La ciudad donde se vive sin dinero cumple 50 a?os
Auroville, un ¨²topico asentamiento en India, es hoy para muchos un perfecto experimento de convivencia y para otros, un lugar inseguro convertido en parque tem¨¢tico de turistas
Una sociedad sin polic¨ªa, en la que no se maneja el dinero, no existen las religiones y cada uno aporta su habilidad a la comunidad. Estos fueron los pilares sobre los que en 1968 se instal¨® en la costa de Tamil Nadu (India) un grupo de personas dispuestas a llevar adelante su propia utop¨ªa, una ciudad experimento. Eran personas libres, cuyas vidas ser¨ªan regidas por doce virtudes: igualdad, generosidad, receptividad, perseverancia, humildad, sinceridad, gratitud, aspiraci¨®n, coraje, bondad, paz y progreso. La llamaron Auroville, est¨¢ a punto de cumplir 50 a?os y a¨²n anda lejos de lograr el ideal con el que naci¨®.
El objetivo inicial era construir una ciudad para 50.000 personas, aunque actualmente sus residentes ascienden a 6.000, de 36 nacionalidades distintas, la mitad de ellos indios. Solo 2.700 tienen derecho a voto. Sus habitantes aseguran que ha logrado ser un lugar autosuficiente gracias al turismo, la exportaci¨®n de alimentos y productos artesanales, as¨ª como la implantaci¨®n de sus proyectos de m¨²sica y arquitectura en el exterior.
A esto hay que a?adir un extenso listado de apoyos internacionales a lo largo de su historia, entre ellos el de la Comisi¨®n Europea o el Gobierno de Navarra, la UNESCO y el Gobierno indio, que les proporciona una subvenci¨®n anual, seg¨²n documentaci¨®n aportada por los miembros de la comunidad.
El objetivo inicial era construir una ciudad para 50.000 personas, actualmente sus residentes ascienden a 6.000
Auroville se fund¨® como una meca de la forma de vida alternativa. En las escuelas se ense?a en funci¨®n de lo que el ni?o quiera aprender esa semana, todo lo que se consume es org¨¢nico, no se vende alcohol, cuenta con una de las cocinas con energ¨ªa solar m¨¢s grandes del mundo, todo es gratuito (desde la lavander¨ªa y jardiner¨ªa hasta cursos de filosof¨ªa y masajes)... Las decisiones se toman de forma consensuada a trav¨¦s de tres ¨®rganos ciudadanos.
El pueblo no tiene calles de asfalto y la arquitectura se organiza en torno a un gran templo central destinado a la meditaci¨®n (Matrimandir). Entre los vecinos se respira cierto aire de culto a los fundadores, Sri Aurobindo y Mirra Alfassa. Se refieren a ella como "la madre" y en todas las casas se encuentran sus fotograf¨ªas y libros escritos por ambos.
Cada a?o se aceptan unas 120 personas incluidos miembros de la casta de los dalit, entre las m¨¢s bajas, condenados de nacimiento a vivir repudiados por la sociedad. Cuando los habitantes mueren, son llevados a un tanatorio llamado Farewell (despedida) en donde el cad¨¢ver queda en una urna de cristal hasta que empieza a descomponerse, solo entonces el alma est¨¢ preparada para irse, dicen.
En todas las casas se encuentran fotograf¨ªas de los fundadores y libros escritos por ambos
La estancia m¨ªnima del visitante es de dos meses si se accede a uno de los proyectos y no todo el mundo llega a adaptarse. Seg¨²n cuenta Fabienne, que lleva 40 a?os en la comunidad, es frecuente encontrarse con personas y grupos que llegan con entusiasmo y abandonan pronto y otras que no son aceptadas por la comunidad porque no cumplen con los requerimientos (no contribuyen laboralmente, alteran el orden social...). Y que cuando se entra, el problema es c¨®mo salir de all¨ª. Despu¨¦s de vivir durante a?os sin generar dinero, si uno decide marcharse, no cuenta con recursos para comprar ni un billete. Tambi¨¦n se han dado muchos casos de personas que abandonan Auroville y tras unos a?os, regresan, incapaces de integrarse socialmente en ning¨²n otro lugar exterior.
La libertad que les caracteriza y de la que hacen gala es precisamente fuente de sus problemas. Al no haber querido en todos estos a?os delimitar concretamente las fronteras, decenas de restaurantes, centros de yoga y otros negocios hacen uso del nombre Auroville para enga?ar a los turistas. Sus habitantes est¨¢n tratando de resolver este asunto por la v¨ªa judicial.
Esta falta de fronteras (32 entradas y ninguna valla) tambi¨¦n ha generado problemas de inseguridad. Varias mujeres han denunciado ataques por parte de habitantes de los pueblos vecinos contrarios al modo de vida de la comunidad. Tambi¨¦n son frecuentes los robos a turistas. Adem¨¢s, la lista de espera para vivir en el asentamiento es de dos a?os por la falta de viviendas y la sensaci¨®n de residir en un parque tem¨¢tico es constante por su relativa dependencia del turismo.
"Auroville no es un refugio, es un peque?o laboratorio para trabajar con las enfermedades del ser humano y buscar una cura. Todo lo que sucede en el mundo exterior sucede tambi¨¦n aqu¨ª" explica Joseba, un vasco que lleva 22 a?os en la ciudad y uno de los 50 espa?oles que all¨ª residen. Es uno de los directores del proyecto Sacred Groves, en el que participan de manera voluntaria arquitectos de todo el mundo experimentando con nuevas formas de construcci¨®n ecol¨®gica y sostenible. Los espa?oles Joan y Aloka imparten la ¨²nica asignatura obligatoria en las escuelas, ATB (despertar la conciencia a trav¨¦s del cuerpo), en la que se aprende a identificar qu¨¦ emoci¨®n se est¨¢ sintiendo y en qu¨¦ parte corporal se manifiesta. A partir de los 16 a?os los estudiantes eligen entre seguir estudios homologados o una ense?anza basada en oficios y artes.
Varias mujeres han denunciado ataques por parte de habitantes de los pueblos vecinos
Muchos de los proyectos que desarrolla la comunidad se exportan. En el laboratorio de m¨²sica, uno de los instrumentos estrella es la nidra anantar, una cama de masaje en cuya parte inferior hay instaladas 50 cuerdas, de modo que cuando alguien las pulsa por debajo, la persona que est¨¢ tumbada recibe los beneficios de la vibraci¨®n. Tambi¨¦n cuentan con el Centro de Educaci¨®n Dental y Acci¨®n rural (ADCERRA) en el que forman a mujeres d¨¢lit para que aprendan a eliminar caries de forma manual a los ni?os de sus comunidades, dado que en un entorno tan pobre, este es el ¨²nico servicio al que puede optar (seg¨²n el informe demogr¨¢fico sobre odontolog¨ªa de la Revista India de Ciencias Odontol¨®gicas, el 70% de los indios viven en ¨¢reas rurales sin servicios odontol¨®gicos y se estima que s¨®lo la mitad de la poblaci¨®n del pa¨ªs utiliza cepillo de dientes).
A la gala de inauguraci¨®n de la comunidad, asistieron 5.000 personas, entre las que se encontraban representantes de 124 pa¨ªses que depositaron all¨ª un pu?ado de tierra de su lugar de procedencia. Para su quincuag¨¦simo aniversario, en 2018, se repetir¨¢ este mismo ritual y contar¨¢n con la asistencia del presidente de India, Narendra Modi. El asentamiento mantiene muchos de los frentes que abrieron hace 50 a?os y est¨¢ todav¨ªa muy lejos de la utop¨ªa.
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