El mejor lugar para desaparecer

Este es el lugar m¨¢s indicado para no toparse con nadie. El sitio perfecto para colocar los monstruos marinos que jalonaban los mapas antiguos. El centro de una circunferencia de 16.900 kil¨®metros sin un solo metro de tierra emergida. Un sitio ajeno por completo a las gu¨ªas de viaje, a la presencia humana, a casi todo. La pesadilla de cualquier n¨¢ufrago. El anti-destino.

En la mitad sur del oc¨¦ano Pac¨ªfico se ubica el polo de inaccesibilidad mar¨ªtima, el sitio m¨¢s alejado de una costa del planeta. Se le llama Punto Nemo en homenaje al personaje mis¨¢ntropo de Verne. Un buen lugar donde sumergirse con el Nautilus si, como ¨¦l, no se quiere ver a nadie ni nada m¨¢s que agua, mucha agua.

Para dibujar ese punto imaginario, los ge¨®grafos intentaron encajar en el Pac¨ªfico el mayor c¨ªrculo posible sin que tocase tierra alguna. El que rodea a Nemo cabe perfectamente en el hueco que dejan tres islas a 2.690 kil¨®metros de distancia. Tierra firme, pero mortalmente aburrida. Al noroeste, el atol¨®n Ducie est¨¢ deshabitado y no es m¨¢s que una u?a de tierra de apenas dos kil¨®metros bajo bandera brit¨¢nica. Mucho m¨¢s al sur, Maher sirve de antesala de la Ant¨¢rtida. Hasta 1868 nadie hab¨ªa puesto un pie sobre esta isla, que ni siquiera merece imagen propia en Google Earth. Su posici¨®n se muestra emborronada por un brochazo de p¨ªxeles azules. El tercer punto, m¨¢s hacia el Norte y el Este, atina sobre el islote Motu Nui, junto a la isla de Pascua, y tambi¨¦n est¨¢ despoblado.

La b¨²squeda de los polos de inaccesibilidad no se limit¨® a los mares. El concepto es aplicable a tierra firme: el punto m¨¢s alejado de la costa de un continente o una pen¨ªnsula. Por ejemplo, en el caso de la Ib¨¦rica, este punto se ubicar¨ªa entre Otero y Domingo P¨¦rez, en la provincia de Toledo, cerca de Talavera de la Reina. Por ¨¢reas continentales, el punto de inaccesibilidad de Norteam¨¦rica se encuentra cerca de Allen, en Dakota del Sur; el de Sudam¨¦rica est¨¢ en el Estado de Matto Grosso, a unos 1.000 kil¨®metros al Noroeste de Brasilia, mientras que el de ?frica estar¨ªa junto al pueblo de Obo, en la Rep¨²blica Centroafricana, cerca de la frontera con Sud¨¢n del Sur y la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo.

El punto m¨¢s interior de la Ant¨¢rtida

Menci¨®n aparte merece el polo de inaccesibilidad de la Ant¨¢rtida, ya que protagoniza uno de las ¨²ltimas epopeyas de los grandes aventureros. En 1958, los sovi¨¦ticos quisieron alcanzar el capricho geogr¨¢fico m¨¢s meriodional del mundo. Lo celebraron construyendo en el lugar un barrac¨®n y plantando encima un busto de Lenin que (se cree) todav¨ªa hoy apunta a Mosc¨².

Pero sus herramientas de medici¨®n, a?os antes de que los sat¨¦lites escudri?aran la superficie terrestre palmo a palmo, hab¨ªan ubicado aquel punto a m¨¢s de cien kil¨®metros de distancia del sitio verdadero. O de los verdaderos, porque no es lo mismo calcular el punto si se tiene en cuenta el casquete polar (la superficie cubierta por hielo, incluyendo el mar helado) que si se considera solo el continente que hay debajo.

Un punto y otro, apenas separados por 180 kil¨®metros, se pisaron por primera vez hace solo once a?os y gracias a una expedici¨®n espa?ola. En 2005, navegando con un trineo impulsado solo por el viento, tres exploradores llegaron a un lugar sin otra particularidad (al menos dentro de un inmenso desierto de hielo) que un aviso del GPS. Hab¨ªan llegado al lugar m¨¢s interior de la Ant¨¢rtida. Era 11 de diciembre y hac¨ªa 31 d¨ªas que hab¨ªan dejado atr¨¢s la base rusa de Novolaz¨¢revskaya, el ¨²ltimo sitio habitado.

¡°Llegamos despu¨¦s de atravesar la Ant¨¢rtida oriental y escogimos esa zona, lejos del polo Sur geogr¨¢fico, porque est¨¢ mucho menos trillada dentro de la exploraci¨®n polar¡±, comenta uno de aquellos tres expedicionarios y veterano aventurero polar, Ram¨®n Larramendi.

Llegar all¨ª fue muy duro. ¡°Al poco de iniciar la expedici¨®n, se averi¨® nuestro trineo, el primer veh¨ªculo impulsado por energ¨ªa renovable con el que se quer¨ªa cruzar el continente¡±. Adem¨¢s, la superficie de la Ant¨¢rtida est¨¢ llena de astrubis, una especie de baches o de olas congeladas, de hasta un metro, sobre las que es muy dif¨ªcil caminar o deslizarse. Larramendi recuerda que celebraron pisar aquel hito, a m¨¢s de 3.000 metros de altitud y a 40 grados bajo cero, descorchando una botella de champ¨¢n y fumando un puro.

Disputas sobre el centro de Asia

Al igual que con la Ant¨¢rtida, tampoco fue f¨¢cil determinar el polo de inaccesibilidad del gran continente euroasi¨¢tico. Uno de los ¨²ltimos en fijarlo no usa en su trabajo anoraks, esqu¨ªes o m¨¢scaras contra el viento. Daniel Garc¨ªa Castellanos, un geof¨ªsico del Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Almera (ICTJA-CSIC), en Barcelona, corrigi¨® mediciones anteriores en 2007 tirando de algoritmos.

¡°La ambig¨¹edad de estas mediciones se debe a la cuesti¨®n de en qu¨¦ lugar sit¨²as la l¨ªnea de costa. Normalmente, los puntos de la costa m¨¢s cercanos al polo de inaccesibilidad terrestre suelen coincidir con deltas, estuarios o bah¨ªas, pero ?d¨®nde empieza el mar y d¨®nde acaba el r¨ªo?¡±, se pregunta el experto. En el caso del de Eurasia, los c¨¢lculos de la desembocadura del r¨ªo Obi ubicaban la l¨ªnea de costa mucho m¨¢s hacia el mar. ¡°Esto llev¨® a m¨¢rgenes de error de varios kil¨®metros¡±. Poca cosa, s¨ª, cuando se habla de miles de kil¨®metros (y de unos puntos m¨¢s bien triviales), pero una piedra en el zapato para los ge¨®grafos.

¡°Determinar la continentalidad (lo interior que es una zona terrestre) tiene influencia en el estudio del clima, pero, en ese aspecto, no la tiene realmente la ubicaci¨®n precisa, unos kil¨®metros de distancia m¨¢s o menos, del polo¡±, ilustra el experto, para a?adir: ¡°A¨²n estamos lejos de conocer todos los recovecos del planeta, incluso su forma precisa, que no es una esfera ni un elipsoide (una esfera achatada), sino una forma irregular¡±.

Investigadores como Garc¨ªa Castellanos parten de este m¨¦todo para avanzar en el conocimiento: imaginan qu¨¦ forma tendr¨ªa el planeta si estuviera completamente cubierto de agua ¡ªsi el nivel del mar alcanzara la cumbre m¨¢s alta¡ª para dibujar una figura en la que debe encajar el planeta real, como si de una funda se tratase. ¡°Un patatoide¡±, como la califica el investigador.

Sobre el conocimiento de la superficie tambi¨¦n se progresa. En los ¨²ltimos d¨ªas se ha publicado el ¨²ltimo modelo topogr¨¢fico global, denominado TanDEm-X, que consta de una enorme base de datos de todo el planeta con medidas de una resoluci¨®n inusitada: cuadrados de solo 12 metros. Y es a¨²n mayor en altura: las elevaciones de todo el planeta se miden con m¨¢rgenes de solo un metro de error. En el mapa del mundo cada vez quedan menos huecos para dibujar los monstruos marinos.

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