Haw¨¢i ha prohibido estos dos filtros solares pero su crema puede tenerlos, ?deber¨ªa evitarlos?

La playa de Hanauma Bay es un para¨ªso en la Tierra y uno?de los destinos tur¨ªsticos m¨¢s populares en Honolulu (Haw¨¢i). Sus aguas cristalinas de color turquesa enmarcadas por un arrecife de coral en el que habita una fauna marina ¨²nica ¡ªcon m¨¢s de 400 especies, el pez t¨ªpico del estado norteamericano, el humuhumunukunukuapua'a¡ª conforman un espacio natural protegido al que acuden cada a?o casi un mill¨®n de ba?istas. Unos 2.600 visitantes diarios de media que vierten 190 kilos anuales de crema solar al mar.

En total, en los arrecifes de coral de todo el mundo se quedan 14.000 toneladas anuales de este ung¨¹ento que los debilita, inmoviliza y los vuelve blancos y escu¨¢lidos, especialmente cuando contiene filtros qu¨ªmicos como la oxibenzona y el octinoxato. El uso de estas sustancias est¨¢ actualmente permitido en la cosm¨¦tica y de hecho est¨¢n presentes en muchas lociones por su bajo coste; pero desde mayo, no podr¨¢n utilizarse en las playas de Haw¨¢i.

Los filtros qu¨ªmicos penetran la piel y se acumulan en el organismo, donde los metabolizamos en m¨¢s sustancias perjudiciales. A trav¨¦s de la placenta, del semen y de la leche materna, pasan al feto que puede sufrir sus consecuencias de adulto

No son solo los corales, ni hace falta irse a Haw¨¢i para observar las consecuencias de estas sustancias. Como disruptores endocrinos, alteran el sistema hormonal de animales ¡ªsobre todo de especies marinas¡ª y tambi¨¦n el de los humanos, aumentando, entre otros efectos, el riesgo de padecer "determinados tipos de c¨¢ncer hormonodependientes", seg¨²n Pilar Mu?oz-Calero, presidenta de la Fundaci¨®n Alborada, directora de la C¨¢tedra de Patolog¨ªa y Medio Ambiente de la Universidad Complutense de Madrid y experta en Medicina ambiental.

As¨ª se resume su funcionamiento, seg¨²n las conclusiones de los estudios que explicamos a continuaci¨®n: los filtros qu¨ªmicos penetran en nuestro organismo y se acumulan en los tejidos, pues ni se reabsorben ni se expulsan. Esto afecta tambi¨¦n a las especies animales introduci¨¦ndose en la cadena alimentaria (es decir, nos comemos las sustancias qu¨ªmicas que les hemos echado antes). Y lo que es m¨¢s, estos filtros permitidos por la UE se metabolizan dentro de nuestro organismo en otras sustancias que s¨ª est¨¢n prohibidas y que, al igual que las primeras, se acumulan hasta el punto de que pueden llegar al feto humano a trav¨¦s del semen, la placenta y de la leche materna.

Tambi¨¦n est¨¢n en los huevos de las aves de Do?ana (a trav¨¦s de sus madres)

Un estudio de?la cient¨ªfica del CSIC Silvia D¨ªaz-Cruz, del Instituto de Diagn¨®stico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA), con la colaboraci¨®n del Hospital de Sant Joan de D¨¦u, de Barcelona, demostr¨® en 2016 que estas sustancias, adem¨¢s de encontrarse en la orina humana, el esperma e incluso en leche materna, como se hab¨ªa documentado con anterioridad, se acumulaba tambi¨¦n en la placenta de las embarazadas.

Y no solo las dos benzofenonas permitidas en los cosm¨¦ticos por la UE (oxibenzona o BP-3 y la BP-4). Los investigadores hallaron otras que, seg¨²n explicaba la directora del estudio, "son resultado de la metabolizaci¨®n. Ello indica que estos compuestos y sus metabolitos no se excretan en su totalidad sino que se acumulan en los tejidos, con consecuencias a¨²n desconocidas".

En una investigaci¨®n m¨¢s reciente, D¨ªaz-Cruz y su equipo encontraron restos de filtros qu¨ªmicos solares en los huevos de las aves de Do?ana. "Este hallazgo es relevante porque demuestra que, si est¨¢ en el huevo, antes de que el ave se haya desarrollado y se haya expuesto al medio ambiente, es porque la madre ha transferido el contaminante antes de la puesta", explica la investigadora.

Efectos en nuestra salud: de endometriosis a mayor riesgo de c¨¢ncer

Pilar Mu?oz-Calero explica que ambas sustancias son omnipresentes en el medio ambiente y en especial en los ecosistemas acu¨¢ticos y explica sus efectos: "De la oxibenzona y de sus metabolitos se han documentado efectos mutag¨¦nicos, es decir que pueden unirse al ADN formando aductos ¡ªformas alteradas de ADN que suelen servir para la detecci¨®n precoz del c¨¢ncer¡ª que impiden la formaci¨®n del amino¨¢cido correspondiente [imprescindibles para todos los procesos metab¨®licos del organismo: ayudan a descomponer los alimentos o a reparar tejidos, entre muchas funciones]", explica.

Raquel Novo, jefa del Servicio de Dermatolog¨ªa de los hospitales universitarios HM Montepr¨ªncipe y HM Puerta del Sur, a?ade que "se asocia a reacciones fotoal¨¦rgicas. Se absorbe por la piel pudiendo pasar a la leche materna, adem¨¢s altera el equilibrio de los ecosistemas marinos, produce alteraciones en el ADN de algunas algas (causando la muerte de unas y el crecimiento de otras) y de los arrecifes de coral adultos favoreciendo su decoloraci¨®n y muerte".

Sobre el octinoxato, Novo explica que "sirve para bloquear la radiaci¨®n ultravioleta B (UVB) pero tiene un efecto disruptor endocrino ¡ªsin ser una hormona puede alterar el funcionamiento de algunas nuestras¡ª, es bioacumulativo y puede aumentar la absorci¨®n de otras sustancias. Se encuentra en la leche materna de muchas mujeres, adem¨¢s contamina los r¨ªos afectando a las poblaciones de peces y m¨¢s animales acu¨¢ticos. Es uno de los filtros m¨¢s problem¨¢ticos junto con la oxibenzona usada para la radiaci¨®n UV-A aunque cada vez menos".

En piscinas y jacuzzis su concentraci¨®n es a¨²n mayor y, mezcladas con el cloro, pueden dar lugar a sustancias m¨¢s t¨®xicas como el cloroformo

Adem¨¢s ambas sustancias "pueden tener un efecto procancer¨ªgeno al comportarse como estr¨®genos en el cuerpo", advierte Mu?oz-Calero: "Se asocian al desarrollo de c¨¢nceres hormonodependientes ¡ªmama, ovarios, tiroides, etc¨¦tera¡ª y a enfermedades relacionadas con la fertilidad (endometriosis, leiomiomas uterinos o descenso de la fertilidad). Una terrible contradicci¨®n: usamos oxibenzona, otras benzoquinonas y octinoxato para protegernos de las mutaciones que puede producir la radiaci¨®n ultravioleta del sol y resulta que tienen efectos mutag¨¦nicos y cancer¨ªgenos", destaca.

Y, ?qu¨¦ pasa si estos componentes pasan al beb¨¦?: "Pueden sufrir sus efectos de adulto, como ocurre con todos los disruptores endocrinos", narra Mu?oz-Calero, quien comenta: "Damos con ellos en piscinas o jacuzzis en concentraciones de partes por mill¨®n superior a la que genera los efectos sobre los organismos acu¨¢ticos. Si se unen al cloro pueden formar sustancias de mayor toxicidad como el cloroformo".

Lo que debemos mirar en la etiqueta de los protectores solares

La oxibenzona y el octinoxato est¨¢n presentes en muchas lociones solares por su bajo coste, y se expresan en la etiqueta con diferentes f¨®rmulas. Para la oxibenzona, del grupo de las benzofenonas, puede aparecer tambi¨¦n como benzofenona (BP-3) o por su nombre completo, 2-hydroxy-4-methoxyphenyl-phenylmethanone, y puede ir acompa?ado de su hermana la BP-4. Son las dos ¨²nicas de esta familia cuyo uso en cosm¨¦ticos permite la Uni¨®n Europea. El octinoxato puede aparecer tambi¨¦n como metoxicinamato de octilo u OMC.

La oxibenzona est¨¢ presente tambi¨¦n en champ¨²s (incluso de beb¨¦s), sales de ba?o, aceites corporales, cremas para el afeitado, hidratantes, reafirmantes, cremas de noche, espumas, acondicionadores... "Sus efectos se producen en concentraciones muy bajas: en un bill¨®n de part¨ªculas de agua con que una sea de oxibenzona se da ese efecto alterador hormonal. Algo dram¨¢tico para nuestros mares y para nosotros", recalca Mu?oz-Calero.

Pese a todo Novo nos tranquiliza: "Estas sustancias no est¨¢n presentes en todos; los protectores minerales ¡ªsolo con filtros f¨ªsicos¡ª son muy seguros para nuestra salud porque no se absorben y tambi¨¦n para el medio ambiente. Adem¨¢s hay filtros qu¨ªmicos sin ellas, en caso de duda el dermat¨®logo recomendar¨¢ el m¨¢s adecuado", se?ala.

El sello que nos asegura que la crema no lleva qu¨ªmicos perjudiciales

Adem¨¢s Mu?oz-Calero recomienda protegerse del sol con sombreros y ropa adecuada: "En las horas m¨¢s seguras se puede tomar un ratito sin protecci¨®n, pues esta adem¨¢s impide absorber vitamina D y el sol es su mayor y mejor fuente. Investigaciones cient¨ªficas recientes relacionan los bajos niveles de esa vitamina con diversos c¨¢nceres (colon, pr¨®stata, p¨¢ncreas, pulm¨®n, mama), enfermedades musculo-esquel¨¦ticas, autoinmunes, ginecol¨®gicas, cardiovasculares o inmunol¨®gicas. Unas concentraciones adecuadas protegen frente al c¨¢ncer", asevera.

Marga Rod¨¢n, ingeniera agr¨®noma especialista en el sector ecol¨®gico y en consumo responsable, cocreadora de la Red Ecoest¨¦tica y fundadora del espacio de divulgaci¨®n Econsentidos a?ade: "Los protectores solares econaturales certificados son la mejor opci¨®n, est¨¢n libres de esos componentes, act¨²an como una pantalla f¨ªsica formando una pel¨ªcula que hace que los rayos reboten sobre nuestra piel por sus filtros minerales (¨®xido de zinc y di¨®xido de titanio) de mayor tama?o que las nanorpart¨ªculas".

Adem¨¢s, existe una certificaci¨®n para solares que respetan la biodiversidad marina, Ecolcare: "Verifica que los filtros usados son f¨ªsicos y que la loci¨®n no lleva qu¨ªmicos perjudiciales para las especies marinas", asegura Rold¨¢n, quien tambi¨¦n aconseja "apostar por una buena nutrici¨®n cut¨¢nea, evitar exposiciones innecesarias al sol, y emplear el sentido com¨²n que es la mejor protecci¨®n solar".