Los perseguidos LGTBI

¡°Nosotras no existimos ante las leyes pero s¨ª estamos. No existimos para la sociedad pero sin embargo la sociedad nos usa: estamos en los pol¨ªgonos, en plena calle Montera de Madrid o en la Casa de Campo pero somos invisibles. Yo soy transexual, mujer y migrante y sufro esa triple discriminaci¨®n¡±, as¨ª denuncia Fabiana c¨®mo es su d¨ªa a d¨ªa, invisible ante una sociedad que prefiere mirar hacia otro lado.Ella form¨® parte del proyecto Orgullo de Valientes, una exposici¨®n organizada por La Merced Migraciones, que ahora se puede ver en esta fotogaler¨ªa. Las im¨¢genes visibilizan la situaci¨®n de aquellos que se ven obligados a huir de su pa¨ªs por su orientaci¨®n sexual o identidad de g¨¦nero y piden refugio en Espa?a.

Fabiana es mexicana y desde hace m¨¢s de una d¨¦cada lucha por la defensa de los derechos de las personas LGTBI+ para que en su pa¨ªs de origen se reconozcan los matrimonios igualitarios en otros estados m¨¢s all¨¢ de Ciudad de M¨¦xico y denunciar el constante acoso que sufren sus compa?eras trans arrestadas y obligadas a permanecer en los calabozos sin haber cometido ning¨²n delito.

¡°Cuando estaba en Espa?a de vacaciones entraron dos veces en mi casa, registraron y destrozaron todo. En ese momento mi familia me dijo que no regresara porque ten¨ªan miedo que pudieran hacerme algo. Porque as¨ª se trabaja en M¨¦xico, se elimina a los l¨ªderes de los movimientos para infundir el miedo y que los dem¨¢s no se manifiesten¡±, cuenta. Eso ocurri¨® en 2016, y desde ese momento ya no ha podido volver a su pa¨ªs por las amenazas constantes que recibe. M¨¦xico es el segundo pa¨ªs m¨¢s violento contra la comunidad LGTBI+, s¨®lo superado por Brasil. ¡°Yo soy de un estado del norte de M¨¦xico donde la gente es muy conservadora. Cuando sales de la capital es cuando empiezan a asesinar a l¨ªderes como mi compa?era Agnes Torres y las amenazas a quienes defendemos los derechos del colectivo¡±, reconoce Fabiana.

En el mundo, 72 pa¨ªses siguen criminalizando al colectivo LGTBI+ y en Arabia Saud¨ª, Irak, Ir¨¢n, Nigeria, Siria, Somalia, Sud¨¢n y Yemen la homosexualidad se castiga con pena de muerte. Por sentir y amar diferente, se enfrentan a detenciones arbitrarias y violencia, se les niegan derechos de reunio?n, expresio?n e informacio?n, sufren discriminacio?n en el empleo, la salud y la educacio?n. Seg¨²n la Organization for Refugee, Asylum & Migration (ORAM) ma?s de 175 millones de personas LGTBQ+ viven en condiciones de peligro o violencia en todo el mundo, pero se estima que menos de 3.000 reciben proteccio?n internacional cada an?o.

Uno de los supuestos bajo los que se puede solicitar asilo y protecci¨®n en Espa?a es tener un temor fundado de sufrir persecuci¨®n por pertenecer a un colectivo determinado, como es el definido por la orientaci¨®n sexual o la identidad de g¨¦nero. Muchas de estas personas llegan a Espa?a buscando vivir su condici¨®n sexual en libertad pero no son pocas las barreras que tienen que superar, como los problemas para encontrar empleo o para alquilar una vivienda, que aumentan para las personas transexuales.

Hace tres a?os naci¨® un proyecto de La Merced Migraciones con el objetivo de apoyar a las personas del colectivo LGTBI+ solicitantes de asilo y refugio. ¡°Muchas de estas personas cuando llegan carecen de apoyos bien porque tirar de los apoyos que tienen de su propia comunidad en Espa?a supone meterse de nuevo en el armario o porque muchas veces llegan solos y no conocen a nadie. Cuando has sufrido rechazo por parte de tu comunidad en tu pa¨ªs y llegas a otro lugar y tienes que refugiarte de nuevo supone volver a sufrir un rechazo¡±, cuenta Josu¨¦ Gonz¨¢lez, trabajador social del proyecto. Por esos motivos, decidieron crear un proyecto espec¨ªfico que apoya a este colectivo.

¡°Muchos sufren bloqueo porque no les es f¨¢cil responder a las entrevistas de asilo contando su vida porque tienen miedo. Muchos de ellos no saben que en nuestro pa¨ªs la homosexualidad no s¨®lo no est¨¢ criminalizada sino que hay una serie de derechos y libertades garantizados constitucionalmente¡±, cuenta Josu¨¦, denunciando como en muchos casos los profesionales que trabajan en el campo del asilo y refugio desconocen bastante las particularidades del colectivo LGTBI+.

Cuando has sufrido rechazo por parte de tu comunidad en tu pa¨ªs y llegas a otro lugar y tienes que refugiarte de nuevo supone volver a sufrir un rechazo

Manuel tuvo que huir de Venezuela por la persecuci¨®n pol¨ªtica que sufr¨ªa por ser miembro de un partido de oposici¨®n. Estuvo viviendo en Madrid unos a?os y volvi¨® a Venezuela para trabajar pero se vio obligado a regresar de nuevo a Espa?a y pedir asilo porque la situaci¨®n era insostenible. ¡°Si adem¨¢s de ser de oposici¨®n eres gay hay una sa?a bastante importante por parte de las fuerzas de seguridad. M¨¢s de la mitad de las agresiones a personas LGTBI+ en Venezuela las cometen agentes de las fuerzas de seguridad¡±, declara Manuel. Aunque reconoce que a nivel social la situaci¨®n en Venezuela hab¨ªa mejorado respecto a hace unos a?os, echaba de menos no poder ir cogido de la mano de su pareja o expresar p¨²blicamente afecto. ¡°Despu¨¦s de vivir en Espa?a, cuando volv¨ª a Venezuela tuve que volver al armario de puertas para afuera de mi casa¡±. Entre junio de 2015 y mayo de 2016 en el pa¨ªs sudamericano se produjeron un total de 18 asesinatos y 75 agresiones a personas de la comunidad LGTBI+. Aunque no existen datos gubernamentales oficiales, ya que en el pa¨ªs no no est¨¢n reconocidos los cr¨ªmenes de odio contra las personas de este colectivo.

Manuel y Fabiana son solo algunas de las personas que forman parte de la exposici¨®n dirigida por el fot¨®grafo Chech¨¦ D¨ªaz quien, tras un proceso participativo, fue fotografiando lo que cada participante quer¨ªa transmitir. ¡°Han sido muy valientes de enfrentarse al estigma, de salir ante la c¨¢mara, sentirse libres y mostrarse tal y como son. Hab¨ªa muchos temores e incertidumbres pero el resultado es que ellos dieron un paso y han querido contar sus historias y hacerlas visibles. Y quieren luchar desde ah¨ª fuera y no encerrados sinti¨¦ndose como si no formaran parte de nada¡±, explica D¨ªaz.

Para Fabiana, participar en esta exposici¨®n signific¨® tener la oportunidad de luchar contra los discursos xen¨®fobos y poder contar su historia. ¡°Lo que yo he vivido siendo una transexual migrante viviendo en Madrid no lo quiero para otra compa?era. Eso es lo que me motiva a seguir trabajando. Mi sue?o ser¨ªa que no existiera la discriminaci¨®n y que cada uno fuera como quisiera ser¡±. Un sue?o que ser¨¢ posible alg¨²n d¨ªa gracias a personas valientes como ellos.

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