Siete pasos para que el cine tambi¨¦n sea para los negros
Los cineastas afrodescendientes y de la di¨¢spora en Espa?a reclaman su sitio en la gran pantalla. Tienen su propia historia que contar y que ellos mejor que nadie para hacerlo
En una cafeter¨ªa frente al mar en Tarifa, en un debate despu¨¦s de una proyecci¨®n y compartiendo un almuerzo o una cerveza vespertina. En cada momento del d¨ªa, en cualquier lugar al azar, fueron escuchados durante una semana los cineastas que acudieron al Festival de Cine Africano Tarifa-T¨¢nger (FCAT), celebrado a principios de mayo de manera simult¨¢nea en estas dos ciudades separadas tan solo por 14 kil¨®metros de mar. Estos actores, actrices y directores, principales representantes de los artistas negros, quer¨ªan reivindicar que la negritud afrodescendiente y de la di¨¢spora debe tener m¨¢s visibilidad en el cine patrio. No en vano este colectivo suma m¨¢s de dos millones en Espa?a. Y lo lograron.
Porque estar, est¨¢n. Pero no siempre se les ve. "Si preguntas por el nombre de un actor negro en Espa?a, nadie sab¨ªa decir uno", asevera Armando Buika. "Sin embargo, las series como Cosas de casa y El pr¨ªncipe de Bel Air han sido las m¨¢s vistas en Espa?a", recuerda el actor, que ahora est¨¢ actuando en el musical El Guardaespaldas, durante una charla a las puertas del Teatro Alameda, epicentro de actividades del festival.
Precisamente por eso, este a?o el FCAT decidi¨® dedicarles su cartel, y ellos pasaron casi una semana participando en las mesas redondas del espacio llamado El ¨¢rbol de las palabras, concediendo entrevistas, repartiendo apretones de manos, estrechando amistades, visionando y comentando peliculas, propias y ajenas... Haciendo campa?a por su causa, en definitiva. Y no pararon. Ya en la recta fnal de su periplo, parece que el mensaje es claro: ellos existen, pero sienten que no se les da el espacio que les gustar¨ªa en el cine para contar sus cosas. ?Qu¨¦ cosas? y ?qu¨¦ se puede hacer para remediarlo? Igual que se quejan, aportan soluciones.
1. Crear agencias para negros
Adem¨¢s de por su trabajo en cine y teatro, Buika ha alcanzado reconocimiento desde que lanz¨® The Black View, una agencia que surge "por la necesidad de sentirnos representados y apoyados, de crear un espacio en el que los actores negros tuvi¨¦semos un lugar para reunirnos", comenta. Desde que nacieron, hace a?o y medio, han pasado muchas cosas importantes: "Lo primero ha sido sacar este debate a la calle. Siendo negros y espa?oles ?tenemos las mismas posibilidades que el resto de actores no negros?". Buika asegura que la respuesta ha sido incre¨ªble porque la mayor¨ªa de la poblaci¨®n blanca interpelada no era consciente de este problema. Y ahora, al menos, el tema est¨¢ sobre la mesa.
Otra de las nuevas agencias pensadas por y para este colectivo es la de Will Shepard, el actor que interpreta a Kaled en la serie Mar de pl¨¢stico de Netflix. Milit¨® en The Black View en sus inicios y posteriormente fund¨® la suya, Limbo. "La hice para quienes no tienen muchas posibilidades, tambi¨¦n asi¨¢ticos y musulmanes. Son j¨®venes que se juntan para trabajar, mostrar talento lejos de lo que solemos ver todos los d¨ªas en televisi¨®n", explica.
Y quien no funda su propia compa?¨ªa de actores, decide ponerse a escribir sus propias historias. El nombre de la actriz Farah Hamed suena: fue candidata a un premio Goya en 2009 como mejor actriz revelaci¨®n por su papel en Retorno a Hansala. Ella act¨²a, canta, baila, escribe y dirige. Y, de paso, cocina, tal y como demuestra en su mon¨®logo entre fogones Tajine, que represent¨® en el Mercado Central de Tarifa. Pero, cuando buscaba un papel, siempre encontraba lo mismo: "Mujer, ¨¢rabe... no salimos de otra cosa. Mi madre no se ha puesto el velo en su vida, mi abuelo era m¨¢s abierto que muchos j¨®venes de hoy en d¨ªa y, sin embargo, seguimos teniendo la visi¨®n de la mujer ¨¢rabe sumisa", se queja. A Hamed le encanta, dice, trabajar como actriz, pero solo consegu¨ªa papeles con los que no se sent¨ªa identificada. "Decid¨ª empezar a contar historias porque en el cine no exist¨ªan las mujeres que yo conozco. Necesito empezar a tomar las riendas porque no quiero esperar a que venga nadie a salvarme". Y as¨ª, adem¨¢s de Tajine, ahora dirige e interpreta Diario de una puta y poeta y en octubre rodar¨¢ su primer cortometraje.
2. Aprender a decir que no
"Suele pasar y me ha pasado que me cogen para un papel y est¨¢ todo un texto escrito sobre un personaje que viene de ?frica, o que es negro y que est¨¢ en Espa?a. Te pones a lee e identificas que no se sostiene el personaje y tiende a ser plano. Como actor negro, tienes una dificultad, que es defender a un personaje que ha sido escrito desde los ojos de otro", describe la actriz y cantante Astrid Jones.
M¨¢s que quedarse sin trabajo por rechazar un papel, a la actriz Astrid Jones le da m¨¢s miedo que el mundo la vea como algo con lo que no se siente identificada
Ante situaciones como las que relata Jones, saber decir que no a personajes que perpet¨²an los estereotipos y una visi¨®n ¨²nica de los hombres y mujeres negros es un paso importante. "La primera vez que dije no a un personaje con el que no me sent¨ªa identificado porque era denigrante para mi raza, crec¨ª como persona y como actor", sentencia Buika durante una de las mesas redondas de El ¨¢rbol de las palabras. Sus compa?eros de tertulia afirman con la cabeza, pero otros dudan. Y es Luc¨ªa Mbom¨ªo, presentadora TVE1 y moderadora del debate, quien hace la pregunta que seguro muchos piensan: "?Y no es complicado rechazar un papel cuando en este sector ya hay de por s¨ª pocas oportunidades?". Jones es tan contundente y clarificadora que arranca los aplausos del p¨²blico: "Me da m¨¢s miedo que el mundo me vea como algo con lo que no me siento identificada. Estar¨ªa siendo inconsecuente con mi realidad y la de muchas otras personas".
3. Poner freno al whitesplaining
Mansplaining es un neologismo angl¨®fono formado por las palabras man (hombre) y explain (explicar) que se populariz¨®? en 2008 tras ser utilizado por Rebeca Solnit en su art¨ªculo Los hombres me explican cosas. Sirve para definir cuando un hombre explica a una mujer algo de una manera considerada como condescendiente o paternalista. A partir de este t¨¦rmino surgi¨® Whitesplaining, que es el mismo comportamiento pero dirigido hacia una persona negra o de otras etnicidades por parte de un blanco. Para Jones, es importante insistir en que los negros deben explicar qui¨¦nes son y c¨®mo ven el mundo. "Empecemos a tomar esa responsabilidad desde nuestro arte y nuestro talento; es necesario formar parte de la visi¨®n ¨²nica que se desprende desde el arte, sobre todo cuando se nos presenta desde personas que desconocen la diversidad y complejidad de nuestra realidad. Es importante que empecemos a contar qui¨¦nes somos respecto a los dem¨¢s, c¨®mo vemos a los dem¨¢s y qu¨¦ nos pasa", anima.
Palmeras en la nieve hubiera sido muy distinta si nos hubieran preguntado
Armando Buika, actor
Para el actor Marius Makon es imperiosamente urgente que el cine d¨¦ un salto cualitativo y haya m¨¢s representaci¨®n negra desde el lado en que se crean las historias. Son los negros quienes tienen que escribir sus propias historias. "Gracias al cine, la gente de los siglos venideros sabr¨¢ c¨®mo vivimos nosotros. Si en las producciones solo hay un negro, el que vende en a calle, la sociedad del siglo que viene pensar¨¢ que en Espa?a no hab¨ªa negros y los que hab¨ªa vend¨ªan en la calle. "Queremos contar nuestra visi¨®n de las cosas porque hasta ahora no se nos ha preguntado absolutamente nada, ninguna producci¨®n se ha hecho desde la visi¨®n de la gente que lo ha sufrido", completa Buika. El ejemplo es Palmeras en la nieve. Hubiera sido muy distinta si nos hubieran preguntado".
4. Hacer pedagog¨ªa
Adem¨¢s de actriz de cine y de teatro, la catalana Silvia Albert es la cocreadora de una obra que se llama No es pa¨ªs para negras en la que se refiere a la discriminaci¨®n que sufren las mujeres afro en Espa?a porque a¨²n se cree que es un pa¨ªs solo de blancos. La soluci¨®n, a su juicio, es la pedagog¨ªa: "Hay que formarse y educar porque faltan muchos datos a la hora de contar la historia de Espa?a, su relaci¨®n con la esclavitud. Ha habido un paso importante de esclavos por aqu¨ª y no se cuenta", denuncia. Aportar luz es la ¨²nica manera para que quienes generan las narrativas que consume el gran p¨²blico se alimenten de esa informaci¨®n y la apliquen a sus historias. "Hay que generar referentes porque estamos encasillados en los mismos papeles, y hay que hacer apuestas, ser valientes y decir: 'Me atrevo poner a una doctora negra en esta serie'. Al final esto se normaliza porque el p¨²blico normaliza todo", asevera la actriz, que recientemente ha hecho una aparici¨®n televisiva en la serie La Catedral del Mar.
Los m¨¢s jovenes, como Shephard, ven que la pedagog¨ªa y las nuevas tecnolog¨ªas se dan la mano. En concreto, las redes sociales son una herramienta que est¨¢n utilizando los miembros de Limbo para expandir su mensaje. "Ellos tienen muchos seguidores y creo que estas redes son ¨²tiles para llegar a juventud, a gente nueva", explica. Adem¨¢s, este colectivo de artistas ofrece charlas en escuelas de formaci¨®n de guionistas y directores. "Somos la nueva generaci¨®n por un cine inclusivo",
5. Ir a por las instituciones p¨²blicas
Armando Buika y The Black View colaboran con Razas, un proyecto impulsado por La joven compa?¨ªa de teatro para proponer una serie de medidas encaminadas a promover la diversidad ¨¦tnica en las artes esc¨¦nicas, tanto en los patios de butacas como en los escenarios. Y con esta idea se fueron al Ayuntamiento de Madrid para demostrar lo que pod¨ªan hacer y recabar su apoyo. "Interpretamos una funci¨®n con 15 chicos negros, chinos, ¨¢rabes y latinos y, en cuanto salieron al escenario, nos pusimos a llorar. La alcaldesa aplaud¨ªa como una loca", cuenta Buika. Y funcion¨® porque el Ayuntamiento de Madrid se ha involucrado en el proyecto, asevera el artista.
Will Shephard apoya el punto de vista de su compa?ero. "La idea de hablar con las instituciones es una forma de intentar dar a este problema a una soluci¨®n pol¨ªtica porque estas son muy necesarias", opina. A trav¨¦s de la activista Consuelo Cruz, tambi¨¦n presente en el festival, Shephard logr¨® ponerse en contact¨® con la Fundaci¨®n Internacional de Derechos Humanos, y con ellos trabaja en proponer una ley que ya existe en otros pa¨ªses como Reino Unido o Francia: "Una ley que establezca que, por cada producci¨®n que haya, tengamos representaci¨®n multicultural. Se est¨¢ estudiando y es un proceso lento, pero es una posible soluci¨®n", anuncia el actor, que recuerda tambi¨¦n otra medida que est¨¢ funcionando con ¨¦xito en su pa¨ªs de origen, la Rep¨²blica Dominicana: "El cine dominicano tiene una ley que permite a todas las empresas que den dinero al cine sin impuestos y eso ha sido incre¨ªble. Est¨¢ funcionando", asevera.
6. Apuntar al bolsillo
"La mezcla genera dinero", sentencia Shephard. A continuaci¨®n, se acerca al micr¨®fono de la grabadora para que quede bien claro el mensaje que quiere lanzar a los productores de cine y televisi¨®n. Y lo explica: "La sociedad es mixta en todos los aspectos, y eso deber¨ªa estar representado en la producciones. "La mezcla vende y los acentos venden porque cuando alguien est¨¢ viendo una pel¨ªcula o una serie le gusta verse representado. Cuando veo a un dominicano (no haciendo de dominicano) digo: '?buah, qu¨¦ bien!'.
Hay que generar referentes porque estamos encasillados en los mismos papeles, y hay que hacer apuestas, ser valientes
Silvia Albert, actriz
?l es quien m¨¢s apuesta por la visi¨®n puramente pr¨¢ctica y econ¨®mica para impulsar el cine africano y afrodescendiente. Un ejemplo de ¨¦xito es The Black Panther, la pel¨ªcula de Disney sobre el m¨ªtico reino de Wakanda, enteramente producida y protagonizada por personas negras. Para este actor de 26 a?os, la inclusi¨®n y la variedad en cualquier proyecto audiovisual generan m¨¢s posibilidades de venta internacional. En Limbo se han aplicado el cuento: "Estamos escribiendo guiones de series, pel¨ªculas... Poco a poco vamos a ir entrando", asevera.
La autonom¨ªa econ¨®mica es lo que propone Astrid Jones. Ella imagina la construcci¨®n de una infraestructura que sostenga al sector por s¨ª mismo y que permita que sus miembros sean capaces de sostener sus producciones. "?C¨®mo se puede hacer eso?", pregunta la actriz. Y responde ella misma:? buscando patrocinio y fondos, pero tambi¨¦n mediante las redes sociales. "Sin mucha dotaci¨®n econ¨®mica pueden aportar un mont¨®n", afirma, y pone en valor el impacto que se puede lograr si alguien con influencia sube un v¨ªdeo a Instagram. "Mucha gente est¨¢ haciendo una labor de comunicaci¨®n, visibilizaci¨®n y apertura con una repercusi¨®n que nosotros, que estamos un poco m¨¢s mayores, no nos podr¨ªamos haber imaginado", subraya.
7. Huir del victimismo
"?Cu¨¢les son las oportunidades, los defectos y las debilidades de la comunidad negra?", pregunta el actor Marius Makon. "Cuando las reconozcamos llegaremos a donde queremos llegar." Makon piensa que no se debe confundir discriminaci¨®n con ignorancia. "Un guionista espa?ol blanco no tiene obligaci¨®n de poner a un negro en una pel¨ªcula si en su experiencia vital no ha tenido relaci¨®n con ninguno", afirma.
Ver discriminaci¨®n donde no la hay deriva en que el sujeto aludido se coloque en una posici¨®n victimista.Y de ella hay que huir. Frente a la pregunta de si uno est¨¢ siendo discriminado, Makon propone pasar por encima y cambiarla por la pregunta de qu¨¦ se puede aportar. "Yo s¨¦ que tengo que aportar algo: no me espero cosas de Espa?a, sino que aporto cosas. Hay que dejar de pensar tanto en qu¨¦ pensar¨¢n de m¨ª y hacer, aportar, creo que ah¨ª est¨¢ la riqueza".
En opini¨®n de Buika, la comunidad negra no ha sido capaz de salir del "ostracismo" en el que viv¨ªa hasta hace poco porque todos estaban "en modo supervivencia". "Llegaba a una audici¨®n, me encontraba con [el actor] Emilio Buale y me sent¨ªa mal pensando que me iba a quitar el trabajo, pero ahora pienso: 'Qu¨¦ guay que estamos aqu¨ª, a ver si tienes suerte y te llevas el papel, t¨ªo". Y, sobre todo, anima dejar atr¨¢s la etiqueta de v¨ªctimas. "De nada sirve. Yo no soy due?o de nadie ni nadie es mi due?o, yo controlo mi vida", afirma.
Todos los actores y actrices entrevistados est¨¢n trabajando, se regocija Buika. El m¨¢s joven es Shepard, que lleva solo cuatro a?os actuando y no para de recibir propuestas. Quiz¨¢ la clave del ¨¦xito sea aplicarse una m¨¢xima acu?ada por ¨¦l mismo que ahora dice que transmite a los actores j¨®venes porque aparte de actor, es "motivador": "Me gusta animar a la gente a luchar por sus cosas, a salir del no se puede, quitar las excusas". ?Y la m¨¢xima? "No persigas sue?os, persigue objetivos", aclara. "Son peque?os cambios en el discurso que hacen que la gente vea m¨¢s accesible lo que quiere hacer. Y lo cumplan".?
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