Ocho razones para visitar Hamburgo, desde pasear a orillas de un lago hasta tomarse una cerveza en un mercado del siglo XVIII
Una iglesia medieval, el museo de la Emigraci¨®n o disfrutar de su litoral fluvial, al m¨¢s puro estilo Mediterr¨¢neo, son algunos de los motivos l¨ªquidos y rojos para visitar esta ciudad alemana
La relaci¨®n entre el agua, el comercio y la arquitectura es el pilar que sustenta la historia de Hamburgo. Un puerto fluvial que el r¨ªo Elba comunica con el Mar del Norte, a unos cien kil¨®metros de distancia. Distancia que no se percibe a tenor del ambiente marinero que se respira. Los motivos para visitar Hamburgo son l¨ªquidos y rojos.
1. Arquitectura portuaria y patrimonial
Speicherstadt es la mayor red de almacenes conectados del mundo. 26 hect¨¢reas en una isla fluvial del Elba en la que se asientan 17 construcciones de ladrillo rojo de aspecto medieval en las que se han almacenado caf¨¦, t¨¦, cacao, especias y tabaco. Hoy lo hacen las alfombras persas de gran tama?o. Desde 2015 este complejo de almacenes y el vecino edificio Chilehaus (Casa Chile), con la forma de una proa de un barco abri¨¦ndose camino en el mar, est¨¢n incluidos en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.
2. Memoria del pasado
La iglesia medieval de San Nicol¨¢s, el patr¨®n de los comerciantes y de la gente de mar, fue presa de las llamas del gran incendio de 1842. Sobre aquel p¨¢ramo chamuscado se levant¨® otra que fue bombardea por el bando aliado durante la II Guerra Mundial. Hoy solo quedan unas ruinas que se han convertido en un memorial para recordar los avatares que ha sufrido Hamburgo a lo largo de su historia.
3. El lugar de las despedidas
El Museo de Emigraci¨®n se encuentra en la denominada Ciudad Ballin, en la hamburguesa isla de Veddel, en honor al propietario de la empresa Hamburg Amerika Line. El se?or Ballin construy¨® en este lugar una ciudad con hospitales, templos religiosos de diferentes credos, teatros, restaurantes y viviendas, para las personas que esperaban turno para embarcar en los barcos rumbo a Am¨¦rica, entre 1850 y 1939. El museo en cuesti¨®n, por medio de la tecnolog¨ªa y medios audiovisuales, reconstruye la historia de la emigraci¨®n.
4. Para ver por dentro y por fuera
La Elbphilharmonie es una impresionante sala de conciertos a orillas del r¨ªo Elba levantada sobre un antiguo almac¨¦n en el extremo occidental de la Hafen City (Ciudad del Puerto). Su fachada de vidrio rematada en un tejado en forma de un mar con oleaje se ha convertido en la nueva imagen de postal de Hamburgo. La Elbphilharmonie combina una arquitectura innovadora, en un emplazamiento privilegiado, con una ac¨²stica que ya les hubiera gustado disfrutar a los griegos y con un programa de conciertos pensado para acercar a la mayor cantidad posible de p¨²blico a la m¨²sica.
5. Los goles son lo de menos
En el gamberro y activista barrio de Sankt Pauli se pudo escuchar por primera vez, fuera de Inglaterra, a unos desconocidos The Beatles. En el mismo vecindario se encuentra Millerntor. Un estadio en el que suena Hells Bells de AC/DC al saltar al c¨¦sped los jugadores y Song 2 de Blur cuando mete un gol el equipo local, el F. C. St. Pauli, el club de f¨²tbol m¨¢s comprometido social y pol¨ªticamente de Alemania. Un equipo que juega para luchar por sus reivindicaciones antirracistas, antifascistas y contra la homofobia, m¨¢s que por la victoria del partido. 90 minutos en los que sus militantes aficionados permanecen de pie.
6. Ba?o en una playa fluvial
Hamburgo cuenta con un arenal de un kil¨®metro de largo de los tres que hay entre ?velg?nne y Teufelsbr¨¹ck, al oeste de la ciudad. La ciudad luce y disfruta su litoral fluvial, al m¨¢s puro estilo Mediterr¨¢neo. En Hamburgo, gracias al Elba, a quien le apetezca puede calzarse unas chanclas, ponerse el ba?ador y estirar la toalla sobre la arena. A los que la arena les incomoda o el agua les parece que est¨¢ fr¨ªa, tambi¨¦n pueden tomar asiento en un club de playa, a la altura del viejo muelle de Sankt Pauli.
7. Donde se dan cita los trasnochadores
En el Mercado de Pescado los domingos, bien temprano, se puede ir a desayunar, cerveza en mano, caf¨¦, arenques, ostras y una pieza de boller¨ªa, al tiempo que se observa a los tipos que tienen pinta de no haber terminado la juerga que comenzaron la noche anterior. La historia de este sitio se remonta al a?o 1703. Desde entonces, productores locales venden pescado, carne, verduras y platos preparados t¨ªpicos hamburgueses. La relaci¨®n de Hamburgo con el agua es tan estrecha que cada vez que el r¨ªo Elba se desborda la plaza se inunda, sin embargo, nunca lo ha hecho en domingo, hasta la fecha.
8. Un lago dual
En Hamburgo el agua se manifiesta en r¨ªos, canales y lagos. En el coraz¨®n de la ciudad, el r¨ªo Alster se convierte en dos lagos: el Interior y el Exterior. Unas 164 hect¨¢reas de superficie acu¨¢tica surcadas por peque?os botes de vela, de remos y tur¨ªsticos. En mitad del lago uno adivina lo agradable que tambi¨¦n es pasear por la orilla del Alster, una de las zonas residenciales m¨¢s apetecibles de la ciudad.
Suscr¨ªbete aqu¨ª a la newsletter de El Viajero y encuentra inspiraci¨®n para tus pr¨®ximos viajes en nuestras cuentas de Facebook, X e Instagram.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.