Billy el Ni?o: acusado de torturas, condecorado por el Estado

¡°Le encantaba el mote que le hab¨ªan puesto. Una vez, me ten¨ªa esposado al radiador en un despacho de la Direcci¨®n General de Seguridad, lleg¨®, me dio un culatazo, y me dijo: ¡®Has tenido el honor de que te pegue un culatazo Billy el Ni?o¡±. Jos¨¦ Mar¨ªa, Chato, Galante denunci¨® al polic¨ªa franquista ante la justicia argentina por torturas cuando se cerr¨® la v¨ªa para investigar los cr¨ªmenes del franquismo en Espa?a. Muri¨® el pasado 28 de marzo con coronavirus, 40 d¨ªas antes que Juan Antonio Gonz¨¢lez Pacheco, conocido como Billy el Ni?o, que ha fallecido este jueves a los 74 a?os de la misma enfermedad sin haber respondido ante la justicia y condecorado por el Estado.

En sus primeros diez d¨ªas en el cargo, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, reclam¨® toda la documentaci¨®n sobre el polic¨ªa franquista acusado de torturas y reclamado por la justicia argentina, para ver si era posible retirarle la medalla pensionada concedida en 1977. As¨ª lo hab¨ªa solicitado, tras recoger m¨¢s de 200.000 firmas, la Asociaci¨®n para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica (ARMH), que ya se hab¨ªa dirigido al anterior Gobierno, del PP, con la misma reclamaci¨®n. Al consultar el expediente del expolic¨ªa comprobaron que no ten¨ªa una, sino cuatro medallas, todas con un incremento de pensi¨®n incorporado. Cobraba el equivalente a pensi¨®n y media.

La primera medalla, con distintivo rojo y un incremento de un 10% en su pensi¨®n, se la concedi¨® el entonces Gobierno franquista el 20 de julio de 1972. La segunda, con distintivo de plata, se la otorg¨® el Ejecutivo de Adolfo Su¨¢rez el 13 de junio de 1977 por la liberaci¨®n del presidente del Consejo de Estado, Antonio Mar¨ªa de Oriol, y el teniente general Emilio Villaescusa, secuestrados por los GRAPO entre finales de 1976 y principios de 1977. Esta condecoraci¨®n supon¨ªa un incremento de su pensi¨®n en un 15%. La tercera, tambi¨¦n con distintivo rojo, es decir, con un incremento en su pensi¨®n de un 10%, le fue concedida por Interior el 10 de octubre de 1980. Y la cuarta, de plata, es del 30 de marzo de 1982. En este caso, era para toda la Brigada de Informaci¨®n, a la que pertenec¨ªa Billy el Ni?o, y supon¨ªa un 15% m¨¢s en su pensi¨®n. El expolic¨ªa franquista la reclam¨® por v¨ªa judicial cuando ya disfrutaba de los beneficios de las otras tres medallas, porque pese a formar parte de dicha brigada no se le hab¨ªan abonado las cantidades aparejadas a la condecoraci¨®n. Una sentencia judicial le reconoci¨® los efectos econ¨®micos de esa medalla el 12 de diciembre de 2010.

El vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias ha pedido este jueves perd¨®n a las v¨ªctimas de Billy el Ni?o. ¡°La muerte del torturador Gonz¨¢lez Pacheco sin haber sido juzgado, con sus medallas y privilegios intactos, es una verg¨¹enza para la democracia y tambi¨¦n para nosotros como Gobierno. Pido perd¨®n a sus v¨ªctimas, luchadores por la democracia y la justicia¡±, ha escrito en su cuenta de Twitter. El pasado febrero, Unidas Podemos vot¨® en el Congreso en contra de pedirle al Gobierno que facilitara la hoja de servicios del torturador franquista. Luego tambi¨¦n pidi¨® disculpas por aquella decisi¨®n. En 2018, Interior tambi¨¦n expedient¨® a un comisario, Jos¨¦ Manuel Mariscal de Gante, por invitar a Billy el Ni?o a un acto oficial.

Chato Galante tard¨® muchos a?os en hablar p¨²blicamente de las torturas recibidas. Fue con el movimiento para la recuperaci¨®n de la memoria hist¨®rica y la querella por los cr¨ªmenes del franquismo cuando decidi¨® recordar en alto aquellos golpes. As¨ª lo hicieron tambi¨¦n otras v¨ªctimas, que se sumaron a la querella argentina e incorporaron a la causa testimonios como estos: ¡°Me dio tal paliza que cre¨ª que me iba a matar¡± (Miguel ?ngel G¨®mez). ¡°Me daba golpes con los pu?os en la cabeza y la espalda¡± (Francisca Villar, detenida con 18 a?os). ¡°Me dio un fuerte golpe en los genitales¡±, cont¨® Jes¨²s Rodr¨ªguez; ¡°Ol¨ªa mucho a alcohol. Era bajito, feo, con los ojos saltones. Ten¨ªa 28 a?os, solo dos m¨¢s que yo. Y disfrutaba torturando. Se le notaba porque en medio de la furia, al pegarte bofetadas y patadas, ten¨ªa un gesto de placer, de satisfacci¨®n¡±, recordaba Felisa Echegoyen. ¡°No era un funcionario que torturaba, era un torturador compulsivo, disfrutaba haci¨¦ndolo. Dec¨ªa: ¡®Te puedo destruir¡±, relataba Galante.

La petici¨®n de la jueza argentina Mar¨ªa Servini de Cubr¨ªa para extraditar a Billy el Ni?o fue finalmente rechazada por considerar que los presuntos delitos hab¨ªan prescrito, pero el expolic¨ªa franquista fue citado a declarar en la Audiencia Nacional en 2014. Cuando le preguntaron si recordaba haber sido procesado en alg¨²n momento por torturas, contest¨®: ¡°Hace algunos a?os algo de malos tratos, pero creo que no fuimos condenados¡±.

Una ley de 1964 estableci¨® como requisitos para recibir este tipo de condecoraciones el haber mostrado ¡°las virtudes de patriotismo, lealtad y entrega al servicio en el m¨¢s alto grado¡±. Cuando la ARMH pidi¨® conocer la ¡°relaci¨®n de m¨¦ritos y servicios de car¨¢cter extraordinario¡± de Billy el Ni?o para disfrutar de ese incremento en su pensi¨®n, el entonces director general de la Polic¨ªa respondi¨® que facilitar dicha informaci¨®n podr¨ªa ponerle en peligro y adem¨¢s, a?ad¨ªa, ¡°el afectado¡± estar¨ªa ¡°en un estado de constante inseguridad y ansiedad¡±.