A la caza: Palomo abre la Semana de la Moda Masculina de Par¨ªs con una colecci¨®n (libremente) cineg¨¦tica
El dise?ador cordob¨¦s ha hecho un "ejercicio de contenci¨®n" con brocados del siglo XVII y una traca final con transparencias napole¨®nicas
Lo que nadie esperaba cuando Alejandro G¨®mez Palomo present¨® su primera colecci¨®n en un piso de Madrid ¨Ccon sus chavales maquillados vestidos de paje-odalisca de fantas¨ªa¨C es que dos a?os despu¨¦s este cordob¨¦s de 25 a?os abrir¨ªa los desfiles de hombre de Par¨ªs como parte del calendario oficial de la Federaci¨®n Nacional de la Costura. Que es precisamente lo que ha hecho la tarde del 16 de enero de 2018: Palomo Spain ha presentado su quinta colecci¨®n en el Studio Arpent, un espacio de la Place des Vosges, en el Marais.
La colecci¨®n estaba inspirada en la caza. ¡°Lo que hace mi padre cada fin de semana¡±, en sus palabras, pero en tiempos de PETA esto no era tanto una apolog¨ªa como una inspiraci¨®n libre. O la inspiraci¨®n de una inspiraci¨®n, porque no hab¨ªa rastro de fusiles ni cabezas de animal y s¨ª alusiones a la interpretaci¨®n que sus ¨ªdolos han hecho de la cineg¨¦tica. John Galliano, Alexander McQueen. Algo as¨ª como monter¨ªa couture: capelinas, sombreros de ala corta con una rama que se elevaba sobre la cabeza, un vestido-gabardina tornasolada que parec¨ªa un capote, y tweed (pero dorado, claro y parte de una chaqueta larga sin mangas).
S¨²mese todo lo anterior a la inspiraci¨®n pict¨®rica (los retratos de Vel¨¢zquez en la corte de Felipe IV) y el cuadro se convierte en una escena totalmente palomo: las capas, los jubones adamascados crop-top con calzoncillo a juego, los calzones sobre las piernas desnudas e incluso un vestido de malla como de princesa medieval habr¨ªan sido de tienda de disfraces si no hubieran estado infinitamente mejor hechos. La alta costura de las mujeres de antes, reproducida para el hombre libre de hoy.
A pesar de lo anterior, el espect¨¢culo fue un alarde de contenci¨®n, porque su ¨²ltimo desfile en Madrid, en el Hotel Wellington, fue una comuni¨®n bastante ruidosa. ¡°El hotel fue tan locura que tuve que parar, o la gente iba a pensar que esto era el cachondeo padre y que ser¨ªa as¨ª siempre. As¨ª que aqu¨ª, en Par¨ªs, hemos hecho un ejercicio de serenidad, de moda, que sea deseable al momento, que se pueda vender¡±. Alejandro acaba de grabar Maestros de la costura, un programa de talentos televisivo en el que hace de jurado que est¨¢ por estrenarse: ¡°Este desfile responde a un momento de explosi¨®n y de tener un poco de miedo a que la gente se piense que me voy a convertir en un personaje. Esto es m¨¢s sobrio, m¨¢s sereno y m¨¢s maduro¡±.
Para quien dude sobre la comercialidad de su propuesta, Palomo advierte que nadie le ha pedido que baje el tono para resultar m¨¢s accesible. ¡°Curiosamente, lo que m¨¢s se vende es lo m¨¢s fuerte. Quien quiere Palomo quiere color y lentejuelas, para comprarse una camisa blanca ya se va a Margiela¡±. ?l tambi¨¦n hace camisas blancas, ¡°pero con volantes¡±.
Los accesorios de piel est¨¢n hechos en Ubrique y la ropa, como siempre, en su taller de Posadas. Su padre, Norberto, sigue siendo el ¨²nico inversor, aparte de lo que Palomo ingresa con su nuevo trabajo en televisi¨®n. ¡°La federaci¨®n nos apoya, somos parte del recorrido, as¨ª que todo apunta a que seguiremos aqu¨ª. Este es el sue?o de todo dise?ador¡±. Puestos a so?ar, ?d¨®nde le gustar¨ªa desfilar en Par¨ªs? ¡°En la Place des Vosges. Pero en el medio¡±. Este desfile era sobrio, sereno y maduro, pero el traje del final, una capa transparente con enorme ribete de armi?o, estaba coronado por un gran sombrero con plumas de Napole¨®n.
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