?Ser¨¢n los ni?os los grandes perjudicados de los rebrotes del coronavirus?

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El ejercicio al aire libre, un desahogo para los ni?os y la nueva organizaci¨®n del horario escolar

As¨ª ha podido afectar el confinamiento al neurodesarrollo de los ni?os

Con el mapa del pa¨ªs ¡®manchado¡¯ de peque?os puntos que representan rebrotes de la covid-19 y algunas comarcas retrocediendo a fases anteriores, parece posible que quienes se quejaban de un exceso de relajaci¨®n en las medidas de protecci¨®n, tuvieran raz¨®n. Algo que ya lleva tiempo preocupando a muchos padres, que no saben c¨®mo esta nueva situaci¨®n afecta a los ni?os, si corren m¨¢s peligro que en la primera oleada o si van a saber adaptarse de nuevo a unas normas que cambian constantemente. Fueron los primeros que se quedaron en casa sin colegio; tuvieron los parques cerrados; no pueden compartir juguetes ni abrazar a sus amigos¡­ Y ahora tienen que pasear con mascarilla. Y a¨²n as¨ª la pregunta contin¨²a en el aire: ?son esas medidas suficientes para salvaguardar su salud?

Seg¨²n Concha S¨¢nchez Pina, presidenta de Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa de Atenci¨®n Primaria, AEPap, hay motivos para la tranquilidad, conservando el sentido com¨²n. ¡°A pesar de que los estudios publicados parecen indicar que los ni?os enferman menos por el coronavirus y contagian menos a otras personas, no existe el riesgo cero. Aunque son pocos, hay casos de coronavirus en la edad pedi¨¢trica, por lo que si se relajan las medidas y vuelve a haber una circulaci¨®n comunitaria del virus, aumentar¨ªa el riesgo de contraer la infecci¨®n tanto en la poblaci¨®n adulta como la infantil¡±. Y contin¨²a: ¡°Faltan muchos estudios para conocer c¨®mo se comporta el coronavirus, desconocemos a¨²n muchos aspectos del mismo. Los estudios apuntan a que en espacios al aire libre ¡ªpor ejemplo piscinas¡ª y manteniendo las normas de seguridad, el contagio ser¨ªa mucho menor que en espacios cerrados y mal ventilados¡±. De ah¨ª que el verano sea el mejor momento para la tranquilidad.

Ante la vuelta al cole, en septiembre, Teresa Cenarro y Pedro Gorrotxategi, vicepresidentes de AEPap, se muestran esperanzados: ¡°Siguiendo las medidas de seguridad, detectando precozmente los casos que surjan, con seguimiento de los contactos y tomando las medidas sanitarias para aislar los brotes, el riesgo que se corre no es elevado¡±. Y los beneficios, muchos, en palabras de Concha S¨¢nchez Pina: ¡°Los pediatras consideramos necesaria esta vuelta ya que el colegio, adem¨¢s de conocimientos, aporta aspectos muy importantes para el desarrollo de la infancia. Tampoco hay que olvidar, que la repercusi¨®n de la falta de escolarizaci¨®n en el desarrollo del ni?o es muy diferente seg¨²n los condicionantes sociales en los que viva el menor¡±.

Por otro lado, parece que su gran capacidad de adaptaci¨®n les facilita estas situaciones de continuos cambios. Lo afirman Cenarro y Gorrotxategi. ¡°Se adaptaron bien, en general, al confinamiento y tambi¨¦n han demostrado su capacidad de adaptaci¨®n con la desescalada. Hay ni?os m¨¢s vulnerables por situaciones familiares desfavorecidas, problemas de salud o de personalidad en los que estos cambios pueden ocasionar alteraciones emocionales, pero la mayor¨ªa se adaptan a los cambios sin problemas.¡± Eso s¨ª, explic¨¢ndoles con palabras que ellos puedan entender, involucr¨¢ndoles para hacerles responsables y protagonistas de los beneficios que se producen gracias a su comportamiento.

Porque aunque los ni?os se adaptan bien a nivel general, tienen una clara influencia de sus padres. Lo cuenta Jos¨¦ Antonio Luengo, psic¨®logo educativo y secretario de la Junta del Colegio de Psic¨®logos de Madrid: ¡°Estimo que padres y madres est¨¢n bastante despistados e inquietos con este panorama. Esta incertidumbre en los adultos se traslada con facilidad a la infancia. El resultado en muchos casos es el afloramiento de miedos dif¨ªciles de describir pero que provocan toda suerte de s¨ªntomas inc¨®modos y desadaptativos: irritabilidad, desinter¨¦s, temor a lo que pueda pasar...¡± Por eso es tan importante que los adultos hagan ¡°las cosas bien, comprendiendo sus necesidades, trat¨¢ndoles de manera adecuada, entendiendo que ellos tambi¨¦n pueden tener miedo e incertidumbre y considerando la necesidad de darles explicaciones¡±.

En cualquier caso, parece que son ellos quienes ponen menos problemas a la hora de ser prudentes y poner en marcha las medidas obligatorias. Tanto es as¨ª que S¨¢nchez Pina comenta que ¡°los ni?os llevan con la mayor naturalidad las mascarillas, demostrando una vez m¨¢s su capacidad de adaptaci¨®n¡±. Luengo se muestra de acuerdo. ¡°Los ni?os se est¨¢n adaptando como pueden a esta circunstancia. No me preocupa el uso de las mascarillas. Lo m¨¢s duro de esta situaci¨®n es la imposibilidad del contacto...¡±