La ¡®maldici¨®n de los recursos¡¯: una paradoja solucionable
Hay quienes se frotan las manos al saber que en sus territorios existen yacimientos naturales. Estudios muestran que una poblaci¨®n informada puede ayudar a evitar decisiones perjudiciales y malos manejos del dinero
Para una comunidad, contar con recursos naturales para explotar no siempre es una bendici¨®n. En pa¨ªses en desarrollo, puede ser incluso lo contrario: es la llamada maldici¨®n de los recursos o paradoja de la abundancia, y consiste en que las zonas m¨¢s ricas en minerales y combustibles se desarrollan menos que los lugares en donde estos no abundan.
Como suele conllevar la intervenci¨®n de algunos funcionarios y pol¨ªticos locales, los expertos tambi¨¦n hablan de political resource curse, o maldici¨®n pol¨ªtica de los recursos. Es la idea de que la explotaci¨®n de recursos naturales, combinada con pr¨¢cticas rentistas y corrupci¨®n por parte de quienes est¨¢n m¨¢s cerca del poder pol¨ªtico, puede deteriorar las pol¨ªticas p¨²blicas.
Un caso se ha venido dando en la provincia nororiental de Cabo Delgado, una de las m¨¢s pobres de Mozambique y principalmente rural. En 2010, se descubri¨® en la cuenca del Rovuma un yacimiento de unos 3,7 billones de metros c¨²bicos de gas natural, lo que podr¨ªa catapultar al pa¨ªs al mercado de los principales exportadores. De hecho, la Administraci¨®n de Informaci¨®n Energ¨¦tica de Estados Unidos se refiri¨® a Mozambique como ¡°uno de los pa¨ªses m¨¢s prometedores¡± de ?frica respecto a este hidrocarburo.
Sin embargo, la fragilidad institucional no ayuda: la organizaci¨®n Freedom House, por ejemplo, cataloga a Mozambique como un pa¨ªs ¡°parcialmente libre¡±, con 51 puntos sobre 100, y la poca penetraci¨®n y libertad de los medios de comunicaci¨®n, as¨ª como los escasos mecanismos de control, llevan a que intereses particulares sobre la extracci¨®n del recurso perjudiquen a una poblaci¨®n que en principio no sabe lo que se decide al respecto, en este caso, en la ciudad de Palma, capital de Cabo Delgado.
Es necesario informar no solo a los l¨ªderes de la comunidad, sino tambi¨¦n al resto de la poblaci¨®n, cuya movilizaci¨®n es necesaria para evitar pr¨¢cticas corruptas en torno a la explotaci¨®n
En ese sentido, seg¨²n el estudio Does Information Break the Political Resource Curse? (?La informaci¨®n puede romper la maldici¨®n pol¨ªtica de los recursos?), publicado en enero pasado por los investigadores Alex Armand, del Navarra Center for International Development, y Alexander Coutts, Pedro Vicente e In¨ºs Vilela, del proyecto Novafrica de la Universidade Nova de Lisboa, si la comunidad est¨¢ informada sobre lo que ocurre con la extracci¨®n del recurso natural en su territorio, puede darse un escenario distinto sobre el manejo del dinero y las decisiones pol¨ªticas a si solamente los responsables directos (pol¨ªticos, empresarios, controladores¡) est¨¢n al tanto.
De acuerdo con los hallazgos de la investigaci¨®n en el lugar, es necesario informar no s¨®lo a los l¨ªderes de la comunidad, sino tambi¨¦n al resto de la poblaci¨®n, cuya movilizaci¨®n es necesaria para evitar pr¨¢cticas corruptas en torno a la explotaci¨®n, como tambi¨¦n se ha estudiado en pa¨ªses como Tanzania o Santo Tom¨¦ y Pr¨ªncipe.
Pero no se trata s¨®lo de que las personas sepan lo que sucede, sino de que conozcan los posibles efectos positivos que trae para la comunidad si se involucran en los proyectos y si estos se llevan por buen camino. As¨ª, seg¨²n el estudio, informar e involucrar a la sociedad puede contribuir incluso a la disminuci¨®n la violencia en la zona, como en el caso de Cabo Delgado, donde grupos extremistas han venido reclutando a j¨®venes de la poblaci¨®n civil.
Con lo cual, si bien es m¨¢s dif¨ªcil que la poblaci¨®n act¨²e directamente en la toma de decisiones sobre la explotaci¨®n de un recurso natural, es positivo involucrarla en los debates sobre aquellas implicaciones que la pueden afectar, en primera instancia, a trav¨¦s de campa?as de comunicaci¨®n que sirvan para concienciar y, si el proyecto es viable, promoviendo la participaci¨®n, la exigencia de rendici¨®n de cuentas y que la explotaci¨®n del recurso contribuya al bienestar social y al desarrollo econ¨®mico de manera eficiente.
Jos¨¦ Manuel Cuevas es investigador asistente en el Navarra Center for International Development del Instituto Cultura y Sociedad de la Universidad de Navarra.
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