Juristas, contra las ¡®patadas en la puerta¡¯ de la polic¨ªa que justifica Interior: ¡°Los pisos tur¨ªsticos son morada¡±

Las recientes entradas policiales sin orden judicial en pisos donde se celebraban fiestas, as¨ª como su justificaci¨®n posterior por parte del Ministerio del Interior, han provocado la salida en tromba de numerosos juristas que rechazan los argumentos esgrimidos para defender la intervenci¨®n de los agentes. M¨¢s de media docena de expertos consultados por EL PA?S aprecian excesos y varios de ellos recuerdan, adem¨¢s, la famosa ley de la patada en la puerta que trat¨® de instaurar el exministro socialista Jos¨¦ Luis Corcuera, que fue declarada inconstitucional hace ya casi 30 a?os.

¡°Los pisos tur¨ªsticos son morada¡±. Interior, que ha evitado criticar a los polic¨ªas, emiti¨® este martes un comunicado donde aseguraba que el piso al que accedieron los agentes ¡°no constituir¨ªa morada¡±, pues ¡°se trataba de un inmueble tur¨ªstico al que se le estaba dando uso para la realizaci¨®n de una fiesta contraviniendo la actual normativa sanitaria¡±. Una tesis que rechaza, por ejemplo, la jueza Mar¨ªa Jes¨²s del Barco, portavoz de la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM), que considera ¡°muy grave¡± lo ocurrido.

Los juristas recalcan que hace a?os que el Tribunal Constitucional ha dejado claro que la inviolabilidad del domicilio es un concepto muy amplio, que incluye no solo la idea de vivienda tradicional, sino tambi¨¦n habitaciones de hotel, caravanas o incluso turismos. Por tanto, el piso tur¨ªstico tambi¨¦n est¨¢ amparado, recalcan. ¡°Legalmente tienen la misma consideraci¨®n¡±, subraya la magistrada Del Barco. ¡°Por supuesto que un piso tur¨ªstico es una morada. Un domicilio es un espacio f¨ªsico donde nos resguardamos para ejercer nuestra intimidad fuera de los ojos de otros¡±, prosigue Fernando ?lvarez-Ossorio, profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Sevilla.

¡°La inviolabilidad del domicilio se vincula al derecho a la intimidad de las personas y protege el ¨¢mbito donde esta desarrolla su vida al amparo de miradas indiscretas¡±, recuerda la abogada Julia Mu?oz-Machado en un art¨ªculo incluido en el libro Comentario m¨ªnimo a la Constituci¨®n Espa?ola.

El docente ?lvarez-Ossorio cuestiona tambi¨¦n que el ministerio pueda alegar que se estaba usando el inmueble como local de fiestas, punto en el que Interior ha querido hacer hincapi¨¦ para esquivar la pol¨¦mica. ¡°Incluso en dicha situaci¨®n, ?por qu¨¦ los agentes dan por hecho, por ejemplo, que no se iba a quedar nadie a dormir?¡±. Es m¨¢s, apostillan varios juristas consultados, ?c¨®mo sab¨ªan antes de la intervenci¨®n que ninguno de los participantes estaba alojado en este?: ¡°?Solo por el ruido que escuchaban detr¨¢s de la puerta?¡±, se pregunta ir¨®nica la portavoz de la APM, que subraya que, incluso en los casos en los que la polic¨ªa tiene indicios de que una casa se utiliza para el tr¨¢fico de drogas, se requiere una autorizaci¨®n judicial para su entrada: ¡°El juez act¨²a aqu¨ª como garante de derechos fundamentales¡±, resume.

En opini¨®n de Lorenzo Cotino, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional de la Universidad de Valencia, tambi¨¦n ser¨ªa ¡°forzad¨ªsimo¡± tratar de defender que la intervenci¨®n de los agentes respond¨ªa a una situaci¨®n de ¡°urgente necesidad¡± por motivos sanitarios. Pues estos pod¨ªan esperar en la puerta hasta que los participantes, antes o despu¨¦s, salieran. En la misma l¨ªnea se manifiesta Alberto L¨®pez Basaguren, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional en la Universidad del Pa¨ªs Vasco: ¡°Si quien es titular de la vivienda, quien la hubiese alquilado, no permit¨ªa voluntariamente la entrada de la polic¨ªa, para acceder por la fuerza los agentes solo pod¨ªan hacerlo si dispon¨ªan de autorizaci¨®n judicial expresa¡±.

Es ¡°absurdo¡± alegar delito de desobediencia. Varios juristas rechazan tambi¨¦n que pueda considerarse que quienes se negaron a abrir la puerta a los agentes estuviesen cometiendo un ¡°delito flagrante¡± de desobediencia, como justific¨® la polic¨ªa en un principio para amparar su actuaci¨®n. En primer lugar, subraya el profesor Fernando ?lvarez-Ossorio, porque llevar¨ªa a reducir al ¡°absurdo¡± el derecho fundamental de la inviolabilidad del domicilio, ya que los agentes podr¨ªan entrar en cualquier vivienda sin orden judicial alegando simplemente que sus ocupantes se niegan a abrirles y, por tanto, cometen un delito de desobediencia que les permite acceder a la casa. Adem¨¢s, a?ade la jueza Del Barco, porque no se puede justificar la ¡°vulneraci¨®n¡± del derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio por la mera infracci¨®n administrativa que supone la celebraci¨®n de una fiesta en pandemia.

Javier Tajadura, profesor de Derecho Constitucional en la Universidad del Pa¨ªs Vasco, mantiene una posici¨®n similar en un art¨ªculo publicado en EL PA?S: ¡°La celebraci¨®n de esas reuniones o fiestas tampoco es constitutiva de ning¨²n delito; se trata de una infracci¨®n administrativa sancionable con multa [...] La polic¨ªa alega que se estar¨ªa produciendo un supuesto delito de ¡®desobediencia¡¯. Se trata de una interpretaci¨®n absurda que vaciar¨ªa de contenido el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio. Este opera precisamente cuando el ciudadano se niega ¡ªesto es, desobedece¡ª a abrir la puerta a la polic¨ªa para que pueda ser identificado¡±.

¡°Con la ley Corcuera ya se intent¨® forzar la ley para decir que hab¨ªa delito flagrante en el caso de los casos de narcotr¨¢fico¡±, recuerda Lorenzo Cotino. Pero, insiste ?lvarez-Ossorio, el Constitucional ya subray¨® que el ¡°delito flagrante¡± era un concepto ¡°excepcional¡± que, para poder aplicarse, requiere que la polic¨ªa tenga una ¡°evidencia directa¡± por los sentidos de que se est¨¦ cometiendo un delito ¡ªy la celebraci¨®n de una fiesta en pandemia no lo es¡ª y, adem¨¢s, que exista una ¡°urgencia¡± de actuar para evitar que se cause el da?o. ¡°Si lees el atestado policial, parece que los agentes se est¨¢n justificando ante lo que pueda venir por posibles irregularidades¡±, remacha la jueza Del Barco.

Reacciones pol¨ªticas. El PP ha respaldado la actuaci¨®n de los polic¨ªas. La portavoz de los populares en la Comisi¨®n de Interior del Congreso, Ana V¨¢zquez Blanco, considera que existe base legal suficiente para que los agentes entren en domicilios sin orden judicial. Seg¨²n ha mantenido, la actuaci¨®n se produjo ante casos de ¡°delito flagrante de desobediencia grave o resistencia a los agentes¡±. Por su parte, EH Bildu ha pedido la comparecencia de Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, en el Parlamento. Edmundo Bal, diputado de Ciudadanos y candidato a la Comunidad de Madrid, tambi¨¦n ha solicitado ¡°explicaciones¡± al ministerio.