El feminicidio es un crimen de lesa humanidad
La violencia contra las mujeres es una profunda injusticia mundial. Es un gran obst¨¢culo para cumplir los derechos humanos de las mujeres y ni?as y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible
La equidad de g¨¦nero y los derechos de las mujeres son fundamentales para garantizar un futuro mejor para todos y todas. Son valores que subyacen a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) adoptados por todos los Estados miembros de las Naciones Unidas. No obstante, hay una impactante desconexi¨®n entre las declaraciones realizadas por los l¨ªderes de Nueva York y Ginebra y la vida ¨Co muerte¨C en las calles en mi regi¨®n, particularmente en Am¨¦rica Latina.
Mi regi¨®n alberga a 14 de los 25 pa¨ªses con m¨¢s altas tasas de feminicidio en el mundo, es decir, de mujeres o ni?as asesinadas por raz¨®n de g¨¦nero. En Am¨¦rica Latina y el Caribe, 12 mujeres y ni?as son asesinadas cada d¨ªa. Sin embargo, el 98% de los casos no llegan a proceso judicial. Estas estad¨ªsticas alarmantes deber¨ªan avergonzarnos e instarnos a exigir acciones por parte de los l¨ªderes para salvar vidas y proteger los derechos y la dignidad de las mujeres y ni?as.
Los asesinatos por raz¨®n de g¨¦nero son la culminaci¨®n de una serie de actos violentos. En general, las personas no son conscientes de la cadena de eventos que llevan al feminicidio. En Am¨¦rica Latina, tenemos una cultura de alta tolerancia hacia la violencia contra las mujeres y ni?as. Se ha normalizado la violencia. Es vista como parte de la vida de las mujeres, especialmente de las que pertenecen a comunidades social y econ¨®micamente desfavorecidas con bajos niveles de educaci¨®n y desarrollo.
La violencia contra las mujeres es una profunda injusticia mundial. Es un gran obst¨¢culo para cumplir los derechos humanos de las mujeres y ni?as y alcanzar los ODS. Actualmente, ning¨²n pa¨ªs est¨¢ en condiciones de alcanzar la equidad de g¨¦nero dentro del plazo estipulado, ni en el mundo desarrollado ni en los pa¨ªses en desarrollo. Es una conclusi¨®n devastadora acerca de nuestras prioridades globales, que demuestra que debemos hacer m¨¢s.
La Iniciativa Spotlight para eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres y ni?as es un paso en la direcci¨®n correcta. Esta iniciativa global impulsada por la ONU y la Uni¨®n Europea apunta a erradicar el feminicidio en cinco pa¨ªses de la regi¨®n: Argentina, El Salvador, Guatemala, Honduras y M¨¦xico.
En Argentina, la Iniciativa est¨¢ apoyando la creaci¨®n de Redes de Adolescentes y J¨®venes por la Igualdad. Estas redes promueven m¨¦todos de prevenci¨®n comunitarios que instan a los j¨®venes a reflexionar sobre roles de g¨¦nero y masculinidad nociva, y plantean soluciones comunitarias para erradicar los feminicidios. La Iniciativa tambi¨¦n brinda capacitaci¨®n a periodistas sobre eliminaci¨®n de los estereotipos de g¨¦nero en la cobertura de noticias sobre violencia contra las mujeres y ni?as.
En Guatemala, la Iniciativa est¨¢ apoyando a la sociedad civil para que abogue por la investigaci¨®n de las amenazas contra los defensores de los derechos humanos de las mujeres. En El Salvador, la Iniciativa Spotlight est¨¢ permitiendo el acceso a oportunidades econ¨®micas para sobrevivientes de violencia, y en M¨¦xico, est¨¢ ayudando a garantizar que el sistema judicial tenga las herramientas correctas y los enfoques adecuados para identificar los feminicidios y llevar adelante las causas judiciales correspondientes.
Como hombres, debemos promover representaciones positivas de lo masculino. Tenemos que darles un buen ejemplo a nuestros hijos
Este es un avance importante, pero no es suficiente. ?Qu¨¦ podemos hacer en otros pa¨ªses latinoamericanos donde la violencia mis¨®gina y la discriminaci¨®n contin¨²an prevaleciendo? ?C¨®mo podemos cambiar las actitudes y pol¨ªticas para proteger mejor a las mujeres en todos los niveles de la sociedad? Necesitamos que los l¨ªderes tradicionales, religiosos y pol¨ªticos aborden este grave abuso de los derechos humanos, as¨ª como las personalidades notables del mundo empresarial y acad¨¦mico que pueden tener una influencia social considerable.
Tenemos que ponerle fin a la impunidad y fortalecer el sistema judicial para investigar, enjuiciar y sancionar a los responsables e invertir en el acceso de las mujeres a los servicios de justicia. Sobre todo, debemos invertir en servicios centrados en las sobrevivientes que alienten a las mujeres y ni?as a hablar y buscar apoyo si est¨¢n experimentando abuso.
Cuando introduje las reformas de bienestar y protecci¨®n social como presidente de Chile a inicios de la d¨¦cada del 2000, aprend¨ª r¨¢pidamente que el recurso m¨¢s importante para las v¨ªctimas de violencia de g¨¦nero era contar con refugios donde pudieran albergarse y estar seguras, lejos de sus abusadores. Garantizar que las mujeres puedan acceder a estos servicios sin correr el riesgo de empobrecimiento era un elemento crucial de dichas reformas, y contin¨²a siendo una prioridad actualmente en toda la regi¨®n. Esto significa que diferentes sectores como salud, servicios sociales, la polic¨ªa y el sistema judicial deben trabajar en forma conjunta y no en silos.
Debemos invertir en prevenci¨®n de la violencia contra las mujeres. Hay cada vez m¨¢s evidencia global que demuestra que la prevenci¨®n es posible si se asignan los recursos necesarios y hay voluntad pol¨ªtica.
Como hombres, debemos promover representaciones positivas de lo masculino. Tenemos que darles un buen ejemplo a nuestros hijos. Esto incluye desafiar las mentalidades t¨®xicas machistas que promueven la aceptaci¨®n de la violencia contra las mujeres, en nuestras escuelas, en los lugares de trabajo, en las instituciones religiosas y en nuestros hogares.
Tambi¨¦n es clave que apoyemos y escuchemos a las sobrevivientes y a las organizaciones y los movimientos feministas. Deben tener voz y voto a la hora de analizar estrategias, soluciones y decisiones. Es inspirador el ejemplo de Irinea Buend¨ªa, cuya hija, Mariana Lima, fue asesinada por su marido en M¨¦xico. La b¨²squeda de justicia de esta valiente madre durante seis a?os sent¨® un precedente clave en materia de procesamiento de feminicidios en M¨¦xico.
Son dignas de imitar las iniciativas de promoci¨®n y litigio del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio ¡ªuna alianza de 49 organizaciones de derechos humanos de M¨¦xico¡ª que ha mejorado la rendici¨®n de cuentas y ha aumentado el acceso a la justicia en casos de feminicidio a lo largo de M¨¦xico y Am¨¦rica Latina.
El movimiento #NiUnaMenos de Argentina ha tenido un ¨¦xito notable as¨ª como los m¨²ltiples grupos de mujeres que abogan incansablemente por el empoderamiento de las mujeres y la equidad. Tenemos que hacer m¨¢s para garantizar que reciban financiamiento y apoyo suficiente que les permita continuar este importante trabajo.
No podemos abordar este problema o imaginar un mundo mejor y m¨¢s justo sin ellas.
Ricardo Lagos es ex presidente de Chile y forma parte del colectivo The Elders que apoya la Iniciativa Spotlight para eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres y ni?as.
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