Si es feminismo, que sea con todas
La diversidad sexual que necesito en el feminismo
Las dos letras que m¨¢s me complicaron la vida cuando empec¨¦ a interesarme por la diversidad sexual LGTBI, fueron la T y la I. No qued¨® otra que desentra?arlas para entenderlas.?
Hasta que conoc¨ª a Gabriel J. Mart¨ªn, no supe por qu¨¦ hay tantos padres de menores con genitales intersexuales reacios a visibilizar la intersexualidad de sus hijos. Temen que se les presione para que se les reconstruya genitalmente, decidiendo, ellos, si son hombres o mujeres. Su explicaci¨®n m¨¢s honesta respecto a lo que supon¨ªa pertenecer a este grupo me impact¨®: ¡°A los 12 a?os me llamaba Patricia y en vez de bajarme la regla, me sali¨® barba.¡± Al nacer, confundieron su micropene con un cl¨ªtoris desmesurado y, como si fuera la ni?a Patricia, as¨ª lo educaron. Su reconstrucci¨®n psicol¨®gica y f¨ªsica (dejar que la naturaleza siguiera su curso: hoy luce una poblada barba), fue m¨¢s que necesaria. A Gabriel se le considera pionero en psicolog¨ªa afirmativa gay, una especialidad anglosajona, al amparo de la Asociaci¨®n Psicol¨®gica Americana, especializada en aliviar el dolor que sufren las personas no heterosexuales, precisamente por serlo. Puede que ahora podamos ampararnos en las leyes necesarias para salvaguardar nuestra integridad, pero hace menos de lo que creen, hasta los personajes ilustres se declaraban orgullosamente hom¨®fobos
Con las personas transexuales, tambi¨¦n tuve que pedir ayuda, claro. M¨¢s all¨¢ de Bibiana Fern¨¢ndez, no ten¨ªa ni idea. Jam¨¢s me explicaron que pudieras nacer con pene y ser mujer. Pero as¨ª es. Ni siquiera sab¨ªa la diferencia entre un travestido y una mujer transexual. Entonces lleg¨® Alexia del Rey, un hombre heterosexual, absolutamente enamorado de su mujer, pero que gusta de transformarse en Alexia para vivir y gozar su parte m¨¢s femenina: ¡°T¨² imag¨ªnate que est¨¢s casada con un hombre con su rol de hombre, el esterotipo, ?c¨®mo te enfrentas si te lo encuentras vestido de mujer?¡±. Ella es la parte femenina de un se?or, que aprovecha cuando se afeita para dar rienda suelta a la libertad sexual que desea. La que desea y merece, porque todos debemos vivir nuestra sexualidad como nos plazca y a este caballero le excita su feminidad hasta el punto de so?ar con penetrar a su mujer maquillado, vistiendo sujetador y bragas.
La identidad sexual es un cambio total. Es el reclamar 'yo tengo derecho a ser' algo distinto a lo que me han dicho que soy
Entre Leo Muli¨®, Isidro Garc¨ªa Nieto y Jos¨¦ Luis Pedreira Massa aprend¨ª de las personas transexuales. Fueron ellos quienes me obligaron a poner delante del calificativo ¡°trans¡±, hombre, mujer o persona no binaria, dependiendo de la identidad sexual de la persona a la que me refiriera. Leo es psic¨®logo y uno de los fundadores de Transdiversia, cooperativa social para las personas trans que trabaja a nivel estatal, pero antes, divulg¨® su experiencia por YouTube. Isidro Garc¨ªa Nieto es trabajador social y sex¨®logo. Durante a?os fue gerente de Fundaci¨®n Daniela, una de las primeras en facilitar soporte a las familias y ni?os transexuales de este pa¨ªs. Isidro ayud¨®, por ejemplo, a la tutora y familia de Nico para que ¨¦l mismo explicara a sus compa?eros de tercero de primaria del colegio cat¨®lico concertado en el que estudia que, aunque en las listas de clase apareciera como la melliza de Blanca, ¨¦l es un ni?o. La tutora, Eva Planells, admite que fue indispensable el consejo y gu¨ªa de Isidro. Aquello le explot¨® en la cara el d¨ªa que pidi¨® en clase a sus alumnos que pensaran en un deseo y lo dibujaran. ¡°Yo dibuj¨¦ que quer¨ªa ser un ni?o¡±, reconoce orgulloso el propio Nico. Lo hicieron tan bien que han recibido un premio por parte de la polic¨ªa municipal de Getafe.
Combatir el odio hacia las personas LGTBI es tarea de todos. Y Jos¨¦ Luis Pedreira Massa es algo as¨ª como el t¨®tem de los psiquiatras infantiles y juveniles. Doctor en la ¨²nica c¨¢tedra de psiquiatr¨ªa infantil del Estado Espa?ol, defensor a ultranza de la despatologizaci¨®n de la transexualidad y vocal en el Consejo Asesor de Sanidad y Servicios Sociales desde este mismo a?o, pelea en los despachos de medio mundo por demostrar que los ni?os y j¨®venes transexuales no tienen ninguna enfermedad mental: ¡°En la transexualidad, igual que en la orientaci¨®n sexual, no hay que diagnosticar, hay que escuchar y comprender. La identidad sexual es un cambio total, es el reclamar 'yo tengo derecho a ser algo distinto a lo que me han dicho que soy".
No entend¨ª qu¨¦ era que te diera un subid¨®n de disforia hasta que vi a una mujer transexual, Clara, en mitad de su tratamiento de l¨¢ser, llorar desconsoladamente porque a¨²n tiene sombra en la mand¨ªbula. S¨ª, confieso. Tengo que pedir ayuda continuamente para entender y poder hablar de muchos temas. No me averg¨¹enzo en reconocerlo y agradezco cada nueva aportaci¨®n aprendida. Por eso me cuesta tanto el discurso de esas mujeres feministas a las que admiro, hablando de mujeres transexuales y de su identidad de g¨¦nero sin que entre las ponentes haya una sola de ellas. No s¨¦ si tienen Twitter, pero si no lo tienen, no entren. En alguna conversaci¨®n sobre el tema, he le¨ªdo que las mujeres transexuales pueden ser hombres disfrazados de mujer que aprovechan el travestismo para entrar en los lugares donde hay hembras de las que abusan.
Como si se hubiera desatado una ola de violaciones de mujeres perpetradas por mujeres trans. Mensajes de odio muy parecidos a los que deja la vicesecretaria de implantaci¨®n de VOX en Valladolid cuando se entera de que una mujer trans ha sido elegida Miss Espa?a y participar¨¢ en la elecci¨®n de Miss Universo. De la ultraderecha me espero cualquier barbaridad, pero de las mujeres feministas que provocan el debate, anhelo cierto inter¨¦s por aprender de lo que no saben. As¨ª se construye el feminismo, ense?¨¢ndonos unas a otras.
Creo firmemente que el feminismo es cosa de todas.
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