Todo est¨¢ en TikTok

Cada d¨¦cada tiene su gesto dominante y el de esta es el swipe, el deslizado, el movimiento que se hace con el dedo en TikTok (y tambi¨¦n en Tinder y en los Instagram Reels) para indicar que nuestras pupilas est¨¢n listas para un nuevo est¨ªmulo. Siguiente, dame m¨¢s, exige ese dedo, y el algoritmo se lo sirve. La oferta no se acaba nunca. Lo hacen cada d¨ªa m¨¢s de 1.000 millones de personas que se han descargado la red social que ha tumbado a todas las otras marcas digitales, bajo cualquier m¨¦trica. El a?o pasado, TikTok tuvo m¨¢s visitas que Google (normal, muchos usuarios lo utilizan como buscador) y m¨¢s minutos de permanencia que YouTube. Facebook, que ahora se llama Meta, tard¨® casi nueve a?os en alcanzar la cifra m¨¢gica de los 1.000 millones de usuarios (el billion, en ingl¨¦s). TikTok lo ha logrado en cinco.

De alguna manera, es la red social que sublima y mejora a las que vinieron antes. A diferencia de Twitter, basada en las palabras, TikTok acapara la atenci¨®n del usuario de manera m¨¢s contundente, con v¨ªdeos que suelen ir enriquecidos con m¨²sica y texto, y que ya pueden durar hasta 10 minutos, mucho m¨¢s que los 15 segundos a los que se ce?¨ªan al principio. Para usarla, tampoco hace falta tener all¨ª una red previa de amigos y conocidos que vayan sirviendo contenido y la hagan interesante, como pasaba en los inicios de Facebook e Instagram. Lo ¨²nico que hay que hacer es entrar, ir a la pesta?a ¡°para ti¡± y dejarse llevar por el feed, el flujo de contenidos, y su algoritmo, que es de una precisi¨®n pasmosa. El a?o pasado, varios reporteros de The Wall Street Journal investigaron ese motor creando centenares de perfiles falsos en TikTok y llegaron a la conclusi¨®n de que en solo 40 minutos de observaci¨®n, la aplicaci¨®n ya ha averiguado qu¨¦ hace vibrar a ese usuario y, por extensi¨®n, claro, lo que quiere comprar. Las marcas lo saben y est¨¢n derivando all¨ª gran parte de su presupuesto y su estrategia de comunicaci¨®n.

¡°En TikTok ni siquiera tienes que seguir a alguien para ver su contenido, requiere menos esfuerzo por parte del usuario, y quiz¨¢ por eso ha sustituido a Twitter e Instagram, que en la d¨¦cada pasada eran las apps de referencia¡±, asegura Kyle Chayka, periodista estadounidense especializado en tecnolog¨ªa y cultura de internet, habitual en las p¨¢ginas de The New Yorker, que prepara un libro sobre lo que ha bautizado como ¡°cultura algor¨ªtmica¡±. As¨ª se refiere a todo lo que existe precisamente porque lo quiere el algoritmo (¡°las canciones que se hicieron populares en TikTok, la est¨¦tica asociada con Instagram, la plantilla Netflix para todos los guiones de cine y televisi¨®n, el discurso de Twitter¡±) y que, seg¨²n ¨¦l, contribuye a empobrecer la cultura y a generar consumidores m¨¢s pasivos.

De todos esos algoritmos, el de TikTok es ahora el que m¨¢s manda sobre el gusto popular. Si la cantante y actriz Olivia Rodrigo es una estrella, es porque se gest¨® all¨ª, lo mismo que la expresi¨®n quiet quitting, la renuncia silenciosa de la que tanto se habl¨® el a?o pasado. Si una canci¨®n de 1977 (como Dreams, de Fleetwood Mac) vuelve a escucharse masivamente es porque un tiktoker, Nathan Apodaca (usuario 420doggface208 en TikTok), la puso de fondo a uno de sus v¨ªdeos, y si Rosal¨ªa comenz¨® a mascar chicle antes de cantar Bizcochito en la gira de Motomami es porque probablemente intuy¨® que el gesto se replicar¨ªa millones de veces en TikTok. Cuando alguien desayuna un batido espumoso hecho con Nescaf¨¦ o cena pasta al horno con queso feta es porque esas recetas, que tienen un componente como de truco revelado, triunfaron all¨ª antes.

Lo que est¨¢ cambiando a medida que la plataforma se acerca a su c¨¦nit es cu¨¢ntos de esos ¨¦xitos nacen de manera espont¨¢nea y cu¨¢ntos han sido ideados y promovidos por una compa?¨ªa que paga para que eso suceda.

¡°Ahora las empresas ejercen mucha m¨¢s influencia sobre qu¨¦ contenido aparece en el feed y el objetivo es ense?arnos anuncios¡±, afirma Chayka. Seg¨²n datos de un estudio de Kantar encargado por la propia TikTok, el 67% de los usuarios aprecia los anuncios y el 93% ha ¡°saltado a la acci¨®n¡± tras ver un v¨ªdeo, es decir, ha hecho o comprado algo influido por un contenido. En TikTok esto se siente menos hiriente porque ya naci¨® as¨ª, sin prometer que all¨ª se iba a ver a los amigos, mientras que Instagram y Twitter se han desviado de sus misiones originales y han llenado los feeds de desconocidos.

¡°Hackear ese algoritmo es cada vez menos posible¡±, incide Gemma Gald¨®n, analista centrada en la ciberseguridad y los aspectos ¨¦ticos relacionados con la tecnolog¨ªa. Es decir, toquetearlo para asegurarnos de que vemos solo lo que nos apetece. ¡°Todas las redes pueden permitirse en los primeros a?os el lujo de no ganar dinero, cuando viven de los fondos de inversi¨®n, y es ah¨ª cuando alimentan la ilusi¨®n de que el usuario genera su propio contenido, pero a medida que se acaba esa inversi¨®n y se pide retorno de beneficios, vemos c¨®mo la l¨®gica del lucro es cada vez m¨¢s evidente¡±.

Hay otra cosa que diferencia TikTok de las otras redes sociales y plataformas de contenido: no es estadounidense, sino china. Su fundador y propietario es Zhang Yiming, un ingeniero de 39 a?os extremadamente discreto (el anti Elon Musk) que dej¨® de ejercer de CEO de ByteDance, la empresa matriz, en 2021, se cree que por presiones del Gobierno chino. La historia de la creaci¨®n de TikTok no dar¨ªa para una pel¨ªcula de Aaron Sorkin como La red social, que cont¨® la g¨¦nesis de Facebook. No hay ah¨ª un relato de un joven en un garaje ni en una universidad de ¨¦lite creando una aplicaci¨®n para vengarse de las chicas que le rechazan. El nacimiento de TikTok fue bastante m¨¢s prosaico. En 2016, la empresa china ByteDance lanz¨® Douyin, una app de playbacks musicales que atrajo a unos 100 millones de usuarios en China y Tailandia. En 2018 compr¨® Musical.ly, una aplicaci¨®n similar que basaba su ¨¦xito en una cartera de canciones muy populares disponibles en su biblioteca, sobre las que se pod¨ªa hacer playback y que ya ten¨ªa cierta implantaci¨®n en Estados Unidos. As¨ª se lanz¨® a la conquista internacional con el nombre de TikTok.

¡°En t¨¦rminos de contenidos, ha habido tres grandes eras que se solapan¡±, resume Jessica Maddox, profesora en la Universidad de Alabama y experta en la investigaci¨®n de las redes sociales. ¡°Al principio era sobre todo bailes y playbacks, que ven¨ªan del periodo de Musical.ly. Despu¨¦s, entre junio de 2020 y junio de 2022, lleg¨® la explosi¨®n, ah¨ª fue cuando todo el mundo se dio cuenta de que pod¨ªa tener un nicho en TikTok. Y en los ¨²ltimos meses, dir¨ªa que hemos entrado en la era del storytelling, en la que el contenido m¨¢s popular consiste en personas contando una historia o revelando algo de s¨ª mismos. De hecho, se ha disparado el hashtag #storytime¡±. La historia, por cierto, puede ir completamente desconectada de la imagen, lo que da a muchos v¨ªdeos de TikTok una especie de cualidad perturbadora. Por ejemplo, son muy habituales los v¨ªdeos de personas que se aplican maquillaje o comen mientras cuentan un crimen escabroso. Y hace poco rul¨® en Twitter ¡ªuna red m¨¢s c¨ªnica y con menor tolerancia a lo sincero y sentido, pero cada vez m¨¢s inundada de v¨ªdeos de la competencia¡ª el clip de una mujer que hac¨ªa un cl¨¢sico baile de TikTok frente a la c¨¢mara mientras explicaba que su marido muri¨® en un accidente el mismo d¨ªa que ella daba a luz a su hijo.

Maddox tambi¨¦n cree que la calidad de los v¨ªdeos se est¨¢ volviendo m¨¢s trabajada y producida, contradiciendo la idea extendida de que TikTok ama lo real, y hasta lo cutre, mientras que Instagram premia lo idealizado.

La pandemia supuso un enorme empuj¨®n para la plataforma. Se calcula que, en las primeras semanas de confinamiento, su implantaci¨®n en Estados Unidos, clave para la adopci¨®n en el resto del mundo, creci¨® un 180% entre los usuarios de entre 15 y 25 a?os, que forman aproximadamente el 25% de su p¨²blico global. El encierro conspiraba para la b¨²squeda de nuevos est¨ªmulos.

Fue el caso de Leticia Gonz¨¢lez, abogada de 57 a?os de Santander, una usuaria que desmiente eso de que solo los j¨®venes est¨¢n en TikTok y los mayores en Meta. ¡°Empec¨¦ a usarla en el confinamiento porque mis hijos me enviaban v¨ªdeos y me entretiene much¨ªsimo, la verdad. Me gusta la inmediatez. Vas pasando v¨ªdeos y unos te gustan y otros no, pero, por lo que me han contado, el algoritmo ya sabe enviarte cosas similares a las que te han gustado. Consumo sobre todo v¨ªdeos de c¨®micos, de personas que hacen contenido biling¨¹e, en espa?ol e ingl¨¦s, cosas sobre manualidades, libros y juegos de mesa. Ahora me he apuntado a uno que hace lengua de signos¡±, explica. Gonz¨¢lez reconoce que la aplicaci¨®n es ¡°peligrosa¡± porque tiene un componente adictivo. ¡°A lo mejor el Telediario est¨¢ aburrido y me digo: pongo el TikTok. En la cama se te puede hacer tard¨ªsimo viendo v¨ªdeos y despu¨¦s se duerme fatal¡±.

Sara Aparicio Oms, una adolescente de 12 a?os que estudia primero de la ESO en Ayerbe (Huesca), tambi¨¦n se enganch¨® a la red social durante el confinamiento. Cuando la mandaron a casa en marzo de 2020, condenada a aburrirse y a hacer clases por Zoom como todos los otros escolares, sus padres terminaron d¨¢ndole un m¨®vil, cansados de que cogiera prestados los suyos. Y lo primero que hizo fue bajarse TikTok, a pesar de que entonces ten¨ªa 10 a?os y la aplicaci¨®n en teor¨ªa proh¨ªbe el uso a los menores de 13. De hecho, la descubrieron y le cerraron el perfil, pero se ha abierto otro, supervisado por sus padres, que controlan qu¨¦ cuentas sigue y controlan su uso del m¨®vil.

¡°Nunca cuelgo nada, y la mayor¨ªa de mis amigos tampoco, pero todos los que tienen m¨®vil tienen TikTok. Me gustan los v¨ªdeos de maquillaje, de patinaje y de animales¡±, dice. Tambi¨¦n sigue a tiktokers como Paula Garc¨ªa, una joven espa?ola que trabaja como au pair en San Francisco y tiene 111.000 seguidores, o Luisito Flowers (178.000 seguidores), que hace v¨ªdeos de humor y en su bio se define de la siguiente manera: ¡°Soy una sirena, pero no se lo digas a nadie¡±. Sara admite que cuando se pone a hacer swipe se le van tranquilamente una hora y media o dos horas consumiendo contenidos, pero su uso de redes no interfiere con su vida anal¨®gica ¡ªes campeona de patinaje sobre hielo¡ª y tiene claro qu¨¦ contenidos no le interesan. ¡°Los que critican o tratan de pol¨¦micas tipo Shakira y Piqu¨¦. Si me sale de eso, paso¡±.

El Hospital Gregorio Mara?¨®n de Madrid estren¨® en julio una unidad pionera en la sanidad p¨²blica en el ¨¢mbito europeo llamada AdCom, destinada a tratar las llamadas adicciones comportamentales, y ah¨ª han incluido por primera vez el enganche a las redes sociales al mismo nivel que el juego patol¨®gico, las compras o el sexo. ¡°Lo de las redes es un campo muy nuevo, solo se estudia desde hace una d¨¦cada, pero los estudios nos est¨¢n demostrando de manera emp¨ªrica que hay unos comportamientos derivados del uso de redes que son muy parecidos a los del consumo de sustancias¡±, explica Ricardo Hodann, psic¨®logo cl¨ªnico integrado en esta unidad del Gregorio Mara?¨®n. ¡°Neurobiol¨®gicamente, implica los mismos circuitos que en la adicci¨®n a sustancias. Vemos que se produce s¨ªndrome de abstinencia cuando hay alejamiento de las redes, irritabilidad y ¨¢nimo depresivo si falta la conexi¨®n y, sobre todo, desplazamiento de actividades. Si se pasa m¨¢s tiempo en redes, se dedica menos al mundo f¨ªsico¡±.

En este momento, en el AdCom est¨¢n tratando a unos 25 adolescentes por dependencia de las redes sociales, a veces combinada tambi¨¦n con excesivo uso de los videojuegos. Y dentro de las redes, las m¨¢s citadas son Instagram y TikTok. ¡°Sabemos que el algoritmo de TikTok ha sido muy se?alado porque utiliza la inteligencia artificial y ofrece el microtargeting. Ofrece al adolescente aquello que la IA detecta como lo que m¨¢s capta su atenci¨®n. A veces pueden reflejar modelos sociales que no son naturales, que exageran la realidad¡±, apunta Hadonn. ¡°Y ah¨ª entramos en las comparaciones ventajosas. Si yo soy un adolescente de 16 a?os y voy al colegio, pero veo a gente m¨¢s exitosa, esto afecta negativamente a la imagen que tengo de m¨ª mismo. El desarrollo social y afectivo durante la adolescencia es fundamental, es cuando se crea una personalidad diferenciada de los padres, y el adolescente que pasa mucho tiempo en redes se lleva una imagen distorsionada de la realidad¡±, se?ala.

Al contrario de lo que se hace con el alcohol o las drogas, el tratamiento no pasa por la abstinencia total porque no ser¨ªa realista ni muy beneficioso. Tratan de inducir al autocontrol, hacen terapia individual y de grupo, y animan a hacer m¨¢s actividades fuera de la red y a instalar aplicaciones que controlan el tiempo de uso. ¡°Sobre todo, nos gusta hablar de prevenci¨®n¡±, se?ala el psic¨®logo. ¡°Es importante aumentar la conciencia entre los padres y los educadores, que ayuden a los adolescentes a introducirse en este mundo y los acompa?en en el proceso¡±.

Desde la propia TikTok insisten en que prefieren hablar de ¡°descubrimiento¡± y ¡°disfrute¡± antes que de adicci¨®n, y animan a que los usuarios personalicen su experiencia, se limiten el n¨²mero de minutos de uso y denuncien cualquier contenido que se pueda considerar ofensivo. ¡°Tenemos unas opciones de seguridad muy potentes¡±, asegura Soraya Castellanos, responsable de Contenidos, Comunidad y Asociaciones de la plataforma. ¡°Puedes escoger qui¨¦n ve tu contenido, qui¨¦n puede enviarte un mensaje privado, qui¨¦n puede hacer d¨²o con nuestros v¨ªdeos, y existe la sincronizaci¨®n parental, para que los padres ejerzan su control¡±. Si detectan que se buscan t¨¦rminos como ¡°suicidio¡± o ¡°anorexia¡±, lo que deber¨ªa encontrarse son contenidos de ayuda y prevenci¨®n. Pero, como siempre, es complicado seleccionar qu¨¦ v¨ªdeos son los que van a agravar un problema de este tipo. En diciembre del a?o pasado, un organismo internacional llamado Center for Countering Digital Hate (CCDH), que se encarga de monitorizar contenidos digitales nocivos, realiz¨® un estudio creando perfiles falsos de adolescentes en TikTok, con base en Gran Breta?a, Australia, Estados Unidos y Canad¨¢. Les daban nombres de usuario reveladores como loseweight (p¨¦rdida de peso). Los resultados, seg¨²n el director del informe, Imran Ahmed, fueron ¡°la pesadilla de cualquier padre¡±, ya que en apenas ocho minutos esos falsos adolescentes ten¨ªan acceso a v¨ªdeos expl¨ªcitos y muy nocivos sobre autolesiones, dietas estrictas e incitaci¨®n al suicidio.

El otro problema al que se enfrenta TikTok, al margen del control de accesos y contenidos ¡ªcon ese topan, en alg¨²n momento, todas las plataformas y redes sociales¡ª es de ¨ªndole muy distinta y tiene que ver con la ciberseguridad. Cualquiera que se descargue la aplicaci¨®n en su m¨®vil est¨¢ regal¨¢ndole una serie de datos: el aspecto de su rostro, sus contactos, su calendario, sus b¨²squedas en Google, su hard drive y su geolocalizaci¨®n, entre otros. ¡°Lo que te dar¨ªa p¨¢nico hacer hasta con un familiar, darle tu tel¨¦fono, se lo est¨¢s dando a un desconocido: pueden ver tus fotos, leer tus mensajes. Compartes lo evidente, pero tambi¨¦n lo no evidente¡±, se?ala la experta en ciberseguridad Gemma Gald¨®n. Y el hecho de que esos datos vayan a parar a una empresa china siempre ha inquietado en Occidente, sobre todo en Estados Unidos. ¡°Aunque muchas empresas lo han intentado durante d¨¦cadas, ninguna ha logrado conquistar a los estadounidenses como lo ha hecho TikTok. Es dif¨ªcil imaginar una empresa rusa o iran¨ª consiguiendo un logro semejante¡±, resum¨ªa un reciente art¨ªculo de portada en la revista dominical de The New York Times, que volv¨ªa a presentar la plataforma como un problema diplom¨¢tico, como cuando Donald Trump estaba en la Casa Blanca y pretend¨ªa prohibir la red social en Estados Unidos a toda costa.

La Administraci¨®n de Biden tiene una relaci¨®n m¨¢s ambigua con la plataforma. Por un lado, recela de toda la informaci¨®n que le regalan sus ciudadanos y de las posibles relaciones de la empresa con el Gobierno chino ¡ª?para muchos expertos, esto no deja de ser una reedici¨®n del miedo rojo de la Guerra Fr¨ªa, cuando se cre¨ªa que cualquier objeto cultural extra?o podr¨ªa ser portador de comunismo¡ª, y por otro, la utiliza y la corteja activamente. La Casa Blanca reclut¨® tiktokers para explicar a los usuarios la guerra de Ucrania y para promocionar la vacuna de la covid. Y cuando Joe Biden quiso comunicar su plan de promoci¨®n del coche el¨¦ctrico desde la feria del autom¨®vil de Detroit, no lo hizo en la CNN o la NBC. Hizo lo que le recomendar¨ªa cualquier experto en marketing: grab¨® un v¨ªdeo con un famoso tiktoker, Daniel Mac, que se dedica a preguntar a personas que conducen coches de lujo a qu¨¦ se dedican.

¡°El miedo chino est¨¢ infundado¡±, cree la experta en ciberseguridad Gemma Gald¨®n. ¡°Todas las plataformas funcionan de la misma manera y todas explotan nuestros datos de la misma forma. Todas son lo que se llama digital spyware [programas de espionaje digital]. La ¨²nica diferencia es que TikTok los almacena en China y no en Estados Unidos. Ahora mismo, la ¨²nica regi¨®n que ofrece ciertas garant¨ªas en este aspecto es la Uni¨®n Europea, porque tiene legislaci¨®n al respecto y se han emitido multas por real time bidding [un sistema de publicidad muy invasivo basado en pujas en tiempo real], pero en la pr¨¢ctica el regulador europeo no puede actuar. Lo ¨²nico que dar¨ªa confianza es una empresa que se comprometiera a cumplir la ley europea vigente, y eso ahora mismo no lo hace ninguna¡±. En la empresa recalcan que los datos de los usuarios europeos se conservan en Estados Unidos y Singapur y que se est¨¢ construyendo un centro en Dubl¨ªn para almacenarlos en breve dentro del territorio europeo.

M¨¢s all¨¢ de un entuerto internacional y de una plataforma en la que pasar las horas, para cada vez m¨¢s gente TikTok es el lugar en el que se ganan el pan, su puesto de trabajo. Hace ya a?os que se profesionaliz¨® la figura del tiktoker y en Espa?a existen varias agencias que ejercen de intermediarios entre los creadores de contenidos y las marcas que quieren contratarlos. A cambio, la agencia se lleva el 20% de las ganancias, una cifra est¨¢ndar habitual en otros campos del espect¨¢culo y el sector editorial. Muchos aclaran que TikTok no es comparable a los inicios de Instagram o de Twitch, que s¨ª generaron una fiebre del oro entre aspirantes a influencers. Cuesta monetizar los v¨ªdeos, y cuesta tener continuidad porque en TikTok es f¨¢cil que se viralice un v¨ªdeo de un usuario con pocos seguidores: importa m¨¢s el contenido que el autor y cu¨¢ntos seguidores pueda tener.

¡°Puedes hacer 40 millones de visualizaciones en un mes y no ingresar ni 700 euros¡±, advierte Iv¨¢n Habib, que cuelga contenidos de cine y televisi¨®n con el perfil @sensafilm. Dana Mart¨ªnez (Hurona Rolera en TikTok) habla de cultura internetera, pero tambi¨¦n comparte historias personales en la plataforma ¡ªrevel¨® all¨ª su diagn¨®stico de autismo y habla de manera muy franca sobre sus trastornos de salud f¨ªsica y mental¡ª y fue durante un tiempo el perfil espa?ol que m¨¢s crec¨ªa. Ingresa al mes unos 3.000 euros, aunque asegura que podr¨ªa estar ganando mucho m¨¢s. ¡°Yo misma he echado el freno porque no doy para m¨¢s¡±, dice. Ha rechazado ofertas de 15.000 euros por un solo v¨ªdeo porque le ped¨ªan promocionar criptomonedas o casas de apuestas, asuntos en los que no quiere entrar. ¡°Hay un blanqueamiento muy gordo de las redes sociales. Soy consciente de que me siguen hasta ni?os peque?os y miro mucho mi contenido, pero s¨¦ que no todo el mundo lo hace. Particip¨¦ en una conferencia de tiktokers en Barcelona y les cort¨¦ el rollo a todos. Les dije: ¡®Oye, no vend¨¢is a vuestra madre por un like, que no es sano¡±. Iv¨¢n y Dana seguramente colgar¨¢n v¨ªdeos nuevos hoy, y millones de dedos se deslizar¨¢n sobre sus caras con un gesto aprendido. Swipe.

Julia Palaz¨®n

Elche, 21 a?os

'Fitness'/ Estilo de vida

573.000 seguidores

29,7 millones de "me gusta"

¡°TikTok es muy aleatorio y dispar¡±

¡°Sin duda lo que triunfa en TikTok es ser uno mismo y no forzar nada¡±, explica Julia Palaz¨®n. En un momento cualquiera, mientras mira la pantalla, ¡°se prende la bombilla¡± y sabe de lo que ir¨¢ su pr¨®ximo v¨ªdeo. Crea principalmente piezas sobre ¡°cosas del d¨ªa a d¨ªa¡±, pero tambi¨¦n de fitness. ¡°Me gusta hacer v¨ªdeos de abdominales o tablas, pero m¨¢s cuando hablo de tendencias del gimnasio¡±. Para ella, TikTok es sin¨®nimo de aleatoriedad. ¡°Siempre tiene lo que t¨² quieres y te va dando el contenido¡±, dice. Su rutina implica ¡°muchas horas de consumir¡± para poder estar al tanto de ¡°lo que va bien en ese momento¡±. Compagina su actividad en TikTok con la carrera de Enfermer¨ªa en la Universidad de Alicante. ¡°Tengo una vida de aut¨®nomo, muy irregular y dispar¡±.

Jos¨¦ Antonio Caro Quises (Milodente)

Huelva, 21 a?os

Tem¨¢tica LGTBI

Un mill¨®n de seguidores

35,4 millones de "me gusta"

¡°Lo que importa es el algoritmo¡±

¡°En TikTok dan igual tus ideas pol¨ªticas, tu sexualidad o tu clase social. Lo que importa es el algoritmo¡±. Seg¨²n Jos¨¦ Antonio Caro, la gente toma en cuenta que cada creador sea aut¨¦ntico. Como Milodente, que sube contenido en el que habla a la c¨¢mara de situaciones de su vida. ¡°Hay que ser transparente y confiar en el otro¡±, dice. Sus v¨ªdeos son sencillos y cortos. ¡°Algunos se lo curran m¨¢s, pero en mi caso solo estoy con amigos y cojo el m¨®vil cuando se me ocurre alguna idea¡±. No considera esto un trabajo ¡ªactualmente es camarero y recepcionista¡ª ya que factura poco con la plataforma y no est¨¢ interesado en colaborar con marcas. Admite que ha recibido ofertas, pero no siente inter¨¦s por incursionar en la publicidad.

Gigi Vives

Barcelona, 27 a?os

Belleza y moda

72.000 seguidores

Un mill¨®n de "me gusta"

¡°Mis seguidoras son como hermanas peque?as¡±

Gigi Vives ya era una influencer cuando se dio cuenta del fen¨®meno de TikTok. Una vez que incursion¨® en la plataforma, entendi¨® que all¨ª se recompensaba ¡°la naturalidad¡±, en contraste con ¡°el postureo¡± de Instagram. ¡°Yo tengo dos versiones: en TikTok soy superhumana y normal, y en Instagram intento mantener un perfil m¨¢s est¨¦tico y superficial¡±. Vives ve a sus seguidoras como ¡°hermanas peque?as¡± a las que busca hablar con ¡°cercan¨ªa y sinceridad¡±. Para los creadores, TikTok es, seg¨²n explica, una red impredecible y dif¨ªcil. Se debe subir contenido diariamente y en poco tiempo las tendencias de bailes o canciones aparecen y desaparecen, por lo que se deben ¡°pillar en el momento¡±. Ella cree haber encontrado el formato que le funciona, pero explica que, si no es constante, incluso cuentas con muchos seguidores como la suya se pueden ver perjudicadas y perder interacciones.

Iv¨¢n Habib Gonz¨¢lez (Sensafilm)

Madrid, 27 a?os

Cine y TV

1,5 millones de seguidores

70,7 millones de "me gusta"

¡°Para m¨ª esto no es un trabajo¡±

¡°Desde el minuto cero he intentado meter todo mi esfuerzo para que estos v¨ªdeos sean lo que a m¨ª me gustar¨ªa ver¡±. Iv¨¢n Habib cre¨® Sensafilm porque not¨® que en TikTok hac¨ªa falta contenido en espa?ol sobre filmes y series que se ofreciera en un formato de entre 15 y 30 segundos. Se enfoca principalmente en las curiosidades de las pel¨ªculas. ¡°Yo debo estar al d¨ªa con todo lo que se est¨¢ produciendo, tambi¨¦n con lo que pasa detr¨¢s de las c¨¢maras¡±. Pero no considera su actividad un trabajo porque le resulta natural pasar horas inmerso en estos temas. Cree que todav¨ªa existe una connotaci¨®n negativa en ser considerado un tiktoker y por eso ¡°tard¨®¡± en asumir que en realidad lo que hac¨ªa era m¨¢s que un pasatiempo.

Dana Mart¨ªnez (Hurona Rolera)

Valencia, 23 a?os

Cultura de internet/salud mental

13 millones de seguidores

303,9 millones de "me gusta"

¡°No soy capaz de fingir al hacer v¨ªdeos¡±

Un d¨ªa, durante el confinamiento, Dana Mart¨ªnez (la protagonista de nuestra portada) decidi¨® que quer¨ªa hacer playbacks de canciones. Se puso ¡°orejitas de elfo¡±, cogi¨® el mando de su Xbox e hizo su versi¨®n del tema Canguro, de Wos. Ahora, como Hurona Rolera, millones de personas ven su contenido. Los v¨ªdeos que sube son de tem¨¢ticas muy variadas, en ellos puede hablar tanto de cultura friki como de cosas ligeras del d¨ªa a d¨ªa o sincerarse sobre situaciones personales. ¡°Soy una persona que no es capaz de fingir y transformarse a la hora de hacer v¨ªdeos¡±, explica. Ya se encuentre frustrada, cabreada o feliz, lo que ven sus seguidores ¡°es lo que hay¡±. Disfruta lo que hace, pero dice tambi¨¦n que le agota c¨®mo TikTok penaliza la falta de actividad y lo exigentes que son sus seguidores. ¡°Acabo de estar unos d¨ªas en Disney y se han quejado de que he subido poco contenido¡±. Dana publica un v¨ªdeo cada dos d¨ªas. ¡°La vida no da para m¨¢s¡±.

Fran Callej¨®n

Almer¨ªa, 37 a?os

Comedia

9,4 millones de seguidores

291,4 millones de "me gusta"

¡°TikTok es para todo el mundo¡±

Fran Callej¨®n destaca que en TikTok no importa si uno es o no una figura p¨²blica. ¡°Si con tus v¨ªdeos la gente se siente identificada, se viraliza¡±. ?l crea contenido para hacer re¨ªr con situaciones cotidianas, en particular con las que tienen que ver con la vida en pareja. Julia Men¨², su compa?era, es tambi¨¦n tiktoker. Ahora que ella est¨¢ embarazada, su feed est¨¢ lleno de v¨ªdeos sobre la vida en casa cuando se espera la llegada de un beb¨¦. Fran aterriz¨® en TikTok a principios de 2019, cuando a¨²n no hab¨ªa tanto contenido como el que ¨¦l y Julia producen. Entonces, la plataforma estaba en ¡°pleno auge¡± y pudo ver el potencial para dar a conocer su comedia. ¡°Mientras Instagram o YouTube son m¨¢s selectos, TikTok es para todo el mundo¡±. Ese es el factor m¨¢s importante para este c¨®mico.