'Pies de azafata': as¨ª sufren el sexismo de tener que llevar tacones en su trabajo

La primera vez que vi a una amiga presentarse para ser azafata de Iberia se pidi¨® un taxi para recorrer 700 metros por miedo a que se le arrugara la falda. Estaba nervios¨ªsima por si no daba una imagen est¨¦ticamente perfecta. Consigui¨® la beca y tras un a?o ejerciendo la profesi¨®n le pregunt¨¦ qu¨¦ tal le iba, su contestaci¨®n fue rotunda ¡°vengo del pod¨®logo porque ya tengo pies de azafata¡±.

A rasgos generales, el protocolo que imponen a las TCP (Tripulante de cabina de pasajeros), es el siguiente: para la mujer es obligatorio, llevar base de maquillaje, r¨ªmel, pintalabios, y u?as perfectamente cuidadas. El pelo ha de ir recogido con un mo?o o coleta si la largura llega a tocar los hombros. Y en cuanto al color, solo pueden utilizar tonos muy discretos o el corporativo de la empresa. Claro est¨¢ que estas directrices var¨ªan dependiendo de la aerol¨ªnea. En Alemania o Noruega, por ejemplo, no te obligan a llevar esos tipos de colores ni te indican de qu¨¦ manera debes cortarte el pelo. E.S.H (21 a?os), que no ha querido revelar su identidad por miedo a perder su puesto, es auxiliar de vuelo y cuenta que ¡°en Emirates, una de las compa?¨ªas m¨¢s restrictivas, exigen a las azafatas que se depilen los brazos,¡± sentencia.?

EL TAC?N

Seg¨²n el protocolo de uniformidad de aerol¨ªneas como Iberia, durante el vuelo las azafatas tienen que calzar tac¨®n bajo (de 3 a 5 cm) y para embarcar, desembarcar y caminar por la terminal, el alto (de 5 a 10 cm). ¡°Estamos acostumbradas a tener los pies llenos de durezas, de ir al pod¨®logo de lo mal que los tienes. De hecho, estamos acostumbradas a sufrir. Vivimos acostumbradas a ponernos pa?os de agua y sal despu¨¦s de trabajar¡± a?ade E.S.H sobre la imposici¨®n del tac¨®n para trabajar. L.P.L de 54 a?os, y con m¨¢s de quince a?os de experiencia como jefa de cabina y actual profesora de aviaci¨®n, alega que el calzado es el mayor problema de las azafatas. ¡°No te puedes ni imaginar lo que sufren los juanetes, las u?as, los callos, las durezas, eso es lo que hace que tu trabajo sea mucho m¨¢s dif¨ªcil. Conozco a muchas compa?eras que han tenido que llegar a operarse. Y lo importante ya no es solo el tac¨®n, es la punta de ese tac¨®n, que te obligan a que sea redonda y estrecha argumentando que el zapato tiene que ser bonito. Estoy segura de que si este problema lo tuvieran los hombres ya estar¨ªa cambiado.¡±

L.P.L prosigue su explicaci¨®n: ¡°Te voy a poner un ejemplo que lo demuestra. Cuando yo volaba hace quince a?os la compa?¨ªa nos daba los zapatos, y mientras nosotras nos quej¨¢bamos de lo dur¨ªsimos e inc¨®modos que eran, a los azafatos y pilotos les daban los famosos Sebagos, zapatos caros, buenos y c¨®modos¡±. A?ade molesta. ¡°Es jodido, pero acabas acostumbr¨¢ndote porque no te dan una m¨ªnima posibilidad de reivindicar nada. Estamos ah¨ª para ser y estar perfectas.¡± Responde E.S.H. y contin¨²a inmediatamente ¡°Yo ser¨ªa sindicalista y le dar¨ªa voz a este sexismo si tuviera la opci¨®n de formar parte del sindicato de trabajadoras, si tuviera un contrato fijo. El problema es que la mayor¨ªa de contratos que se hacen en aviaci¨®n son en pr¨¢cticas o periodos cortos de tiempo. Si te quejas te echan. Punto¡± asegura decidida la m¨¢s joven de las entrevistadas.?

LAS CAUSAS DE LLEVAR TAC?N

Miguel ?ngel Ruiz ?lvarez, pod¨®logo de la Cl¨ªnica del Pie la Eria (Oviedo)

El tac¨®n, que provoca que se estilicen visualmente las piernas, causa ciertas consecuencias: en cada pisada la presi¨®n se distribuye a lo largo del pie. A m¨¢s altura de tal¨®n m¨¢s se focaliza la presi¨®n en la zona del antepi¨¦ y no se reparte entre el tal¨®n y el antepi¨¦, lo cual aumenta la probabilidad de sufrir lesiones en articulaciones metatarsofal¨¢ngicas y en los dedos.

Adem¨¢s, el calzado estrecho (todo zapato de tac¨®n alto es estrecho) hace que las articulaciones del antepi¨¦ no tengan la libertad necesaria para hacer sus movimientos, lo que puede producir alteraciones articulares como el hallux valgux (juanete), dedos en garra¡­ Conclusi¨®n, el tac¨®n estrecho y fino hace que el tobillo est¨¦ inestable, con la consiguiente posibilidad de sufrir esguinces de tobillo y problemas musculares varios, como puede ser la retracci¨®n (acortamiento) del tend¨®n de aquiles y los problemas consiguientes en la musculatura trasera de la pierna (soleo y gemelos). Y si adem¨¢s sumamos que el calzado tiene suela fina y dura (de cuero normalmente) no ayuda en la amortiguaci¨®n necesaria que se necesita en cada paso y se sufre un exceso de presi¨®n en la zona del antepi¨¦ (la misma que se ve afectada por la altura del tac¨®n).

LA ?EVOLUCI?N? EN EL MUNDO DE LA AVIACI?N

Seg¨²n cuentan las TCP m¨¢s veteranas, el mundo de la aviaci¨®n hace treinta a?os era menos exigente que ahora, pero en cuanto a la est¨¦tica de la mujer, los requisitos no han cambiado mucho. ¡°Salvo porque antes se ped¨ªa que fueran casi modelos, el resto de exigencias es igual. Sin embargo, y afortunadamente, ahora te piden que est¨¦s mucho m¨¢s formada, que tengas m¨¢s cursos, hay pruebas m¨¢s duras de nataci¨®n, de idiomas¡­¡° explica L.P.L.?

Al preguntarles si no les parece el momento de que este protocolo tan riguroso cambie, la mayor¨ªa saca a relucir el modo en el que funcionan los procesos de selecci¨®n en Espa?a. ¡°Muchos creen que vamos por delante, pero somos uno de los pocos pa¨ªses, junto con las compa?¨ªas asi¨¢ticas como Emirates o Qatar Airways, que sigue pidiendo foto de cuerpo entero y carnet en los curr¨ªculos?para poder acceder a la entrevista. Y si no les gustas f¨ªsicamente no te llaman, da igual los idiomas que sepas y los cursos que hayas hecho. Claro est¨¢, esto no ocurre en EEUU ni en el resto de Europa¡± argumenta E.S.H, la azafata que acaba de aterrizar en el mundo de la aviaci¨®n.

T.L.O (34 a?os) no est¨¢ segura de que un sindicato defendiera la situaci¨®n del protocolo est¨¦tico. ¡°En la mayor¨ªa de los casos, la gente que est¨¢ detr¨¢s, que es la que ha mamado ese sexismo, lo ve normal y quiere lo mejor para la aerol¨ªnea, y lo que buscan es la perfecci¨®n. Yo creo que el sindicato no afectar¨ªa porque estar¨ªa formado por los mismos que te llaman la atenci¨®n por llevar una u?a mordida, o un anillo de m¨¢s en el dedo. Tienen una mente muy antigua," aclara muy segura.

DIFERENCIAS ENTRE HOMBRES Y MUJERES

¡°Hay compa?¨ªas, por ejemplo, en las que a los hombres no se les permite llevar tup¨¦, pero ninguna les obliga a utilizar corrector de ojos si tienen ojeras o mala cara", discrepa M.F.J (27 a?os). Todas las entrevistadas asumen que, aunque los azafatos est¨¦n sometidos al protocolo est¨¦tico, (zapatos lustrosos, barba rasurada y manicura perfecta) la mujer siempre sale perdiendo tanto en la comodidad como en lo econ¨®mico.?

¡°Una azafata no solo se maquilla en su casa y ya est¨¢. Cuando vas a aterrizar t¨² tienes que estar como si acabaras de subir al avi¨®n, sino, te ponen un parte y eso llega a la jefatura de auxiliares y tu puesto de trabajo est¨¢ en juego. La gente no lo piensa, pero este ejercicio supone un gasto econ¨®mico muy gordo, que no te lo pagan ni lo tienen en cuenta.¡± Contin¨²a M.F.J. ¡°Lo mismo ocurre con las medias, que tienen que ser de un modelo espec¨ªfico. Si se te rompe una, tienes que llevar siempre de repuesto, porque no puedes ir con ninguna imperfecci¨®n. Y tampoco te lo pagan, claro," asegura con un enfado m¨¢s que notable.

Al hombre que tiene una barba espesa s¨ª que le obligan a afeitarse durante el servicio cuando le aparece una leve sombra en el ment¨®n, al igual que deben tener una manicura impecable. Aun as¨ª, L.P.L comenta que ¡°ha habido alumnos que se han dejado de morder las u?as para entrar en una compa?¨ªa a¨¦rea, pero un chico que se haya mordido un poco m¨¢s de lo permitido, no le pasa nada, una mujer con las u?as mordidas tambi¨¦n levemente, no podr¨ªa volar. No nos hacen fijarnos tanto en las manos de los hombres,¡± a?ade y recuerda otro caso que a su parecer fue injusto, "ahora que me preguntas, a una chica le llegaron a llamar la atenci¨®n porque el roce de sus medias hacia ruido al pasar por el pasillo del avi¨®n. Dec¨ªan que hab¨ªa engordado y le ri?eron por eso," concluye disgustada.?

SEXISMO Y JERARQU?A

¡°Espero que respetes el anonimato¡± me dice M.F.J (30 a?os) antes de contestar la pregunta. ¡°Yo no he visto un sexismo tan exagerado por parte de clientes a azafatas, pero te podr¨ªa dar mil ejemplos de pilotos a TCP.¡± La entrevistada imita la voz de uno que se tiene por un?mandam¨¢s. ¡°En la cabina de mando solo entran chicas, a m¨ª el caf¨¦ no me lo pone ning¨²n hombre, me lo pone una chica¡± y as¨ª todo el rato¡±. Sin tiempo a realizar la siguiente cuesti¨®n, sigue con el discurso: ¡°Tambi¨¦n me he encontrado con pilotos hom¨®fobos que ped¨ªan que los azafatos (con posibilidad de ser homosexuales, seg¨²n ellos) se situaran en la parte trasera del avi¨®n para no estar cerca. ¡°Aqu¨ª delante solo chicas¡± dec¨ªan. De hecho, cuando se puso la norma de que las mujeres pudiesen llevar pantalones muchos pilotos se opusieron," sentencia.

Por parte de los pasajeros tambi¨¦n hay cierta falta de educaci¨®n, cuenta E.S.H:?¡°Hace un par de meses un hombre pasajero de la clase business me dio un cachete en el culo con el peri¨®dico para pedirme un caf¨¦. Me qued¨¦ flipando, la verdad.¡± Adem¨¢s de estas inc¨®modas situaciones, las entrevistadas declaran que siempre tiene que soportar por parte de los pasajeros comentarios del tipo: ¡°En esta compa?¨ªa las azafatas son muy guapas, he volado en otras que eran horrorosas, y la verdad es que prefiero volar aqu¨ª¡±. ¡°Los hombres creen que eso es algo bonito¡±, dice L.P.L, la auxiliar de vuelo que ahora ejerce de profesora. ¡°Y por lo que me cuentan alumnas m¨ªas a d¨ªa de hoy, los hombres se creen con el derecho de llamarte por ¡°guapa¡±, dejarte notas con mensajes como ¡°qu¨¦ buena est¨¢s¡± o que les des el n¨²mero de tel¨¦fono. Y no es una situaci¨®n aislada, es un problema de la educaci¨®n que ha recibido el hombre¡±. Son muchos los casos similares a estos. Uno de los m¨¢s famosos fue el comentario de un pasajero en una aerol¨ªnea argentina quej¨¢ndose del ¡°bajo nivel (f¨ªsico) de las azafatas".

Para terminar, las azafatas subrayan el hecho de que en la aviaci¨®n la jerarqu¨ªa mande en todo momento. ¡°Nosotras (azafatos tambi¨¦n) tenemos que estar pidiendo permiso por todo, incluso para abrir y cerrar las puertas de la furgoneta que nos traslada," apunta A.G.A (35 a?os). Defienden que ¡°aunque seamos mu?ecas andantes, porque nos hacen estar as¨ª, no estamos para servir caf¨¦s, ni para decorar el avi¨®n, estamos para evacuarlo, para actuar lo m¨¢s r¨¢pido posible e intentar salvar la vida a las m¨¢s de doscientas personas que llevamos abordo. Estamos por la seguridad, no somos camareras que vamos especialmente guapas porque s¨ª, que es lo que parece.¡±