24 horas en la Barceloneta, donde aflora el alma marinera de Barcelona

Con casi 260 a?os de antig¨¹edad, la Barceloneta es un barrio de origen marinero y obrero donde a¨²n se pueden encontrar vecinos que te hablan de lo que fue el lugar hace a?os. El quehacer del d¨ªa a d¨ªa no es lo que suele aparecer en las fotos de postal y los turistas despistados no suelen adentrarse en su interior. Cuando hace calor, muchos son los visitantes que se dejan ver en su vistoso paseo mar¨ªtimo, que comienza en el lujoso Hotel W, dise?ado por Ricardo Bofill, y termina en el monumento al Pez, dise?ado por Frank Gehry en 1992. Este barrio costero, para algunos, sobre todo para las mayores, sigue siendo L¡¯Ostia. Aunque se dice que el apelativo viene de la cantidad de ostras que antiguamente sus aguas tra¨ªan consigo, otra versi¨®n habla del contrabando que ven¨ªa del puerto romano del mismo nombre. Lo cierto es que el barrio fue construido en el siglo XVIII cuando sus costas dejaron de estar inundadas. El crecimiento y desarrollo del puerto de Barcelona fue fundamental para la creaci¨®n de este barrio que durante el verano adquiere un brillo especial.

9:00 Bares de toda la vida

Pedro lleg¨® a Barcelona en 1992, en plena efervescencia de la capital catalana debido a los Juegos Ol¨ªmpicos que transformaron la ciudad. ¡°Antes hab¨ªa dos t¨²neles subterr¨¢neos que te llevaban a la playa¡±, dice ¨¦l, sentado en la barra del Bar Pi?ol (Andrea Doria, 28) (1), una t¨ªpica tasca donde suelen acudir los vecinos del barrio, ideal para tomar desayunos. La Cova Fumada (Baluard, 56) (2) es otro de los establecimientos t¨ªpicos y con m¨¢s historia del barrio, tiene m¨¢s de 75 a?os y por ah¨ª han pasado m¨¢s de tres generaciones de la familia Sol¨¦. Est¨¢ en la plaza del Mercado y llama la atenci¨®n porque siempre hay gente haciendo cola para sentarse en una mesa. Solo abre por las ma?anas y algunos vecinos dicen que la tradicional Bomba catalana se invent¨® aqu¨ª, donde, eso s¨ª, tienen el mejor precio (2 euros). Otros vecinos, en cambio, mencionan a La Bombeta (Maquinista, 3) como la creadora de esta bola hecha de patata prensada y frita. Otro buen sitio para desayunar es el Bar del Paco (3), en el mismo mercado.

10:00 El aporte de Gaud¨ª

A pocos metros de la boca del metro de la Barceloneta est¨¢ la Plaza del Palau (4), que en la antig¨¹edad fue la plaza principal de Barcelona. Por aqu¨ª entraba todo lo que llegaba v¨ªa mar¨ªtima y durante mucho tiempo fue el ¨²nico acceso que se ten¨ªa a la ciudad desde el puerto. En el siglo XIX el Ayuntamiento le encarg¨® a Antonio Gaud¨ª el dise?o de unas farolas que a¨²n se pueden ver frente al edificio de la antigua aduana de Barcelona. En la misma plaza tambi¨¦n se puede apreciar la Fuente del Genio Catal¨¢n, un monumento de estilo neocl¨¢sico cuya construcci¨®n estuvo dedicada a la memoria de un capit¨¢n general de Catalu?a, Francisco Bernaldo de Quir¨®s y Mari?o de Lobera, que en 1826 trajo las aguas de la sierra Moncada a la regi¨®n.

10:30 Repaso a la historia de Catalu?a

Cruzando la ronda de Litoral nos encontramos con la plaza de Pau Vila, donde est¨¢ el Palau de Mar (5), un edificio construido entre 1880 y 1890 que en un principio sirvi¨® para acoger los antiguos Almacenes Generales de Comercio. Con una arquitectura portuaria del siglo XIX, hoy la construcci¨®n alberga el Museo de Historia de Catalu?a y el Centro de Historia Contempor¨¢nea. El museo, inaugurado en 1996, es de visita imprescindible para conocer el pasado de esta regi¨®n espa?ola. Su exposici¨®n permanente, que ocupa unos 4.000 metros cuadrados, abarca desde el paleol¨ªtico inferior hasta la Catalu?a posfranquista, dividida en siete partes. En la azotea espera 1881 la Terraza de las Indianas, un restaurante-bar y mirador donde se puede ver La Barceloneta a vista de p¨¢jaro y es posible acceder con la entrada al museo.

12:00 Un chapuz¨®n antes de tomar el sol

De las nueve playas que hay en la ciudad cuatro est¨¢n en la Barceloneta. Somorrostro (6) est¨¢ ubicada en el l¨ªmite con Poble Nou. En el pasado este arenal alberg¨® barracas con hasta 15.000 personas que, en parte, se pueden ver en la fotograf¨ªa La Chunga en Somorrostro de Oriol Maspons y Julio Ubi?a de 1958 (hoy en d¨ªa expuesta en el Reina Sof¨ªa de Madrid). Le sigue la playa de la Barceloneta (7) en la que uno se encontrar¨¢ con la mayor cantidad de turistas de todas partes del mundo y donde los chiringuitos en la arena est¨¢n a la orden del d¨ªa. Practicar idiomas aqu¨ª no ser¨¢ muy dif¨ªcil. La de Sant Miquel (8) le debe su nombre a la iglesia Sant Miquel de Port, construida en 1755, y es tambi¨¦n una de las m¨¢s concurridas de la ciudad. A su lado y cercana al hotel W est¨¢ Sant Sebesti¨¤, (9)una de las playas m¨¢s antiguas, donde se puede practicar nudismo a la altura del Club de Nataci¨® Barcelona (10). A diferencia de las otras, es la menos concurrida y suele ser la preferida de los barceloneses.?

14:30 Pausa para comer

Al adentramos en el coraz¨®n del barrio encontraremos una serie de recomendaciones para comer. Con m¨¢s de 65 a?os, Can Ramonet (Maquinista, 17) (11) es un restaurante donde se puede degustar comida casera con un toque de originalidad y frescura. Pasa por ser la taberna m¨¢s antigua del puerto, ya que lleva desde 1753 en ese mismo lugar y hoy pertenece al Grupo Ramonet. Tiene men¨²s del d¨ªa a menos de 20 euros, con platillos como lomo con bacalao con chanfaina o entrecot de ternera a la pimienta con patatas fritas. La Bombeta (Joan de Borb¨®n, 19) (12), por su parte, ofrece calamares rellenos y sus famosas patatas bravas.

16:00 La huella modernista

En el Parque de la Barceloneta (13),ubicado por debajo de la Ronda del Litoral e inaugurado en 1996, se puede apreciar una gran variedad de especies vegetales. Est¨¢ ubicado donde previamente hab¨ªa funcionado la f¨¢brica Catalana de Gas que cerr¨® en 1989. Es un espacio abierto, donde tambi¨¦n hay pistas de baloncesto y se puede ver a j¨®venes y adolescentes practicando deportes. El parque est¨¢ dividido en tres partes y en una de ellas est¨¢ La Torre de Aguas, construcci¨®n modernista dise?ada por el arquitecto Dom¨¨nec i Estap¨¤ en 1907, en la que se puede observar su cubierta c¨®nica de ladrillo trencadis.Aqu¨ªtambi¨¦n se encuentra La F¨¢brica del Sol, otro espacio que por su arquitectura modernista hay que ver. Es obra del mismo arquitecto y hoy es sede de Recursos de Barcelona Sostenible, encargada de la educaci¨®n ambiental.

17:00 Barceloneta literaria

Los libros y los lectores en esta parte de Barcelona tienen dos refugios. El primero de ellos es Fahrenheit 451 (Sal, 5) (14), que hasta hace poco era la m¨ªtica librer¨ªa Negra y Criminal regentada por Paco Camarasa. Hoy est¨¢ a cargo de Sergio Lled¨® y su pareja Azra Ibramovich. ¡°Comenzamos con una librer¨ªa ambulante en Sitges y lo nuestro fue intentar poner en valor el oficio del librero en detrimento del consumo online¡±, dice Lled¨® en una peque?a estancia donde es posible tomarse un caf¨¦. Gracias a la iniciativa de una clienta que compr¨® el local, hoy, la que era librer¨ªa de novelas policiales, lleva el nombre del t¨ªtulo de una de las obras de Ray Bradbury. ¡°La antigua era m¨¢s oscura. Nosotros la hemos abierto e iluminado un poco m¨¢s, pero mantiene el calorcito que ten¨ªa Negra¡±. La otra es la librer¨ªa La Garba (Maquinista, 19) (15), que lleva funcionando casi 40 a?os. Originalmente abierta y fundada como una cooperativa por Pilar Malla, pas¨® por las manos de m¨¢s de un due?o. Hoy est¨¢ regentado por La Asociaci¨®n Barceloneta Abierta, que tras la jubilaci¨®n del ¨²ltimo propietario decidi¨® hacerse cargo del local. ¡°Lo que hicieron fue buscar avales mancomunados entre los vecinos que pusieron entre 100 y 1.000 euros cada uno¡±, dice Xavi Noya, uno de sus dependientes. Para el traspaso se necesitaban 40.000 euros. ¡°Hoy gracias a los vecinos, la librer¨ªa sigue funcionando¡±.

19:00 Caf¨¦ como recuerdo

Si algo ha caracterizado a los barrios como la Barceloneta es el esp¨ªritu pujante de sus vecinos. Son muy pocos los comercios familiares que han resistido el paso del tiempo. Uno de ellos es Caf¨¦s Salvador (Maquinista, 15) (16), uno de los pocos en Barcelona donde uno se puede llevar el caf¨¦ reci¨¦n tostado y embolsado a casa, proveniente distintas partes del mundo. La bolsa ronda los 18 euros y se puede escoger entre m¨¢s de 14 tipos de caf¨¦. Miguel Palau, hijo de Salvador, lleva 37 a?os trabajando en la tienda que comenz¨® como una Colmada. ¡°Yo vivo en este barrio de toda la vida y a¨²n hay clientas mayores que siguen viniendo a comprarnos como lo hac¨ªan antes. Cada vez son menos, claro¡±, dice mostrando los costales de caf¨¦ verde. ¡°Si lo hueles, sentir¨¢s que a¨²n huele a campo¡±.

?21:00 Un paseo despu¨¦s de la cena

Paco Alcalde (Em¨ªlia Llorca Mart¨ªn, 12) (17) es la tercera generaci¨®n de la arrocer¨ªa del mismo nombre que tiene m¨¢s de 101 a?os. Su abuelo lleg¨® de Berlanga de Duero (Soria) con 13 a?os y trabaj¨® con el antiguo due?o de lo que entonces era una tienda, quien le vendi¨® el local a plazos. ¡°Dorm¨ªa debajo de las botas de vino¡±, cuenta Alcalde. ¡°Llegaban los pescadores con garrafas de 20 o 30 litros para que se los llenaran de vino. A veces ven¨ªan con botas gigantescas que cargaban al hombro¡±. En ese entonces el hielo se vend¨ªa a granel. ¡°Ped¨ªan una peseta de hielo y cortaban el enorme bloque con una sierra¡±, relata Alcalde. ¡°Mucha gente ven¨ªa a tomar el verm¨² los domingos por la ma?ana. En esa ¨¦poca se tomaba el Suau, que era caf¨¦ con gaseosa¡±. Salamanca (Pepe Rubianes, 34) (18) es otra emblem¨¢tica marisquer¨ªa con m¨¢s de 50 a?os de trayectoria y por donde han pasado distintas celebridades. Para algo m¨¢s casero, El Nou Ramonet (Carbonell, 5) (19) tiene un ambiente m¨¢s fresco e informal, as¨ª como La Fresca (Maquinista, 8) (20) donde se puede cenar por entre 10 y 20 euros por persona.

Una caminata por el Paseo Mar¨ªtimo tras la cena puede ser una buena forma de despedirse del barrio.