono de palo. Sin nadie. Sola. Es otra manera de expresar lo que siento, muy buena para relajarme. A Melendi voy a ir a verle en mayo con una amiga de la familia que hace lo posible para que mis sue?os se hagan realidad.

¡ªA mi madre le cost¨® que yo fuera independiente. Yo quiero ser libre pero tambi¨¦n hay que saber que hay cosas que nosotros no sabemos. El trabajo de una madre es estar ah¨ª siempre, cuando alguien te discrimina diciendo que t¨² no puedes hacer las cosas bien. No me gusta que me hagan de menos. Yo quiero ser una chica m¨¢s.

¡ªUn d¨ªa me dije: "Voy a hacer un poema y a ver qu¨¦ pasa". Quer¨ªa dar a la gente la sorpresa de presentarme al concurso, y, oye, se me prendi¨® el foco y escrib¨ª uno bastante original. Trataba de cuando celebras el d¨ªa de los enamorados. Yo me hab¨ªa enamorado en el pasado, sab¨ªa de qu¨¦ iba.

¡ªMe gustar¨ªa tener un novio. Uno que me respete, que me haga feliz, y que tenga coche.

¡ªMi plan para un fin de semana perfecto es ir a bailar al Club P¨¢ramo de 6 a 8. M¨²sica disco y agarrado.

¡ªAl volver a casa veo La Voz Kids. Y me encanta el f¨²tbol. Soy del Real Madrid. Otro de mis sue?os es ir al Bernab¨¦u.

¡ªEl a?o pasado present¨¦ el evento literario. Hay gente que se pone nerviosa, pero yo te dar¨ªa un consejo: tienes que creerte que est¨¢s hablando en casa, como que se lo est¨¢s contando a una amiga... Lo aprend¨ª del tutorial de una mujer que te ense?a a hablar en p¨²blico. Mi madre dijo que sali¨® de maravilla. Qu¨¦ va a decir una madre.

¡ªEl trabajo para m¨ª es lo mejor que te puede suceder. Sin trabajo no tienes dinero para regalar cosas a la gente que m¨¢s quieres. Me imagino viviendo independiente, en un piso tutelado. Si se lo dijera a mi madre no se asustar¨ªa. Me dar¨ªa consejos.

¡ªYo soy libre, pero tengo un poco de ayuda. Y tel¨¦fonos de urgencia.

¡ªPor la noche repaso lo que he hecho durante el d¨ªa. A veces, rezo: doy gracias por tener a mi madre, el trabajo, mis amigos. No tengo padre, as¨ª que no puedo echar de menos lo que no he tenido. Pero tengo a Jos¨¦, el marido de esta amiga que me va a acompa?ar a Melendi, y yo le considero mi papi. Para qu¨¦ quiero m¨¢s.

Melani ha logrado trabajar, amar, ser querida. Me ha dado sabios consejos para sobrellevar la inseguridad. Pero no todos estamos dotados de su alegr¨ªa y de ese tozudo af¨¢n de superaci¨®n.