La ¡®app¡¯ brasile?a con la que denunciar abusos y ataques a menores

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Hace cinco a?os Brasil se preparaba para algo muy gordo. Para tres cosas muy gordas, en realidad. En 2013 acogi¨® la Copa Federaciones, en 2014, el Mundial de f¨²tbol y en 2016, unos Juegos Ol¨ªmpicos. En semejante escenario y ante la avalancha de visitantes que estaba por llegar, Unicef se ali¨® con una peque?a empresa de software,?Ilhasoft, cuyo objetivo era "cambiar el mundo" y crearon Proteja Brasil, una aplicaci¨®n que permite identificar y denunciar abusos y ataques a menores. La herramienta est¨¢ directamente conectada con Dial 100, la l¨ªnea de tel¨¦fono de defensa de los derechos humanos del Gobierno Federal.

Entre las utilidades que proporciona est¨¢ la de indicar la ubicaci¨®n de lugares de inter¨¦s como, comisar¨ªas, juzgados de menores, embajadas o Ayuntamientos. El uso es totalmente an¨®nimo y ni Unicef, ni los creadores de la aplicaci¨®n tienen forma de conocer la identidad del usuario. Permite denunciar todo tipo de agresiones a los derechos de los menores: explotaci¨®n infantil, maltrato f¨ªsico y psicol¨®gico, abusos sexuales... Pero tambi¨¦n aquellos derivados del mundo digital, como el bullying y la pedofilia que se nutre de las redes sociales. El 80% de los j¨®venes entre 9 y 17 a?os tiene acceso a Internet, seg¨²n los datos recopilados por la organizaci¨®n. "Este proyecto se enmarca dentro de WePROTECT, una alianza internacional para frenar los abusos online", explica al otro lado del tel¨¦fono desde S?o Paulo la experta en protecci¨®n a la infancia de Unicef, Fabiana Gorenstein.

Arranc¨® de forma piloto en 2013, en 2014 se extendi¨® a todas las ciudades sede del Mundial de f¨²tbol y en 2016 ya funcion¨® a pleno rendimiento. En septiembre del a?o pasado, 51.000 usuarios se hab¨ªan descargado la aplicaci¨®n, que hab¨ªa registrado 692.680 interacciones, entre denuncias y consultas de informaci¨®n. Hoy ya va por 109.000 descargas. Esto es una constataci¨®n, defiende Gorenstein, de que la aplicaci¨®n ha dejado de ser un proyecto aislado para convertirse en una parte de las pol¨ªticas p¨²blicas del pa¨ªs en materia de defensa de los menores. "Quer¨ªamos avanzar gracias a la innovaci¨®n, ampliar la capacidad de denuncia y defensa de la infancia gracias a las nuevas tecnolog¨ªas", a?ade Gorenstein. La protecci¨®n de ni?os y adolescentes ha formado parte de la agenda pol¨ªtica en las ¨²ltimas legislaturas en el pa¨ªs sudamericano. Brasil cuenta desde 2014 con una normativa que proh¨ªbe totalmente los castigos f¨ªsicos en el ¨¢mbito dom¨¦stico y escolar.

Desde un principio se implicaron en este proyecto la ONG Cedeca (Centro de Defesa da Crian?a e do Adolescente Yves de Roussan), la asociaci¨®n brasile?a de jueces y fiscales y el propio Gobierno. Numerosos youtubers se prestaron para dar a conocer la herramienta. El objetivo estaba claro: que la poblaci¨®n supiese que ten¨ªa al alcance de la mano la posibilidad de defender los derechos de la infancia en un pa¨ªs en el que el 90% los ciudadanos se conecta a Internet a trav¨¦s del m¨®vil.

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