Peligro de infodemia
Medidas de higiene mental para que el alud de noticias no nos acabe intoxicando. Cuatro consejos para salir del c¨ªrculo vicioso de la sobreinformaci¨®n.
Nada m¨¢s abrir los ojos por la ma?ana, Mar¨ªa echa mano de su tel¨¦fono m¨®vil. Mira los mensajes que le han entrado durante la noche y, sin salir a¨²n de la cama, consulta un par de peri¨®dicos para ponerse al d¨ªa de la pandemia. Se levanta inquieta y, mientras se prepara el desayuno, abre en su ordenador el mapa del coronavirus a tiempo real que ofrece la Universidad Johns Hopkins. All¨ª comprueba el aumento de casos y muertes en el mundo y en su propio pa¨ªs, as¨ª como en aquellos donde tiene amigos.
Mientras mordisquea una tostada sin hambre, pone la televisi¨®n. Se entera de una denuncia presentada por los colegios de m¨¦dicos catalanes contra un agricultor que promociona falsos tratamientos contra el virus a partir de una sustancia t¨®xica. Intenta teletrabajar y por WhatsApp no paran de entrarle v¨ªdeos de expertos que dan recomendaciones para no infectarse, teor¨ªas conspiranoicas, diatribas contra la gesti¨®n del Gobierno de la crisis, memes pretendidamente graciosos¡ Todo sobre la Covid-19.
Cuando Mar¨ªa hace una pausa a media ma?ana para hacer ejercicio en la bicicleta est¨¢tica, pone la radio. All¨ª recibe m¨¢s informaciones sobre un tema que cada d¨ªa le dispara m¨¢s la ansiedad. De vuelta al trabajo, le entran media docena de mensajes de personas que quieren saber c¨®mo lo lleva. Tambi¨¦n realiza un par de llamadas a amigos y familiares que est¨¢n asustados. Hablan de la situaci¨®n actual y de lo incierto y preocupante que es todo. A¨²n no ha llegado la hora del almuerzo y ya se siente exhausta y desanimada. Un dolor de cabeza persistente le hace temer si no estar¨¢ infectada tambi¨¦n ella. ?Cu¨¢ndo acabar¨¢ esta pesadilla?
Ni ella ni nadie tiene una respuesta precisa a esa pregunta, pero hay cuatro medidas de higiene mental que podemos adoptar para que la informaci¨®n sea una herramienta ¨²til y no un azote para los nervios:
Limitar la informaci¨®n. Los datos importantes sobre la pandemia no evolucionan con tanta rapidez para que tengamos que conectarnos a las noticias a todas horas. Una vez sabemos las cifras del d¨ªa, el resto son declaraciones de pol¨ªticos, comentaristas, debates, etc¨¦tera. Un exceso de informaci¨®n, m¨¢s que nutrir nuestra necesidad de saber, se acaba convirtiendo en infoxicaci¨®n, palabra que acu?¨® Alfons Cornella, fundador de la empresa Infonom¨ªa. Por salud, conviene cortar el streaming continuo de noticias para decidir cu¨¢ndo queremos recibir nuestra dosis.
Elegir medios rigurosos. El escritor T. S. Eliot advert¨ªa ya el siglo pasado que ¡°el conocimiento no implica sabidur¨ªa, as¨ª como la informaci¨®n no implica conocimiento¡±. Es algo a tener en cuenta en medio del bombardeo de teor¨ªas que achacan la pandemia a una guerra biol¨®gica secreta, al despliegue de la red 5G o a un mecanismo de defensa de la naturaleza para expulsar a los par¨¢sitos humanos. Sin embargo, estas hip¨®tesis no hacen m¨¢s que a?adir confusi¨®n a nuestra mente, agotada por el monotema y por la incertidumbre. La OMS habla ya de infodemia para referirse al exceso de informaci¨®n sobre un tema, formada en gran parte por bulos y rumores, que no es ¨²til y acaba siendo contraproducente.
Silenciar los grupos de WhatsApp y similares. Con algunos participantes que disponen de demasiado tiempo libre, estas comunidades virtuales son un pozo sin fondo de basura informativa. En un esfuerzo de evitar los bulos y la sobreinformaci¨®n, la misma empresa de mensajer¨ªa m¨®vil hoy propiedad de Facebook est¨¢ tomando medidas contra el reenv¨ªo de mensajes, limit¨¢ndolo a una vez por cada chat o grupo. Aun as¨ª, si dosificamos o cerramos el grifo de las redes sociales, recuperaremos tiempo, energ¨ªas y serenidad.
Compensar la negatividad con evasi¨®n. Aunque tomemos las medidas anteriores, seguiremos expuestos a la situaci¨®n que mantiene al planeta entero en vilo. Especialmente en las horas previas a acostarnos, una medida de higiene mental muy necesaria es distraernos con contenidos que no tengan nada que ver con la pandemia que estamos viviendo. Tanto si es una novela de aventuras como una pel¨ªcula c¨®mica, necesitamos historias amables que nos permitan desconectar y recuperar la calma necesaria para los tiempos que vienen. ¡ªeps
Francesc Miralles es escritor y periodista especializado en psicolog¨ªa.
Dormir mejor para afrontar el d¨ªa de forma positiva
El doctor Eduard Estivill, fundador de la Cl¨ªnica del Sue?o, observa que la calidad del descanso se ha visto afectada por el confinamiento, a pesar de que pasamos m¨¢s tiempo en la cama. Antes de la pandemia, la media de sue?o de los adultos en Espa?a era de 6 horas 45 minutos. Sin embargo, actualmente est¨¢n aumentando los casos de insomnio y muchas personas confiesan padecer m¨¢s pesadillas. Esto es debido, seg¨²n este especialista, a la relajaci¨®n de horarios y h¨¢bitos, lo cual desajusta nuestro reloj interior, y a la sobrecarga de informaci¨®n alarmante a lo largo del d¨ªa. Adem¨¢s de establecer horarios, Estivill recomienda limitar la informaci¨®n a una dosis por la ma?ana o al mediod¨ªa y desconectar el resto del d¨ªa para mejorar la calidad del sue?o, y con ello poder afrontar estas jornadas extra?as de forma m¨¢s positiva.
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