14 espacios naturales imprescindibles para entender el atractivo de Andaluc¨ªa

M¨¢s informaci¨®n

La gu¨ªa 'En ruta por Andaluc¨ªa', de Lonely Planet

Cascadas, monta?as, desfiladeros, paisajes inabarcables, ¨¢rboles centenarios, animales salvajes, costas abruptas¡­ Andaluc¨ªa es de lo m¨¢s variopinta y gran parte de su territorio est¨¢ protegido, aunque eso no impide que est¨¦ abierto al disfrute p¨²blico. Recomendamos 14 espacios naturales que por distintos motivos merecen ser explorados en cualquier ¨¦poca del a?o. No solo en verano.

1. Ciudades de piedra y caminos de v¨¦rtigo

El Torcal de Antequera (M¨¢laga)

El Torcal es una ciudad de piedra surgida cuando se retir¨® el oc¨¦ano en el Jur¨¢sico, en plena era mesozoica (hace 145 millones de a?os), un impresionante macizo k¨¢rstico de rocas calizas que la erosi¨®n ha ido esculpiendo con formas caprichosas. El Torcal es solo una de las maravillas naturales de Antequera, ciudad malague?a cuyas contrucciones de ladrillo con un toque mud¨¦jar, su plateresco y su barroco ¡ªadem¨¢s de la porra antequera, una variante del salmorejo cordob¨¦s¡ª merecen por si sola una vista.? Lo ideal es pasar al menos dos noches para que tambi¨¦n de tiempo a visitar sus alrededores, en los que destacan el conjunto arqueol¨®gico D¨®lmenes de Antequera, un monumento funerario de la Edad de Cobre que consta de tres monumentos prehist¨®ricos (El Romeral, Viera y Menga, patrimonio mundial desde 2016) y el paraje natural del Torcal, a 16 kil¨®metros de la ciudad.? Este ¨²ltimo comprende una zona de sierra de 12 kil¨®metros salpicada de extra?as formaciones rocosas de piedra caliza, modeladas por los agentes atmosf¨¦ricos, a las que se le han dado los nombres m¨¢s fantasiosos, como el Burladero, la Esfinge, las Catedrales o el P¨²lpito. Declarado tambi¨¦n patrimonio mundial por la Unesco, el conjunto ofrece varias rutas se?alizadas, como la Ruta Verde, de dificultad baja y que se recorre en unos 45 minutos; o la Ruta Amarilla, que discurre por terreno pedregoso y requiere al menos dos horas para completarla.

Otra excursi¨®n interesante para amantes de la naturaleza es la que nos lleva hasta la Laguna de Fuente de Piedra, a 30 minutos en coche al norte de Antequera. Se trata del mayor humedal de Andaluc¨ªa, de 6,5 kil¨®metros de largo, en el que, entre los meses de marzo y julio, se dan cita miles de parejas de flamencos para reproducirse. Adem¨¢s es un ¨¢rea de invernada y de paso de muchas otras aves. Para sacarle el jugo a la visita es imprescindible contar con unos buenos prism¨¢ticos.

La ¨²ltima visita recomendable est¨¢ 35 kil¨®metros al oeste de Antequera. El Caminito del Rey es un escalofriante sendero que pasa por las paredes del desfiladero de los Gaitanes, un ca?¨®n excavado para desviar las aguas del r¨ªo Guadalhorce hasta una central hidroel¨¦ctrica. Tres de sus ocho kil¨®metros transcurren por una vertiginosa pasarela de madera (rehabilitada por completo en 2015) a 105 metros de altura sobre el agua. Las entradas solo se adquieren por Internet para fechas y franjas horarias muy espec¨ªficas, as¨ª que es necesario comprarlas con, al menos, un mes de antelaci¨®n.

2. El parque nacional m¨¢s joven de Espa?a

Sierra de las Nieves (M¨¢laga)

Hace solo unas semanas la sierra malague?a de las Nieves se convert¨ªa en el decimosexto parque nacional del pa¨ªs, el tercero en Andaluc¨ªa y el primero en M¨¢laga. Y m¨¦ritos no le faltan a este rinc¨®n en el centro de la provincia de M¨¢laga, un espacio de gran valor paisaj¨ªstico y grandes contrastes, en el que podemos encontrar cimas de casi 2.000 metros de altitud, junto a la sima m¨¢s profunda de Andaluc¨ªa; todo un para¨ªso para amantes de la monta?a y de la espeleolog¨ªa. Pero lo que le hace realmente ¨²nico a este parque es su riqueza bot¨¢nica, con hasta 15.000 tipos de plantas, con un protagonista especial: el pinsapo, un abeto mediterr¨¢neo reliquia de la ¨¦poca glaciar (lee el reportaje de EL PA¨ªS Semanal aqu¨ª). Junto a los pinsapos hay encinas, alcornoques, algarrobos y casta?os. No falta la fauna (cabra mont¨¦s, ¨¢guilas, b¨²hos gavilanes...) y unos pueblos blancos que no han perdido su identidad, como El Burgo, localidad tan remota como atractiva, que puede ser una buena base para visitar el parque.

Uno de los paseos m¨¢s recomendables por la sierra es la ascensi¨®n al pico m¨¢s alto de Andaluc¨ªa occidental, el Torrecilla, entre Ronda y San Pedro de Alc¨¢ntara.

3. R¨ªos, pinsapos, embalses¡­ y mucha lluvia

Sierra de Grazalema (C¨¢diz y M¨¢laga)

Grazalema no se cansa de romper los t¨®picos sobre Andaluc¨ªa, ya que en este lugar llueve y llueve sin parar. De hecho, es el rinc¨®n de la pen¨ªnsula con m¨¢s precipitaciones al a?o. Solo as¨ª se explica la exuberante naturaleza y la espectacularidad de esta sierra declarada parque natural en 1977, que se extiende por 574 kil¨®metros cuadrados en el extremo occidental de la cordillera B¨¦tica, entre las provincias de M¨¢laga y C¨¢diz, y que forma parte del restringido club de Reservas de la Biosfera de la Unesco.

En Grazalema encontraremos bosques de pinsapos, cuevas, embalses, r¨ªos, vestigios arqueol¨®gicos y una nutrida flora y fauna end¨¦micas. Las localidades m¨¢s interesantes del parque se pueden conocer a trav¨¦s de una extensa red de 20 senderos, algunos de los cuales llegan a lugares de acceso restringido. Por ejemplo, el de la Garganta Verde (2,5 kil¨®metros; 1 hora), hasta la hom¨®nima ca¨ªda de agua; el del El Torre¨®n (3 kil¨®metros; 2 horas y media), el pico m¨¢s alto de la provincia gaditana; el del Pinsapar (12 kil¨®metros; 7 horas), por el bosque de pinsapos, o el sendero de Llanos del Rabel (6,2 kil¨®metros; 2 horas).

Para recorrerlos, as¨ª como obtener informaci¨®n y planos de las rutas, es necesario reservar en el centro de visitantes de El Bosque. El acceso es gratuito, pero si se tiene pensado acudir en temporada alta (verano y primavera) es aconsejable llamar o enviar un correo electr¨®nico a esta direcci¨®n cvelbosque@reservatuvisita.es al menos con un mes de antelaci¨®n.

Grazalema es tambi¨¦n un escenario donde se puede hacer puenting, parapente, barranquismo, espeleolog¨ªa, escalada o, simplemente, pasear y disfrutar de la naturaleza. Por ejemplo, en el pantano de Zahara de la Sierra-El Gastor, con la sierra del Pinar como tel¨®n de fondo, perfecto para dar un paseo en canoa.

4. Excursiones entre alcornoques y quejigos

Los Alcornocales (C¨¢diz)

Una inmensa masa de alcornoques ¡ªque ha sobrevivido gracias a la extracci¨®n del corcho¡ª, quejigos y robles conforman un enorme bosque de 170.000 hect¨¢reas surcado por r¨ªos y arroyos, a caballo entre las provincias de C¨¢diz y M¨¢laga, entre el estrecho de Gibraltar y la sierra de Grazalema. El parque natural de los Alcornocales que protege este paraje es un verdadero para¨ªso para los amantes del excursionismo. Sus 1.677 kil¨®metros cuadrados, en los que viven decenas de especies animales, esconden r¨ªos, lagunas, cumbres de roca caliza, cuevas cubiertas de pinturas prehist¨®ricas (como la del Tajo de las Figuras) y decenas de umbr¨ªos senderos, ideales para romper la rutina playera.

Al parque se puede ir a pescar, subir a El Picacho o recorrer la ruta de los molinos a la que se accede desde la localidad gaditana de Alcal¨¢ de los Gazules. Uno de los recorridos m¨¢s populares y con mejores vistas es el que sube desde este pueblo hasta El Picacho (3,3 kil¨®metros), que con sus 882 metros de altura es el segundo punto m¨¢s elevado del parque. Desde la cumbre, el panorama del bosque es inolvidable. Para acometer esta caminata es imprescindible solicitar un permiso en el centro de visitantes, en Alcal¨¢ de los Gazules.

5. El desierto desde el mar

Cabo de Gata (Almer¨ªa)

Lejos del turismo masivo de otras zonas de Andaluc¨ªa, aunque cada vez m¨¢s demandado, el Cabo de Gata se ha convertido en uno de los ¨²ltimos rincones en los que disfrutar con relativa calma de los contrastes de los paisajes andaluces. A 35 kil¨®metros al este de Almer¨ªa, el cabo de Gata es un promontorio rocoso asomado al Mediterr¨¢neo y coronado por un faro, pero tambi¨¦n da nombre a un amplio parque natural cuyo ¨¢rea protegida, que incluye tambi¨¦n un tramo de mar, abarca numerosos pueblos y algo m¨¢s de 340 kil¨®metros de costa, irregular y escarpada que cobijan decenas de rec¨®nditas calas, muchas de ellas de dif¨ªcil acceso.

Un perfecto punto de partida para explorarlas, preludio de lo que se puede encontrar m¨¢s al oeste, es Carboneras, el municipio m¨¢s oriental del parque, frente al cual se halla la isla de San Andr¨¦s ¡ªen realidad son dos islotes; isla Grande e isla Chica¡ª, declarada monumento natural en 2003 y destino de los amantes del buceo por la riqueza de sus fondos marinos. Las playas m¨¢s famosas y concurridas, generalmente largas y con fondos arenosos, est¨¢n alrededor de San Jos¨¦; en cambio, las espectaculares calitas solitarias que han hecho famosa a la zona, y a las cuales se accede a trav¨¦s de caminos polvorientos con diferentes grados de dificultad, est¨¢n casi por cualquier parte. La deliciosa cala de los Toros, a la que se llega pasando por un estrecho valle cubierto de pinos y palmeras, es un buen ejemplo, cerca de La Isleta del Moro, una de las aldeas m¨¢s aut¨¦nticas de la zona, con varios restaurantes de pescado y un bonito mirador muy frecuentado cuando se pone el sol.

El puerto de San Jos¨¦ es tambi¨¦n uno de los puntos de partida para las excursiones en barco que permiten admirar desde el mar la belleza y la diversidad de la costa del parque natural Cabo de Gata-N¨ªjar. Adem¨¢s de contemplar los acantilados y el resultado de los distintos aluviones volc¨¢nicos, con algunas traves¨ªas se disfruta de chapuzones en las calas o de la puesta de sol.

6. La meca del 'spaghetti western'

Desierto de Tabernas (Almer¨ªa)

Al norte de la ciudad de Almer¨ªa, este paraje des¨¦rtico de cerros pardos con escasos matojos se asemeja al desierto de Mojave (EE UU). En los a?os 60, famosos actores como Clint Eastwood o Claudia Cardinale se pasearon por estos paisajes donde se rodaron numerosos spaghetti western. Esos antiguos decorados de la ¨¦poca dorada de las pel¨ªculas del Oeste se han convertido en parques tem¨¢ticos donde pasar una jornada divertida en familia. Y algunos siguen siendo plat¨®s de cine,

Pero hay m¨¢s en este desierto de 280 kil¨®metros cuadrados, el ¨²nico declarado como tal en suelo europeo, y uno de los paisajes m¨¢s singulares de Espa?a. El campamento base para explorar la zona es el desolado pueblo de Tabernas, principal localidad de la zona. Pese a que en el pueblo se hallan interesantes iglesias y ermitas, y los restos del castillo ¨¢rabe, casi todos los viajeros pasan por aqu¨ª para visitar algunos de los viejos decorados cinematogr¨¢ficos, transformados actualmente en parques tem¨¢ticos (como Fort Bravo y Oasys MiniHollywood) que organizan espect¨¢culos de baile de canc¨¢n, tiroteos y rutas a caballo. Para descubrir las maravillas geol¨®gicas y medioambientales del desierto es mejor contratar una ruta en todoterreno con alguna agencia local.

Uno de sus parajes m¨¢s singulares son las cuevas de Sorbas, que forman parte de una amplia red de cavidades y galer¨ªas subterr¨¢neas excavadas en los yesos. Cristales brillantes de yeso, apacibles estanques, estalactitas, estalagmitas y oscuros t¨²neles fantasmales forman parte de un circuito de una hora y media.

7. Un vergel de flora y fauna

Parque nacional de Sierra Nevada (Granada)

Con el pico m¨¢s alto de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, el Mulhac¨¦n (3.479 metros), y la estaci¨®n de esqu¨ª m¨¢s meridional, la de Pradollano, el macizo de Sierra Nevada no necesita presentaciones. Sus 75 kil¨®metros de longitud, que se extienden de oeste a este por las provincias de Granada y Almer¨ªa, y alberga hasta 61 municipios, atraen cada a?o a miles de viajeros de todo el mundo. El parque nacional de Sierra Nevada, con una extensi¨®n de 862 kil¨®metros cuadrados, es el mayor parque nacional de Espa?a, con m¨¢s de 2.000 plantas catalogadas de las cerca de 8.000 que existen en la Pen¨ªnsula, entre ellas muchas end¨¦micas. Tambi¨¦n presume de tener la mayor poblaci¨®n de ¨ªbices (cabras salvajes) de Andaluc¨ªa, que retozan por encima de los 2.800 metros.

Sierra Nevada fue declarada parque nacional en 1998 por tratarse de un h¨¢bitat de una impresionante variedad de flora y fauna, y con hasta 14 cumbres que superan los 3.000 metros de altitud. Ofrece todo tipo de atractivos durante todo el a?o, como excursiones y rutas organizadas, pero tambi¨¦n se puede ir por libre a la Hoya de la Mora, desde donde sale el autob¨²s que llega a las cabeceras de las sendas que suben al Veleta (4 kil¨®metros) y al Mulhac¨¦n (14 kil¨®metros).

En el peque?o poblado de Pradollano (integrado pr¨¢cticamente por hoteles, restaurantes y otros establecimientos hosteleros) se halla la estaci¨®n de esqu¨ª de Sierra Nevada, que cuenta con 111 kil¨®metros de pistas y 21 remontes, y que en verano permite explorar las monta?as en bicicleta.

8. De Sierra Nevada a las Alpujarras

Los Cahorros del r¨ªo Monachil (Granada)

El r¨ªo Monachil ha ido excavando un desfiladero que, en algunos puntos, alcanza 30 metros de altura y que puede disfrutarse a lo largo de una ruta de unos nueve kil¨®metros que parte del pueblo del mismo nombre y est¨¢ abierta todo el a?o. Se trata de una excursi¨®n espectacular, dentro del parque natural de Sierra Nevada, que atraviesa por un puente colgante de 63 metros. Las paredes del ca?¨®n son un destino popular para la pr¨¢ctica de la escalada.

Monachil est¨¢ a menos de media hora de Granada y es puerta de entrada para disfrutar del espectacular panorama alpino que se desvela en el horizonte granadino: tanto las cumbres de Sierra Nevada, entre las que despunta el techo de la Espa?a peninsular, como las cotas m¨¢s bajas que se extienden por las Alpujarras, salpicadas de pintorescos pueblecitos.

El paisaje de las Alpujarras es completamente diferente, incluso extra?o respecto a todos: una serie de valles que se extienden por el flanco sur de Sierra Nevada, con pueblos como?Pampaneira o Capileira, que se llenan de visitantes en busca de paz espiritual. Pero hasta los m¨¢s visitados resultan atractivos, con sus casas de estilo bereber y techos planos, y callejones que se abren entre ellas a diversos niveles por las laderas, entre conducciones de agua de tiempos de la invasi¨®n ¨¢rabe. Hay senderos que conectan estas localidades y que pueden recorrerse sin problemas para explorar la comarca a pie.

9. Cerezos, adelfas y cascadas en Sierra M¨¢gina (Ja¨¦n)

En Ja¨¦n no solo crecen olivos. En la localidad de Torres, en pleno coraz¨®n del parque natural de Sierra M¨¢gina, cada primavera la floraci¨®n de los cerezos ti?e sus campos de blanco hasta donde alcanza la vista. Un manto que en verano se torna rojo. Adem¨¢s, desde este pueblo parten varias rutas y los m¨¢s preparados pueden incluso subir al pico M¨¢gina, de 2.165 metros de altitud. Torres es un blanco balc¨®n asomado a un mar verde de olivares y cerezos, y uno de los pueblos m¨¢s pintorescos de esta Sierra M¨¢gina, mucho m¨¢s desconocida que la cercana Sierra de Segura. A 23 kil¨®metros se all¨ª se encuentra Bedmar, donde se halla uno de los bosques de adelfas m¨¢s grandes de toda Europa. Y en Jimena, en la falda noroeste del monte Aznait¨ªn, podemos hacer una ruta por el Pinar de C¨¢nava, un espacio verde de pino carrasco bastante peculiar porque es uno de los m¨¢s antiguos de toda Andaluc¨ªa. Adem¨¢s, por aqu¨ª y por all¨¢ surgen peque?os oasis como el nacimiento del r¨ªo Arbuniel, en Cambil, o el paraje de H¨²tar, en Albanchez, un capricho de la naturaleza en forma de cascadas y lagunillas de aguas cristalinas.

Sierra M¨¢gina es parque natural desde 1989. Por estas tierras cruzaba la Ruta de los Nazar¨ªes, que un¨ªa las Navas de Tolosa con el reino de Granada, escenario de muchas batallas, por lo que la regi¨®n est¨¢ llega de fortificaciones y castillos.

10. Donde nace el Guadalquivir

Cazorla, Segura y las Villas (Ja¨¦n)

Este es el enclave protegido de mayor tama?o de Espa?a, con altas cumbres, tupidos bosques y peque?os pueblos api?ados bajo inexpugnables castillos. En su conjunto se trata de uno de los lugares naturales m¨¢s emblem¨¢ticos de Andaluc¨ªa. Las joyas de la ruta son Cazorla, Hornos y Segura de la Sierra, tres localidades donde historia, naturaleza y cultura se fusionan regalando postales de ensue?o.

Con m¨¢s de 2.100 kil¨®metros cuadrados de territorio protegido, el parque re¨²ne ecosistemas muy diversos, desde olivares hasta altas monta?as que llegan a cotas de 2.107 metros. Entre medias hay densos bosques regados por r¨ªos y riachuelos, valles, terrenos k¨¢rsticos e impresionantes cascadas. No es de extra?ar que sea un destino privilegiado para excursionistas, que pueden elegir entre decenas de senderos que se adentran en ¨¦l. Muchos de ellos salen de Cazorla, como la ruta de los Cortados del Chorro (20 kil¨®metros; 5 horas), la del Gilillo (18 kil¨®metros; 5 horas) o la del R¨ªo Borosa (15 kil¨®metros; 4 horas), una de las m¨¢s transitadas. Para saber cu¨¢l elegir es recomendable acercarse al centro de interpretaci¨®n del Chorro, entre La Iruela y Hornos, rodeado por un jard¨ªn bot¨¢nico y con una exposici¨®n sobre naturaleza, bot¨¢nica y fauna.

Entre los rincones m¨¢s interesantes de esta serran¨ªa andaluza destacan el nacimiento del Guadalquivir, al que se llega por una pista sin asfaltar o la cerrada de El¨ªas en el R¨ªo Borosa. Para los muy andarines: el sendero circular GR 247 da la vuelta a todo el parque, pasando por la mayor parte de los sitios de inter¨¦s y los m¨¢s atractivos. Son 21 etapas, con refugios de urgencia all¨ª donde no hay ning¨²n otro alojamiento. Adem¨¢s, casi todo el sendero puede recorrerse en bicicleta.

11. Rincones naturales cruzando Despe?aperros

Cascada de La Cimbarra (Ja¨¦n)

Al norte de la provincia de Ja¨¦n el r¨ªo Guarrizas esconde muchas sorpresas: grandes rocas de cuarcita, en las que se conservan restos f¨®siles, y una sucesi¨®n de impresionantes cascadas. La m¨¢s espectacular es la de La Cimbarra, con 40 metros de ca¨ªda, que forma una laguna en la que muchos no resisten la tentaci¨®n de darse un chapuz¨®n en verano (aunque el ba?o no est¨¢ permitido). Tanto en la cascada de Cimbarra como en cuevas del entorno hay importantes ejemplos de pinturas rupestres neol¨ªticas, prueba del valor estrat¨¦gico que esta zona de Despe?aperros ha tenido hist¨®ricamente como lugar de paso obligado entre la Meseta y Andaluc¨ªa.

12. El reino de las aves de paso

Marismas de Do?ana (Huelva)

Las aves son las grandes protagonistas del espacio natural de Do?ana, una de las principales reservas ecol¨®gicas de Europa, que ocupa m¨¢s de 100.000 hect¨¢reas entre las provincias de Huelva, Sevilla y C¨¢diz. Patrimonio mundial de la Unesco, Do?ana es tambi¨¦n uno de los rincones naturales m¨¢s originales de la pen¨ªnsula, un extens¨ªsimo humedal en la desembocadura del Guadalquivir en el que corretean grandes reba?os de ciervos y piaras de jabal¨ªs, el lince ib¨¦rico trata de sobrevivir y, por aqu¨ª y por all¨¢, podremos ver miles de aves acu¨¢ticas del norte que pasan aqu¨ª el invierno, entre ellas, cerca del 80% de los ¨¢nades reales.

Partir del centro de visitantes El Acebuche es una de las muchas formas de acercarse a este territorio en el que las marismas tienen un protagonismo especial. En el arroyo de la Rocina, accesible desde El Roc¨ªo, se pueden ver multitud de aves acu¨¢ticas, especialmente en el crep¨²sculo, cuando se acercan en bandadas para dormir. Por el sendero de las lagunas del Acebuche (1,5 y 3,5 kil¨®metros de ida y vuelta) llegaremos a observatorios ornitol¨®gicos que dominan las cercanas lagunas, y si seguimos la ruta de la Raya Real, una de las m¨¢s importantes para la peregrinaci¨®n del Roc¨ªo, entraremos en el Coto del Rey, una amplia zona boscosa donde pueden verse ciervos y jabal¨ªes con facilidad.

La ¨²nica forma de visitar el parque nacional de Do?ana es mediante circuitos guiados en todoterrerno con alguna de las empresas autorizadas.

13. Por carreteras secundarias en la Siberia sevillana

Cerro del Hierro, Sierra Norte (Sevilla)

Al paisaje de rocas calizas del Cerro del Hierro, una aldea de la localidad de San Nicol¨¢s del Puerto, le llaman la Siberia sevillana. Sus minas, explotadas desde los romanos hasta finales del siglo XX, han moldeado el aspecto del paraje que forma parte del parque natural Sierra Norte de Sevilla. Un sendero de unos dos kil¨®metros con varios miradores permite disfrutar del paisaje.

Este es uno de los muchos rincones de este parque natural que abarca una amplia zona en el norte de la provincia de Sevilla, con un paisaje muy cambiante de verdes valles y suaves colinas, bosques, r¨ªos y viejos pueblos de estrechas calles blancas o castillos de ¨¦poca musulmana. Es sencillo pasar varios d¨ªas por estas tranquilas carreteras secundarias disfrutando de las numerosas rutas de senderismo y bicicleta: hay 19 rutas marcadas en diversas zonas, entre ellas la v¨ªa verde de la Sierra Norte, una de las mejores: 18 kil¨®metros que discurren por el valle del Hu¨¦znar hasta las minas del Cerro de Hierro, siguiendo una antigua v¨ªa f¨¦rrea en desuso.

14. Para¨ªsos naturales de Sierra Morena

Sierra de Hornachuelos (C¨®rdoba)

Con una extensi¨®n de m¨¢s de 60.000 hect¨¢reas, cubiertos en gran parte por bosque mediterr¨¢neo y regado por varios r¨ªos, el parque de la Sierra de Hornachuelos, en Sierra Morena, es uno de los para¨ªsos naturales del occidente andaluz. Es perfecto para conocer en todo su esplendor el bosque mediterr¨¢neo y de ribera de Sierra Morena. Por sus seis senderos se?alizados es posible ver algunas de las especies que lo habitan: ciervos, jabal¨ªes, lobos ib¨¦ricos, buitres negros, ¨¢guilas imperiales o cig¨¹e?as negras.

Para conocer sus parajes m¨¢s destacados, lo mejor es acercarse a Hornachuelos, capital de la reserva, donde est¨¢ el centro de visitantes Huerta del Rey con una peque?a exposici¨®n sobre el medioambiente de la zona e informaci¨®n para realizar rutas a caballo o en burro.?