La gente m¨¢s guapa en los salones m¨¢s finos de la ¨¦poca de la regencia
De Emilia Pardo Baz¨¢n a la infanta Eulalia de Borb¨®n, Christian Franzen fotografi¨® a arist¨®cratas, artistas y literatos del Madrid durante el gobierno de Mar¨ªa Cristina de Habsburgo a finales de XIX. Un libro recuerda al autor en el centenario de su muerte
Dan¨¦s de origen, Christian Franzen (1864-1923) lleg¨® a Espa?a en el inicio de la regencia de Mar¨ªa Cristina de Habsburgo. En su elegante estudio de la madrile?a calle del Pr¨ªncipe fue construyendo su prestigioso cat¨¢logo de retratos, en el que encontramos a los miembros de la realeza y, del rey hacia abajo, a todos los que eran algo en la alta sociedad de entonces. Cuando Madrid abr¨ªa sus puertas al siglo XX, a Franzen se le pod¨ªa encontrar en los salones aristocr¨¢ticos de la capital, tan genero...
Dan¨¦s de origen, Christian Franzen (1864-1923) lleg¨® a Espa?a en el inicio de la regencia de Mar¨ªa Cristina de Habsburgo. En su elegante estudio de la madrile?a calle del Pr¨ªncipe fue construyendo su prestigioso cat¨¢logo de retratos, en el que encontramos a los miembros de la realeza y, del rey hacia abajo, a todos los que eran algo en la alta sociedad de entonces. Cuando Madrid abr¨ªa sus puertas al siglo XX, a Franzen se le pod¨ªa encontrar en los salones aristocr¨¢ticos de la capital, tan generosamente descritos por los cronistas de sociedad. En aquellos cen¨¢culos de la monarqu¨ªa restaurada se hac¨ªa presente el fot¨®grafo, desplegando su elegancia personal, su parla insinuante y su talento natural para la seducci¨®n y el trato. Sus reportajes de la vida social madrile?a del fin de siglo los reuni¨® en el ¨¢lbum Los salones de Madrid (1898), con texto de Monte-Cristo y pr¨®logo de Emilia Pardo Baz¨¢n. Pero Franzen fue, adem¨¢s, persona cultivada y cercana a los artistas y literatos que apreciaban sinceramente su talento y la delicadeza de su registro. De su amistad con Emilia Pardo Baz¨¢n, Juan Valera y, sobre todo, con P¨¦rez Gald¨®s y Joaqu¨ªn Sorolla, han quedado magn¨ªficos retratos, con los que el fot¨®grafo compuso la mejor galer¨ªa de celebridades de su tiempo, solo comparable a la de Laurent en el suyo. Cuando se cumple el primer centenario de su muerte, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando recuerda con un libro y una exposici¨®n a este olvidado y extraordinario fot¨®grafo, sin cuya obra no podr¨ªamos entender la historia del Madrid de la regencia, ni la propia historia de la fotograf¨ªa espa?ola.