Cuidar la hipertensi¨®n en la peluquer¨ªa
La autora argumenta que los servicios sanitarios no pueden ser los ¨²nicos responsables de la prevenci¨®n de las enfermedades no transmisibles
Hay en Harlem, Nueva York, una barber¨ªa donde los clientes no van ¨²nicamente a cortarse el pelo o a arreglarse la barba. Los que all¨ª trabajan manejan tijeras y navajas con la misma habilidad con la que conversan sobre hipertensi¨®n arterial, ense?an a reconocer riesgos, resaltan la importancia de adquirir h¨¢bitos saludables y, sobre todo, ayudan a tomar conciencia sobre la necesidad de actuar para mejorar la salud. La cita quincenal de muchos varones afroamericanos con su peluquero se ha convertido, gracias a la iniciativa del doctor Joseph Ravenell, en una excelente oportunidad para promover el cuidado de la salud entre un sector de la poblaci¨®n que normalmente no acude como debiera a los servicios de atenci¨®n primaria.
Casi un tercio de las muertes que se producen en el mundo son debidas a las enfermedades cardiovasculares y otras patolog¨ªas asociadas, que son prevenibles y controlables con una detecci¨®n precoz y un tratamiento temprano. Sin embargo, atribuir la prevenci¨®n de manera exclusiva a los sistemas de salud es un planteamiento err¨®neo, ya que su capacidad de actuaci¨®n est¨¢ limitada no solo por los recursos disponibles, sino tambi¨¦n por la naturaleza de los factores que inciden en las enfermedades no transmisibles. Los determinantes sociales de la salud son aqu¨ª fundamentales y exceden los ¨¢mbitos de desempe?o de los sistemas sanitarios.
Iniciativas como las de la barber¨ªa neoyorquina demuestran el enorme potencial que tiene un espacio no cl¨ªnico para promover el cuidado de la salud y no desacreditan el papel de los centros de salud, mucho menos los de la atenci¨®n primaria, a la vez que abren una v¨ªa a la creaci¨®n de nuevos espacios de educaci¨®n y de concienciaci¨®n. Los Centros para el Control y la Prevenci¨®n de Enfermedades del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, desarrollan, en l¨ªnea con esta tendencia, el Programa Nacional de Prevenci¨®n de la Diabetes. Mediante un proceso de cascada que busca multiplicar las oportunidades para prevenir la diabetes tipo 2, el programa entrena a diferentes organizaciones locales p¨²blicas y privadas y las certifica como coach en estilo de vida. Con esta formaci¨®n, las entidades socias desarrollan programas espec¨ªficos que ayudan a las personas con prediabetes a trabajar en la mejora de sus condiciones de salud, especialmente a partir de la dieta y la actividad f¨ªsica.
Casi un tercio de las muertes que se producen en el mundo son debidas a las enfermedades cardiovasculares y otras patolog¨ªas asociadas, que son prevenibles
En Canad¨¢, el exitoso Programa de concientizaci¨®n sobre la Salud Cardiovascular (CHAP, por sus siglas en ingl¨¦s) combina las pol¨ªticas del sistema con los recursos de las comunidades para fomentar la medici¨®n de la presi¨®n arterial y promover la salud cardiovascular y las actividades de manejo de las enfermedades cr¨®nicas. En este modelo de probada eficacia destaca la asociaci¨®n entre los proveedores institucionales y los voluntarios, que act¨²an como educadores de salud, verdaderos brazos comunitarios del sistema que emprenden una importante cruzada contra la hipertensi¨®n arterial.
En Am¨¦rica Latina, el Ministerio de Salud y Desarrollo Social de Argentina ha dise?ado una innovadora estrategia para la prevenci¨®n de enfermedades y promoci¨®n de la salud, de f¨¢cil acceso y bajo costo de implementaci¨®n. La iniciativa, conocida como Radio salud, ofrece informaci¨®n simple y ¨²til dirigida a emisoras de radio y al p¨²blico en general. Los mensajes en formato radiof¨®nico buscan educar en temas diversos, como hipertensi¨®n o diabetes, y tratan no solo de invitar a las comunidades a actuar, sino de entregarles las herramientas para que puedan hacer eficazmente esta labor.
Las nuevas realidades sociales han sido el desencadenante de m¨¢s iniciativas innovadoras. La reciente declaraci¨®n del aislamiento como un problema de salud p¨²blica ha hecho reaccionar al sistema de salud p¨²blico del Reino Unido. La soledad est¨¢ estrechamente vinculada a serios problemas de salud como las enfermedades card¨ªacas, los accidentes cerebrovasculares y la demencia, por lo que el sistema brit¨¢nico de salud est¨¢ promoviendo diferentes alternativas en las comunidades para identificar, acompa?ar y trabajar con las personas que viven solas. En ese panorama emerge como aliado inesperado el servicio postal brit¨¢nico o Royal Mail y se plantea la posibilidad de que sean los funcionarios de correos los que hagan un seguimiento de las personas solas como parte de sus rondas de entrega habituales con el fin de mantener un sistema de vigilancia continua.
La asociaci¨®n entre la pol¨ªtica p¨²blica y el quehacer de las comunidades tiene hoy d¨ªa muchas expresiones. Estas formas disruptivas de hacer salud desdibujan las fronteras entre los sistemas de salud y los actores sociales y abren inmensas posibilidades relacionadas con la prevenci¨®n de las enfermedades no transmisibles, la educaci¨®n para su control eficaz y la promoci¨®n de h¨¢bitos y estilos de vida saludables.
Patricia Jara es especialista l¨ªder en la divisi¨®n de Salud y Protecci¨®n Social del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
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