Aprender a navegar en un mar de desinformaci¨®n

Informaci¨®n sesgada, manipulaci¨®n informativa o bulos son conceptos cada vez m¨¢s presentes en nuestra sociedad. Nos hemos acostumbrado a o¨ªr hablar de desinformaci¨®n cada d¨ªa, pero no es tan habitual saber identificarla. En plena transici¨®n digital, la informaci¨®n falsa y err¨®nea en Internet se propaga a toda velocidad, y sus efectos no son inocuos. Al contrario, tienen consecuencias graves: aumento de la polarizaci¨®n social, propagaci¨®n de los discursos de miedo y odio, y una sensaci¨®n de desconfianza cada mayor hacia los medios y la pol¨ªtica. Este contexto es especialmente perjudicial para las ni?as y adolescentes que, en una etapa cr¨ªtica de aprendizaje y desarrollo, se enfrentan a contenidos falsos, confusos y peligrosos sin saber c¨®mo diferenciarlos de la informaci¨®n ¨²til, contrastada y veraz.

La pandemia ha hecho que el entorno digital sea una de las pocas ventanas al mundo para millones de ni?as y j¨®venes. Las que tienen acceso a dispositivos y una buena conexi¨®n, cada vez pasan m¨¢s tiempo en la Red, donde se informan, debaten y participan. Muchas son nativas digitales y, sin embargo, no cuentan con las herramientas para navegar de forma segura en un mar de desinformaci¨®n. Solo el 30% de las ni?as y adolescentes en Espa?a ha recibido formaci¨®n para saber identificar la desinformaci¨®n y la informaci¨®n err¨®nea y el 55% asegura no saber diferenciar noticias falsas en Internet.

Estos son algunos de los datos que revela el informe The Truth Gap: (Des)informadas online, elaborado por Plan International a partir de m¨¢s de 26.000 encuestas a ni?as, adolescentes y j¨®venes de entre 15 y 25 a?os en 26 pa¨ªses. Sus experiencias nos cuentan c¨®mo son bombardeadas a diario con mentiras y estereotipos sobre sus cuerpos, su identidad y sobre c¨®mo deben comportarse. Se manipulan im¨¢genes y v¨ªdeos para cosificarlas y avergonzarlas, y se difunden rumores para silenciar sus voces y frenar su participaci¨®n. Ven c¨®mo mujeres l¨ªderes o activistas, referentes para ellas, son objeto de campa?as de acoso.

Tal y como revela el informe, las mentiras y los bulos en Internet tambi¨¦n est¨¢n afectando a la salud mental de las j¨®venes. Al 91% de las ni?as y j¨®venes encuestadas a nivel global les preocupa la desinformaci¨®n y la informaci¨®n err¨®nea online, y un 46% asegura haber sufrido tristeza, depresi¨®n, estr¨¦s o ansiedad como consecuencia de la informaci¨®n falsa en Internet. En Espa?a, el porcentaje de ni?as que ha tenido efectos negativos en su bienestar emocional llega al 38%, donde el 19% reconoce adem¨¢s que ha llegado a sentirse insegura f¨ªsicamente.

Un ecosistema digital t¨®xico est¨¢ silenciando las voces de las ni?as. El esfuerzo ingente que deben realizar para separar los hechos y la informaci¨®n de las opiniones y los bulos, llenos de estereotipos, limita su capacidad de verse a s¨ª mismas como activistas, creadoras de ideas o l¨ªderes del cambio. En este sentido, el 15% de las encuestadas en nuestro pa¨ªs ha dejado de participar en asuntos pol¨ªticos o de actualidad como consecuencia de la informaci¨®n falsa y la desinformaci¨®n online y el 14% reconoce que estas informaciones han afectado a su confianza en los resultados electorales.

Nuestro informe del a?o pasado, (In)seguras online, ya analizaba el impacto del acoso y la violencia digital que frenan, limitan y silencian la participaci¨®n de las ni?as y las adolescentes en las redes sociales. Las participantes en este estudio ya se?alaban a las plataformas como principales responsables de combatir esta violencia, y a lo largo del ¨²ltimo a?o chicas de varios pa¨ªses han participado en un grupo de trabajo con representantes de Facebook e Instagram para mejorar los mecanismos de protecci¨®n y denuncia de acoso. Hoy se?alamos que el esfuerzo y compromiso de estas plataformas digitales ha sido insuficiente, como demuestra el informe de este a?o: el 65% de las encuestadas indica que Facebook es la plataforma en la que m¨¢s informaci¨®n err¨®nea y desinformaci¨®n encuentran.

Ni?as y j¨®venes han alzado su voz a trav¨¦s de una petici¨®n global a gobiernos de todo el mundo. Junto con Plan International, est¨¢n reclamando medidas urgentes y una mayor inversi¨®n para garantizar la alfabetizaci¨®n digital de todos los ni?os, ni?as y j¨®venes desde la educaci¨®n primaria. Solo con la formaci¨®n, el apoyo y las herramientas necesarias podr¨¢n defenderse de los bulos, ejercer sus derechos con garant¨ªas y participar de manera cr¨ªtica y segura en Internet.

No debemos permanecer impasibles: podemos ser parte de la soluci¨®n y apoyar su petici¨®n. Combatir la desinformaci¨®n y sus efectos nocivos es una cuesti¨®n de derechos, y una responsabilidad compartida de gobiernos, organizaciones, plataformas digitales y la sociedad en su conjunto. Ni?as y adolescentes tienen el poder de reescribir el futuro, y deben poder hacerlo con informaci¨®n ¨²til y veraz, no con bulos.

Concha L¨®pez es la directora general de Plan International.