¡®Juno¡¯ explora las entra?as de J¨²piter

Desde los tiempos de Galileo, los observadores de los astros han mirado a J¨²piter y se han preguntado qu¨¦ hay debajo de las espectaculares nubes que cubren su atm¨®sfera. El an¨¢lisis de los ¨²ltimos datos de la sonda Juno, publicados este mi¨¦rcoles, contribuyen a responder a esa pregunta y se acercan un paso a responder si, m¨¢s all¨¢ de su espesa envoltura de gases, hay un n¨²cleo que se form¨® a partir de rocas, una de las mayores inc¨®gnitas sobre el origen del Sistema Solar.

J¨²piter tiene m¨¢s masa que el resto de planetas del Sistema Solar juntos y da una vuelta sobre s¨ª mismo cada 10 horas. Con estas caracter¨ªsticas su campo gravitatorio deber¨ªa ser uniforme, pero no lo es, hay zonas donde el empuje del gigante es mayor y hasta ahora no se sab¨ªa por qu¨¦. Cuatro estudios publicados hoy en Nature aportan la explicaci¨®n a este fen¨®meno y lo utilizan para explicar c¨®mo es el interior del planeta.

Un primer estudio analiz¨® el retardo de las se?ales de radio que Juno env¨ªa a la Tierra en funci¨®n de su posici¨®n en su ¨®rbita sobre los dos polos. El experimento confirma la irregularidad del campo gravitatorio y sugiere que la explicaci¨®n est¨¢ en los vientos que circulan por la atm¨®sfera y que mueven una masa de gases tan enorme que ejerce su propio empuje gravitatorio sobre la nave. Esta atracci¨®n es cambiante, pues cada una de las bandas de nubes del planeta se mueve a una velocidad relativa diferente, de ah¨ª que la sonda sufra esos tirones observados.

En base a la intensidad de ese tira y afloja gravitatorio, otros dos trabajos calculan que los vientos jovianos no solo existen en las capas m¨¢s externas de la atm¨®sfera, sino que se extienden hasta una profundidad de 3.000 kil¨®metros, donde la presi¨®n es 100.000 veces mayor que en la superficie de la Tierra. Todo este caos de tormentas y vientos en esta primera capa de J¨²piter engloba solo el 1% de la masa total del planeta. El 99% restante es territorio desconocido. Es probable que bajo la atm¨®sfera haya una segunda capa hecha de hidr¨®geno y helio en estado l¨ªquido. Uno de los estudios publicados hoy apunta que los ¨¢tomos cargados en esta segunda capa ejercen una fuerza de rozamiento que reduce 10 veces la velocidad relativa de las nubes.

Los nuevos datos de Juno permiten inferir de qu¨¦ est¨¢n hechas las capas m¨¢s internas del planeta, aunque tambi¨¦n plantean nuevas preguntas, explica Yamila Miguel, astr¨®noma de la Universidad de Leiden y coautora de tres de los estudios publicados este mi¨¦rcoles. ¡°Con los datos obtenidos hasta ahora, ya sabemos que J¨²piter no es homog¨¦neo, que necesitamos una mayor concentraci¨®n de elementos m¨¢s pesados que hidr¨®geno y helio en el interior del planeta para explicar las observaciones¡±, explica esta investigadora de origen argentino. ¡°Esto descarta que el planeta no tenga un n¨²cleo, pero no nos dice la composici¨®n o el estado del mismo. En el centro del planeta, las temperaturas son cercanas a 20.000 grados y las presiones son unos 10 millones de veces la que tenemos en la superficie de la Tierra, as¨ª que pensar en un n¨²cleo en estado s¨®lido es mucho decir. Para conocer el estado de esa materia tendremos que realizar estudios de rocas y hielos en dichas condiciones de presi¨®n y temperatura¡±, a?ade.

Seg¨²n los modelos te¨®ricos, J¨²piter tendr¨ªa otras dos capas por conocer: un ¡°n¨²cleo difuso¡± con elementos m¨¢s pesados que el hidr¨®geno y el helio y el n¨²cleo propiamente dicho, hecho de elementos a¨²n m¨¢s pesados, explica Miguel. Uno de los objetivos declarados de Juno es determinar de qu¨¦ est¨¢ hecho ese n¨²cleo interno, lo que puede ayudar a comprender mejor el comportamiento de los gigantes gaseosos, que son muy abundantes dentro de nuestra galaxia, y determinar c¨®mo fueron los primeros momentos de formaci¨®n de nuestro Sistema Solar, ya que J¨²piter fue el primero en aparecer tras la formaci¨®n del Sol.

Juno ten¨ªa previsto seguir orbitando J¨²piter hasta Julio, cuando deb¨ªa modificar su trayectoria para suicidarse en su atm¨®sfera. Pero los responsables de la misi¨®n tienen previsto presentar a la NASA una ampliaci¨®n de la misi¨®n para seguir orbitando este lejano mundo hasta 2022.