Espacio inesperado
La posici¨®n de los grupos sobre la pr¨®rroga de la alarma est¨¢ dejando al descubierto los verdaderos perfiles del actual mapa parlamentario
El Congreso autorizar¨¢ hoy, previsiblemente, la segunda pr¨®rroga del estado de alarma, cuya raz¨®n salta a la vista: diariamente se diagnostican nuevos contagios, aunque el ritmo podr¨ªa estar ralentiz¨¢ndose, como el n¨²mero de fallecidos. El confinamiento, pues, est¨¢ resultando eficaz para evitar el colapso del sistema sanitario y permitir a los abnegados equipos m¨¦dicos rebajar la tensi¨®n y elevar la eficacia.
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Estas realidades deber¨ªan bastar para que la totalidad de los grupos pol¨ªticos respaldaran la pr¨®rroga del estado de alarma, y, sin embargo, algunos de ellos han anunciado que no lo har¨¢n. La ultraderecha de Vox, alegando su rechazo a un Gobierno que en su d¨ªa declar¨® ileg¨ªtimo, y que ahora, dando curso a un descarnado oportunismo, propone sustituir por otro de unidad entre el PSOE y el PP, adem¨¢s del mismo Vox, por supuesto. Las fuerzas independentistas, por su parte, no contemplan el voto negativo, pero s¨ª reafirmarse en la abstenci¨®n. Con ocasi¨®n de la primera pr¨®rroga intentaron justificarla mediante la contradicci¨®n de reclamar medidas m¨¢s dr¨¢sticas y al mismo tiempo no facilitar el instrumento legal para aplicarlas. En este nuevo pleno, la excusa es, sencillamente, indescifrable.
La posici¨®n de los grupos sobre la pr¨®rroga est¨¢ dejando inesperadamente al descubierto los verdaderos perfiles del actual mapa parlamentario, ocultos hasta hace poco por la algarab¨ªa de la crispaci¨®n. La l¨ªnea de fondo que separa a unos partidos de otros no pasa tanto por sus programas como por la elecci¨®n de sus prioridades ante una emergencia donde lo que est¨¢ en juego es la vida y la salud de los ciudadanos. Para Vox y para las fuerzas independentistas que representa Quim Torra esa elecci¨®n no admite r¨¦plica: antes que la emergencia est¨¢n sus programas, y antes que el objetivo com¨²n de controlar la pandemia, el de hacer avanzar los suyos propios.
El desmarque parlamentario de unas fuerzas que solo son antag¨®nicas porque levantan la bandera de una naci¨®n diferente permite distinguir, en sentido contrario, un amplio espacio pol¨ªtico desde el que hacer frente a la pandemia. Es en el interior de este espacio, hoy m¨¢s n¨ªtido que antes, donde puede fraguar la confianza pol¨ªtica imprescindible para dejar atr¨¢s la pesadilla, tanto desde el punto de vista sanitario como, tambi¨¦n, econ¨®mico. Los partidos que se han manifestado a favor de prorrogar la alarma lo hacen, sin duda, porque suscriben que la prioridad es la salud de los ciudadanos. Pero tambi¨¦n porque comparten la confianza en el instrumento, una Constituci¨®n que, entre las muchas pruebas que ha superado con ¨¦xito durante su vigencia, tarde o temprano podr¨¢ exhibir tambi¨¦n la erradicaci¨®n de esta pandemia.
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