El castillo de Chindasvinto
?Existe realmente este siniestro lugar evocado por un conocido poema?
Un conocido poema humor¨ªstico de Joaqu¨ªn Abati, El conde Sisebuto, empieza con los versos: ¡°A cuatro leguas de Pinto/ y treinta de Marmolejo/ existe un castillo viejo/ que edific¨® Chindasvinto¡±. ?Podr¨ªan deducir mis sagaces lectores y lectoras si tal castillo existe realmente?
Aunque no lo parezca, esta pregunta tiene que ver con el m¨¢s sencillo de los acertijos propuestos la semana pasada: si tres planetas -A, B y C- distan respectivamente 10, 20 y 30 a?os luz de la Tierra, lo m¨¢s cerca que pueden estar dos de ellos entre s¨ª es 10 a?os luz (A y B o B y C si est¨¢n alineados con la Tierra y en la misma direcci¨®n), y lo m¨¢s lejos, 50 a?os luz (B y C alineados con la Tierra y en direcciones opuestas).
El otro problema, el de los recorridos m¨ªnimo y m¨¢ximo para visitar los tres exoplanetas, tiene una parte f¨¢cil y otra no tanto. El recorrido ser¨¢ m¨ªnimo si los tres planetas est¨¢n alineados con la Tierra y en la misma direcci¨®n, pues al ir al m¨¢s alejado pasaremos por los otros dos y ¡°solo¡± tendremos que recorrer 30 a?os luz (y otros tantos de vuelta, claro, si queremos volver a casa). Hallar la disposici¨®n de los planetas que dar¨ªa lugar a un recorrido m¨¢ximo es bastante m¨¢s complicado, y algunos lectores a¨²n est¨¢n en ello (ver comentarios de la semana pasada).
Un viaje largo, pero confortable
Sigamos con el fascinante tema de los exoplanetas vecinos. ?Cu¨¢nto tardar¨ªa una astronave en llegar al planeta A de nuestro acertijo anterior, el que solo est¨¢ a 10 a?os luz, acelerando a 1 G (9,8 m/s2)? Para los que no recuerden sus clases de f¨ªsica de secundaria, eso significa que cada segundo su velocidad aumentar¨ªa en 9,8 metros por segundo (igual que un cuerpo en ca¨ªda libre). La elecci¨®n de esa aceleraci¨®n no es arbitraria, pues se traducir¨ªa en una gravedad artificial igual a la terrestre, cosa muy conveniente a todos los efectos. Una aceleraci¨®n mayor acortar¨ªa el viaje, pero ser¨ªa sumamente inc¨®moda para los viajeros (o incluso gravemente perjudicial si se mantuviera durante mucho tiempo). Los aviones de reacci¨®n aceleran a veces a 5 G o m¨¢s, pero solo durante unos segundos, pues en esos momentos el piloto es aplastado contra su asiento como si su peso corporal se hubiera quintuplicado.
Carlo Frabetti es escritor y matem¨¢tico, miembro de la Academia de Ciencias de Nueva York. Ha publicado m¨¢s de 50 obras de divulgaci¨®n cient¨ªfica para adultos, ni?os y j¨®venes, entre ellos Maldita f¨ªsica, Malditas matem¨¢ticas o El gran juego. Fue guionista de La bola de cristal.
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