¡°En ?frica, la pobreza es causa y consecuencia de la discapacidad¡±

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Un d¨ªa, la peque?a Yetnebersh Nigussie vislumbr¨® las hebras del mundo que le hab¨ªa tocado vivir. Ocurri¨® a los 12 a?os y acababa de ingresar en el instituto Menelik II de Addis Abeba, en su Etiop¨ªa natal. De ni?a, en su pueblo, en la escuela para ciegos donde curs¨® los primeros estudios, siempre dependi¨® de los otros, necesit¨® de ayuda para coger un autob¨²s o caminar entre la gente. Pero ese d¨ªa, en la ciudad, cuando m¨¢s lo necesitaba, se sinti¨® completamente sola. Desde entonces hasta ma?ana viernes 1 de diciembre, cuando reciba en Estocolmo el Premio Nobel Alternativo, habr¨¢n pasado 27 a?os en los que esta brillante abogada y activista no ha permitido ni un solo instante que la ceguera le robase sus sue?os.

¡°En mi historia hay tanta luz como oscuridad¡±, asegura Nigussie. Nacida en 1982 en el peque?o pueblo et¨ªope de Amhara Saint Wollo, una meningitis que padeci¨® a los cinco a?os le arrebat¨® la visi¨®n para siempre pero, como ella misma suele decir, tambi¨¦n le permiti¨® escapar del previsible destino de un matrimonio precoz. ¡°No hab¨ªa atenci¨®n m¨¦dica en 400 kil¨®metros a la redonda y mi familia tard¨® tres a?os en descubrir que ya no iba a recuperar la vista¡±, explica. ¡°En la comunidad nada era accesible para m¨ª, ni la escuela, ni los transportes, nada. As¨ª que me enviaron a un colegio cat¨®lico para personas ciegas a 800 kil¨®metros de distancia¡±.

El contacto con otros ni?os en circunstancias parecidas, el est¨ªmulo de las monjas que dirig¨ªan la escuela y un af¨¢n de superaci¨®n a prueba de bomba la convirtieron en una estudiante brillante. Por eso, cuando lleg¨® al instituto inclusivo Menelik II y sinti¨® el rechazo de sus nuevos compa?eros, lejos de arredrarse empez¨® a destacar por sus excelentes resultados. Y las barreras cayeron y los amigos empezaron a florecer. Pero la ceguera era solo uno de sus desaf¨ªos.

¡°Aunque las mujeres somos la mitad de la poblaci¨®n de mi pa¨ªs, estamos escasamente representadas en los ¨¢mbitos pol¨ªtico, laboral y econ¨®mico. Todav¨ªa hay muchas ni?as que son obligadas a casarse entre los 10 y los 13 a?os, pr¨¢cticas tradicionales da?inas persisten en zonas rurales pese a su prohibici¨®n y la violencia de g¨¦nero est¨¢ muy extendida frente a una respuesta judicial muy lenta¡±, asegura Nigussie, quien, tras licenciarse en Derecho y obtener una maestr¨ªa en Trabajo Social en la Universidad de Addis Abeba, ha hecho de la lucha por los derechos de la mujer y de las personas con discapacidad su personal caballo de batalla.

Las mujeres con discapacidad sufren un alto riesgo de violencia de g¨¦nero, abusos sexuales, malos tratos y explotaci¨®n

En sus a?os universitarios lider¨® el consejo estudiantil, cofund¨® el movimiento contra el SIDA y cre¨® la Asociaci¨®n Femenina de Estudiantes. Ha militado en m¨¢s de 20 colectivos, incluida la Red Nacional de Acci¨®n por la Discapacidad de Etiop¨ªa y la Asociaci¨®n Nacional de Mujeres Ciegas, de la que ha sido su presidenta. ¡°En muchos pa¨ªses africanos se proh¨ªbe a las personas con discapacidad disfrutar de derechos como casarse, abrir una cuenta bancaria, votar, trabajar o recibir educaci¨®n. Pero son las mujeres con discapacidad las que deben hacer frente a mayores desaf¨ªos, tanto en la esfera p¨²blica como en la privada, porque adem¨¢s sufren un alto riesgo de violencia de g¨¦nero, abusos sexuales, malos tratos y explotaci¨®n¡±, explica.

Convencida de la necesidad de nuevos enfoques en el abordaje de la discapacidad, en 2005, Yetnebersh Nigussie fue una de las grandes impulsoras del Centro Et¨ªope para la Discapacidad y el Desarrollo (ECDD), una organizaci¨®n que huye de la visi¨®n asistencialista y centra su trabajo en promover la inclusi¨®n tanto en la sociedad como en las esferas pol¨ªtica y judicial. Como su presidenta, cargo que ostent¨® entre 2011 y 2015, el ECDD se convirti¨® en un referente en Etiop¨ªa y un ejemplo para otros pa¨ªses africanos con acciones como la permanente presi¨®n y asesoramiento para la accesibilidad de los edificios y medios de transporte en su pa¨ªs. Consciente del enorme trabajo que queda por hacer, no se olvida de las duras condiciones de vida a las que deben hacer frente los discapacitados en el continente.

¡°Muchos discapacitados en ?frica viven en niveles extremos de pobreza y son sometidos a constantes violaciones de sus derechos, discriminaci¨®n sist¨¦mica, exclusi¨®n social y prejuicios. En mucha mayor medida que en el mundo desarrollado. De hecho, la pobreza es el denominador com¨²n de las personas con discapacidad en Etiop¨ªa y suele ser tambi¨¦n su origen. La pobreza es a la vez causa y consecuencia de la discapacidad. Con el 84% de la poblaci¨®n en zonas rurales es l¨®gico pensar que la mayor¨ªa de ellos vive en dichas ¨¢reas, donde los servicios b¨¢sicos son limitados y a menudo inaccesibles. Adem¨¢s, la posibilidad de rehabilitaci¨®n se concentra en los centros urbanos. Como resultado, la inmensa mayor¨ªa no tiene acceso a servicios que podr¨ªan reducir su dependencia, facilitarles una vida autosuficiente y una escapatoria a la pobreza¡±, asegura con claridad.

Este viernes en Estocolmo, Nigussie recibir¨¢ junto a otros tres galardonados el conocido como Premio Nobel Alternativo concedido por la Fundaci¨®n Right Livelihood Award por ¡°su inspiradora labor de promoci¨®n de los derechos y la inclusi¨®n de personas con discapacidad, fomentando el desarrollo de su potencial y un cambio de mentalidad en nuestras sociedades¡±, seg¨²n el fallo del jurado. Este galard¨®n vio la luz en 1980 y pretende honrar el trabajo de ¡°valientes que ofrecen soluciones visionarias y ejemplares a las causas profundas de los problemas globales¡±, tal y como asegura la organizaci¨®n.

Pese a la dimensi¨®n internacional de su labor gracias a su constante apoyo e incidencia en organismos como Naciones Unidas, Nigussie, casada y madre de dos hijos, sigue muy vinculada a Etiop¨ªa donde el trabajo por hacer es enorme. ¡°La educaci¨®n es el arma secreta para combatir toda forma de desigualdad. Los ni?os con discapacidad son excluidos con m¨¢s frecuencia de las escuelas debido a factores como centros inaccesibles, estigma y discriminaci¨®n¡±, a?ade. Pese a todo, es una firme defensora del potencial de todo ser humano con sus diferencias. ¡°Me gustar¨ªa enviar un mensaje a todos los ni?os y ni?as invidentes en el mundo. Les digo que la ceguera puede impedirte ver, pero nunca te detendr¨¢ para conseguir tus sue?os. Acepta la ceguera como una parte de la diversidad humana y sigue adelante con tu vida con determinaci¨®n, no permitas que te separe de aquello que quieres ser o pretendes alcanzar¡±.

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