As¨ª es el barrio de Pek¨ªn donde hay ¡°robotaxi¡± y la compra llega en veh¨ªculo sin conductor
El barrio pekin¨¦s conocido por las siglas BJHAD es un gran laboratorio de conducci¨®n aut¨®noma. La inteligencia artificial es la gran apuesta tecnol¨®gica actual de China.
Bastan un par de minutos desde que se reserva un robotaxi a trav¨¦s de la aplicaci¨®n m¨®vil hasta que acude al lugar. Son las dos de la tarde de un jueves en la capital de China y el trayecto transcurre sin necesidad de intervenci¨®n humana. ¡°A veces tenemos que acelerar manualmente para no provocar atascos. Las bicicletas y las motos suelen retrasar la circulaci¨®n porque no respetan las se?ales¡±, comenta el conductor que se limita a supervisar el viaje, mientras el volante se mueve como por arte de magia.
El ?rea de Demostraci¨®n de Conducci¨®n Automatizada de Alto Nivel de Pek¨ªn (BJHAD, por sus siglas en ingl¨¦s), de 60 kil¨®metros cuadrados, es la primera zona piloto del pa¨ªs en la que diferentes tipos de veh¨ªculos aut¨®nomos circulan por las v¨ªas p¨²blicas. Situada en un apartado distrito del sureste, ha sido el escenario elegido como ensayo de un plan futurista que espera convertir la ciudad en un referente de la inteligencia artificial (IA). Robotaxis Apollo de Baidu y robots de reparto de JD.com (tambi¨¦n conocido como Jingdong) transitan sus infinitas avenidas dejando una imagen ut¨®pica en comparaci¨®n con la jungla del tr¨¢fico del centro de la ciudad.
¡°[Un robotaxi] recibe una media de 15 reservas diarias, principalmente para trayectos del metro a la oficina¡±, a?ade el taxista. Baidu y Pony.ai se convirtieron en noviembre en las primeras compa?¨ªas con permiso para operar una flota de 100 robotaxis en la BJHAD y, desde abril, no exigen que un humano ocupe el asiento del conductor. Estos coches tienen permitido circular a 60 kil¨®metros por hora y su servicio contin¨²a siendo gratuito, aunque tienen licencia comercial.
Baidu, el principal motor de b¨²squeda de China, ha apostado por diversificar su negocio comercializando su tecnolog¨ªa de IA y transporte inteligente. Su programa Apollo Go est¨¢ disponible en siete ciudades, y aspira a expandirse a 65 para el a?o 2025 y a 100 para 2030. A diferencia de los robotaxis Waymo que Google comenz¨® a operar en Estados Unidos en 2020, los de Baidu circulan durante el d¨ªa, recopilando un mayor n¨²mero de datos.
Aunque durante cuatro a?os consecutivos Baidu ha encabezado la lista de compa?¨ªas chinas con mayor n¨²mero de patentes de aplicaciones de IA, a la vanguardia de los veh¨ªculos aut¨®nomos se encuentra el gigante del comercio electr¨®nico JD.com. En la BJHAD, donde Jingdong estableci¨® en 2016 su sede central, los robots bajo su sello predominan en las calles. Los veh¨ªculos aut¨®nomos de reparto transportan principalmente pedidos del supermercado inteligente 7FRESH, cadena operada por JD que combina comercio electr¨®nico y tradicional. ¡°Los productos acuden a las personas, en lugar de que nosotros los busquemos¡±, apunta Yang Han, del departamento de comunicaci¨®n de Jingdong.
Gracias al an¨¢lisis de macrodatos de los m¨¢s de 400 millones de usuarios anuales de JD.com, las tiendas f¨ªsicas de 7FRESH est¨¢n adaptadas a las necesidades de su ubicaci¨®n, mientras que en la aplicaci¨®n est¨¢ disponible todo el inventario. Los robots de reparto, que circulan a 15 kil¨®metros por hora y pueden transportar entre 100 y 200 kilogramos, entregan los pedidos en menos de una hora dentro de un rango de cinco kil¨®metros.
En las oficinas de la empresa, los empleados recurren a robots m¨¢s peque?os para enviar documentos u otros art¨ªculos en cuesti¨®n de 10 minutos. ¡°Agilizan mucho el trabajo, no tenemos que estar corriendo de un lugar a otro¡±, recalca Yang Han. En sus trayectorias, llaman al ascensor o abren puertas por s¨ª solos.
Los robots reconocen el entorno y evitan obst¨¢culos, con una tasa de precisi¨®n del 98% para objetos peque?os. Reciben la informaci¨®n a trav¨¦s de c¨¢maras de visi¨®n artificial y otros sensores y, gracias al algoritmo de navegaci¨®n, localizan su ubicaci¨®n y planifican o replantean su ruta. La plataforma de simulaci¨®n en la nube de JD acumula los datos de los trayectos, que mejoran la capacidad de conducci¨®n.
Este proceso de digitalizaci¨®n ha experimentado una aceleraci¨®n por la pandemia. Jingdong ha enviado veh¨ªculos de reparto de peque?o y gran tama?o a las ciudades chinas que se han visto afectadas por los peores brotes de la covid-19 en estos dos a?os y medio. Durante el pico de contagios a principios de 2020 en Wuhan, recorrieron un total de 6.800 kil¨®metros y entregaron m¨¢s de 13.000 paquetes.
En un pa¨ªs en el que la estabilidad social tiene entre sus pilares fundamentales una baja tasa de paro, no obstante, esta apuesta puede resultar a la larga, cuando menos, arriesgada. Yang Han, sin embargo, insiste en que se trata de ¡°alcanzar una sinergia entre humanos y m¨¢quinas¡±: ¡°El objetivo es aliviar la presi¨®n de los repartidores en la carretera y permitirles concentrarse en el servicio al cliente o el mantenimiento de los veh¨ªculos. Los mensajeros esperan a que lleguen los robots, recogen los pedidos y los entregan en la puerta, pero no tienen que transportarlos¡±.
La BJHAD pertenece al ?rea de Desarrollo Econ¨®mico y Tecnol¨®gico de Pek¨ªn, el primer centro espec¨ªficamente orientado a la investigaci¨®n en IA de China. El pa¨ªs ambiciona ser el l¨ªder mundial en IA para el a?o 2030 y dejar definitivamente atr¨¢s la imagen de ¡°f¨¢brica del mundo¡±.
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