?Y si el Gobierno pide prestado al Banco Central sin pagar intereses?
Los Chalecos Amarillos piden la derogaci¨®n de una Ley sobre el Banco de Francia
El movimiento de los Chalecos Amarillos en Francia est¨¢ llamando la atenci¨®n de los medios de todo el mundo. Si bien su verdadero car¨¢cter sigue sin conocerse, hay una reivindicaci¨®n muy interesante desde el punto de vista de reforma monetaria: Derogaci¨®n de la Ley n? 73-7 del 3 de enero de 1973 sobre el Banco de Francia. Quisiera presentaros mi visi¨®n sobre este tema caliente antes de cerrar el 2018.
El Art¨ªculo 25 de la misma, vigente desde hace casi 46 a?os, proh¨ªbe que el Tesoro P¨²blico pida pr¨¦stamos directos al Banco de Francia. Hay un informe, publicado por el Club de Roma hace 6 a?os, que respalda el argumento de este activista franc¨¦s. Seg¨²n este trabajo, titulado Money and Sustainability, hasta 1973 era posible que el gobierno franc¨¦s tomara pr¨¦stamos del banco central sin pagar tasas de inter¨¦s, mientras que hoy en d¨ªa Campos El¨ªseos (y otros gobiernos del mundo) no tienen otro remedio que vender bonos y pagar tasas de inter¨¦s para financiarse. En Espa?a, por ejemplo, el Art¨ªculo 13-2 de la Ley 13/1994, de 1 de junio, de Autonom¨ªa del Banco de Espa?a, tambi¨¦n proh¨ªbe la financiaci¨®n directa al Estado.
El mismo informe se?ala un hecho muy curioso: Si no hubiera entrado en vigor esta prohibici¨®n del Art¨ªculo 25 y hubiera sido posible la financiaci¨®n directa, la deuda p¨²blica de Francia en 2009 ser¨ªa s¨®lo el 8,6% del PIB en vez del 78% que realmente ten¨ªa ese a?o. Podemos decir sin duda que sin esta ley Campos El¨ªseos habr¨ªa podido gozar de mayores presupuestos y/o bajar los impuestos. Este tipo de econom¨ªa p¨²blica es lo que reivindican los activistas de los Chalecos Amarillos, y yo, sin identificarme completamente con ellos, tengo una visi¨®n similar sobre las finanzas como propone Positive Money.
El gobierno espa?ol pierde unos 16.300 millones de euros en el pago de las tasas de inter¨¦s
Traduzcamos este hecho en el contexto espa?ol, con la deuda p¨²blica que llega a aproximadamente 100% del PIB y con la tasa de inter¨¦s de 1,42% al a?o (bonos de 10 a?os, aunque se aplican distintas tasas por cada bono con sus propias condiciones). Podemos decir que el gobierno espa?ol pierde m¨¢s o menos 16.300 millones de euros para pagar las tasas de inter¨¦s (no para devolver el principal de la deuda), lo que ser¨ªa un costo innecesario si el Banco de Espa?a pudiera financiar directamente a La Moncloa. Esta cifra equivaldr¨ªa a unos 350 euros por cada habitante en Espa?a (1.400 euros por una familia de cuatro miembros), o si se pudiera compensar esta cifra para bajar el IVA, llegar¨ªamos a pagar s¨®lo el 16% de IVA en vez del actual 21%.
Hay otra cuesti¨®n ¨¦tica sobre los bonos p¨²blicos: si cada Estado existe con el fin de servir al inter¨¦s de todos los nacionales y otros ciudadanos en su territorio, ?por qu¨¦ se justifica el pago de tasas de inter¨¦s = enriquecimiento de los acreedores, incluso los acreedores extranjeros que no forman parte de la naci¨®n? ?C¨®mo es posible que el gobierno hel¨¦nico tenga, como prioridad, pagar la deuda a los bancos alemanes, antes de servir a los propios griegos?
Huelga decir que no es f¨¢cil reivindicar el cambio de esta ley, porque hoy en d¨ªa esta prohibici¨®n est¨¢ integrada en el Art¨ªculo 123 del Tratado de Lisboa y ning¨²n Estado puede cambiarlas por s¨ª solo. Sin embargo, a medida que este movimiento crezca en toda Europa, quiz¨¢ el Parlamento Europeo se vea obligado a reconsiderar esta cl¨¢usula para permitir unas finanzas p¨²blicas con menor austeridad, que les permitan m¨¢s mano libre a los estados miembros de la Uni¨®n Europea.
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